1. Filosofía Intercultural
Mayo 2011
Anyelina González Belmar
La ciudadanía intercultural
Cómo y cuándo nos convertimos en ciudadanos para la sociedad. Sí bien es cierto, el
ser humano es sociable y necesita de las interacciones de los demás, evolucionar,
crecer, aprender y desarrollarse en ella. Es necesario ser consientes del proceso,
mientras nos relacionamos no sólo considerar el cómo o cuándo, sino que ir más allá y
preguntarnos el porqué es necesario, qué nos impulsa a estar integrados en ella y
principalmente cómo y cuándo contribuimos en la sociedad.
El ser social necesita de elementos y herramientas, como señala Carla Cordua, “somos
bidividuos” los cuales necesitan del de al lado para vivir, no fuimos creados para estar
solos en el mundo, ni mucho menos para contribuirnos a nosotros mismos. La
individualidad es la capacidad de reconocerse a sí mismos y propone que los
miembros singulares o particulares de un grupo puedan tomarse atributos como
retirarse a una isla de tranquilidad, en las que llama la atención una posible diferencia
entre las voces del colectivo y las interiores, en las cuales debe destacarse la propia,
como aquella voz interna, que escuchamos de vez en cuando y no cuando realmente
debiéramos, saber escucharnos y reaccionar a lo que estamos pensando de verdad es
necesario a diario.
Una de las principales características del ser humano es la capacidad que tenemos de
optar al silencium, para que se pueda distinguir entre el murmullo colectivo, se
necesita de la abstinencia del habla y más que una pausa, es un estado de
2. contemplación, para aquellos que aprecian lo simple y se atreven a escucharse a sí
mismos, internamente; “En el interior del hombre habita la verdad” como señalaba
San Agustín es necesario que como bidividuos nos encontremos a nosotros mismos de
forma interna, escuchando nuestra propia verdad, nuestro silencium, encontrar en la
quietud de nuestras mentes y voz interior; él ser humano no se entiende sin
semejantes, ni otros sujetos que lo rodeen, su existencia es siempre social y esto
puede mantenerse por medio de la transmisión; no se puede habitar antes de sí
mismo, una comunicación de hábitos de hacer, pensar y sentir entre los participantes
y bidividuos, es necesaria para el día a día uno siempre aprende del otro, por muy
mínimo que sea.
Hablar de una ciudadanía intercultural, es principalmente referirnos a un valor
esencial; como es, el de la tolerancia y, al igual que con el término comunicación, es
preciso proponer un esfuerzo a comprenderla, asumir la realidad en otro la misma
cultura. Tolerar es ser paciente, es respetar a los demás, ideas, creencias o prácticas de
los demás cuando por ejemplo son diferentes o contrarias a las propias, por tanto
podemos decir que, es el proceso de respeto hacia la misma humanidad, hacia
nosotros mismos, es dejar hacer y ser a los demás, es necesario adoptar cierto tipo
de perspectiva del otro en sentido de cooperación.
Para poder comprender lo anterior, es necesario, incluir un proceso de empatía, de
identificación, de proyección, de simpatía, de generosidad, ya que nosotros percibimos
a las demás personas no sólo objetivamente, sino como otro sujeto con el cual uno se
identifica e identifica en sí mismo, un ego alter que se vuelve alter ego, además se debe
estar presente el hablar y el escuchar, aunque cueste y para muchos sea aburrido,
poco productivo y poco beneficiosos, ya que las realidades y las características
compartidas generar nuevos conocimientos y más aprendizajes, experiencias siempre
van a existir la idea es, ver como las asimilemos y que tomamos de ellas, tanto lo
positivo como lo negativo de una forma dialéctica, transformacional.
3. Es por esto que podemos decir que cada uno de nosotros es parte de una cultura en
particular, y a su vez de una cultura global, moderna, que se interrelacionan y que
podemos expresar como lo siguiente: yo, pertenezco a mi familia culturalmente, ésta a
su vez posee características que la hacen única, y que además al enfrentarse a la
sociedad, considera o no aspectos en común, hacia miras de una comunidad mayor y a
su vez hacia el mundo.
Como podemos ver desde mi familia las interacciones se vuelven mucho más amplias
a medida que conocemos y ampliamos nuestro espectro, Cultura Chilena, la cual
traspasa todas las características propias hasta interactuar a diario con las distintas
culturas del mundo.
Cuando ejercemos nuestra ciudadanía es en parte, desde adentro hacia afuera, desde
las perspectivas internas, mezclándose con las externas, además de las respectivas
interacciones que uno realiza con las demás sociedades y sus propias características,
costumbres, modas, tendencias, visiones de mundo, etc.
Mi Familia
Cultura Chilena
Culturas del mundo
4. Podemos señalar que el concepto de cultura, en sentido polisémico puede tomarse
desde el punto de vista, multicultural, como:
· Un conjunto de hechos, reglas, emociones, símbolos o artefactos conscientes e
inconscientes que pueden determinar prácticas, normas de relación social, etc.
· Que pueden afectar a variables de tipo etnográficas (nacionalidad, etnia,
lenguaje o religión) que pueden afectar identidades, imágenes, pertenencias.
· Cuya meta es la adaptación de la persona y su grupo social al entorno en el que
viven.
· Que determinan tanto la relación social como otros aspectos más individuales
de la persona tanto en la vida privada como en el desempeño de una actividad
profesional. (Aneas, 2003)
Además de esto podemos considerar que dentro de las culturas se puede desarrollar
la competencia entre ellas, ámbitos sociales, psicológicos y profesionales.
El hombre se torna social y a su vez adaptable, tanto a los cambios que ocurren a nivel
personal como colectivo, esta transformación interna provoca un cambio en los
individuos, los cuales desarrollaran a favor de su crecimiento personal, por ejemplo
en relaciones sociales e interpersonales, además de adquirir aptitudes y sentirse bien
en el entorno, estos cambios emocionales y afectivos, implica relacionarse frente a los
retos, oportunidades y experiencias de vida. Tomando en cuenta aéreas de desarrollo
profesional, tanto en la habilidad de estar allí y de trabajar de manera eficaz, una
persona con competencias culturales disponen de los recursos y capacidades para
lograr mantener un equilibrio entre el mantenimiento de la propia identidad y el
desempeño funcional en otros grupos culturales.
Retomando todo lo anterior podemos decir que el desarrollo social-cultural de una
persona va a depender de cómo se desarrolle y de cómo se enfrente a la sociedad, el
considerar el desarrollo social a nivel intercultural, puede ser en respuesta de la
discriminación que a diario cometemos,
5. Webgrafía:
Revista Iberoamericana de Educación (ISSN: 1681-5653): COMPETENCIA
INTERCULTURAL, CONCEPTO, EFECTOS E IMPLICACIONES EN EL EJERCICIO DE LA
CIUDADANÍA
6. Webgrafía:
Revista Iberoamericana de Educación (ISSN: 1681-5653): COMPETENCIA
INTERCULTURAL, CONCEPTO, EFECTOS E IMPLICACIONES EN EL EJERCICIO DE LA
CIUDADANÍA