SlideShare una empresa de Scribd logo
1 de 3
Descargar para leer sin conexión
__________________________________________________________________________________________________
Sociedad Julio Garavito Página Nº 1 de 3
MENSUARIO
OCTUBRE 2011 VOL. 2 Nº 30
EL PAPEL DE LAS SOCIEDADES
CIENTÍFICAS EN LA REVOLUCIÓN
CIENTIFICA1
Por: Carlos Eduardo de Jesús Sierra Cuartas
2
Jamás se insistirá lo suficiente acerca de la ín-
dole de pobre dama vergonzante de la investi-
gación y enseñanza de la historia de la ciencia
y la tecnología en el mundo hispano. En mar-
cado contraste, mundos como el anglosajón y
el galo han dedicado a sus correspondientes
historias mucha mayor atención, incluso en la
época actual, cuando ha sufrido un menosca-
bo significativo tal actividad a causa del dete-
rioro de las humanidades en pleno liberalismo
económico, tan dado al privilegio del creci-
miento económico a ultranza. De esta suerte,
si lo decimos a la manera de Rabindranath Ta-
gore, el mundo hispano le ha dado rienda
suelta al suicidio de su alma.
En la investigación sobre historia de la ciencia
y la tecnología, existe un frente interesante a
propósito del papel cumplido por las socieda-
des científicas en la consolidación de la revo-
lución científica. En realidad, aún queda mu-
cho por investigar al respecto, máxime por ser
la revolución de marras un fenómeno complejo
que continúa mal comprendido en la actuali-
dad. A fin de destacar dicha complejidad, se-
ñalemos en síntesis apretada los sucesos más
1
Texto de la conferencia dictada por el autor en la
Sociedad Julio Garavito, en el Planetario de Me-
dellín, el 26 de febrero de 2011.
2
Profesor Asociado de la Universidad Nacional de
Colombia.
relevantes que condujeron al surgimiento de
la ciencia moderna: (1) la caída del régimen
de los arcontes en la antigua Grecia, tras lo
cual surge la democracia ateniense como fru-
to de un proceso de ensayo y error que pro-
curó darle solución al problema de cómo go-
bernarse entre iguales, de lo cual nacieron
las reglas del tener razón para el desenvol-
vimiento en el espacio del ágora; (2) el surgi-
miento del monoteísmo en el Egipto de Ake-
natón, idea perfeccionada por los israelitas al
pasar de un dios material (el disco solar) a un
Dios inmaterial (Yahvé), una idea que permi-
te comprender el universo en forma global y
estructurada; (3) la confluencia de los aportes
anteriores de Atenas y Jerusalén en la Roma
imperial, iniciándose así la fusión entre am-
bos, proceso que abarcará también a la Edad
Media; (4) el aporte adicional de los gremios
de artesanos medievales en la forma de ins-
trumentos; (5) la recuperación inestimable del
saber filosófico y científico grecolatino gra-
cias a la labor de los sabios muslimes tanto
del Islam Oriental como del Occidental; (6)
una vez concluida la fusión de los aportes se-
ñalados, ya en la Edad Moderna, entró en es-
cena la revolución científica como el fruto co-
rrespondiente de tan largo proceso, primero
en campos como la astronomía y la física, y,
poco después, en la medicina. De forma más
tardía, en el siglo XVIII, gracias a la labor de
Antoine Laurent de Lavoisier y Joseph Pries-
tley, tuvo lugar la revolución en el campo de
la química.
Conviene señalar que, a mediados del siglo
XII, hubo un giro en la forma de concebir la
ciencia. Hasta ese momento, solía concebir-
se la ciencia en tanto medio para comprender
la naturaleza y su funcionamiento sin ánimo
de explotarla. A lo sumo, se entendía la cien-
cia cual remedio para que el Hombre pudiera
paliar sus debilidades, de suerte que tuviese
un chance de sobrevivir. Propiamente, esta
concepción de la ciencia como remedio se la
debemos a Hugo de San Víctor. No obstante,
muerto éste, entró en escena la concepción
de la ciencia como medio para conquistar la
naturaleza, una idea debida a los monjes
nórdicos, entre quienes estuvieron Alberto
Magno y Guillermo de Occam. Más adelante,
Francis Bacon asentará más aún esta idea,
basamento de la ciencia moderna desde en-
tonces, un rasgo bastante criticado en virtud
__________________________________________________________________________________________________
Sociedad Julio Garavito Página Nº 2 de 3
MENSUARIO
OCTUBRE 2011 VOL. 2 Nº 30
de los daños causados tanto al ambiente co-
mo al ser humano.
Como se ve, el fenómeno llamado ciencia dis-
ta mucho de ser un relato simple, de suerte
que su reducción a una argamasa de persona-
jes y sucesos anecdóticos hace añicos la posi-
bilidad de comprender la complejidad conco-
mitante. Por desgracia, no pocos de quienes
hablan de la historia de la ciencia pecan de in-
currir en este obstáculo epistemológico. Y, si
hacen las veces de divulgadores por medios
diversos, diseminan este mal terrible. En otras
palabras, no ofrecen la imagen del surgimiento
de la ciencia como el fruto de una aventura de
la ética, esto es, el fruto de la lucha hermanen-
te contra el dogmatismo y el principio de auto-
ridad. Para colmo, proliferan como verdolaga
en playa los eruditos a la violeta, quienes gus-
tan de pontificar sobre historia de la ciencia y
la tecnología sin tomarse la menor molestia de
acometer un mínimo de investigación seria al
respecto, de manera que puedan basar sus
afirmaciones en fuentes rigurosas y fidedig-
nas.
Ahora bien, la historia de la ciencia no está
desconectada de la historia de la tecnología,
sobre todo desde el siglo XVIII. De ahí que
sea buena idea centrar la atención en el fenó-
meno de las sociedades científicas. Recorde-
mos que entre las primeras sociedades funda-
das estuvo la londinense Royal Society, la cual
continúa como la meca de la ciencia en el pla-
neta. Entre sus presidentes, contó con sir Isa-
ac Newton. Además, en el Siglo de las Luces,
la Royal Society acogió como miembros a
figuras de obligada mención en la historia de
la tecnología, entre quienes merece la pena
destacar a John Smeaton, Padre por antono-
masia de la ingeniería civil y cuya labor incluyó
la mejora del rendimiento de las ruedas hi-
dráulicas de su tiempo.
De entre las sociedades científicas de la Rubia
Albión, destaquemos la Sociedad Lunar de
Birmingham, puesto que constituyó un espacio
en el que confluyeron científicos y empresa-
rios. Significa esto que los empresarios británi-
cos allí asociados hicieron las veces de mece-
nas de los científicos. De esta forma, por
ejemplo, Joseph Priestley pudo adelantar sus
investigaciones. Entre sus fundadores, la So-
ciedad Lunar contó con Erasmus Darwin,
abuelo de Charles, y Matthew Boulton, quien,
junto con James Watt, fundó la primera firma
de ingeniería del mundo, dedicada a la explo-
tación de la máquina de vapor mejorada de
Watt. Además de Erasmus Darwin y Matthew
Boulton, fueron miembros de tal Sociedad
Josiah Wedgwood (el otro abuelo de Charles
Darwin), James Watt, William Withering, Jo-
seph Priestley y Benjamin Franklin. En gene-
ral, la Sociedad Lunar de Birmingham contó
con unos doce miembros, eso sí, de calidad:
Pauca, sed bona. En el capítulo 8 de El as-
censo del hombre, encontramos esta intere-
sante precisión (Bronowski, 1987): “Asocia-
ciones como la Sociedad Lunar representan
la intuición de los creadores de la revolución
industrial (una intuición peculiarmente ingle-
sa) de que tenían una responsabilidad social.
La he llamado una intuición inglesa, aunque
de hecho esto no es muy justo; la Sociedad
Lunar estaba sumamente influenciada por
Benjamín Franklin y otros norteamericanos
asociados con ella. Su credo era: la buena
vida es más que decencia material, pero la
buena vida debe estar basada en la decencia
material”.
De otro lado, en 1776, Matthew Boulton se
ufanaba de su asociación comercial con Ja-
mes Watt, tanto que cuando el biógrafo Ja-
mes Boswell le visitó ese mismo año, Boulton
le dijo lo siguiente: “Yo vendo aquí, señor, lo
que todo el mundo desea tener: poder”, una
frase alusiva al dios sol de todo poder, la má-
quina de vapor.
Resulta llamativa la razón del nombre de la
Sociedad Lunar. Obedecía al hecho que sus
reuniones, con una frecuencia mensual, se
llevaban a cabo durante el plenilunio a fin de
que los miembros que residiesen lejos de Bir-
mingham pudiesen viajar de noche, luego de
cada sesión, con una relativa seguridad por
los peligrosos caminos ingleses.
Benjamin Franklin, al igual que Joseph Pri-
estley, formó parte así mismo de otra so-
ciedad científica inglesa: El Club de los Ho-
nestos Liberales. Solían celebrar reunión sus
miembros en el café London en el patio de la
londinense Catedral de San Pablo. Como
describe Steven Johnson (2010), era un gru-
po de librepensadores que se enzarzaba en
una larga y desordenada sesión sin equiva-
__________________________________________________________________________________________________
Sociedad Julio Garavito Página Nº 3 de 3
MENSUARIO
OCTUBRE 2011 VOL. 2 Nº 30
lente exacto en la cultura científica moderna.
Lo más parecido vendría a ser una juerga noc-
turna después de un congreso científico de los
de hoy, lo cual connota compartir información
esencial y potencialmente lucrativa bajo el es-
tímulo de la cafeína, el etanol y la nicotina. El
propio Boswell describió como sigue una de
aquellas sesiones (Johnson, 2010): “Está for-
mada por clérigos, médicos y algunos otros
profesionales (…) (incluido) el señor Price,
quien escribe sobre asuntos morales (…) so-
bre la mesa hay vino y ponche. Algunos fuma-
mos en pipa, y la conversación discurre de
manera bastante formal, en ocasiones calma-
da y en otras encendida. A las nueve traen
bandejas con conejos de Gales, pasteles de
manzana, oporto y cerveza”.
En general, las sociedades científicas que in-
fluyeron sobremanera tanto en la revolución
industrial como en la revolución científica sue-
len ser de factura británica. Entre éstas, la So-
ciedad Lunar de Birmingham transformó de
manera significativa el saber y la tecnología de
la Rubia Albión en las postrimerías del siglo
XVIII. En cuanto a otras regiones concierne,
no gozaron de tanto protagonismo habida
cuenta de lo tardío de la realización de tales
revoluciones en su seno si las hubo. Botón de
muestra, la revolución industrial en Francia
apenas se consolidará a mediados del siglo
XIX. Por el estilo, aconteció en Alemania. En
cuanto a España, tan sólo a fines del siglo
XVIII hará sus primeros pinitos en Cataluña. Si
nos fijamos en el mundo hispano, habrá que
esperar hasta fines del siglo XIX y comienzos
del siglo XX para apreciar el surgimiento de
sus primeras sociedades científicas, pero en
un contexto paradójico, puesto que se trata de
países casi que sin revolución industrial para
efectos prácticos. Más bien, sus modos de
producción actuales cabe denominarlos como
feudalismos de alta tecnología de acuerdo con
la certera expresión de Heinz Dieterich (2005).
En el presente, el caso español es bastante
ilustrativo, puesto que su precaria economía
está basada en el turismo y la construcción,
una precariedad que ha saltado a la vista
con la explosión reciente de la burbuja
inmobiliaria. Así las cosas, es paradójica la
existencia de sociedades científicas en el
seno de países que carecen de revoluciones
industriales. En otros términos, la cultura de
la ciencia no ha sentado sus reales al sur de
los Pirineos y del río Grande.
Para concluir, destaquemos que las socieda-
des científicas británicas del siglo XVIII go-
zaron de un período de gran creatividad habi-
da cuenta que no se veía con malos ojos la
investigación pergeñada por amateurs, serios
por supuesto, como fue el caso de Joseph
Priestley, quien, junto con Lavoisier, protago-
nizó la revolución científica en el campo de la
química en aquellos tiempos. Pero, desde el
siglo XIX, la actividad científica se profesio-
nalizó y, tras la Segunda Guerra Mundial,
han caído en forma dramática sus indicado-
res de creatividad por obra y gracia de un
fenómeno nefasto conocido como la megalo-
ciencia (Big Science). De facto, no faltan
quienes consideran que el último real descu-
brimiento científico fue el de la doble hélice
del ADN en 1953 (Gómez, 2002). Por con-
siguiente, la investigación en torno a las so-
ciedades científicas de los siglos XVII y XVIII
puede darnos luces a fin de renovar y aquila-
tar la actividad científica y académica de la
actualidad.
Referencias
Bronowski, Jacob. (1987). El ascenso del
hombre. Bogotá: Fondo Educativo
Interamericano.
Dieterich, Heinz. (2005). Crisis en las ciencias
sociales. Madrid: Popular.
Gómez Gutiérrez, Alberto. (2002). Del
macroscopio al microscopio: Historia de la
medicina científica. Bogotá: Pontificia
Universidad Javeriana/Academia Nacional de
Medicina.
Johnson, Steven. (2010). La invención del
aire: Un descubrimiento, un genio y su
tiempo. Madrid: Turner.
Richtie-Calder, Lord. (1982). La Sociedad
Lunar de Birmingham. Investigación y
Ciencia, N°71.
Órgano de difusión de la Sociedad Julio Garavito
Comité Editorial:
William Lalinde
León Jaime Restrepo
Adalberto Lopera
Director: Rodrigo Gallego
Editora: Olga Lucía Penagos
Correo E.: rgallegof@une.net.co A.A. 6748 Med. Col.

Más contenido relacionado

La actualidad más candente

La barbarie del_especialismo. José Ortega y Gasset
La barbarie del_especialismo. José Ortega y GassetLa barbarie del_especialismo. José Ortega y Gasset
La barbarie del_especialismo. José Ortega y GassetJorge Pacheco
 
El Proyecto Matriz #122. MAXIMO SANDIN vs DARWIN. DARWINISMO SOCIAL III
El Proyecto Matriz #122. MAXIMO SANDIN vs DARWIN. DARWINISMO SOCIAL IIIEl Proyecto Matriz #122. MAXIMO SANDIN vs DARWIN. DARWINISMO SOCIAL III
El Proyecto Matriz #122. MAXIMO SANDIN vs DARWIN. DARWINISMO SOCIAL IIIProyecto Matriz
 
El Arqueofuturismo - Guillaume Faye
El Arqueofuturismo - Guillaume FayeEl Arqueofuturismo - Guillaume Faye
El Arqueofuturismo - Guillaume FayeAraceli Noemi Lopez
 
Avances cientificos ilustracion
Avances cientificos ilustracionAvances cientificos ilustracion
Avances cientificos ilustracioncmcgrupo6
 
Reynoso surgimiento-antropologia-posmoderna
Reynoso surgimiento-antropologia-posmodernaReynoso surgimiento-antropologia-posmoderna
Reynoso surgimiento-antropologia-posmodernaJoose D' Castellaano
 
Cejsc ude a agenda cultural 262 marzo 2019
Cejsc ude a agenda cultural 262 marzo 2019Cejsc ude a agenda cultural 262 marzo 2019
Cejsc ude a agenda cultural 262 marzo 2019CarlosEduardoSierraC
 
Tema 5 orígenes del movimiento obrero
Tema 5   orígenes del movimiento obreroTema 5   orígenes del movimiento obrero
Tema 5 orígenes del movimiento obreropoetaclaudiorodriguez
 
3ºESO Guía de estudio tema 1 El nacimiento del mundo moderno
3ºESO Guía de estudio tema 1 El nacimiento del mundo moderno3ºESO Guía de estudio tema 1 El nacimiento del mundo moderno
3ºESO Guía de estudio tema 1 El nacimiento del mundo modernoGeohistoria23
 
Dialnet la educaciondurantelailustracionespanola
Dialnet la educaciondurantelailustracionespanolaDialnet la educaciondurantelailustracionespanola
Dialnet la educaciondurantelailustracionespanolaNatalia Chañe Tamayo
 
Dialnet laeducaciondurantelailustracionespanola-131208050532-phpapp02
Dialnet laeducaciondurantelailustracionespanola-131208050532-phpapp02Dialnet laeducaciondurantelailustracionespanola-131208050532-phpapp02
Dialnet laeducaciondurantelailustracionespanola-131208050532-phpapp02Elena Bermúdez Redrajo
 

La actualidad más candente (12)

La barbarie del_especialismo. José Ortega y Gasset
La barbarie del_especialismo. José Ortega y GassetLa barbarie del_especialismo. José Ortega y Gasset
La barbarie del_especialismo. José Ortega y Gasset
 
El Proyecto Matriz #122. MAXIMO SANDIN vs DARWIN. DARWINISMO SOCIAL III
El Proyecto Matriz #122. MAXIMO SANDIN vs DARWIN. DARWINISMO SOCIAL IIIEl Proyecto Matriz #122. MAXIMO SANDIN vs DARWIN. DARWINISMO SOCIAL III
El Proyecto Matriz #122. MAXIMO SANDIN vs DARWIN. DARWINISMO SOCIAL III
 
El Arqueofuturismo - Guillaume Faye
El Arqueofuturismo - Guillaume FayeEl Arqueofuturismo - Guillaume Faye
El Arqueofuturismo - Guillaume Faye
 
Avances cientificos ilustracion
Avances cientificos ilustracionAvances cientificos ilustracion
Avances cientificos ilustracion
 
Reynoso surgimiento-antropologia-posmoderna
Reynoso surgimiento-antropologia-posmodernaReynoso surgimiento-antropologia-posmoderna
Reynoso surgimiento-antropologia-posmoderna
 
Edad modernaa
Edad modernaaEdad modernaa
Edad modernaa
 
Cejsc ude a agenda cultural 262 marzo 2019
Cejsc ude a agenda cultural 262 marzo 2019Cejsc ude a agenda cultural 262 marzo 2019
Cejsc ude a agenda cultural 262 marzo 2019
 
Tema 5 orígenes del movimiento obrero
Tema 5   orígenes del movimiento obreroTema 5   orígenes del movimiento obrero
Tema 5 orígenes del movimiento obrero
 
Hu 12 Descubrimientos Cientificos
Hu 12 Descubrimientos CientificosHu 12 Descubrimientos Cientificos
Hu 12 Descubrimientos Cientificos
 
3ºESO Guía de estudio tema 1 El nacimiento del mundo moderno
3ºESO Guía de estudio tema 1 El nacimiento del mundo moderno3ºESO Guía de estudio tema 1 El nacimiento del mundo moderno
3ºESO Guía de estudio tema 1 El nacimiento del mundo moderno
 
Dialnet la educaciondurantelailustracionespanola
Dialnet la educaciondurantelailustracionespanolaDialnet la educaciondurantelailustracionespanola
Dialnet la educaciondurantelailustracionespanola
 
Dialnet laeducaciondurantelailustracionespanola-131208050532-phpapp02
Dialnet laeducaciondurantelailustracionespanola-131208050532-phpapp02Dialnet laeducaciondurantelailustracionespanola-131208050532-phpapp02
Dialnet laeducaciondurantelailustracionespanola-131208050532-phpapp02
 

Similar a Mensuario vol2 32 oct-11

Análisis del Contexto Nacional.pptx
Análisis  del Contexto Nacional.pptxAnálisis  del Contexto Nacional.pptx
Análisis del Contexto Nacional.pptxAlejandro Villafuerte
 
La Ilustracion, contexto histórico del pensamiento de Kant
La Ilustracion, contexto histórico del pensamiento de KantLa Ilustracion, contexto histórico del pensamiento de Kant
La Ilustracion, contexto histórico del pensamiento de Kantjose.antonio.paredes
 
temas importantes de la salud sanitarios
temas importantes de la salud sanitariostemas importantes de la salud sanitarios
temas importantes de la salud sanitariosJhonGutierrez62
 
FORTI FEBRRO.2023.pdf
FORTI FEBRRO.2023.pdfFORTI FEBRRO.2023.pdf
FORTI FEBRRO.2023.pdfEl Fortí
 
FORTI FEBRRO.2023.pdf
FORTI FEBRRO.2023.pdfFORTI FEBRRO.2023.pdf
FORTI FEBRRO.2023.pdfEl Fortí
 
FORTI FEBRRO.2023.pdf
FORTI FEBRRO.2023.pdfFORTI FEBRRO.2023.pdf
FORTI FEBRRO.2023.pdfEl Fortí
 
Monografía: la Era de la Ilustración: Aportes de los Enciclopedistas y su imp...
Monografía: la Era de la Ilustración: Aportes de los Enciclopedistas y su imp...Monografía: la Era de la Ilustración: Aportes de los Enciclopedistas y su imp...
Monografía: la Era de la Ilustración: Aportes de los Enciclopedistas y su imp...hector coello
 
Santiago Antunez de Mayolo
Santiago Antunez de MayoloSantiago Antunez de Mayolo
Santiago Antunez de MayoloJose luis Meza
 
REVOLUCIÓN CIENTÍFICA SIGLO XVII.docx
REVOLUCIÓN CIENTÍFICA SIGLO XVII.docxREVOLUCIÓN CIENTÍFICA SIGLO XVII.docx
REVOLUCIÓN CIENTÍFICA SIGLO XVII.docxEdwingEmilioSantosRi
 
Santiago de Aija y el Esquivo Neutron
Santiago de Aija y el Esquivo NeutronSantiago de Aija y el Esquivo Neutron
Santiago de Aija y el Esquivo NeutronZuniga Agustin
 
Ciencia en el periodo de entreguerras.(Fisica relativista y cuántica)
Ciencia en el periodo de entreguerras.(Fisica relativista y cuántica)Ciencia en el periodo de entreguerras.(Fisica relativista y cuántica)
Ciencia en el periodo de entreguerras.(Fisica relativista y cuántica)Santiago Fernández Fernández
 
1. corrientes filosoficas xx
1. corrientes filosoficas xx1. corrientes filosoficas xx
1. corrientes filosoficas xxisabel2014
 

Similar a Mensuario vol2 32 oct-11 (20)

Mensuario vol2 30 (jun-11)
Mensuario vol2 30 (jun-11)Mensuario vol2 30 (jun-11)
Mensuario vol2 30 (jun-11)
 
Neoclasicismo
NeoclasicismoNeoclasicismo
Neoclasicismo
 
V2n2a02
V2n2a02V2n2a02
V2n2a02
 
Análisis del Contexto Nacional.pptx
Análisis  del Contexto Nacional.pptxAnálisis  del Contexto Nacional.pptx
Análisis del Contexto Nacional.pptx
 
La Ilustracion, contexto histórico del pensamiento de Kant
La Ilustracion, contexto histórico del pensamiento de KantLa Ilustracion, contexto histórico del pensamiento de Kant
La Ilustracion, contexto histórico del pensamiento de Kant
 
temas importantes de la salud sanitarios
temas importantes de la salud sanitariostemas importantes de la salud sanitarios
temas importantes de la salud sanitarios
 
FORTI FEBRRO.2023.pdf
FORTI FEBRRO.2023.pdfFORTI FEBRRO.2023.pdf
FORTI FEBRRO.2023.pdf
 
FORTI FEBRRO.2023.pdf
FORTI FEBRRO.2023.pdfFORTI FEBRRO.2023.pdf
FORTI FEBRRO.2023.pdf
 
FORTI FEBRRO.2023.pdf
FORTI FEBRRO.2023.pdfFORTI FEBRRO.2023.pdf
FORTI FEBRRO.2023.pdf
 
Monografía: la Era de la Ilustración: Aportes de los Enciclopedistas y su imp...
Monografía: la Era de la Ilustración: Aportes de los Enciclopedistas y su imp...Monografía: la Era de la Ilustración: Aportes de los Enciclopedistas y su imp...
Monografía: la Era de la Ilustración: Aportes de los Enciclopedistas y su imp...
 
Santiago Antunez de Mayolo
Santiago Antunez de MayoloSantiago Antunez de Mayolo
Santiago Antunez de Mayolo
 
Circular 892 may_20-17
Circular 892  may_20-17Circular 892  may_20-17
Circular 892 may_20-17
 
G. Lefebvre
G. LefebvreG. Lefebvre
G. Lefebvre
 
Cejsc articulo1b
Cejsc articulo1bCejsc articulo1b
Cejsc articulo1b
 
REVOLUCIÓN CIENTÍFICA SIGLO XVII.docx
REVOLUCIÓN CIENTÍFICA SIGLO XVII.docxREVOLUCIÓN CIENTÍFICA SIGLO XVII.docx
REVOLUCIÓN CIENTÍFICA SIGLO XVII.docx
 
Santiago de Aija y el Esquivo Neutron
Santiago de Aija y el Esquivo NeutronSantiago de Aija y el Esquivo Neutron
Santiago de Aija y el Esquivo Neutron
 
Archigram
ArchigramArchigram
Archigram
 
Circular 742 mar_29-14
Circular 742  mar_29-14Circular 742  mar_29-14
Circular 742 mar_29-14
 
Ciencia en el periodo de entreguerras.(Fisica relativista y cuántica)
Ciencia en el periodo de entreguerras.(Fisica relativista y cuántica)Ciencia en el periodo de entreguerras.(Fisica relativista y cuántica)
Ciencia en el periodo de entreguerras.(Fisica relativista y cuántica)
 
1. corrientes filosoficas xx
1. corrientes filosoficas xx1. corrientes filosoficas xx
1. corrientes filosoficas xx
 

Más de CarlosEduardoSierraC

Las2orillas.co la dura realidad de ser profesor universitario en tiempos de p...
Las2orillas.co la dura realidad de ser profesor universitario en tiempos de p...Las2orillas.co la dura realidad de ser profesor universitario en tiempos de p...
Las2orillas.co la dura realidad de ser profesor universitario en tiempos de p...CarlosEduardoSierraC
 
Las2orillas.co bibliotecas universitarias fómites otra realidad dantesca de l...
Las2orillas.co bibliotecas universitarias fómites otra realidad dantesca de l...Las2orillas.co bibliotecas universitarias fómites otra realidad dantesca de l...
Las2orillas.co bibliotecas universitarias fómites otra realidad dantesca de l...CarlosEduardoSierraC
 
Cejsc las 2 orillas 14 de mayo de 2021
Cejsc las 2 orillas 14 de mayo de 2021Cejsc las 2 orillas 14 de mayo de 2021
Cejsc las 2 orillas 14 de mayo de 2021CarlosEduardoSierraC
 
Las universidades y sus flamantes protocolos de bioseguridad las2orillas
Las universidades y sus flamantes protocolos de bioseguridad   las2orillasLas universidades y sus flamantes protocolos de bioseguridad   las2orillas
Las universidades y sus flamantes protocolos de bioseguridad las2orillasCarlosEduardoSierraC
 
Nuevagaceta co inicio_crisis_de_los_intelectuales_en_tiempos
Nuevagaceta co inicio_crisis_de_los_intelectuales_en_tiemposNuevagaceta co inicio_crisis_de_los_intelectuales_en_tiempos
Nuevagaceta co inicio_crisis_de_los_intelectuales_en_tiemposCarlosEduardoSierraC
 
Microsoft word mensuario vol2-24 nov-09-
Microsoft word   mensuario vol2-24  nov-09-Microsoft word   mensuario vol2-24  nov-09-
Microsoft word mensuario vol2-24 nov-09-CarlosEduardoSierraC
 
Nuevagaceta co inicio_virtualidad_en_tiempos_de_pandemia
Nuevagaceta co inicio_virtualidad_en_tiempos_de_pandemiaNuevagaceta co inicio_virtualidad_en_tiempos_de_pandemia
Nuevagaceta co inicio_virtualidad_en_tiempos_de_pandemiaCarlosEduardoSierraC
 

Más de CarlosEduardoSierraC (20)

Las2orillas.co la dura realidad de ser profesor universitario en tiempos de p...
Las2orillas.co la dura realidad de ser profesor universitario en tiempos de p...Las2orillas.co la dura realidad de ser profesor universitario en tiempos de p...
Las2orillas.co la dura realidad de ser profesor universitario en tiempos de p...
 
Las2orillas.co bibliotecas universitarias fómites otra realidad dantesca de l...
Las2orillas.co bibliotecas universitarias fómites otra realidad dantesca de l...Las2orillas.co bibliotecas universitarias fómites otra realidad dantesca de l...
Las2orillas.co bibliotecas universitarias fómites otra realidad dantesca de l...
 
Cejsc articulo2 2021
Cejsc articulo2 2021Cejsc articulo2 2021
Cejsc articulo2 2021
 
Cejsc las 2 orillas 14 de mayo de 2021
Cejsc las 2 orillas 14 de mayo de 2021Cejsc las 2 orillas 14 de mayo de 2021
Cejsc las 2 orillas 14 de mayo de 2021
 
Las universidades y sus flamantes protocolos de bioseguridad las2orillas
Las universidades y sus flamantes protocolos de bioseguridad   las2orillasLas universidades y sus flamantes protocolos de bioseguridad   las2orillas
Las universidades y sus flamantes protocolos de bioseguridad las2orillas
 
Cejsc ula articulo3 c 2020b
Cejsc ula articulo3 c 2020bCejsc ula articulo3 c 2020b
Cejsc ula articulo3 c 2020b
 
Cejsc hass rcfc 2020
Cejsc hass rcfc 2020Cejsc hass rcfc 2020
Cejsc hass rcfc 2020
 
Cejsc ula 2020a
Cejsc ula 2020aCejsc ula 2020a
Cejsc ula 2020a
 
Nuevagaceta co inicio_crisis_de_los_intelectuales_en_tiempos
Nuevagaceta co inicio_crisis_de_los_intelectuales_en_tiemposNuevagaceta co inicio_crisis_de_los_intelectuales_en_tiempos
Nuevagaceta co inicio_crisis_de_los_intelectuales_en_tiempos
 
Cejsc bpp 19 de mayo de 2020
Cejsc bpp 19 de mayo de 2020Cejsc bpp 19 de mayo de 2020
Cejsc bpp 19 de mayo de 2020
 
Mensuario vol2 17 (mar-09)
Mensuario vol2 17 (mar-09)Mensuario vol2 17 (mar-09)
Mensuario vol2 17 (mar-09)
 
Mensuario vol2 21 ago-09-
Mensuario vol2 21 ago-09-Mensuario vol2 21 ago-09-
Mensuario vol2 21 ago-09-
 
Microsoft word mensuario vol2-24 nov-09-
Microsoft word   mensuario vol2-24  nov-09-Microsoft word   mensuario vol2-24  nov-09-
Microsoft word mensuario vol2-24 nov-09-
 
Mensuario vol2 26 mzo-10-
Mensuario vol2 26  mzo-10-Mensuario vol2 26  mzo-10-
Mensuario vol2 26 mzo-10-
 
Mensuario vol2 29 (nov-10)
Mensuario vol2 29  (nov-10)Mensuario vol2 29  (nov-10)
Mensuario vol2 29 (nov-10)
 
Mensuario vol2 29 ago-10-
Mensuario vol2 29  ago-10-Mensuario vol2 29  ago-10-
Mensuario vol2 29 ago-10-
 
Mensuario vol2 34 may-12-
Mensuario vol2 34  may-12-Mensuario vol2 34  may-12-
Mensuario vol2 34 may-12-
 
Mensuario vol2 33 (feb-12)
Mensuario vol2 33 (feb-12)Mensuario vol2 33 (feb-12)
Mensuario vol2 33 (feb-12)
 
Mensuario vol2 30 (jun-11)
Mensuario vol2 30 (jun-11)Mensuario vol2 30 (jun-11)
Mensuario vol2 30 (jun-11)
 
Nuevagaceta co inicio_virtualidad_en_tiempos_de_pandemia
Nuevagaceta co inicio_virtualidad_en_tiempos_de_pandemiaNuevagaceta co inicio_virtualidad_en_tiempos_de_pandemia
Nuevagaceta co inicio_virtualidad_en_tiempos_de_pandemia
 

Último

HISTORIA NATURAL DE LA ENFEREMEDAD: SARAMPION
HISTORIA NATURAL DE LA ENFEREMEDAD: SARAMPIONHISTORIA NATURAL DE LA ENFEREMEDAD: SARAMPION
HISTORIA NATURAL DE LA ENFEREMEDAD: SARAMPIONAleMena14
 
Documento Técnico Base del Inventario de Especies Vegetales Nativas del Estad...
Documento Técnico Base del Inventario de Especies Vegetales Nativas del Estad...Documento Técnico Base del Inventario de Especies Vegetales Nativas del Estad...
Documento Técnico Base del Inventario de Especies Vegetales Nativas del Estad...Juan Carlos Fonseca Mata
 
Woods, Thomas E. - Cómo la Iglesia construyó la Civilización Occidental [ocr]...
Woods, Thomas E. - Cómo la Iglesia construyó la Civilización Occidental [ocr]...Woods, Thomas E. - Cómo la Iglesia construyó la Civilización Occidental [ocr]...
Woods, Thomas E. - Cómo la Iglesia construyó la Civilización Occidental [ocr]...frank0071
 
Van Young, Eric. - La otra rebelión. La lucha por la independencia de México,...
Van Young, Eric. - La otra rebelión. La lucha por la independencia de México,...Van Young, Eric. - La otra rebelión. La lucha por la independencia de México,...
Van Young, Eric. - La otra rebelión. La lucha por la independencia de México,...frank0071
 
Tortosa et al. 2º Simposio Internacional Composta.pdf
Tortosa et al. 2º Simposio Internacional Composta.pdfTortosa et al. 2º Simposio Internacional Composta.pdf
Tortosa et al. 2º Simposio Internacional Composta.pdfGermán Tortosa
 
Módulo de oftalmología en cirugia general.pptx
Módulo de oftalmología en cirugia general.pptxMódulo de oftalmología en cirugia general.pptx
Módulo de oftalmología en cirugia general.pptxLuisGuzmnHernndez1
 
problemas_oscilaciones_amortiguadas.pdf aplicadas a la mecanica
problemas_oscilaciones_amortiguadas.pdf aplicadas a la mecanicaproblemas_oscilaciones_amortiguadas.pdf aplicadas a la mecanica
problemas_oscilaciones_amortiguadas.pdf aplicadas a la mecanicaArturoDavilaObando
 
Fritzsche, Peter. - Vida y muerte en el Tercer Reich [ocr] [2009].pdf
Fritzsche, Peter. - Vida y muerte en el Tercer Reich [ocr] [2009].pdfFritzsche, Peter. - Vida y muerte en el Tercer Reich [ocr] [2009].pdf
Fritzsche, Peter. - Vida y muerte en el Tercer Reich [ocr] [2009].pdffrank0071
 
SEMIOLOGIA RESPIRATORIA, CLINICA BASICA .pdf
SEMIOLOGIA RESPIRATORIA, CLINICA BASICA .pdfSEMIOLOGIA RESPIRATORIA, CLINICA BASICA .pdf
SEMIOLOGIA RESPIRATORIA, CLINICA BASICA .pdfrvillegasp16001
 
Sistema Endocrino, rol de los receptores hormonales, hormonas circulantes y l...
Sistema Endocrino, rol de los receptores hormonales, hormonas circulantes y l...Sistema Endocrino, rol de los receptores hormonales, hormonas circulantes y l...
Sistema Endocrino, rol de los receptores hormonales, hormonas circulantes y l...GloriaMeza12
 
4.-ENLACE-QUÍMICO.-LIBRO-PRINCIPAL (1).pdf
4.-ENLACE-QUÍMICO.-LIBRO-PRINCIPAL (1).pdf4.-ENLACE-QUÍMICO.-LIBRO-PRINCIPAL (1).pdf
4.-ENLACE-QUÍMICO.-LIBRO-PRINCIPAL (1).pdfvguadarramaespinal
 
Holland, Tom - Milenio. El fin del mundo y el origen del cristianismo [2010].pdf
Holland, Tom - Milenio. El fin del mundo y el origen del cristianismo [2010].pdfHolland, Tom - Milenio. El fin del mundo y el origen del cristianismo [2010].pdf
Holland, Tom - Milenio. El fin del mundo y el origen del cristianismo [2010].pdffrank0071
 
LEY FEDERAL DE TRABAJO IPN MEDICINA OCUPACIONAL.pdf
LEY FEDERAL DE TRABAJO IPN MEDICINA OCUPACIONAL.pdfLEY FEDERAL DE TRABAJO IPN MEDICINA OCUPACIONAL.pdf
LEY FEDERAL DE TRABAJO IPN MEDICINA OCUPACIONAL.pdfrvillegasp16001
 
Generalidades de Morfología y del aparato musculoesquelético.pdf
Generalidades de Morfología y del aparato musculoesquelético.pdfGeneralidades de Morfología y del aparato musculoesquelético.pdf
Generalidades de Morfología y del aparato musculoesquelético.pdfJosefinaRojas27
 
PIZARRO-parte4.pdf apuntes de física 3, electricidad y magnetismo
PIZARRO-parte4.pdf apuntes de física 3, electricidad y magnetismoPIZARRO-parte4.pdf apuntes de física 3, electricidad y magnetismo
PIZARRO-parte4.pdf apuntes de física 3, electricidad y magnetismoArturoDavilaObando
 
EXAMEN ANDROLOGICO O CAPACIDAD REPRODUCTIVA EN EQUINOS.pptx
EXAMEN ANDROLOGICO O CAPACIDAD REPRODUCTIVA  EN EQUINOS.pptxEXAMEN ANDROLOGICO O CAPACIDAD REPRODUCTIVA  EN EQUINOS.pptx
EXAMEN ANDROLOGICO O CAPACIDAD REPRODUCTIVA EN EQUINOS.pptxJhonFonseca16
 
Centro de masa, centro de gravedad y equilibrio.pptx
Centro de masa, centro de gravedad y equilibrio.pptxCentro de masa, centro de gravedad y equilibrio.pptx
Centro de masa, centro de gravedad y equilibrio.pptxErichManriqueCastill
 
Pielonefritis en imagenologia clinica.pptx
Pielonefritis en imagenologia clinica.pptxPielonefritis en imagenologia clinica.pptx
Pielonefritis en imagenologia clinica.pptxLuisGuzmnHernndez1
 
valoracion hemodinamica y respuesta a fluidorerapia
valoracion hemodinamica y respuesta a fluidorerapiavaloracion hemodinamica y respuesta a fluidorerapia
valoracion hemodinamica y respuesta a fluidorerapiaresiutihjaf
 
el lugar santo y santisimo final.pptx y sus partes
el lugar santo y santisimo final.pptx y sus partesel lugar santo y santisimo final.pptx y sus partes
el lugar santo y santisimo final.pptx y sus partesAsihleyyanguez
 

Último (20)

HISTORIA NATURAL DE LA ENFEREMEDAD: SARAMPION
HISTORIA NATURAL DE LA ENFEREMEDAD: SARAMPIONHISTORIA NATURAL DE LA ENFEREMEDAD: SARAMPION
HISTORIA NATURAL DE LA ENFEREMEDAD: SARAMPION
 
Documento Técnico Base del Inventario de Especies Vegetales Nativas del Estad...
Documento Técnico Base del Inventario de Especies Vegetales Nativas del Estad...Documento Técnico Base del Inventario de Especies Vegetales Nativas del Estad...
Documento Técnico Base del Inventario de Especies Vegetales Nativas del Estad...
 
Woods, Thomas E. - Cómo la Iglesia construyó la Civilización Occidental [ocr]...
Woods, Thomas E. - Cómo la Iglesia construyó la Civilización Occidental [ocr]...Woods, Thomas E. - Cómo la Iglesia construyó la Civilización Occidental [ocr]...
Woods, Thomas E. - Cómo la Iglesia construyó la Civilización Occidental [ocr]...
 
Van Young, Eric. - La otra rebelión. La lucha por la independencia de México,...
Van Young, Eric. - La otra rebelión. La lucha por la independencia de México,...Van Young, Eric. - La otra rebelión. La lucha por la independencia de México,...
Van Young, Eric. - La otra rebelión. La lucha por la independencia de México,...
 
Tortosa et al. 2º Simposio Internacional Composta.pdf
Tortosa et al. 2º Simposio Internacional Composta.pdfTortosa et al. 2º Simposio Internacional Composta.pdf
Tortosa et al. 2º Simposio Internacional Composta.pdf
 
Módulo de oftalmología en cirugia general.pptx
Módulo de oftalmología en cirugia general.pptxMódulo de oftalmología en cirugia general.pptx
Módulo de oftalmología en cirugia general.pptx
 
problemas_oscilaciones_amortiguadas.pdf aplicadas a la mecanica
problemas_oscilaciones_amortiguadas.pdf aplicadas a la mecanicaproblemas_oscilaciones_amortiguadas.pdf aplicadas a la mecanica
problemas_oscilaciones_amortiguadas.pdf aplicadas a la mecanica
 
Fritzsche, Peter. - Vida y muerte en el Tercer Reich [ocr] [2009].pdf
Fritzsche, Peter. - Vida y muerte en el Tercer Reich [ocr] [2009].pdfFritzsche, Peter. - Vida y muerte en el Tercer Reich [ocr] [2009].pdf
Fritzsche, Peter. - Vida y muerte en el Tercer Reich [ocr] [2009].pdf
 
SEMIOLOGIA RESPIRATORIA, CLINICA BASICA .pdf
SEMIOLOGIA RESPIRATORIA, CLINICA BASICA .pdfSEMIOLOGIA RESPIRATORIA, CLINICA BASICA .pdf
SEMIOLOGIA RESPIRATORIA, CLINICA BASICA .pdf
 
Sistema Endocrino, rol de los receptores hormonales, hormonas circulantes y l...
Sistema Endocrino, rol de los receptores hormonales, hormonas circulantes y l...Sistema Endocrino, rol de los receptores hormonales, hormonas circulantes y l...
Sistema Endocrino, rol de los receptores hormonales, hormonas circulantes y l...
 
4.-ENLACE-QUÍMICO.-LIBRO-PRINCIPAL (1).pdf
4.-ENLACE-QUÍMICO.-LIBRO-PRINCIPAL (1).pdf4.-ENLACE-QUÍMICO.-LIBRO-PRINCIPAL (1).pdf
4.-ENLACE-QUÍMICO.-LIBRO-PRINCIPAL (1).pdf
 
Holland, Tom - Milenio. El fin del mundo y el origen del cristianismo [2010].pdf
Holland, Tom - Milenio. El fin del mundo y el origen del cristianismo [2010].pdfHolland, Tom - Milenio. El fin del mundo y el origen del cristianismo [2010].pdf
Holland, Tom - Milenio. El fin del mundo y el origen del cristianismo [2010].pdf
 
LEY FEDERAL DE TRABAJO IPN MEDICINA OCUPACIONAL.pdf
LEY FEDERAL DE TRABAJO IPN MEDICINA OCUPACIONAL.pdfLEY FEDERAL DE TRABAJO IPN MEDICINA OCUPACIONAL.pdf
LEY FEDERAL DE TRABAJO IPN MEDICINA OCUPACIONAL.pdf
 
Generalidades de Morfología y del aparato musculoesquelético.pdf
Generalidades de Morfología y del aparato musculoesquelético.pdfGeneralidades de Morfología y del aparato musculoesquelético.pdf
Generalidades de Morfología y del aparato musculoesquelético.pdf
 
PIZARRO-parte4.pdf apuntes de física 3, electricidad y magnetismo
PIZARRO-parte4.pdf apuntes de física 3, electricidad y magnetismoPIZARRO-parte4.pdf apuntes de física 3, electricidad y magnetismo
PIZARRO-parte4.pdf apuntes de física 3, electricidad y magnetismo
 
EXAMEN ANDROLOGICO O CAPACIDAD REPRODUCTIVA EN EQUINOS.pptx
EXAMEN ANDROLOGICO O CAPACIDAD REPRODUCTIVA  EN EQUINOS.pptxEXAMEN ANDROLOGICO O CAPACIDAD REPRODUCTIVA  EN EQUINOS.pptx
EXAMEN ANDROLOGICO O CAPACIDAD REPRODUCTIVA EN EQUINOS.pptx
 
Centro de masa, centro de gravedad y equilibrio.pptx
Centro de masa, centro de gravedad y equilibrio.pptxCentro de masa, centro de gravedad y equilibrio.pptx
Centro de masa, centro de gravedad y equilibrio.pptx
 
Pielonefritis en imagenologia clinica.pptx
Pielonefritis en imagenologia clinica.pptxPielonefritis en imagenologia clinica.pptx
Pielonefritis en imagenologia clinica.pptx
 
valoracion hemodinamica y respuesta a fluidorerapia
valoracion hemodinamica y respuesta a fluidorerapiavaloracion hemodinamica y respuesta a fluidorerapia
valoracion hemodinamica y respuesta a fluidorerapia
 
el lugar santo y santisimo final.pptx y sus partes
el lugar santo y santisimo final.pptx y sus partesel lugar santo y santisimo final.pptx y sus partes
el lugar santo y santisimo final.pptx y sus partes
 

Mensuario vol2 32 oct-11

  • 1. __________________________________________________________________________________________________ Sociedad Julio Garavito Página Nº 1 de 3 MENSUARIO OCTUBRE 2011 VOL. 2 Nº 30 EL PAPEL DE LAS SOCIEDADES CIENTÍFICAS EN LA REVOLUCIÓN CIENTIFICA1 Por: Carlos Eduardo de Jesús Sierra Cuartas 2 Jamás se insistirá lo suficiente acerca de la ín- dole de pobre dama vergonzante de la investi- gación y enseñanza de la historia de la ciencia y la tecnología en el mundo hispano. En mar- cado contraste, mundos como el anglosajón y el galo han dedicado a sus correspondientes historias mucha mayor atención, incluso en la época actual, cuando ha sufrido un menosca- bo significativo tal actividad a causa del dete- rioro de las humanidades en pleno liberalismo económico, tan dado al privilegio del creci- miento económico a ultranza. De esta suerte, si lo decimos a la manera de Rabindranath Ta- gore, el mundo hispano le ha dado rienda suelta al suicidio de su alma. En la investigación sobre historia de la ciencia y la tecnología, existe un frente interesante a propósito del papel cumplido por las socieda- des científicas en la consolidación de la revo- lución científica. En realidad, aún queda mu- cho por investigar al respecto, máxime por ser la revolución de marras un fenómeno complejo que continúa mal comprendido en la actuali- dad. A fin de destacar dicha complejidad, se- ñalemos en síntesis apretada los sucesos más 1 Texto de la conferencia dictada por el autor en la Sociedad Julio Garavito, en el Planetario de Me- dellín, el 26 de febrero de 2011. 2 Profesor Asociado de la Universidad Nacional de Colombia. relevantes que condujeron al surgimiento de la ciencia moderna: (1) la caída del régimen de los arcontes en la antigua Grecia, tras lo cual surge la democracia ateniense como fru- to de un proceso de ensayo y error que pro- curó darle solución al problema de cómo go- bernarse entre iguales, de lo cual nacieron las reglas del tener razón para el desenvol- vimiento en el espacio del ágora; (2) el surgi- miento del monoteísmo en el Egipto de Ake- natón, idea perfeccionada por los israelitas al pasar de un dios material (el disco solar) a un Dios inmaterial (Yahvé), una idea que permi- te comprender el universo en forma global y estructurada; (3) la confluencia de los aportes anteriores de Atenas y Jerusalén en la Roma imperial, iniciándose así la fusión entre am- bos, proceso que abarcará también a la Edad Media; (4) el aporte adicional de los gremios de artesanos medievales en la forma de ins- trumentos; (5) la recuperación inestimable del saber filosófico y científico grecolatino gra- cias a la labor de los sabios muslimes tanto del Islam Oriental como del Occidental; (6) una vez concluida la fusión de los aportes se- ñalados, ya en la Edad Moderna, entró en es- cena la revolución científica como el fruto co- rrespondiente de tan largo proceso, primero en campos como la astronomía y la física, y, poco después, en la medicina. De forma más tardía, en el siglo XVIII, gracias a la labor de Antoine Laurent de Lavoisier y Joseph Pries- tley, tuvo lugar la revolución en el campo de la química. Conviene señalar que, a mediados del siglo XII, hubo un giro en la forma de concebir la ciencia. Hasta ese momento, solía concebir- se la ciencia en tanto medio para comprender la naturaleza y su funcionamiento sin ánimo de explotarla. A lo sumo, se entendía la cien- cia cual remedio para que el Hombre pudiera paliar sus debilidades, de suerte que tuviese un chance de sobrevivir. Propiamente, esta concepción de la ciencia como remedio se la debemos a Hugo de San Víctor. No obstante, muerto éste, entró en escena la concepción de la ciencia como medio para conquistar la naturaleza, una idea debida a los monjes nórdicos, entre quienes estuvieron Alberto Magno y Guillermo de Occam. Más adelante, Francis Bacon asentará más aún esta idea, basamento de la ciencia moderna desde en- tonces, un rasgo bastante criticado en virtud
  • 2. __________________________________________________________________________________________________ Sociedad Julio Garavito Página Nº 2 de 3 MENSUARIO OCTUBRE 2011 VOL. 2 Nº 30 de los daños causados tanto al ambiente co- mo al ser humano. Como se ve, el fenómeno llamado ciencia dis- ta mucho de ser un relato simple, de suerte que su reducción a una argamasa de persona- jes y sucesos anecdóticos hace añicos la posi- bilidad de comprender la complejidad conco- mitante. Por desgracia, no pocos de quienes hablan de la historia de la ciencia pecan de in- currir en este obstáculo epistemológico. Y, si hacen las veces de divulgadores por medios diversos, diseminan este mal terrible. En otras palabras, no ofrecen la imagen del surgimiento de la ciencia como el fruto de una aventura de la ética, esto es, el fruto de la lucha hermanen- te contra el dogmatismo y el principio de auto- ridad. Para colmo, proliferan como verdolaga en playa los eruditos a la violeta, quienes gus- tan de pontificar sobre historia de la ciencia y la tecnología sin tomarse la menor molestia de acometer un mínimo de investigación seria al respecto, de manera que puedan basar sus afirmaciones en fuentes rigurosas y fidedig- nas. Ahora bien, la historia de la ciencia no está desconectada de la historia de la tecnología, sobre todo desde el siglo XVIII. De ahí que sea buena idea centrar la atención en el fenó- meno de las sociedades científicas. Recorde- mos que entre las primeras sociedades funda- das estuvo la londinense Royal Society, la cual continúa como la meca de la ciencia en el pla- neta. Entre sus presidentes, contó con sir Isa- ac Newton. Además, en el Siglo de las Luces, la Royal Society acogió como miembros a figuras de obligada mención en la historia de la tecnología, entre quienes merece la pena destacar a John Smeaton, Padre por antono- masia de la ingeniería civil y cuya labor incluyó la mejora del rendimiento de las ruedas hi- dráulicas de su tiempo. De entre las sociedades científicas de la Rubia Albión, destaquemos la Sociedad Lunar de Birmingham, puesto que constituyó un espacio en el que confluyeron científicos y empresa- rios. Significa esto que los empresarios británi- cos allí asociados hicieron las veces de mece- nas de los científicos. De esta forma, por ejemplo, Joseph Priestley pudo adelantar sus investigaciones. Entre sus fundadores, la So- ciedad Lunar contó con Erasmus Darwin, abuelo de Charles, y Matthew Boulton, quien, junto con James Watt, fundó la primera firma de ingeniería del mundo, dedicada a la explo- tación de la máquina de vapor mejorada de Watt. Además de Erasmus Darwin y Matthew Boulton, fueron miembros de tal Sociedad Josiah Wedgwood (el otro abuelo de Charles Darwin), James Watt, William Withering, Jo- seph Priestley y Benjamin Franklin. En gene- ral, la Sociedad Lunar de Birmingham contó con unos doce miembros, eso sí, de calidad: Pauca, sed bona. En el capítulo 8 de El as- censo del hombre, encontramos esta intere- sante precisión (Bronowski, 1987): “Asocia- ciones como la Sociedad Lunar representan la intuición de los creadores de la revolución industrial (una intuición peculiarmente ingle- sa) de que tenían una responsabilidad social. La he llamado una intuición inglesa, aunque de hecho esto no es muy justo; la Sociedad Lunar estaba sumamente influenciada por Benjamín Franklin y otros norteamericanos asociados con ella. Su credo era: la buena vida es más que decencia material, pero la buena vida debe estar basada en la decencia material”. De otro lado, en 1776, Matthew Boulton se ufanaba de su asociación comercial con Ja- mes Watt, tanto que cuando el biógrafo Ja- mes Boswell le visitó ese mismo año, Boulton le dijo lo siguiente: “Yo vendo aquí, señor, lo que todo el mundo desea tener: poder”, una frase alusiva al dios sol de todo poder, la má- quina de vapor. Resulta llamativa la razón del nombre de la Sociedad Lunar. Obedecía al hecho que sus reuniones, con una frecuencia mensual, se llevaban a cabo durante el plenilunio a fin de que los miembros que residiesen lejos de Bir- mingham pudiesen viajar de noche, luego de cada sesión, con una relativa seguridad por los peligrosos caminos ingleses. Benjamin Franklin, al igual que Joseph Pri- estley, formó parte así mismo de otra so- ciedad científica inglesa: El Club de los Ho- nestos Liberales. Solían celebrar reunión sus miembros en el café London en el patio de la londinense Catedral de San Pablo. Como describe Steven Johnson (2010), era un gru- po de librepensadores que se enzarzaba en una larga y desordenada sesión sin equiva-
  • 3. __________________________________________________________________________________________________ Sociedad Julio Garavito Página Nº 3 de 3 MENSUARIO OCTUBRE 2011 VOL. 2 Nº 30 lente exacto en la cultura científica moderna. Lo más parecido vendría a ser una juerga noc- turna después de un congreso científico de los de hoy, lo cual connota compartir información esencial y potencialmente lucrativa bajo el es- tímulo de la cafeína, el etanol y la nicotina. El propio Boswell describió como sigue una de aquellas sesiones (Johnson, 2010): “Está for- mada por clérigos, médicos y algunos otros profesionales (…) (incluido) el señor Price, quien escribe sobre asuntos morales (…) so- bre la mesa hay vino y ponche. Algunos fuma- mos en pipa, y la conversación discurre de manera bastante formal, en ocasiones calma- da y en otras encendida. A las nueve traen bandejas con conejos de Gales, pasteles de manzana, oporto y cerveza”. En general, las sociedades científicas que in- fluyeron sobremanera tanto en la revolución industrial como en la revolución científica sue- len ser de factura británica. Entre éstas, la So- ciedad Lunar de Birmingham transformó de manera significativa el saber y la tecnología de la Rubia Albión en las postrimerías del siglo XVIII. En cuanto a otras regiones concierne, no gozaron de tanto protagonismo habida cuenta de lo tardío de la realización de tales revoluciones en su seno si las hubo. Botón de muestra, la revolución industrial en Francia apenas se consolidará a mediados del siglo XIX. Por el estilo, aconteció en Alemania. En cuanto a España, tan sólo a fines del siglo XVIII hará sus primeros pinitos en Cataluña. Si nos fijamos en el mundo hispano, habrá que esperar hasta fines del siglo XIX y comienzos del siglo XX para apreciar el surgimiento de sus primeras sociedades científicas, pero en un contexto paradójico, puesto que se trata de países casi que sin revolución industrial para efectos prácticos. Más bien, sus modos de producción actuales cabe denominarlos como feudalismos de alta tecnología de acuerdo con la certera expresión de Heinz Dieterich (2005). En el presente, el caso español es bastante ilustrativo, puesto que su precaria economía está basada en el turismo y la construcción, una precariedad que ha saltado a la vista con la explosión reciente de la burbuja inmobiliaria. Así las cosas, es paradójica la existencia de sociedades científicas en el seno de países que carecen de revoluciones industriales. En otros términos, la cultura de la ciencia no ha sentado sus reales al sur de los Pirineos y del río Grande. Para concluir, destaquemos que las socieda- des científicas británicas del siglo XVIII go- zaron de un período de gran creatividad habi- da cuenta que no se veía con malos ojos la investigación pergeñada por amateurs, serios por supuesto, como fue el caso de Joseph Priestley, quien, junto con Lavoisier, protago- nizó la revolución científica en el campo de la química en aquellos tiempos. Pero, desde el siglo XIX, la actividad científica se profesio- nalizó y, tras la Segunda Guerra Mundial, han caído en forma dramática sus indicado- res de creatividad por obra y gracia de un fenómeno nefasto conocido como la megalo- ciencia (Big Science). De facto, no faltan quienes consideran que el último real descu- brimiento científico fue el de la doble hélice del ADN en 1953 (Gómez, 2002). Por con- siguiente, la investigación en torno a las so- ciedades científicas de los siglos XVII y XVIII puede darnos luces a fin de renovar y aquila- tar la actividad científica y académica de la actualidad. Referencias Bronowski, Jacob. (1987). El ascenso del hombre. Bogotá: Fondo Educativo Interamericano. Dieterich, Heinz. (2005). Crisis en las ciencias sociales. Madrid: Popular. Gómez Gutiérrez, Alberto. (2002). Del macroscopio al microscopio: Historia de la medicina científica. Bogotá: Pontificia Universidad Javeriana/Academia Nacional de Medicina. Johnson, Steven. (2010). La invención del aire: Un descubrimiento, un genio y su tiempo. Madrid: Turner. Richtie-Calder, Lord. (1982). La Sociedad Lunar de Birmingham. Investigación y Ciencia, N°71. Órgano de difusión de la Sociedad Julio Garavito Comité Editorial: William Lalinde León Jaime Restrepo Adalberto Lopera Director: Rodrigo Gallego Editora: Olga Lucía Penagos Correo E.: rgallegof@une.net.co A.A. 6748 Med. Col.