2. Matriz BCG
•Si tomamos en consideración
dos dimensiones para clasificar los
productos de una empresa, siendo
estas el crecimiento que experimenta
el mercado del producto y la posición
de la empresa respecto a la
competencia, los productos se pueden
clasificar en cuatro categorías
principales
4. Productos "incógnita"
Cuando se da simultáneamente una posición
competitiva baja y un mercado de crecimiento
elevado, por ejemplo al introducir un producto
nuevo, no se conoce el posible éxito del producto;
es decir que, más allá de los estudios e
investigación realizados, no sabemos cual va a ser
la suerte de dicho producto.
Se dice que es un producto "incógnita" y no
queda más remedio que aportar recursos para
mejorar la posición competitiva con respecto a la
competencia (que posiblemente este pasando por
una situación similar).
5. Productos "estrella"
•Si se ha alcanzado una buena posición
competitiva y el mercado está en crecimiento, al
producto se lo denomina "estrella". Normalmente
proveniente de un producto incógnita
•Sin embargo si bien el producto estrella suele
ser un producto de alta exposición, es decir buena
exhibición, uso intensivo de publicidad y promociones
por ejemplo, no necesariamente significa que el
producto estrella es el que más cantidad de recursos
aporte a la empresa ya que es muy probable que
requieran mayores esfuerzos en mantener la posición
frente a la competencia, al no tener todavía un buen
posicionamiento desarrollado.
6. Productos «Vaca»
•Si el crecimiento del mercado se vuelve
más lento y si ha conseguido mantener una
buena posición competitiva, la empresa puede
comenzar a recoger los recursos de su producto
(o dicho de otra forma "ordeñar su vaca").
•En este punto, el mercado no requiere una
elevada inversión y el producto es aceptado sin
más esfuerzo que el recordatorio para el cliente
7. Productos «Perro»
•Si en un mercado de lento crecimiento la
empresa pierde su posición frente a la
competencia, por quedar obsoleto el producto
tanto por la aparición de nuevos productos,
desarrollos de nuevas tecnologías, cambio en los
hábitos de consumo, etc, tendrá lo que se llama
un producto «perro»
•Este es un buen momento para plantearse
si seguir con el producto o eliminarlo de la
cartera, dependiendo de la estrategia a seguir por
la empresa.