Las sustancias orgánicas generalmente no son solubles en agua debido a que sus moléculas son no polares y están formadas principalmente por carbono e hidrógeno. Sin embargo, los alcoholes y algunos ácidos son solubles en agua porque sus moléculas pueden formar puentes de hidrógeno con las moléculas de agua, la cual es polar. La solubilidad depende del tamaño de la molécula orgánica y la cantidad de grupos funcionales como OH, siendo mayor cuanto más pequeña y más grupos tenga.