El documento describe las principales variables lingüísticas y socioculturales que afectan la forma en que las personas hablan. Estas variables incluyen la ubicación geográfica, la edad, el sexo, la profesión y la clase social de los hablantes. También distingue entre situaciones formales e informales y entre relaciones simétricas y asimétricas entre los hablantes. El documento proporciona ejemplos de cómo estas variables pueden dar lugar a variaciones en el vocabulario, gramática y estilo del habla.