1. CONTROL INTERNO
Utiliza un transductor
electrónico conectado
directamente a la piel del feto.
A través de la abertura cervical
se conecta un cable de
electrodos al cuero cabelludo u
otra parte del cuerpo del feto y
luego se conecta al monitor
Proporciona una transmisión
más precisa y consistente de la
frecuencia cardíaca fetal que el
control externo
Se puede utilizar cuando
resulta insuficiente, o si se
requiere una supervisión más
cercana.
2. RIESGOS DEL CONTROL
INTERNO:
Es posible que experimente una ligera incomodidad con la inserción
del electrodo.
• Infecciones y contusiones del cuero cabelludo u otra parte del
cuerpo del feto.
Está contraindicado en mujeres que tienen lesiones de herpes activo
en el cuello uterino o en la vagina, por el riesgo de transferir la
infección al feto.
• La colocación de un electrodo interno requiere que se rompan las
membranas amnióticas y que el cuello uterino se dilate (abra)
varios centímetros para permitir el contacto con el cuero
cabelludo u otra parte del cuerpo del feto.
3. Para el control interno de la frecuenciacardíaca fetal:
1. Con los pies y las piernas apoyadas como para un
examen pélvico.
2. Realizarán un examen vaginal, con guante, para
verificar la dilatación cervical.
3. Si la bolsa de líquido amniótico aún sigue intacta, es
posible que el médico la rompa con un instrumento.
4.Con un guante puesto, el médico sentirá con sus dedos la
parte del feto que se encuentre en la abertura cervical
4. 5. Se le introducirá una larga guía plástica de
electrodos en la vagina. Contra la parte del cuerpo
del feto se colocará un pequeño cable en espiral en
el extremo del electrodo, y se lo rotará suavemente
hasta la piel del feto.
6. Se quitará la guía y quedará el electrodo en su
lugar, conectado a la parte del cuerpo del feto.
7. Se conectarán los cables con electrodos al del
monitor y se sujetará con una banda alrededor de su
muslo.
8. Una vez que nazca el bebé, se quitará el electrodo.