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508 Medicine. 2008;10(8):508-17
ACTUALIZACIÓN
Introducción
La litiasis biliar o colelitiasis es una enfermedad que se ca-
racteriza por la presencia de cálculos en el interior de la ve-
sícula biliar. Es una de las patologías más frecuentes en apa-
rato digestivo, llegando a presentarse en hasta un 12% de la
población adulta mediterránea. Presenta una mayor preva-
lencia a edades más avanzadas y en la mujer con una propor-
ción 2:1.
Estamos asistiendo a un gran avance en el conocimiento
en cuanto a la epidemiología y a los factores de riesgo para el
desarrollo de la colelitiasis. Esta es más frecuente en indivi-
duos de raza caucásica, hispanos e indios nativos americanos,
mientras que es menos frecuente en afroamericanos, europeos
del Este y japoneses.
Dependiendo de la composición, diferenciamos dos tipos
de cálculos biliares: litiasis de colesterol, que representa un
75% de los cálculos en países occidentales, y litiasis pigmen-
taria, compuesta casi en su totalidad por sales cálcicas de bi-
lirrubina no conjugada. El 85% de los cálculos se localiza en
la vesícula biliar; el 15% restante se localiza en la vía biliar
principal de forma concomitante.
Epidemiología
Prevalencia
Los datos de los diferentes estudios epidemiológicos mues-
tran una modesta diferencia en cuanto a la prevalencia de co-
lelitiasis en diferentes poblaciones; estas diferencias pueden
ser a nivel genético, medioambientales, o ambas. En general
la colelitiasis es aproximadamente dos veces más frecuente
en mujeres, y aproximadamente un 10% de la población tie-
ne colelitiasis. Muchas series indican que la prevalencia de
colelitiasis en mujeres con edades comprendidas entre 20 y
55 años varía de un 5% hasta un 20%, y en aquellas mayores
de 50 años se estima en torno a 25-30% (Sleizenger).
PUNTOS CLAVE
Epidemiología. Aunque la prevalencia varía entre
unas poblaciones y otras, se considera una
patología muy frecuente llegando a presentarse
en un 10% en nuestro medio, siendo dos veces
más frecuente en mujeres • Existen otros
factores que pueden influir en la producción de
litiasis biliar, como son el embarazo, fármacos,
obesidad, diabetes y nutrición parenteral, entre
otros.
Patogenia. Tres son los defectos que
principalmente se ven afectados en la formación
de cálculos: supersaturación de colesterol,
aceleración de la cristalización y la hipomotilidad
de la vesícula biliar • Cualquier factor dietético,
metabólico o genético que interfiera en alguno de
los mecanismos anteriormente citados actuará
aumentando o disminuyendo la formación de
dichos cálculos • La litiasis pigmentaria es
secundaria al exceso de bilirrubina no conjugada
que se genera en la hemólisis y en otras
enfermedades crónicas.
Clínica. La manifestación clínica más habitual es
la de dolor en hipocondrio derecho continuo que
irradia a espalda y escápula, que generalmente va
asociado a náuseas y vómitos • A este cuadro
clínico se le denomina cólico biliar • Es
fundamental el diagnóstico diferencial con la
colecistitis aguda.
Diagnóstico. Se basa fundamentalmente en las
características clínicas del paciente asociado a
pruebas de imagen • La ecografía abdominal
destaca de entre las demás por ser una prueba no
invasiva al alcance de cualquier médico.
Tratamiento. Consiste en el control médico de los
cólicos biliares a la espera del tratamiento
definitivo: la colecistectomía, que habitualmente
se lleva a cabo por vía laparoscópica • La
eficacia del tratamiento médico orientado a la
disolución de los cálculos va a depender en gran
medida del tamaño de las litiasis. • El tratamiento
médico se basa en el uso de sales biliares orales,
la disolución por contacto y la litotricia • Para el
control del dolor puede ser útil la meperidina o el
ketorolaco.
Colelitiasis
M. Valdés Mas y J. Egea Valenzuela
Servicio de Medicina de Aparato Digestivo.
Hospital Universitario Virgen de la Arrixaca. Murcia. España.
04 ACT 8 (508-517).qxp 17/4/08 16:27 Página 508
Predisposición étnica
La predisposición genética a presentar colelitiasis no está
claramente demostrada. No hay duda de que la genética de-
sempeña un papel importante en la patogenia de la litiasis bi-
liar, pero la influencia genética es multifactorial y varía entre
poblaciones debido a que hay factores físicos que son deter-
minantes de la formación de cálculos. Dentro de una pobla-
ción los familiares de primer grado presentan una prevalen-
cia 4,5 veces superior al resto de la población1
. Han sido
descubiertos varios genes asociados a la formación de cálcu-
los y genes protectores en ratones2,3
. La importancia de estos
genes en la formación de litiasis en humanos está por esta-
blecer.
Los indios Pima en el sur de Arizona ejemplifican una
población de alto riesgo con una prevalencia de colelitiasis
en mujeres del 70%. Otras poblaciones de riesgo son los
países escandinavos, Alaska, Canadá, Bolivia y Chile4
.
Morfología y composición
La litiasis biliar está compuesta mayoritariamente por litiasis
de colesterol, litiasis negra o litiasis pigmentaria.
Las litiasis de colesterol son las más comunes. Están
compuestas de colesterol en su totalidad o en su mayor par-
te. Al microscopio se aprecia que estos cálculos están com-
puestos de cristales de colesterol monohidrato unidos por
una matriz de mucina con un núcleo negro de sales de calcio
de bilirrubina no conjugada.
La litiasis pigmentaria negra está compuesta por bilirru-
binato cálcico o compuestos poliméricos de calcio y cobre,
así como una gran cantidad de mucina. No se presenta con
una estructura cristalina regular. Ocurre más frecuentemen-
te en pacientes cirróticos o con hemólisis crónicas.
La litiasis pigmentaria marrón está compuesta por sales
de calcio y bilirrubina no conjugada, con cantidades variables de
colesterol y proteínas. Estas litiasis están asociadas a infec-
ciones. Las bacterias presentes en la vía biliar producen ␤-
glucuronidasas que hidrolizan el ácido glucurónico5
. El re-
sultado es la formación de sales de calcio de bilirrubina no
conjugada con ácidos biliares no conjugados y ácidos grasos
de cadena larga6
. El examen microscópico muestra el citoes-
queleto de bacterias, siendo necesario el antecedente de in-
fección para la formación de litiasis.
Factores de riesgo
Edad
La litiasis biliar raramente se disuelve espontáneamente, es
más, la prevalencia acumulada aumenta con la edad. Además,
la secreción de colesterol a la vía biliar se incrementa con la
edad, mientras que la formación de ácidos biliares disminuye,
por tanto la bilis se vuelve más litogénica con la edad (tabla 1).
Sexo
Como ya se ha comentado previamente, la prevalencia de co-
lelitiasis es mayor en mujeres en todos los grupos de edad7,8
.
COLELITIASIS
Medicine. 2008;10(8):508-17 509
La diferencia entre mujeres y va-
rones es particularmente impor-
tante en adultos jóvenes9
. La ra-
zón fundamental estriba en los
embarazos y los esteroides sexua-
les.
Embarazo
El embarazo es el mayor factor de
riesgo para el desarrollo de cálcu-
los de colesterol. El riesgo está re-
lacionado con la frecuencia y el
número de embarazos. En un es-
tudio, por ejemplo, se apreció una
prevalencia de colelitiasis aumen-
tada en 1,3% en nulíparas frente a
un 12,2% en multíparas10
.
Las hormonas sexuales indu-
cen una variedad de cambios fisio-
lógicos en el sistema biliar que
acaba secretando bilis muy satura-
da de colesterol, lo que promueve
la formación de cálculos. Es debi-
do fundamentalmente a la induc-
ción de la secreción de colesterol
por parte de los estrógenos, exce-
so de producción de ácidos bilia-
res hidrofílicos y un vaciamiento
más lento debido a la progestero-
na11,12
. Estos cambios se normali-
zan en uno o dos meses tras el
parto. En el postparto el 61% de casos con barro biliar se re-
suelven y aproximadamente el 30% de las litiasis menores de
10 mm desaparecen10
.
Fármacos
1. Estrógenos: cabría diferenciar entre hombres y mujeres.
El tratamiento con estrógenos en la mujer va a generar una
hipersecreción de colesterol a la bilis y reducción de la sínte-
sis de ácidos biliares. En el hombre va a provocar únicamen-
te un aumento de la secreción de colesterol a la bilis13,14
.
2. Clofibrato: va a reducir la concentración de ácidos bi-
liares como resultado de una supresión de la actividad de la
7␣-hidroxilasa y un descenso de la actividad de la Acil-CoA
colesterol transferasa; el resultado será un incremento de la
secreción de colesterol libre a la bilis15
.
3. Contraceptivos orales: incrementan la secreción de co-
lesterol16
.
4. Progestágenos: disminuyen la actividad de la Acil-CoA
colesterol transferasa, incrementan la secreción de colesterol
y generan un enlentecimiento del vaciamiento de la vesícula.
5. Ceftriaxona: precipita creando una sal insoluble com-
puesta de calcio y ceftriaxona17
.
6. Octreótido: disminuye la motilidad de la vesícula bi-
liar18
.
Historia familiar
Hay estudios que sugieren que la genética tiene un papel im-
portante en el desarrollo de litiasis biliar19
. La gran variabili-
TABLA 1
Factores de riesgo de
colelitiasis
Edad
Sexo femenino
Genéticos
Indios Pima
Chilenos
Obesidad
Embarazo
Pérdida de peso rápida
Dieta muy baja en calorías
Intervención de obesidad
mórbida
Cirrosis
Hipertrigliceridemia
Anemias hemolíticas
Fármacos
Clofibrato
Estrógenos
Anticonceptivos orales
Octreótido
Ceftriaxona
Resección de íleon terminal
Enfermedad de Crohn
Estasis de vesícula biliar
Diabetes mellitus
Nutrición parenteral total
Post-vagotomía
Lesión de médula espinal
Actividad física disminuida
04 ACT 8 (508-517).qxp 17/4/08 16:27 Página 509
dad de colelitiasis entre diferentes grupos étnicos puede ser
debida a variabilidad genética, así como a hábitos dietéticos
y culturales. Un ejemplo dramático es el de los indios Pima,
que tienen un excepcional porcentaje de colelitiasis: el 73%
de las mujeres mayores de 25 años4
.
Obesidad
La obesidad es un factor de riesgo bien definido para el desarro-
llo de colelitiasis, presumiblemente debido al aumento en la
síntesis de colesterol y secreción a la vía biliar. El riesgo es
particularmente alto en mujeres y más en pacientes con obe-
sidad mórbida20-22
.
Pérdida de peso rápida
La pérdida de peso rápida es también un factor de riesgo de
colelitiasis. Altos porcentajes de litiasis se han descrito en
dietas de muy bajas calorías23,24
. Son más frecuentes en mu-
jeres caucasianas.
El mecanismo de formación no está claramente delimita-
do. Parece estar relacionado con un aumento de la mucina y
el calcio en la bilis. Además estos pacientes son más propen-
sos a ser sintomáticos; un 28% de los pacientes pueden lle-
gar a precisar colecistectomía urgente22
.
La profilaxis con ácido ursodesoxicólico parece ser efec-
tiva y reduce el riesgo de formación de litiasis durante la pér-
dida de peso rápida25
.
Nutrición parenteral total
Está asociada a un aumento de desarrollo de colecistitis sin
cálculos, así como colelitiasis. La frecuencia de barro biliar
también es alta, con diagnóstico de la misma incluso a las tres
semanas de iniciada la nutrición parenteral total (NPT)26
. El
defecto fisiológico más importante es la estasis biliar por hi-
pomotilidad debido al ayuno prolongado. También se ha
apreciado un defecto en la relajación del esfínter de Oddi.
Diabetes mellitus
La diabetes mellitus parece estar asociada a un aumento en la
formación de litiasis biliar según demuestran algunos estu-
dios27
. El mecanismo que predispone a litiasis no está del todo
claro. Hay dos posibles factores: la hipertrigliceridemia y la
neuropatía autonómica, que va a desencadenar estasis biliar28
.
Lípidos séricos
El papel preciso de los lípidos séricos en la formación de li-
tiasis no está del todo claro. Parecen estar asociadas con apo-
lipoproteínas E4 y aumento de triglicéridos29
. Por otro lado
existe una asociación negativa entres colelitiasis y el coleste-
rol ligado a lipoproteínas de alta densidad (HDL). No hay
evidencia que concluya una relación directa entre el coleste-
rol sérico y la colelitiasis30
.
Cirrosis
Es un factor de riesgo mayor para colelitiasis. Un análisis
multivariable demostró que el riesgo aumenta en pacientes
con estadio Child B y C de cirrosis (independientemente de
la causa) y en pacientes con elevado índice de masa corporal.
El incremento de formación de litiasis es debido a múltiples
factores: reducción de síntesis y transporte de sales biliares y
ENFERMEDADES DEL APARATO DIGESTIVO (VIII)
510 Medicine. 2008;10(8):508-17
de bilirrubina no conjugada, aumento de los estrógenos y
una mala respuesta a la contracción de la vesícula biliar du-
rante las comidas31,32
.
Disminución de la actividad física
La actividad física está relacionada con el descenso de riesgo
de colelitiasis sintomática33
.
Enfermedad de Crohn
La prevalencia de colelitiasis en pacientes con enfermedad de
Crohn está aumentada. Se ha llegado a detectar hasta un
26% de prevalencia de litiasis biliar en dicha población, lo
que es dos veces más frecuente que en la población gene-
ral34,35
. La litiasis de los pacientes con enfermedad de Crohn
ileal suele ser pigmentaria debido al aumento de la concen-
tración de bilirrubina conjugada, bilirrubina no conjugada y
calcio en la vesícula biliar secundaria a la alteración de la cir-
culación enterohepática36
.
Factores protectores
Existen una serie de factores dietéticos que parece que ten-
gan relación con una menor formación de colelitiasis.
Ácido ascórbico
Hay diversos estudios acerca de la relación entre la historia
de colelitiasis sintomática o asintomática y los niveles de áci-
do ascórbico en sangre. Niveles de ácido ascórbico superio-
res a 27 ␮mol/l presentan un 13% menos de prevalencia de
patología litiásica37
. Por razones poco claras esto no es cierto
en hombres. El beneficio del ácido ascórbico parece estar re-
lacionado con su efecto a nivel del catabolismo del colesterol.
Café
El consumo moderado de café ha sido asociado con una re-
ducción en el riesgo de colelitiasis sintomática38
. Individuos
que llegan a beber dos o tres tazas de café diarias tienen
aproximadamente un 40% menos de riesgo de desarrollar
colelitiasis sintomática.
Proteínas vegetales
Se ha visto el consumo de proteínas vegetales en el contexto
de una dieta de ajuste energético como un factor protector
para colecistectomía39
.
Grasas poliinsaturadas y monoinsaturadas
El consumo de grasas poliinsaturadas y monoinsaturadas en
el contexto de una dieta está asociado con la reducción del
riesgo de formación de colelitiasis40
.
Patogenia
Tres son los defectos que principalmente se ven afectados en
la formación de cálculos: supersaturación de colesterol, ace-
leración de la cristalización y la hipomotilidad de la vesícula
biliar. Los tres factores conjuntamente son los que van a in-
tervenir en la formación de litiasis biliar (tabla 2).
04 ACT 8 (508-517).qxp 17/4/08 16:27 Página 510
Supersaturación de colesterol
El colesterol es esencialmente insoluble en agua y por tanto
requiere de la actividad detergente de las sales biliares, los
fosfolípidos (lecitina), para permanecer en solución. El co-
lesterol, los fosfolípidos y los ácidos biliares son los mayores
componentes lipídicos de la bilis. En humanos, el aumento
de la saturación de colesterol en la vesícula biliar es el deter-
minante más importante de la formación de cristales41
.
Alteraciones en el metabolismo del colesterol afectan de
modo directo a los porcentajes de ácidos biliares y secreción de
colesterol a la bilis, produciendo una bilis más litogénica. Al-
gunos estudios muestran que los pacientes con colelitiasis tie-
nen una actividad de hidroxi-metil-glutaril-CoA (HMG CoA)
reductasa y aumentos en la síntesis de colesterol superiores a
los controles42
. La lovastatina es un inhibidor competente de la
HMG CoA reductasa bloqueando la formación de cálculos43
.
Los porcentajes de esterificación de colesterol pueden
influir en la litogenicidad de la bilis, porque los fármacos que
reducen la esterificación (progesterona y clofibrato) tienden
a incrementar la secreción de colesterol44
. La actividad de la
acil-CoA colesterol transferasa (ACAT) se ha visto reducida
o normal en pacientes con colelitiasis. La importancia de ello
radica en que el colesterol libre regula la síntesis de coleste-
rol aumentándola. Este colesterol libre puede estar alterado
por el aumento o descenso de la actividad de la ACAT. Una
actividad baja aumenta el colesterol libre, que a su vez esti-
mula la secreción de colesterol a la bilis45
.
La composición de los ácidos biliares es también un deter-
minante de interés en la litogenicidad de la bilis. Cuanto más
hidrofóbicos sean los ácidos biliares, mayor será su inducción
en la secreción de colesterol y la supresión de la síntesis de áci-
dos biliares46
. La concentración relativa de los diferentes áci-
dos biliares influye en el índice de saturación, y por tanto es
más propensa a la formación de cristales. Los pacientes con co-
COLELITIASIS
Medicine. 2008;10(8):508-17 511
lelitiasis tienen menos cantidad de ácido cólico y mayor canti-
dad de su metabolito ácido deoxicólico (producido por acción
bacteriana)47
. Este ácido es hidrofóbico y aumenta el índice de
saturación, así como incrementa la secreción de colesterol.
Factores nucleadores y antinucleadores
En una bilis supersaturada, el primer paso en la formación
de colelitiasis es la nucleación, que consiste en un proceso de
condensación o agregación por el cual se forman cristales
microscópicos o partículas amorfas a partir de la bilis super-
saturada48
. Después de la nucleación ocurre la cristalización,
que da lugar a cristales de colesterol monohidrato que pue-
den aglomerarse y formar macrolitiasis49
. El tiempo de nu-
cleación en pacientes con colelitiasis es inferior respecto a los
pacientes sanos50
. También, la cantidad de proteínas en la bi-
lis con cristales de colesterol es superior a la de la bilis que
no presenta cristales51
. Un número muy importante de fac-
tores pronucleadores han sido estudiados, así como factores
inhibidores de la nucleación, pero a excepción de la mucina,
su relevancia fisiológica continúa en debate.
La glucoproteína mucina es el factor pronucleador más
importante que ha sido identificado. El core de las glucopro-
teínas de mucina contiene regiones hidrofóbicas que pueden
unir el colesterol, los fosfolípidos y la bilirrubina. La unión
de vesículas ricas en colesterol a las regiones hidrofóbicas pa-
rece ser el motivo que acelera la nucleación52
.
La mucina es secretada de forma continua a la vesícula
biliar, sin embargo la secreción es excesiva en la bilis litogé-
nica. La hipersecreción de mucina precede a la formación de
cristales de colesterol. La secreción de mucina está regulada,
al menos en parte, por las prostaglandinas, y puede ser inhi-
bida por los antiinflamatorios no esteroideos (AINE)53,54
.
Desafortunadamente, la frecuencia de colelitiasis es la misma
en pacientes que toman AINE durante mucho tiempo que en
los que no los toman55
.
La concentración de calcio en bilis desempeña un papel
importante en la precipitación y formación de colelitiasis.
Las sales de calcio están presentes en la mayor parte de las li-
tiasis biliares. Los pacientes con colelitiasis pueden tener
mayores concentraciones de calcio y supersaturación de car-
bonato cálcico56
. El carbonato cálcico, así como el bilirrubi-
nato cálcico y el fosfato cálcico, pueden servir como caldo de
cultivo para la formación de cristales de colesterol.
Hipomotilidad de la vesícula biliar
La vesícula en sí misma contribuye a la patogénesis de la co-
lelitiasis. La mucosa de la vesícula biliar tiene uno de los ma-
yores índices de absorción del cuerpo. El volumen de bilis
disminuye en un 80 a 90% mientras reside en la vesícula bi-
liar, mediante un transporte activo de sodio unido a una ab-
sorción pasiva de agua57
.
El control neurológico del vaciado de la vesícula biliar
está mediado por el sistema nervioso parasimpático y el sim-
pático. En conjunto incrementan la contractilidad de la vesí-
cula biliar, y la posterior relajación. En los pacientes con co-
TABLA 2
Factores de riesgo y fisiopatología
Edad Aumento de secreción de colesterol y disminución de la
síntesis de ácidos biliares
Sexo femenino Aumento de secreción de colesterol y aumento del
tránsito intestinal
Obesidad Hipersecreción de colesterol a la bilis e incremento de la
síntesid de colesterol
Nutrición PT Hipomotilidad de la vesícula biliar
Pérdida de peso Hipersecreción de colesterol, disminución síntesis ácidos
biliares e hipomotilidad de la vesícula
Embarazo Aumento de la secreción de colesterol e hipomotilidad de
la vesícula biliar
Anticonceptivos Aumento de la secreción de colesterol
Clofibrato Aumento de la secreción de colesterol
Estrógenos Hipersecreción de colesterol y dsiminución de la síntesis
de ácidos biliares
Progestágenos Aumento de la secreción de colesterol e hipomotilidad de
la vesícula biliar
Octeótrido Disminución de la motilidad de la vesícula biliar
Ceftriaxona Precipitación en una sal insoluble de calcio-ceftriaxona
Predisposición genética Aumento de la secreción de colesterol
Patología ileon terminal Hiposecreción de sales biliares
Descenso de HDL Aumenta la actividad de la HMG CoA reductasa
Aumento de triglicéridos Aumenta la actividad de la HMG CoA reductasa
04 ACT 8 (508-517).qxp 17/4/08 16:27 Página 511
lelitiasis se han evidenciado defectos de la motilidad, demos-
trados por el aumento del volumen residual tras las comi-
das58
. La inhibición del estímulo colinérgico con atropina
aumenta el tiempo de vaciamiento de la vesícula biliar
después de una comida en respuesta a la colecistoquinina
(CCK)59
. Esta es la sustancia del cuerpo humano que pre-
senta un estímulo mayor sobre la contracción de la vesícula
biliar. Los pacientes con colelitiasis presentan una disminu-
ción de dicho estímulo tras inyección intravenosa de CCK60
.
Las sustancias que estimulan la liberación de CCK son los
ácidos grasos de cadena larga, aminoácidos e hidratos de car-
bono61
. El fallo de la producción de dichos estímulos es el
mecanismo que con más frecuencia ocurre en pacientes con
litiasis biliar. Otras hormonas como la somatostatina y los
polipéptidos pancreáticos afectan a la motilidad de la vesícu-
la biliar, pero su papel no está del todo claro.
Una complicación potencial de la estasis de la vesícula bi-
liar es la formación de barro biliar, como ocurre en pacien-
tes con lesiones en la médula espinal, nutrición parenteral
prolongada, tratamientos prolongados con octreótidos, el
embarazo y la pérdida de peso rápida61
.
Litiasis pigmentaria
Se presenta en el 10 al 25% de todas las litiasis. Como su
nombre indica, son litiasis que están pigmentadas como re-
sultado de la precipitación de la bilirrubina. Como ocurre
con las litiasis de colesterol, la prevalencia de las litiasis pig-
mentarias aumenta con la edad y es generalmente más fre-
cuente en mujeres.
Las litiasis pigmentarias negras se forman en la vesícula
biliar como consecuencia del exceso de producción de bili-
rrubina no conjugada, la cual precipita como bilirrubinato
cálcico para formar litiasis. Está asociada a hemólisis cróni-
ca, cirrosis y pancreatitis62
.
Las litiasis pigmentarias marrones son más comunes en
áreas en las cuales las infecciones de la vía biliar son más fre-
cuentes. Se pueden formar en la vesícula biliar o en otras re-
giones del árbol biliar. Están siempre asociadas a la coloni-
zación de la vía biliar por microorganismos entéricos63
.
Clínica
En la mayoría de los pacientes los primeros síntomas que se
experimentan en la colelitiasis son los ataques recurrentes de
dolor, el llamado cólico biliar. Menos frecuentes como sín-
tomas iniciales son las complicaciones de la colelitiasis (cole-
cistitis, pancreatitis aguda litiásica, colangitis aguda o cole-
docolitiasis con colestasis extrahepática).
Cólico biliar
El cólico biliar está causado generalmente por la contracción
de la vesícula biliar en respuesta a estímulos hormonales y
neurales secundarios a la ingesta de grasas, forzando la litia-
sis contra la salida biliar por el conducto cístico, lo que au-
ENFERMEDADES DEL APARATO DIGESTIVO (VIII)
512 Medicine. 2008;10(8):508-17
menta la presión dentro de la vesícula biliar y genera dolor.
Las litiasis generalmente vuelven a la vesícula biliar cuando la
vesícula se relaja. En muchos pacientes el dolor no es intenso,
y este es el motivo por el que suelen presentar múltiples
ataques antes de que precisen atención médica. La frecuen-
cia de los ataques recurrentes varía de años a días64
.
A pesar del término “cólico”, el dolor es habitualmente
constante y no cólico. El ataque clásico se describe como un
intenso dolor opresivo en el hipocondrio derecho o epigas-
trio, o en el pecho, que irradia a la espalda y a la región es-
capular derecha65
. El dolor sigue a la ingesta de grasas y ha-
bitualmente no ocurre en ayunas. Sin embargo, el dolor
puede no estar relacionado con las comidas en un número
considerable de pacientes.
El dolor está generalmente asociado a sudoración, náu-
seas y vómitos. No se incrementa con los movimientos y no se
alivia con la flexión del tronco o con los movimientos intes-
tinales. Después del ataque, la exploración física es habitual-
mente normal, con la excepción de posibles molestias resi-
duales en abdomen superior.
El cólico biliar requiere hacer diagnóstico diferencial con
una complicación muy grave de la colelitiasis, que es la cole-
cistitis aguda. Este cuadro clínico está asociado a inflamación
de la pared de la vesícula biliar, fiebre y leucocitosis.
Diagnóstico
El diagnóstico de la colelitiasis no complicada debe ser sos-
pechado por la clínica (principalmente por el cuadro de cóli-
co biliar). En estos pacientes debemos evaluar la presencia de
litiasis o barro biliar.
El cólico biliar es el mayor predictor de litiasis biliar,
pero mientras las pruebas de imagen intentan detectar la
presencia de litiasis, no hay pruebas de laboratorio ni clínicas
que puedan dar el diagnóstico de cólico biliar. El diagnósti-
co está basado, por tanto, en una historia clínica meticulosa.
Exploración física
Los pacientes que presentan un cólico biliar simple no reflejan
aparente mal estado general, no tienen fiebre, ni taquicardia.
El dolor es característicamente leve y no intenso como para
llevar al paciente a urgencias. Durante el dolor el abdomen
está generalmente sin alteraciones, sin signos de irritación pe-
ritoneal, mientras el dolor sea visceral sin inflamación de la ve-
sícula biliar. Sin embargo, puede haber defensa voluntaria.
La exploración física puede ayudarnos a distinguirlo de
una colecistitis aguda. El del cólico biliar está bien localiza-
do y no presenta signo de Murphy positivo. Este signo es ca-
racterístico de la colecistitis.
Análisis de laboratorio
Los análisis de laboratorio deben ser normales en pacientes
con colelitiasis no complicada tanto en periodos sintomá-
ticos como en asintomáticos. Sin embargo, pueden ser útiles
04 ACT 8 (508-517).qxp 17/4/08 16:27 Página 512
para descartar otros diagnósticos. En un estudio razonable
solicitaríamos: enzimas hepáticas, amilasa y lipasa séricas,
hemograma y análisis de orina.
Estudios de imagen
Son útiles para confirmar la presencia de colelitiasis o barro
biliar en pacientes con historia sugestiva de cólico biliar. De-
ben ser útiles también para excluir otros diagnósticos.
Ecografía
Es considerada como la prueba de imagen más útil para con-
firmar la presencia de colelitiasis, ya que es una prueba no in-
vasiva, relativamente al alcance, no es cara y no genera radia-
ción al paciente. La sensibilidad de esta exploración está en
torno al 84% y la especificidad en un 99%66
. Otro factor a te-
ner en cuenta es que es una prueba que depende en gran me-
dida de la experiencia del radiólogo. Independientemente del
observador, está generalmente aceptado que los ultrasonidos
no son especialmente sensibles para determinar el número y
el tamaño de las litiasis en la vesícula biliar. Esto es especial-
mente cierto para litiasis de 1 ó 2 mm de diámetro que fre-
cuentemente pueden aparecer como una única litiasis (fig. 1).
Radiografía de abdomen
La radiografía de abdomen no es útil para visualizar coleli-
tiasis en pacientes sintomáticos. Únicamente un 10% de las
litiasis tiene suficiente calcio en su composición para hacer-
las radioopacas y ser visibles en la radiografía (fig. 2).
Colecistografía oral
La colecistografía oral es una técnica útil para diagnosti-
car colelitiasis y para medir la función de la vesícula biliar.
Actualmente apenas se usa. Se utiliza cuando no se puede lo-
grar un buen estudio por ecografía, para confirmar la pre-
sencia de adenomiomatosis de la vesícula biliar y para evaluar
a los pacientes que van a recibir tratamiento médico con áci-
do ursodesoxicólico, en el que es importante demostrar el
número y tamaño de las litiasis.
Tomografía computarizada
La sensibilidad para el diagnóstico de colelitiasis con tomo-
grafía computarizada (TC) es muy baja, ya que no son visi-
bles debido a que la mayoría son isodensas67
.
Ecoendoscopia (ultrasonografía endoscópica [USE])
Se pueden obtener imágenes de la vesícula biliar por vía eco-
endoscópica en el transcurso de una endoscopia a la altura
del antro gástrico. La visualización es buena si no hay gas
que interfiera la transmisión ultrasónica. Es más sensible que
la extracorpórea para la valoración de colelitiasis, sobre todo
en pacientes obesos o con otras alteraciones anatómicas que
dificulten la correcta visualización68
. Puede ser útil en el es-
tudio de litiasis de pequeño tamaño y microlitiasis. Puesto
que es una técnica invasiva, se reserva para pacientes con có-
lico biliar en que se sospechen complicaciones de la coleli-
tiasis como la pancreatitis. También es útil en pacientes en
que se sospecha coledocolitiasis (fig. 3).
COLELITIASIS
Medicine. 2008;10(8):508-17 513
Fig. 1. Ecografía abdominal en la que se observan múltiples litiasis en vesícula
biliar.
Fig. 2. Litiasis biliar en radiografía de abdomen.
Fig. 3. Coledocolitiasis en ultrasonografía endoscópica.
04 ACT 8 (508-517).qxp 17/4/08 16:27 Página 513
Tratamiento
Cólico biliar
El tratamiento del cólico biliar consiste en el control del do-
lor, que se puede llevar a cabo con meperidina, que es prefe-
rible a la morfina ya que afecta menos a la motilidad del es-
fínter de Oddi69
. Los pacientes con ataques prolongados
deben recibir también hidratación intravenosa.
Otra opción sería el uso de ketorolaco para pacientes que
se presentan en urgencias con cólico biliar. El tratamiento
generalmente quita el dolor durante 20 ó 30 minutos. Des-
pués se le prescribirá ibuprofeno 400 mg por vía oral que se
tomará durante los sucesivos ataques, hasta que se lleve a
cabo un tratamiento definitivo. Tanto la meperidina como el
ketorolaco se ha visto que tienen un efecto equivalente. La
meperidina, en cambio, tiene más efectos secundarios: náu-
seas y vómitos.
Tratamiento profiláctico
Cuando el ataque agudo de cólico biliar cede, debe realizarse
un tratamiento profiláctico para quitar las litiasis previniendo
así nuevos ataques o incluso complicaciones más graves. Hay
múltiples formas, desde la cirugía hasta la disolución de las
mismas con tratamiento médico. La elección va a depender
del riesgo quirúrgico del paciente.
La colecistectomía es la técnica más aconsejada. Consis-
te en extraer la vesícula biliar bajo anestesia general mediante
laparotomía en hipocondrio derecho o mediante laparosco-
pia. La laparoscopia ha demostrado presentar mayor riesgo
de lesiones en la vía biliar común70
. En un 10% de los casos
la laparoscopia se convierte en abierta. La elección se basa en la
experiencia del cirujano.
Tratamiento de las colelitiasis
Médico
Hay tres métodos que pueden utilizarse aislados o en combi-
nación: sales biliares orales, disolución por contacto y litotri-
cia.
La eficacia del tratamiento médico depende del tamaño
y la composición de las litiasis, así como de la función de la
vesícula biliar. Pacientes con litiasis pequeñas ricas en coles-
terol sin signos de calcificación son candidatos a tratamiento
con ácidos biliares y disolución por contacto. Litiasis de ma-
yor tamaño pueden ser subsidiarias de litotricia combinada
con otras técnicas para disolver y facilitar la disolución de las
mismas. Una buena función de la vesícula biliar es necesaria
para limpiar las litiasis y para minimizar el riesgo de coleli-
tiasis recurrente. Como conclusión, las litiasis pigmentadas y
las calcificadas no son candidatas a tratamiento médico.
Ácidos biliares. Actúan inhibiendo la secreción de coleste-
rol a la bilis, incrementando la secreción de bilis, inhibiendo
la formación de litiasis y mejorando el vaciamiento de la ve-
ENFERMEDADES DEL APARATO DIGESTIVO (VIII)
514 Medicine. 2008;10(8):508-17
sícula biliar71
. La presencia de cálculos con colesterol y sales
de calcio dificulta la disolución de los mismos, disminuyen-
do la eficacia de los ácidos biliares. Las condiciones para el
uso de ácidos biliares son: a) litiasis menores de 1 cm; b) sín-
tomas leves; c) buena función de la vesícula biliar; d) litiasis
cuya composición sea predominantemente de colesterol, y e)
mínima calcificación y baja densidad en TC. El efecto fun-
damental que se busca es la disolución completa del cálculo
así como la disminución en la magnitud de los síntomas y el
riesgo de complicaciones.
Los que más se usan son el ácido ursodesoxicólico y el
chenodesoxicólico. El ursodesoxicólico tiene menos efectos
secundarios, causando menos diarrea que el chenodesoxicó-
lico, no aumenta el colesterol sérico y no produce hepatoto-
xicidad. La dosis de ácido ursodesoxicólico es de 10 mg/kg.
Si los pacientes cumplen las condiciones mencionadas
previamente, la disolución de los cálculos se llevará a cabo en
al menos un 90% de ellos. La respuesta del tratamiento es
lenta, con disminución de tamaño de 1 mm al mes de media,
por ello el tratamiento ha de durar en torno a un año. Si no
se produce una disolución completa, suele ser debido a la
presencia de un mayor contenido de calcio en las litiasis. Por
ello, para la selección de pacientes candidatos puede ser útil
la realización de TC, donde apreciaremos las litiasis con ma-
yor contenido de calcio.
Como en el resto de tratamientos médicos, existe una in-
cidencia significativa de recurrencia de los síntomas incluso
en pacientes con disolución completa de las litiasis72
. El ries-
go parece ser mayor en pacientes con múltiples litiasis y el
tiempo de disolución de las litiasis es más prolongado.
Estatinas. Hay mucho interés en el uso de inhibidores de la
HMG CoA reductasa en el tratamiento de colelitiasis. Estos
agentes reducen la secreción de colesterol, sin embargo no
reducen el índice de saturación de colesterol, probablemen-
te por la reducción en la secreción de ácidos biliares y fosfo-
lípidos. No obstante, no hay evidencia de que las estatinas
reduzcan el número y el tamaño de las litiasis73
. La unión del
tratamiento de ácidos biliares y estatinas no ha supuesto nin-
gún beneficio.
Disolución por contacto. Los métodos para la disolución
de cálculos por contacto directo requieren de solventes que
se han usado durante años. Están siendo utilizados en pocos
sitios de EE. UU. y Europa. El metil terbutil éter es un po-
tente solvente del colesterol y ha sido usado solo o en com-
binación con otros agentes. La indicación y la selección de
pacientes es similar a la del tratamiento con ácidos biliares,
sin embargo, su respuesta más rápida y la mayor eficacia per-
miten tratar a pacientes con síntomas más intensos. Los cál-
culos pequeños ricos en colesterol con mínima calcificación
son los más fáciles de disolver. La respuesta adecuada de la
vesícula biliar es necesaria para eliminar las sustancias resul-
tantes de la disolución. La técnica requiere una punción
directa de vesícula biliar. La vía de acceso suele ser extrape-
ritoneal. Hay también varios estudios en los que la aproxi-
mación se hace vía colangiopancreatografía retrógrada en-
doscópica (CPRE)74
. La mayor complicación que puede
tener la técnica es la canalización de la vesícula biliar y la to-
04 ACT 8 (508-517).qxp 17/4/08 16:27 Página 514
xicidad directa de los agentes disolventes. Entre las compli-
caciones del acercamiento transhepático está el sangrado y la
pérdida de bilis, que suele ser intraperitoneal si el acerca-
miento no es extraperitoneal. La pérdida de bilis ocurre ge-
neralmente tras la retirada del catéter y se aprecia muy pron-
to. Suele cursar con dolor, leucocitosis y fiebre. Si hay
sospecha, debería hacerse una colecistografía. Si la pérdida es
importante debe hacerse una colecistectomía.
Litotricia extracorpórea. Hay muchos tipos de litotricias
que se han usado para el tratamiento de la colelitiasis y ne-
frolitiasis. La litotricia que se usa habitualmente es a través
de ultrasonidos. Es más efectiva en pacientes con una única
litiasis, aunque se han documentado casos de fragmentación
de 10 litiasis mediante esta técnica. Es recomendada en pa-
cientes con menos de tres litiasis. Otros factores favorables
son el bajo índice de masa corporal (IMC) y la buena función
de la vesícula biliar. Las litiasis radioopacas responden peor
a la litotricia así como a la acción de los ácidos biliares. Las
litiasis de pequeño tamaño son difíciles de tratar mediante li-
totricia por la dificultad para localizarlas. Entre los criterios
de exclusión para litotricia destacan: alteraciones de la coa-
gulación y de las plaquetas, anomalías del conducto cístico y
vasculares, complicaciones agudas relacionadas con colelitia-
sis y el embarazo. Las complicaciones son frecuentes aunque
leves. Un 30 a un 40% presenta cólico biliar secundario al
paso de los restos de la fragmentación por el cístico. Ocurre
generalmente en los primeros tres días tras la prueba. Una
obstrucción real de la vía biliar o una pancreatitis es menos
frecuente, afectando a menos del 5% de los enfermos. Como
en otros tratamientos médicos, la recurrencia de litiasis es
bastante frecuente y depende de la habilidad en la completa
fragmentación de las litiasis, ya que puede servir de caldo de
cultivo para la formación de otras nuevas. La función
correcta de la vesícula biliar no solo facilita el aclaramiento de
los restos de la litiasis, sino que también previene la forma-
ción de nuevas litiasis. La recurrencia de litiasis tras la inter-
vención está en torno a un 3-12% al año75
. La administra-
ción de ácido ursodesoxicólico puede ayudar a reducir el
riesgo de recurrencia de los síntomas. Aproximadamente un
80% de los pacientes persiste con síntomas tras el aclara-
miento de las litiasis, de ahí que la eficacia de la litotricia para
la remisión de la sintomatología sea dudosa.
Endoscópico y percutáneo
Pacientes con elevados factores de riesgo como para ser
intervenidos quirúrgicamente pueden requerir colecistecto-
mía percutánea. En pacientes con patología de la vía biliar
(cólico biliar, colecistitis aguda, colecistitis acalculosa y pan-
creatitis litiásica) asociada a graves comorbilidades que ex-
cluya cualquier otro tratamiento se ha utilizado la colocación
de un stent en el conducto cístico.
Quirúrgico
Colecistectomía abierta. Es la mejor opción terapéutica
para el tratamiento de la colelitiasis por su baja morbilidad y
porque quita los síntomas en un 90-95% de los pacientes. La
mortalidad de la colecistectomía abierta ronda el 1,5%. El
COLELITIASIS
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riesgo de muerte es mucho mayor en pacientes que requieren
una colecistectomía de urgencia para el tratamiento de una
colecistitis aguda y cuando es necesaria la exploración de la
vía biliar. La mortalidad también aumenta con la edad del pa-
ciente. Las complicaciones son raras. La mayoría de ellas son
leves, como infecciones, serositis, retención urinaria o atelec-
tasias. Como complicaciones específicas destacan las pérdidas
de bilis, lesión de la vía biliar y la pancreatitis aguda.
Colecistectomía laparoscópica. Es una técnica menos in-
vasiva que la anterior, con una cicatriz menor, menos dolor
y una vuelta a la normalidad más rápida. La mortalidad de
esta técnica está entre 0 y 0,15%. La conversión a cirugía
abierta ocurre en un 2,2% de los pacientes. Lesiones en la vía
biliar se dan en un 0,14 a un 0,5% de los pacientes. En una
semana los pacientes pueden reanudar sus ocupaciones habi-
tuales.
Manejo del paciente según la clínica
Cabría dividir a los pacientes en 4 grupos:
1. Pacientes con litiasis asintomáticas: no van a recibir
tratamiento específico ya que cuando presentan clínica, esta
es muy leve.
2. Pacientes con síntomas típicos y colelitiasis: requieren
tratamiento específico que generalmente es la colecistecto-
mía, sobre todo cuando presentan síntomas recurrentes. El
riesgo de recurrencias y complicaciones está en torno al
70%76
.
3. Pacientes con síntomas atípicos y colelitiasis: debe ha-
cerse diagnóstico diferencial con otros cuadros clínicos. Si
no se encuentra otra causa, pueden ser tratados como coleli-
tiasis sabiendo que la tasa de persistencia de los síntomas es
muy alta.
4. Pacientes con síntomas típicos pero sin colelitiasis: la
sospecha clínica de colelitiasis debe mantenerse en estos pa-
cientes. Deben ser estudiados en varias ocasiones por eco-
grafía. Si persisten los síntomas deben buscarse otras causas.
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www.infodoctor.org/www/colelitiasis.htm
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www.susmedicos.com/0_Articulos_General/art_calculos_vesicula_biliar.htm
COLELITIASIS
Medicine. 2008;10(8):508-17 517
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  • 1. 508 Medicine. 2008;10(8):508-17 ACTUALIZACIÓN Introducción La litiasis biliar o colelitiasis es una enfermedad que se ca- racteriza por la presencia de cálculos en el interior de la ve- sícula biliar. Es una de las patologías más frecuentes en apa- rato digestivo, llegando a presentarse en hasta un 12% de la población adulta mediterránea. Presenta una mayor preva- lencia a edades más avanzadas y en la mujer con una propor- ción 2:1. Estamos asistiendo a un gran avance en el conocimiento en cuanto a la epidemiología y a los factores de riesgo para el desarrollo de la colelitiasis. Esta es más frecuente en indivi- duos de raza caucásica, hispanos e indios nativos americanos, mientras que es menos frecuente en afroamericanos, europeos del Este y japoneses. Dependiendo de la composición, diferenciamos dos tipos de cálculos biliares: litiasis de colesterol, que representa un 75% de los cálculos en países occidentales, y litiasis pigmen- taria, compuesta casi en su totalidad por sales cálcicas de bi- lirrubina no conjugada. El 85% de los cálculos se localiza en la vesícula biliar; el 15% restante se localiza en la vía biliar principal de forma concomitante. Epidemiología Prevalencia Los datos de los diferentes estudios epidemiológicos mues- tran una modesta diferencia en cuanto a la prevalencia de co- lelitiasis en diferentes poblaciones; estas diferencias pueden ser a nivel genético, medioambientales, o ambas. En general la colelitiasis es aproximadamente dos veces más frecuente en mujeres, y aproximadamente un 10% de la población tie- ne colelitiasis. Muchas series indican que la prevalencia de colelitiasis en mujeres con edades comprendidas entre 20 y 55 años varía de un 5% hasta un 20%, y en aquellas mayores de 50 años se estima en torno a 25-30% (Sleizenger). PUNTOS CLAVE Epidemiología. Aunque la prevalencia varía entre unas poblaciones y otras, se considera una patología muy frecuente llegando a presentarse en un 10% en nuestro medio, siendo dos veces más frecuente en mujeres • Existen otros factores que pueden influir en la producción de litiasis biliar, como son el embarazo, fármacos, obesidad, diabetes y nutrición parenteral, entre otros. Patogenia. Tres son los defectos que principalmente se ven afectados en la formación de cálculos: supersaturación de colesterol, aceleración de la cristalización y la hipomotilidad de la vesícula biliar • Cualquier factor dietético, metabólico o genético que interfiera en alguno de los mecanismos anteriormente citados actuará aumentando o disminuyendo la formación de dichos cálculos • La litiasis pigmentaria es secundaria al exceso de bilirrubina no conjugada que se genera en la hemólisis y en otras enfermedades crónicas. Clínica. La manifestación clínica más habitual es la de dolor en hipocondrio derecho continuo que irradia a espalda y escápula, que generalmente va asociado a náuseas y vómitos • A este cuadro clínico se le denomina cólico biliar • Es fundamental el diagnóstico diferencial con la colecistitis aguda. Diagnóstico. Se basa fundamentalmente en las características clínicas del paciente asociado a pruebas de imagen • La ecografía abdominal destaca de entre las demás por ser una prueba no invasiva al alcance de cualquier médico. Tratamiento. Consiste en el control médico de los cólicos biliares a la espera del tratamiento definitivo: la colecistectomía, que habitualmente se lleva a cabo por vía laparoscópica • La eficacia del tratamiento médico orientado a la disolución de los cálculos va a depender en gran medida del tamaño de las litiasis. • El tratamiento médico se basa en el uso de sales biliares orales, la disolución por contacto y la litotricia • Para el control del dolor puede ser útil la meperidina o el ketorolaco. Colelitiasis M. Valdés Mas y J. Egea Valenzuela Servicio de Medicina de Aparato Digestivo. Hospital Universitario Virgen de la Arrixaca. Murcia. España. 04 ACT 8 (508-517).qxp 17/4/08 16:27 Página 508
  • 2. Predisposición étnica La predisposición genética a presentar colelitiasis no está claramente demostrada. No hay duda de que la genética de- sempeña un papel importante en la patogenia de la litiasis bi- liar, pero la influencia genética es multifactorial y varía entre poblaciones debido a que hay factores físicos que son deter- minantes de la formación de cálculos. Dentro de una pobla- ción los familiares de primer grado presentan una prevalen- cia 4,5 veces superior al resto de la población1 . Han sido descubiertos varios genes asociados a la formación de cálcu- los y genes protectores en ratones2,3 . La importancia de estos genes en la formación de litiasis en humanos está por esta- blecer. Los indios Pima en el sur de Arizona ejemplifican una población de alto riesgo con una prevalencia de colelitiasis en mujeres del 70%. Otras poblaciones de riesgo son los países escandinavos, Alaska, Canadá, Bolivia y Chile4 . Morfología y composición La litiasis biliar está compuesta mayoritariamente por litiasis de colesterol, litiasis negra o litiasis pigmentaria. Las litiasis de colesterol son las más comunes. Están compuestas de colesterol en su totalidad o en su mayor par- te. Al microscopio se aprecia que estos cálculos están com- puestos de cristales de colesterol monohidrato unidos por una matriz de mucina con un núcleo negro de sales de calcio de bilirrubina no conjugada. La litiasis pigmentaria negra está compuesta por bilirru- binato cálcico o compuestos poliméricos de calcio y cobre, así como una gran cantidad de mucina. No se presenta con una estructura cristalina regular. Ocurre más frecuentemen- te en pacientes cirróticos o con hemólisis crónicas. La litiasis pigmentaria marrón está compuesta por sales de calcio y bilirrubina no conjugada, con cantidades variables de colesterol y proteínas. Estas litiasis están asociadas a infec- ciones. Las bacterias presentes en la vía biliar producen ␤- glucuronidasas que hidrolizan el ácido glucurónico5 . El re- sultado es la formación de sales de calcio de bilirrubina no conjugada con ácidos biliares no conjugados y ácidos grasos de cadena larga6 . El examen microscópico muestra el citoes- queleto de bacterias, siendo necesario el antecedente de in- fección para la formación de litiasis. Factores de riesgo Edad La litiasis biliar raramente se disuelve espontáneamente, es más, la prevalencia acumulada aumenta con la edad. Además, la secreción de colesterol a la vía biliar se incrementa con la edad, mientras que la formación de ácidos biliares disminuye, por tanto la bilis se vuelve más litogénica con la edad (tabla 1). Sexo Como ya se ha comentado previamente, la prevalencia de co- lelitiasis es mayor en mujeres en todos los grupos de edad7,8 . COLELITIASIS Medicine. 2008;10(8):508-17 509 La diferencia entre mujeres y va- rones es particularmente impor- tante en adultos jóvenes9 . La ra- zón fundamental estriba en los embarazos y los esteroides sexua- les. Embarazo El embarazo es el mayor factor de riesgo para el desarrollo de cálcu- los de colesterol. El riesgo está re- lacionado con la frecuencia y el número de embarazos. En un es- tudio, por ejemplo, se apreció una prevalencia de colelitiasis aumen- tada en 1,3% en nulíparas frente a un 12,2% en multíparas10 . Las hormonas sexuales indu- cen una variedad de cambios fisio- lógicos en el sistema biliar que acaba secretando bilis muy satura- da de colesterol, lo que promueve la formación de cálculos. Es debi- do fundamentalmente a la induc- ción de la secreción de colesterol por parte de los estrógenos, exce- so de producción de ácidos bilia- res hidrofílicos y un vaciamiento más lento debido a la progestero- na11,12 . Estos cambios se normali- zan en uno o dos meses tras el parto. En el postparto el 61% de casos con barro biliar se re- suelven y aproximadamente el 30% de las litiasis menores de 10 mm desaparecen10 . Fármacos 1. Estrógenos: cabría diferenciar entre hombres y mujeres. El tratamiento con estrógenos en la mujer va a generar una hipersecreción de colesterol a la bilis y reducción de la sínte- sis de ácidos biliares. En el hombre va a provocar únicamen- te un aumento de la secreción de colesterol a la bilis13,14 . 2. Clofibrato: va a reducir la concentración de ácidos bi- liares como resultado de una supresión de la actividad de la 7␣-hidroxilasa y un descenso de la actividad de la Acil-CoA colesterol transferasa; el resultado será un incremento de la secreción de colesterol libre a la bilis15 . 3. Contraceptivos orales: incrementan la secreción de co- lesterol16 . 4. Progestágenos: disminuyen la actividad de la Acil-CoA colesterol transferasa, incrementan la secreción de colesterol y generan un enlentecimiento del vaciamiento de la vesícula. 5. Ceftriaxona: precipita creando una sal insoluble com- puesta de calcio y ceftriaxona17 . 6. Octreótido: disminuye la motilidad de la vesícula bi- liar18 . Historia familiar Hay estudios que sugieren que la genética tiene un papel im- portante en el desarrollo de litiasis biliar19 . La gran variabili- TABLA 1 Factores de riesgo de colelitiasis Edad Sexo femenino Genéticos Indios Pima Chilenos Obesidad Embarazo Pérdida de peso rápida Dieta muy baja en calorías Intervención de obesidad mórbida Cirrosis Hipertrigliceridemia Anemias hemolíticas Fármacos Clofibrato Estrógenos Anticonceptivos orales Octreótido Ceftriaxona Resección de íleon terminal Enfermedad de Crohn Estasis de vesícula biliar Diabetes mellitus Nutrición parenteral total Post-vagotomía Lesión de médula espinal Actividad física disminuida 04 ACT 8 (508-517).qxp 17/4/08 16:27 Página 509
  • 3. dad de colelitiasis entre diferentes grupos étnicos puede ser debida a variabilidad genética, así como a hábitos dietéticos y culturales. Un ejemplo dramático es el de los indios Pima, que tienen un excepcional porcentaje de colelitiasis: el 73% de las mujeres mayores de 25 años4 . Obesidad La obesidad es un factor de riesgo bien definido para el desarro- llo de colelitiasis, presumiblemente debido al aumento en la síntesis de colesterol y secreción a la vía biliar. El riesgo es particularmente alto en mujeres y más en pacientes con obe- sidad mórbida20-22 . Pérdida de peso rápida La pérdida de peso rápida es también un factor de riesgo de colelitiasis. Altos porcentajes de litiasis se han descrito en dietas de muy bajas calorías23,24 . Son más frecuentes en mu- jeres caucasianas. El mecanismo de formación no está claramente delimita- do. Parece estar relacionado con un aumento de la mucina y el calcio en la bilis. Además estos pacientes son más propen- sos a ser sintomáticos; un 28% de los pacientes pueden lle- gar a precisar colecistectomía urgente22 . La profilaxis con ácido ursodesoxicólico parece ser efec- tiva y reduce el riesgo de formación de litiasis durante la pér- dida de peso rápida25 . Nutrición parenteral total Está asociada a un aumento de desarrollo de colecistitis sin cálculos, así como colelitiasis. La frecuencia de barro biliar también es alta, con diagnóstico de la misma incluso a las tres semanas de iniciada la nutrición parenteral total (NPT)26 . El defecto fisiológico más importante es la estasis biliar por hi- pomotilidad debido al ayuno prolongado. También se ha apreciado un defecto en la relajación del esfínter de Oddi. Diabetes mellitus La diabetes mellitus parece estar asociada a un aumento en la formación de litiasis biliar según demuestran algunos estu- dios27 . El mecanismo que predispone a litiasis no está del todo claro. Hay dos posibles factores: la hipertrigliceridemia y la neuropatía autonómica, que va a desencadenar estasis biliar28 . Lípidos séricos El papel preciso de los lípidos séricos en la formación de li- tiasis no está del todo claro. Parecen estar asociadas con apo- lipoproteínas E4 y aumento de triglicéridos29 . Por otro lado existe una asociación negativa entres colelitiasis y el coleste- rol ligado a lipoproteínas de alta densidad (HDL). No hay evidencia que concluya una relación directa entre el coleste- rol sérico y la colelitiasis30 . Cirrosis Es un factor de riesgo mayor para colelitiasis. Un análisis multivariable demostró que el riesgo aumenta en pacientes con estadio Child B y C de cirrosis (independientemente de la causa) y en pacientes con elevado índice de masa corporal. El incremento de formación de litiasis es debido a múltiples factores: reducción de síntesis y transporte de sales biliares y ENFERMEDADES DEL APARATO DIGESTIVO (VIII) 510 Medicine. 2008;10(8):508-17 de bilirrubina no conjugada, aumento de los estrógenos y una mala respuesta a la contracción de la vesícula biliar du- rante las comidas31,32 . Disminución de la actividad física La actividad física está relacionada con el descenso de riesgo de colelitiasis sintomática33 . Enfermedad de Crohn La prevalencia de colelitiasis en pacientes con enfermedad de Crohn está aumentada. Se ha llegado a detectar hasta un 26% de prevalencia de litiasis biliar en dicha población, lo que es dos veces más frecuente que en la población gene- ral34,35 . La litiasis de los pacientes con enfermedad de Crohn ileal suele ser pigmentaria debido al aumento de la concen- tración de bilirrubina conjugada, bilirrubina no conjugada y calcio en la vesícula biliar secundaria a la alteración de la cir- culación enterohepática36 . Factores protectores Existen una serie de factores dietéticos que parece que ten- gan relación con una menor formación de colelitiasis. Ácido ascórbico Hay diversos estudios acerca de la relación entre la historia de colelitiasis sintomática o asintomática y los niveles de áci- do ascórbico en sangre. Niveles de ácido ascórbico superio- res a 27 ␮mol/l presentan un 13% menos de prevalencia de patología litiásica37 . Por razones poco claras esto no es cierto en hombres. El beneficio del ácido ascórbico parece estar re- lacionado con su efecto a nivel del catabolismo del colesterol. Café El consumo moderado de café ha sido asociado con una re- ducción en el riesgo de colelitiasis sintomática38 . Individuos que llegan a beber dos o tres tazas de café diarias tienen aproximadamente un 40% menos de riesgo de desarrollar colelitiasis sintomática. Proteínas vegetales Se ha visto el consumo de proteínas vegetales en el contexto de una dieta de ajuste energético como un factor protector para colecistectomía39 . Grasas poliinsaturadas y monoinsaturadas El consumo de grasas poliinsaturadas y monoinsaturadas en el contexto de una dieta está asociado con la reducción del riesgo de formación de colelitiasis40 . Patogenia Tres son los defectos que principalmente se ven afectados en la formación de cálculos: supersaturación de colesterol, ace- leración de la cristalización y la hipomotilidad de la vesícula biliar. Los tres factores conjuntamente son los que van a in- tervenir en la formación de litiasis biliar (tabla 2). 04 ACT 8 (508-517).qxp 17/4/08 16:27 Página 510
  • 4. Supersaturación de colesterol El colesterol es esencialmente insoluble en agua y por tanto requiere de la actividad detergente de las sales biliares, los fosfolípidos (lecitina), para permanecer en solución. El co- lesterol, los fosfolípidos y los ácidos biliares son los mayores componentes lipídicos de la bilis. En humanos, el aumento de la saturación de colesterol en la vesícula biliar es el deter- minante más importante de la formación de cristales41 . Alteraciones en el metabolismo del colesterol afectan de modo directo a los porcentajes de ácidos biliares y secreción de colesterol a la bilis, produciendo una bilis más litogénica. Al- gunos estudios muestran que los pacientes con colelitiasis tie- nen una actividad de hidroxi-metil-glutaril-CoA (HMG CoA) reductasa y aumentos en la síntesis de colesterol superiores a los controles42 . La lovastatina es un inhibidor competente de la HMG CoA reductasa bloqueando la formación de cálculos43 . Los porcentajes de esterificación de colesterol pueden influir en la litogenicidad de la bilis, porque los fármacos que reducen la esterificación (progesterona y clofibrato) tienden a incrementar la secreción de colesterol44 . La actividad de la acil-CoA colesterol transferasa (ACAT) se ha visto reducida o normal en pacientes con colelitiasis. La importancia de ello radica en que el colesterol libre regula la síntesis de coleste- rol aumentándola. Este colesterol libre puede estar alterado por el aumento o descenso de la actividad de la ACAT. Una actividad baja aumenta el colesterol libre, que a su vez esti- mula la secreción de colesterol a la bilis45 . La composición de los ácidos biliares es también un deter- minante de interés en la litogenicidad de la bilis. Cuanto más hidrofóbicos sean los ácidos biliares, mayor será su inducción en la secreción de colesterol y la supresión de la síntesis de áci- dos biliares46 . La concentración relativa de los diferentes áci- dos biliares influye en el índice de saturación, y por tanto es más propensa a la formación de cristales. Los pacientes con co- COLELITIASIS Medicine. 2008;10(8):508-17 511 lelitiasis tienen menos cantidad de ácido cólico y mayor canti- dad de su metabolito ácido deoxicólico (producido por acción bacteriana)47 . Este ácido es hidrofóbico y aumenta el índice de saturación, así como incrementa la secreción de colesterol. Factores nucleadores y antinucleadores En una bilis supersaturada, el primer paso en la formación de colelitiasis es la nucleación, que consiste en un proceso de condensación o agregación por el cual se forman cristales microscópicos o partículas amorfas a partir de la bilis super- saturada48 . Después de la nucleación ocurre la cristalización, que da lugar a cristales de colesterol monohidrato que pue- den aglomerarse y formar macrolitiasis49 . El tiempo de nu- cleación en pacientes con colelitiasis es inferior respecto a los pacientes sanos50 . También, la cantidad de proteínas en la bi- lis con cristales de colesterol es superior a la de la bilis que no presenta cristales51 . Un número muy importante de fac- tores pronucleadores han sido estudiados, así como factores inhibidores de la nucleación, pero a excepción de la mucina, su relevancia fisiológica continúa en debate. La glucoproteína mucina es el factor pronucleador más importante que ha sido identificado. El core de las glucopro- teínas de mucina contiene regiones hidrofóbicas que pueden unir el colesterol, los fosfolípidos y la bilirrubina. La unión de vesículas ricas en colesterol a las regiones hidrofóbicas pa- rece ser el motivo que acelera la nucleación52 . La mucina es secretada de forma continua a la vesícula biliar, sin embargo la secreción es excesiva en la bilis litogé- nica. La hipersecreción de mucina precede a la formación de cristales de colesterol. La secreción de mucina está regulada, al menos en parte, por las prostaglandinas, y puede ser inhi- bida por los antiinflamatorios no esteroideos (AINE)53,54 . Desafortunadamente, la frecuencia de colelitiasis es la misma en pacientes que toman AINE durante mucho tiempo que en los que no los toman55 . La concentración de calcio en bilis desempeña un papel importante en la precipitación y formación de colelitiasis. Las sales de calcio están presentes en la mayor parte de las li- tiasis biliares. Los pacientes con colelitiasis pueden tener mayores concentraciones de calcio y supersaturación de car- bonato cálcico56 . El carbonato cálcico, así como el bilirrubi- nato cálcico y el fosfato cálcico, pueden servir como caldo de cultivo para la formación de cristales de colesterol. Hipomotilidad de la vesícula biliar La vesícula en sí misma contribuye a la patogénesis de la co- lelitiasis. La mucosa de la vesícula biliar tiene uno de los ma- yores índices de absorción del cuerpo. El volumen de bilis disminuye en un 80 a 90% mientras reside en la vesícula bi- liar, mediante un transporte activo de sodio unido a una ab- sorción pasiva de agua57 . El control neurológico del vaciado de la vesícula biliar está mediado por el sistema nervioso parasimpático y el sim- pático. En conjunto incrementan la contractilidad de la vesí- cula biliar, y la posterior relajación. En los pacientes con co- TABLA 2 Factores de riesgo y fisiopatología Edad Aumento de secreción de colesterol y disminución de la síntesis de ácidos biliares Sexo femenino Aumento de secreción de colesterol y aumento del tránsito intestinal Obesidad Hipersecreción de colesterol a la bilis e incremento de la síntesid de colesterol Nutrición PT Hipomotilidad de la vesícula biliar Pérdida de peso Hipersecreción de colesterol, disminución síntesis ácidos biliares e hipomotilidad de la vesícula Embarazo Aumento de la secreción de colesterol e hipomotilidad de la vesícula biliar Anticonceptivos Aumento de la secreción de colesterol Clofibrato Aumento de la secreción de colesterol Estrógenos Hipersecreción de colesterol y dsiminución de la síntesis de ácidos biliares Progestágenos Aumento de la secreción de colesterol e hipomotilidad de la vesícula biliar Octeótrido Disminución de la motilidad de la vesícula biliar Ceftriaxona Precipitación en una sal insoluble de calcio-ceftriaxona Predisposición genética Aumento de la secreción de colesterol Patología ileon terminal Hiposecreción de sales biliares Descenso de HDL Aumenta la actividad de la HMG CoA reductasa Aumento de triglicéridos Aumenta la actividad de la HMG CoA reductasa 04 ACT 8 (508-517).qxp 17/4/08 16:27 Página 511
  • 5. lelitiasis se han evidenciado defectos de la motilidad, demos- trados por el aumento del volumen residual tras las comi- das58 . La inhibición del estímulo colinérgico con atropina aumenta el tiempo de vaciamiento de la vesícula biliar después de una comida en respuesta a la colecistoquinina (CCK)59 . Esta es la sustancia del cuerpo humano que pre- senta un estímulo mayor sobre la contracción de la vesícula biliar. Los pacientes con colelitiasis presentan una disminu- ción de dicho estímulo tras inyección intravenosa de CCK60 . Las sustancias que estimulan la liberación de CCK son los ácidos grasos de cadena larga, aminoácidos e hidratos de car- bono61 . El fallo de la producción de dichos estímulos es el mecanismo que con más frecuencia ocurre en pacientes con litiasis biliar. Otras hormonas como la somatostatina y los polipéptidos pancreáticos afectan a la motilidad de la vesícu- la biliar, pero su papel no está del todo claro. Una complicación potencial de la estasis de la vesícula bi- liar es la formación de barro biliar, como ocurre en pacien- tes con lesiones en la médula espinal, nutrición parenteral prolongada, tratamientos prolongados con octreótidos, el embarazo y la pérdida de peso rápida61 . Litiasis pigmentaria Se presenta en el 10 al 25% de todas las litiasis. Como su nombre indica, son litiasis que están pigmentadas como re- sultado de la precipitación de la bilirrubina. Como ocurre con las litiasis de colesterol, la prevalencia de las litiasis pig- mentarias aumenta con la edad y es generalmente más fre- cuente en mujeres. Las litiasis pigmentarias negras se forman en la vesícula biliar como consecuencia del exceso de producción de bili- rrubina no conjugada, la cual precipita como bilirrubinato cálcico para formar litiasis. Está asociada a hemólisis cróni- ca, cirrosis y pancreatitis62 . Las litiasis pigmentarias marrones son más comunes en áreas en las cuales las infecciones de la vía biliar son más fre- cuentes. Se pueden formar en la vesícula biliar o en otras re- giones del árbol biliar. Están siempre asociadas a la coloni- zación de la vía biliar por microorganismos entéricos63 . Clínica En la mayoría de los pacientes los primeros síntomas que se experimentan en la colelitiasis son los ataques recurrentes de dolor, el llamado cólico biliar. Menos frecuentes como sín- tomas iniciales son las complicaciones de la colelitiasis (cole- cistitis, pancreatitis aguda litiásica, colangitis aguda o cole- docolitiasis con colestasis extrahepática). Cólico biliar El cólico biliar está causado generalmente por la contracción de la vesícula biliar en respuesta a estímulos hormonales y neurales secundarios a la ingesta de grasas, forzando la litia- sis contra la salida biliar por el conducto cístico, lo que au- ENFERMEDADES DEL APARATO DIGESTIVO (VIII) 512 Medicine. 2008;10(8):508-17 menta la presión dentro de la vesícula biliar y genera dolor. Las litiasis generalmente vuelven a la vesícula biliar cuando la vesícula se relaja. En muchos pacientes el dolor no es intenso, y este es el motivo por el que suelen presentar múltiples ataques antes de que precisen atención médica. La frecuen- cia de los ataques recurrentes varía de años a días64 . A pesar del término “cólico”, el dolor es habitualmente constante y no cólico. El ataque clásico se describe como un intenso dolor opresivo en el hipocondrio derecho o epigas- trio, o en el pecho, que irradia a la espalda y a la región es- capular derecha65 . El dolor sigue a la ingesta de grasas y ha- bitualmente no ocurre en ayunas. Sin embargo, el dolor puede no estar relacionado con las comidas en un número considerable de pacientes. El dolor está generalmente asociado a sudoración, náu- seas y vómitos. No se incrementa con los movimientos y no se alivia con la flexión del tronco o con los movimientos intes- tinales. Después del ataque, la exploración física es habitual- mente normal, con la excepción de posibles molestias resi- duales en abdomen superior. El cólico biliar requiere hacer diagnóstico diferencial con una complicación muy grave de la colelitiasis, que es la cole- cistitis aguda. Este cuadro clínico está asociado a inflamación de la pared de la vesícula biliar, fiebre y leucocitosis. Diagnóstico El diagnóstico de la colelitiasis no complicada debe ser sos- pechado por la clínica (principalmente por el cuadro de cóli- co biliar). En estos pacientes debemos evaluar la presencia de litiasis o barro biliar. El cólico biliar es el mayor predictor de litiasis biliar, pero mientras las pruebas de imagen intentan detectar la presencia de litiasis, no hay pruebas de laboratorio ni clínicas que puedan dar el diagnóstico de cólico biliar. El diagnósti- co está basado, por tanto, en una historia clínica meticulosa. Exploración física Los pacientes que presentan un cólico biliar simple no reflejan aparente mal estado general, no tienen fiebre, ni taquicardia. El dolor es característicamente leve y no intenso como para llevar al paciente a urgencias. Durante el dolor el abdomen está generalmente sin alteraciones, sin signos de irritación pe- ritoneal, mientras el dolor sea visceral sin inflamación de la ve- sícula biliar. Sin embargo, puede haber defensa voluntaria. La exploración física puede ayudarnos a distinguirlo de una colecistitis aguda. El del cólico biliar está bien localiza- do y no presenta signo de Murphy positivo. Este signo es ca- racterístico de la colecistitis. Análisis de laboratorio Los análisis de laboratorio deben ser normales en pacientes con colelitiasis no complicada tanto en periodos sintomá- ticos como en asintomáticos. Sin embargo, pueden ser útiles 04 ACT 8 (508-517).qxp 17/4/08 16:27 Página 512
  • 6. para descartar otros diagnósticos. En un estudio razonable solicitaríamos: enzimas hepáticas, amilasa y lipasa séricas, hemograma y análisis de orina. Estudios de imagen Son útiles para confirmar la presencia de colelitiasis o barro biliar en pacientes con historia sugestiva de cólico biliar. De- ben ser útiles también para excluir otros diagnósticos. Ecografía Es considerada como la prueba de imagen más útil para con- firmar la presencia de colelitiasis, ya que es una prueba no in- vasiva, relativamente al alcance, no es cara y no genera radia- ción al paciente. La sensibilidad de esta exploración está en torno al 84% y la especificidad en un 99%66 . Otro factor a te- ner en cuenta es que es una prueba que depende en gran me- dida de la experiencia del radiólogo. Independientemente del observador, está generalmente aceptado que los ultrasonidos no son especialmente sensibles para determinar el número y el tamaño de las litiasis en la vesícula biliar. Esto es especial- mente cierto para litiasis de 1 ó 2 mm de diámetro que fre- cuentemente pueden aparecer como una única litiasis (fig. 1). Radiografía de abdomen La radiografía de abdomen no es útil para visualizar coleli- tiasis en pacientes sintomáticos. Únicamente un 10% de las litiasis tiene suficiente calcio en su composición para hacer- las radioopacas y ser visibles en la radiografía (fig. 2). Colecistografía oral La colecistografía oral es una técnica útil para diagnosti- car colelitiasis y para medir la función de la vesícula biliar. Actualmente apenas se usa. Se utiliza cuando no se puede lo- grar un buen estudio por ecografía, para confirmar la pre- sencia de adenomiomatosis de la vesícula biliar y para evaluar a los pacientes que van a recibir tratamiento médico con áci- do ursodesoxicólico, en el que es importante demostrar el número y tamaño de las litiasis. Tomografía computarizada La sensibilidad para el diagnóstico de colelitiasis con tomo- grafía computarizada (TC) es muy baja, ya que no son visi- bles debido a que la mayoría son isodensas67 . Ecoendoscopia (ultrasonografía endoscópica [USE]) Se pueden obtener imágenes de la vesícula biliar por vía eco- endoscópica en el transcurso de una endoscopia a la altura del antro gástrico. La visualización es buena si no hay gas que interfiera la transmisión ultrasónica. Es más sensible que la extracorpórea para la valoración de colelitiasis, sobre todo en pacientes obesos o con otras alteraciones anatómicas que dificulten la correcta visualización68 . Puede ser útil en el es- tudio de litiasis de pequeño tamaño y microlitiasis. Puesto que es una técnica invasiva, se reserva para pacientes con có- lico biliar en que se sospechen complicaciones de la coleli- tiasis como la pancreatitis. También es útil en pacientes en que se sospecha coledocolitiasis (fig. 3). COLELITIASIS Medicine. 2008;10(8):508-17 513 Fig. 1. Ecografía abdominal en la que se observan múltiples litiasis en vesícula biliar. Fig. 2. Litiasis biliar en radiografía de abdomen. Fig. 3. Coledocolitiasis en ultrasonografía endoscópica. 04 ACT 8 (508-517).qxp 17/4/08 16:27 Página 513
  • 7. Tratamiento Cólico biliar El tratamiento del cólico biliar consiste en el control del do- lor, que se puede llevar a cabo con meperidina, que es prefe- rible a la morfina ya que afecta menos a la motilidad del es- fínter de Oddi69 . Los pacientes con ataques prolongados deben recibir también hidratación intravenosa. Otra opción sería el uso de ketorolaco para pacientes que se presentan en urgencias con cólico biliar. El tratamiento generalmente quita el dolor durante 20 ó 30 minutos. Des- pués se le prescribirá ibuprofeno 400 mg por vía oral que se tomará durante los sucesivos ataques, hasta que se lleve a cabo un tratamiento definitivo. Tanto la meperidina como el ketorolaco se ha visto que tienen un efecto equivalente. La meperidina, en cambio, tiene más efectos secundarios: náu- seas y vómitos. Tratamiento profiláctico Cuando el ataque agudo de cólico biliar cede, debe realizarse un tratamiento profiláctico para quitar las litiasis previniendo así nuevos ataques o incluso complicaciones más graves. Hay múltiples formas, desde la cirugía hasta la disolución de las mismas con tratamiento médico. La elección va a depender del riesgo quirúrgico del paciente. La colecistectomía es la técnica más aconsejada. Consis- te en extraer la vesícula biliar bajo anestesia general mediante laparotomía en hipocondrio derecho o mediante laparosco- pia. La laparoscopia ha demostrado presentar mayor riesgo de lesiones en la vía biliar común70 . En un 10% de los casos la laparoscopia se convierte en abierta. La elección se basa en la experiencia del cirujano. Tratamiento de las colelitiasis Médico Hay tres métodos que pueden utilizarse aislados o en combi- nación: sales biliares orales, disolución por contacto y litotri- cia. La eficacia del tratamiento médico depende del tamaño y la composición de las litiasis, así como de la función de la vesícula biliar. Pacientes con litiasis pequeñas ricas en coles- terol sin signos de calcificación son candidatos a tratamiento con ácidos biliares y disolución por contacto. Litiasis de ma- yor tamaño pueden ser subsidiarias de litotricia combinada con otras técnicas para disolver y facilitar la disolución de las mismas. Una buena función de la vesícula biliar es necesaria para limpiar las litiasis y para minimizar el riesgo de coleli- tiasis recurrente. Como conclusión, las litiasis pigmentadas y las calcificadas no son candidatas a tratamiento médico. Ácidos biliares. Actúan inhibiendo la secreción de coleste- rol a la bilis, incrementando la secreción de bilis, inhibiendo la formación de litiasis y mejorando el vaciamiento de la ve- ENFERMEDADES DEL APARATO DIGESTIVO (VIII) 514 Medicine. 2008;10(8):508-17 sícula biliar71 . La presencia de cálculos con colesterol y sales de calcio dificulta la disolución de los mismos, disminuyen- do la eficacia de los ácidos biliares. Las condiciones para el uso de ácidos biliares son: a) litiasis menores de 1 cm; b) sín- tomas leves; c) buena función de la vesícula biliar; d) litiasis cuya composición sea predominantemente de colesterol, y e) mínima calcificación y baja densidad en TC. El efecto fun- damental que se busca es la disolución completa del cálculo así como la disminución en la magnitud de los síntomas y el riesgo de complicaciones. Los que más se usan son el ácido ursodesoxicólico y el chenodesoxicólico. El ursodesoxicólico tiene menos efectos secundarios, causando menos diarrea que el chenodesoxicó- lico, no aumenta el colesterol sérico y no produce hepatoto- xicidad. La dosis de ácido ursodesoxicólico es de 10 mg/kg. Si los pacientes cumplen las condiciones mencionadas previamente, la disolución de los cálculos se llevará a cabo en al menos un 90% de ellos. La respuesta del tratamiento es lenta, con disminución de tamaño de 1 mm al mes de media, por ello el tratamiento ha de durar en torno a un año. Si no se produce una disolución completa, suele ser debido a la presencia de un mayor contenido de calcio en las litiasis. Por ello, para la selección de pacientes candidatos puede ser útil la realización de TC, donde apreciaremos las litiasis con ma- yor contenido de calcio. Como en el resto de tratamientos médicos, existe una in- cidencia significativa de recurrencia de los síntomas incluso en pacientes con disolución completa de las litiasis72 . El ries- go parece ser mayor en pacientes con múltiples litiasis y el tiempo de disolución de las litiasis es más prolongado. Estatinas. Hay mucho interés en el uso de inhibidores de la HMG CoA reductasa en el tratamiento de colelitiasis. Estos agentes reducen la secreción de colesterol, sin embargo no reducen el índice de saturación de colesterol, probablemen- te por la reducción en la secreción de ácidos biliares y fosfo- lípidos. No obstante, no hay evidencia de que las estatinas reduzcan el número y el tamaño de las litiasis73 . La unión del tratamiento de ácidos biliares y estatinas no ha supuesto nin- gún beneficio. Disolución por contacto. Los métodos para la disolución de cálculos por contacto directo requieren de solventes que se han usado durante años. Están siendo utilizados en pocos sitios de EE. UU. y Europa. El metil terbutil éter es un po- tente solvente del colesterol y ha sido usado solo o en com- binación con otros agentes. La indicación y la selección de pacientes es similar a la del tratamiento con ácidos biliares, sin embargo, su respuesta más rápida y la mayor eficacia per- miten tratar a pacientes con síntomas más intensos. Los cál- culos pequeños ricos en colesterol con mínima calcificación son los más fáciles de disolver. La respuesta adecuada de la vesícula biliar es necesaria para eliminar las sustancias resul- tantes de la disolución. La técnica requiere una punción directa de vesícula biliar. La vía de acceso suele ser extrape- ritoneal. Hay también varios estudios en los que la aproxi- mación se hace vía colangiopancreatografía retrógrada en- doscópica (CPRE)74 . La mayor complicación que puede tener la técnica es la canalización de la vesícula biliar y la to- 04 ACT 8 (508-517).qxp 17/4/08 16:27 Página 514
  • 8. xicidad directa de los agentes disolventes. Entre las compli- caciones del acercamiento transhepático está el sangrado y la pérdida de bilis, que suele ser intraperitoneal si el acerca- miento no es extraperitoneal. La pérdida de bilis ocurre ge- neralmente tras la retirada del catéter y se aprecia muy pron- to. Suele cursar con dolor, leucocitosis y fiebre. Si hay sospecha, debería hacerse una colecistografía. Si la pérdida es importante debe hacerse una colecistectomía. Litotricia extracorpórea. Hay muchos tipos de litotricias que se han usado para el tratamiento de la colelitiasis y ne- frolitiasis. La litotricia que se usa habitualmente es a través de ultrasonidos. Es más efectiva en pacientes con una única litiasis, aunque se han documentado casos de fragmentación de 10 litiasis mediante esta técnica. Es recomendada en pa- cientes con menos de tres litiasis. Otros factores favorables son el bajo índice de masa corporal (IMC) y la buena función de la vesícula biliar. Las litiasis radioopacas responden peor a la litotricia así como a la acción de los ácidos biliares. Las litiasis de pequeño tamaño son difíciles de tratar mediante li- totricia por la dificultad para localizarlas. Entre los criterios de exclusión para litotricia destacan: alteraciones de la coa- gulación y de las plaquetas, anomalías del conducto cístico y vasculares, complicaciones agudas relacionadas con colelitia- sis y el embarazo. Las complicaciones son frecuentes aunque leves. Un 30 a un 40% presenta cólico biliar secundario al paso de los restos de la fragmentación por el cístico. Ocurre generalmente en los primeros tres días tras la prueba. Una obstrucción real de la vía biliar o una pancreatitis es menos frecuente, afectando a menos del 5% de los enfermos. Como en otros tratamientos médicos, la recurrencia de litiasis es bastante frecuente y depende de la habilidad en la completa fragmentación de las litiasis, ya que puede servir de caldo de cultivo para la formación de otras nuevas. La función correcta de la vesícula biliar no solo facilita el aclaramiento de los restos de la litiasis, sino que también previene la forma- ción de nuevas litiasis. La recurrencia de litiasis tras la inter- vención está en torno a un 3-12% al año75 . La administra- ción de ácido ursodesoxicólico puede ayudar a reducir el riesgo de recurrencia de los síntomas. Aproximadamente un 80% de los pacientes persiste con síntomas tras el aclara- miento de las litiasis, de ahí que la eficacia de la litotricia para la remisión de la sintomatología sea dudosa. Endoscópico y percutáneo Pacientes con elevados factores de riesgo como para ser intervenidos quirúrgicamente pueden requerir colecistecto- mía percutánea. En pacientes con patología de la vía biliar (cólico biliar, colecistitis aguda, colecistitis acalculosa y pan- creatitis litiásica) asociada a graves comorbilidades que ex- cluya cualquier otro tratamiento se ha utilizado la colocación de un stent en el conducto cístico. Quirúrgico Colecistectomía abierta. Es la mejor opción terapéutica para el tratamiento de la colelitiasis por su baja morbilidad y porque quita los síntomas en un 90-95% de los pacientes. La mortalidad de la colecistectomía abierta ronda el 1,5%. El COLELITIASIS Medicine. 2008;10(8):508-17 515 riesgo de muerte es mucho mayor en pacientes que requieren una colecistectomía de urgencia para el tratamiento de una colecistitis aguda y cuando es necesaria la exploración de la vía biliar. La mortalidad también aumenta con la edad del pa- ciente. Las complicaciones son raras. La mayoría de ellas son leves, como infecciones, serositis, retención urinaria o atelec- tasias. Como complicaciones específicas destacan las pérdidas de bilis, lesión de la vía biliar y la pancreatitis aguda. Colecistectomía laparoscópica. Es una técnica menos in- vasiva que la anterior, con una cicatriz menor, menos dolor y una vuelta a la normalidad más rápida. La mortalidad de esta técnica está entre 0 y 0,15%. La conversión a cirugía abierta ocurre en un 2,2% de los pacientes. Lesiones en la vía biliar se dan en un 0,14 a un 0,5% de los pacientes. En una semana los pacientes pueden reanudar sus ocupaciones habi- tuales. Manejo del paciente según la clínica Cabría dividir a los pacientes en 4 grupos: 1. Pacientes con litiasis asintomáticas: no van a recibir tratamiento específico ya que cuando presentan clínica, esta es muy leve. 2. Pacientes con síntomas típicos y colelitiasis: requieren tratamiento específico que generalmente es la colecistecto- mía, sobre todo cuando presentan síntomas recurrentes. El riesgo de recurrencias y complicaciones está en torno al 70%76 . 3. Pacientes con síntomas atípicos y colelitiasis: debe ha- cerse diagnóstico diferencial con otros cuadros clínicos. Si no se encuentra otra causa, pueden ser tratados como coleli- tiasis sabiendo que la tasa de persistencia de los síntomas es muy alta. 4. Pacientes con síntomas típicos pero sin colelitiasis: la sospecha clínica de colelitiasis debe mantenerse en estos pa- cientes. Deben ser estudiados en varias ocasiones por eco- grafía. Si persisten los síntomas deben buscarse otras causas. Bibliografía • Importante •• Muy importante ✔ Metaanálisis ✔ Ensayo clínico controlado ✔ Epidemiología ✔1. Sarin SK, Negi VS, Dewan R, Sasan S, Saraya A. High familial prevalen- ce of gallstones in the first-degree relatives of gallstone patients. Hepato- logy. 1995;22(1):138-41. ✔2. Lammert F, Wang DQ, Paigen B, Carey MC. 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