1. Resumen lectura Sherlock Holmes
En el siguiente escrito mencionaré los pasos seguidos por Sherlock
Holmes en la resolución del crimen el Jardín de Lauriston:
Holmes afirmaba que el cerebro de una persona es como un pequeño
ático vacío en el que hay que meter el mobiliario que uno prefiera. Se
entiende entonces que debemos mantener en el cerebro datos que sean
para nuestra utilidad y no que solo hagan bulto en él. Para esto debemos
aprender a ser selectivos en los conocimientos, no dejarnos llevar por lo
que escuchamos sino por lo que investigamos y confirmamos.
Primero que nada, él era muy analítico, muy observador, no se lanzaba a
sacar conclusiones, sin antes tener pruebas, pruebas que pueda
demostrar. Por el contrario Scotland Yard se lanzaba tras cualquier pista
y en su afán de ser uno mejor que otro, iban tras datos si no equivocados,
no los enfilaban hacia caminos que los lleven a resultados verdaderos.
Decía Holmes “Es una equivocación garrafal el sentar teorías antes de
disponer de todos los elementos de juicio, porque así es como éste se
tuerce en un determinado sentido”.
Él no se lanzaba a la investigación sin un porqué, observaba con
detenimiento cada circunstancia que pudiera parecerle una pista, hacia
hipótesis que lo ayudaban esclarecer sus dudas. Escrudiñaba cada rincón
que le pudiera dar una pista, cosa que Scotland Yard, no hacía, no
miraban más allá de lo evidente, y eso los llevaba a arruinar incluso las
pruebas que pudieran tener a su alcance para resolver parte del crimen.
Holmes basaba muchas de sus hipótesis en crímenes anteriores,
buscaba similitudes, que le pudieran ayudar en los casos actuales.
Datos que ni de casualidad tenían los detectives de Scotland Yard. Solo
veían complicaciones, y no se ocupaban en resolver el crimen. Se
preocupaban, no se ocupaban. Pensaban que por tener más edad que
Sherlock podían ser mejores que él.
2. Sherlock estaba siempre preparado con accesorios para poder analizar
en el momento de la investigación, algún material, que pudiera darle
pistas. Scotland sólo recogía evidencia sin estudiarla minuciosamente.
Usaba la vida cotidiana como base de su observación y deducción.
Precisamente en esos detalles era en los que no se fijaban los
investigadores de Scotland Yard.
Por ese motivo, recluto gente que averiguaran por el para no entorpecer
su investigación, usaba esa estrategia y le daba resultados.
Tenía mucho ingenio para hacer que el propio asesino se acercara a él,
claro que no siempre le resultaban las cosas como él quería.
El concluye que es más fácil que la gente de resultados con pocos datos
obtenidos, a que analicen un resultado para obtener todos los pasos que
llevan a él. Él decía: “Nada es pequeño para una inteligencia grande”.
Al final él sabía que si lograba dar con el asesino, no lo iban a reconocer,
que los investigadores iban a ser los premiados, pero a él no le importó,
porque al fin y al cabo, él fue que resolvió el misterio del Jardín de
Lauriston.