Durante el Porfiriato en México se profesionalizó más el magisterio. Se aumentó el número de Escuelas Normales para formar a los maestros, y se definieron los años de estudio requeridos para maestros de primaria elemental y superior. También se expidió la Ley de Instrucción Pública de 1876 para organizar el sistema educativo en niveles de primaria, secundaria y profesional, y crear escuelas como la Normal, de Jurisprudencia, Ingenieros y Medicina.