El documento describe los aspectos promovidos por la cultura de paz. Estos incluyen: 1) construir un nuevo orden internacional basado en una paz positiva y solución no violenta de conflictos, 2) práctica de los derechos humanos en dimensiones económica, social y política, 3) educación para la paz legitimada por resoluciones internacionales que promueven los derechos humanos.
1. Bachiller
Marisabel Valera
República Bolivariana de Venezuela
Ministerio del Poder Popular para la Educación
Universidad Bicentenaria de Aragua
Escuela de Contaduría Pública
2do Semestre
Sede Valle de la Pascua. Sección P1.
2. Cultura de PazCultura de Paz
Se define “cultura de paz” como el conjunto de valores, actitudes,
tradiciones, comportamientos y estilos de vida basados en el respeto a
la vida, el fin de la violencia y la promoción y la práctica de la no
violencia por medio de la educación, el diálogo y la cooperación; el
respeto pleno a los principios de soberanía e independencia política; el
respeto pleno y promoción de los derechos humanos y libertades
fundamentales; el compromiso con el arreglo pacífico de los conflictos;
la protección al medio ambiente; respeto y fomento a la igualdad de
derechos de hombres y mujeres; derecho de todos a la libertad de
expresión, opinión e información; adhesión a los principios de libertad,
justicia, democracia, tolerancia, solidaridad, cooperación, pluralismo,
diversidad cultural, diálogo y entendimiento entre todos los niveles de la
sociedad entre las naciones.
3. Se intenta concientizar al mundo sobre la necesidad de tener una
cultura de No Violencia y con esto se exige la participación de todos
en este cambio evolutivo, en el cual 5 parámetros principales nos
ayudarán a forjar un mundo más justo, más solidario, más libre, digno y
armonioso, y con mejor prosperidad para todos.
Rechazar la Violencia
Practicar la No violencia activa y rechazar la violencia física, sexual, psicológica,
económica, social y en todos sus aspectos, en particular a los más débiles, como son los
niños y adolescentes. Hoy en día, existe el llamado "Bullying" que se da mayormente en
los colegios, por lo que debemos educar a nuestros hijos hacia una cultura de paz y así
vivir en una cultura que no tolere la violencia.
Liberar la Generosidad
Compartir el tiempo y los recursos materiales para terminar con la exclusión, la injusticia y la
opresión política y económica.
Escuchar para Comprender
Defender la Libertad de Expresión y la "Diversidad Cultural", privilegiar el "diálogo" sin ceder
al fanatismo y al rechazo, también es cuando una sola persona o más aconsejan bien a
una persona que está confundida y necesita de consejos; y una persona debe aprender
a escuchar como también debe aprender a comprender a las personas que nos
rodean.
Preservar el Planeta
Promover un consumo responsable y tener en cuenta la importancia de la vida y el
equilibrio de los recursos naturales del Planeta en el que vivimos.
Manifiesto 2000 para
una cultura de paz y
no violencia
4. La cultura como Alternativa para
promover la Paz
La construcción de una cultura de la paz es un proceso lento que supone un cambio de
mentalidad individual y colectiva. En este cambio la educación y la cultura tienen un
papel importante ya que la que información que nosotros proporcionamos es para los
futuros ciudadanos y esto permite una evolución del pensamiento social. Pero esto no
es suficiente para que estos cambios se den en profundidad. La sociedad, desde los
diferentes ámbitos implicados y desde su capacidad educadora, también deben incidir
y apoyar los proyectos y programas educativos formales. Así es importante que se
genere un proceso de reflexión sobre cómo se puede incidir en la construcción de la
cultura de la paz, desde los medios de comunicación, desde la familia, las empresas, las
unidades de producción agrícolas, desde los ayuntamientos, desde las organizaciones
no gubernamentales, desde las asociaciones ciudadanas, etc.. Se trata de generar una
conciencia colectiva sobre la necesidad de una cultura de la paz enraizada en la
sociedad con tanta fuerza que no deje lugar a la violencia. Y se trata de que los
gobiernos tomen conciencia de esta cultura de la paz y de los factores y condicionantes
que la facilitarían, tal como eliminación de las situaciones de injusticia, distribución más
equitativa de la riqueza, eliminación de la pobreza, derecho a la educación en
igualdad de condiciones, etc... Y por otro lado que conviertan esta conciencia en una
nueva cultura de administrar el poder.
Conjunto de conocimientos,
ideas, tradiciones y
costumbres que
caracterizan a un pueblo o
a una época.
Situación de tranquilidad y
buena relación entre los
miembros de un grupo
5. Acciones Para
Representar La
Cultura De PAZ
Enseñar y aprender a resolver los conflictos. El conflicto
está presente de forma permanente en nuestra
sociedad como manifestación de la diversidad de
intereses y cosmovisiones. Los conflictos que suelen
tener diversidad de causas y argumentaciones:
territoriales, culturales, económicas, socio laborales,
etc.., tradicionalmente se resuelven mediante el uso de
la fuerza y mediante la imposición de la voluntad del
más fuerte. No hay soluciones mágicas pero hay
mecanismos para resolver los conflictos de forma
diferente y que forma parte de la cultura de la paz:
Eliminación de los factores socioeconómicos que
pueden generarlo.
Desarrollo de una justicia nacional e internacional
Previsión del conflicto mediante la observación y
política e intervenir para redimensionarlo.
Control y autocontrol de la agresividad.
Diálogo, negociación o mediación sin que
obligatoriamente haya de haber vencedores y
vencidos.
Estrategias y técnicas didácticas para educar en el
aula.
Educar Con valores: Cuando educamos, consciente o
inconscientemente estamos transmitiendo una escala de
valores. Educar conscientemente para la paz supone ayudar
a construir unos valores y actitudes determinados tales como
la justicia, libertad, cooperación, respeto, solidaridad, la
actitud crítica, el compromiso, la autonomía, el dialogo, la
participación. Al mismo tiempo se cuestionan los valores que
son contrarios a la paz como la discriminación, la
intolerancia, la violencia, el etnocentrismo, la indiferencia, el
conformismo.
6. • No se trata de educar para inhibir la iniciativa y el interés sino para encauzar la actividad y el espíritu combativo
hacia la consecución de resultados útiles a la sociedad. Se trata de participar en la construcción de la paz.
• Educar para la paz supone recuperar la idea de paz positiva. Esto implica construir y potenciar en el proceso de
aprendizaje unas relaciones fundamentadas en la paz entre los alumnos-padres-profesores; entre ciudadano y
poder. De ello se deriva la necesidad de afrontar los conflictos que se den en la vida del centro y en la sociedad
de forma no violenta.
Finalmente podemos decir que metodológicamente se debería intervenir desde los diferentes ámbitos de influencia
(escuela, medios de comunicación, ONG, movimientos asociativos, familias, etc..) para :
• Proporcionar situaciones que favorezcan la autoestima como base importante de las relaciones personales y
sociales.
• Proporcionar situaciones que favorezcan la comunicación y convivencia con el interior y el exterior de los
contextos.
• Participar en celebraciones y actos relacionados con la paz y solidaridad.
• Crear climas democráticos en las aulas, centros y otros contextos de relación.
• Fomentar la reflexión, el intercambio de opiniones y la argumentación como defensa.
• Fomentar la comprensión de los puntos de vista de los compañeros
• Consensuar y difundir las normas de convivencia.
• Fomentar el trabajo en grupo y los proyectos colectivos.
• Utilizar técnicas de reflexión y desarrollo moral: debates sobre experiencias, clarificación de valores, discusión de
dilemas, resolución de conflictos, dramatizaciones, juegos de simulación, etc..
Acciones Para Representar La Cultura De PAZ
7. Aspectos Promovidos Por la cultura
de PAZ
1. La educación para la paz pretende alcanzarla construcción de un nuevo orden internacional basado en un concepto de paz positivo, de modo que las
relaciones en cualquier nivel (individual, familiar, social, nacional, internacional) tengan como resultado la solución no violenta de los conflictos y la justicia.
2. La paz, de este modo entendida, equivale a la práctica real de los derechos humanos en su dimensión económica, social y política, de modo que esta
paz no representa un simple ideal más o menos utópico sino que está sostenido por unos principios contenidos en la Declaración Universal de los Derechos
Humanos que conforman la conquista y lucha de la Humanidad por el bienestar, el reconocimiento de unos derechos inherentes al hombre y el modo
universalmente aceptado de sociedad aspirada.
3. La educación para la paz se legitima, sea o no aceptada esta legitimación dentro de las políticas y administraciones educativas, por un conjunto de
resoluciones, acuerdos, convenios, pactos y declaraciones de los organismos internacionales. La educación para la paz y los derechos humanos es
necesaria, para la práctica del derecho a la paz. El derecho a la paz dfine y sostiene esta educación.
4. La educación para la paz no puede restringirse sólo al marco de la escuela o de las instituciones educativas, sino que abarca la realidad total de la
persona, la sociedad y el mundo en constante desarrollo. La educación para la paz, por tanto, se configura desde múltiples dimensiones y se extiende
desde ángulos diferentes de acuerdo con el sujeto educado.
5. Siendo la paz, la justicia y los Derecho Humanos procesos complejos y su construcción veraz comprende realidades también complejas y diferentes,
debe difundir, informar y formar conforme a los estudios realizados por la Investigación sobre la paz.
6. La educación para la paz y los Derechos Humanos como acción concreta y específica debe inspirarse para su realización en los pensamientos y
experiencias pedagógicas que han tenido como objetivo la formación y desarrollo de la persona integral, solidaria y fraterna.
7. La educación para la paz no puede entenderse como una acción neutral, puesto que pretende unos objetivos muy diversos a los tradicionales. Esta
educación tiene una dimensión política, en cuanto que, no sólo busca la construcción de la paz como ausencia de guerra, sino fundamentalmente como
justicia. Este objetivo es, en definitiva, la transformación de las relaciones y estructuras de poder, la transformación de la sociedad misma.
8. Aunque podamos encontrar en el pasado momentos y experiencias que inspiren la educación para la paz, sin duda tiene su nacimiento en un momento
concreto y surge como necesidad urgente debido a motivaciones específicas. Es el peligro de la destrucción total de la Humanidad lo que motiva el
cambio lentísimo de las relaciones internacionales y la génesis de la educación para la paz.