LABERINTOS DE DISCIPLINAS DEL PENTATLÓN OLÍMPICO MODERNO. Por JAVIER SOLIS NO...
Lógica aristotélica
1. Lógica aristotélica
La lógica aristotélica es la tradición lógica basada en el trabajo del filósofo griego Aristóteles,
primer pensador en formalizar el sistema lógico de tal manera que sus propuestas han trascendido
hasta nuestros días. Aristóteles planteó sus ideas en varias obras, reunidas posteriormente bajo el
nombre de Organon (órgano, herramienta), para difundir sus conocimientos sobre las leyes del
razonamiento, argumentando que estas eran vitales para adentrarse en el mundo de la filosofía.
Introducción
La lógica aristotélica supone que la mente reproduce sólo la realidad, la existencia de las cosas tal y
como son, por ello es una ciencia objetiva que se dedica a estudiar conceptos, desglosándolos en
predicables y predicamentos. La lógica analiza juicios y formas de razonamiento y su manera de
expresar resultados es el silogismo o razonamiento deductivo categórico.
El elemento básico es el «término» o «concepto». Este representa un objeto en la mente del hombre
de manera que no pueda ser afectado por los sentidos, la memoria o la mente. Un concepto tiene
comprensión (características del objeto) y extensión (hace alusión la cantidad de sujetos a los que el
concepto puede aplicarse).
La unión entre los términos o conceptos es una proposición. Según Aristóteles, habría cuatro formas
básicas de proposiciones afirmativas:
“Todo A es B” (universal afirmativo).
“Ningún A es B” (universal negativo).
“Algunos A son B” (particular afirmativo).
“Algunos A no son B” (particular negativo).
Las letras sustituyen a palabras comunes como “perro”, “animal de cuatro patas” o 'cosa viviente',
llamadas “términos”.
A partir de las proposiciones se construyen los silogismos o razonamientos. Un silogismo bien
formulado consta de dos proposiciones que fungen como premisas y de una conclusión, debiendo
tener cada premisa un término en común con la conclusión y un segundo término relacionado con la
otra premisa. En lógica clásica se formulan reglas por las que todos los silogismos bien construidos
se identifican como formas válidas o no válidas de argumentación.
Materia: Conceptos en el juicio que se relacionan íntimamente Forma: Relación entre ellos a través
del verbo SER. Para Aristóteles el Sujeto se representa con la letra S y el predicado con la letra P;
de esta manera separa materia y forma y poder representar todos los juicios como “Hanz es hábil” o
“Alejandra es preciosa” con la forma “S es P”.