Esta plática incluye ejercicios para aplicar con nuestros niños en clase o en la casa, fomentando con ello la autoregulación. Son actividades que deben elegirse y practicarse con ellos.
2. ¿Qué es la autorregulación?
Es la capacidad para controlar y dirigir
APROPIADAMENTE las emociones. Está relacionada
de la capacidad de inhibir una respuesta dominante
(cuando no es adecuada en una situación) e impacta
en la planeación y flexibilidad de pensamiento.
Está sujeta a un proceso de maduración:
emerge a los 6 años y alcanza su madurez a
los 12 años.
Inhibición: empiezan a observarse cambios entre los
4 años y medio y los 5 años. Se relaciona con
mejorías en el control emocional.
3. ¿Cómo es una persona autorregulada?
Sigue las reglas.
Toma decisiones de manera personal sabe elegir.
Sabe cómo reaccionar ante situaciones nuevas.
4. ■ Reiteramos:
El cerebro del niño no está
preparado para procesar y
autorregular emociones fuertes.
Es un proceso en el que
intervienen el aprendizaje y la
maduración.
5. ¿Qué podemos
hacer?
• Acompañar.
• Dejar elegir.
• Dejar experimentar las
consecuencias naturales y
lógicas.
• Prevean situaciones y apliquen
una estrategia de autoregulación.
6. Acompañar
■ Desde los 2 años, el niño puede participar en
algunas actividades de independencia personal,
pero no está listo para hacerlo solo.
■ Esto le da seguridad y favorece la referencia
espacial.
■ Encuentra sus pertenencias y a sí mismo.
■ De los 3 a 4 años, el niño necesita saber por qué
hacer las cosas (se lo puede tragar tu hermanito,
puede quebrarse, lo puedes encontrar más rápido).
■ Dejar responsabilidades en casa y dar tiempo
suficiente para que las termine.
7. Dejar elegir
■ A partir de los 5 años, ya podrá hacerse cargo
de algunas cosas él solo.
■ Pueden hacer contratos con él.
■ Seleccionar actividades que no sean
abrumadoras: preparar su mochila, poner en
orden su habitación, recoger las basuras, etc.
■ Darle las alternativas y permitir que elija.
■ Las alternativas deben mantenerse dentro de
un marco de reglas para la familia.
8. Establecer algunas
reglas en casa
En casa, el orden se manifiesta por reglas. Los niños
necesitan saber por qué existen esas reglas.
Si hay un desorden cotidiano en casa, significa que hay
un rechazo de las reglas del hogar. Es conveniente
analizar el motivo por el que el niño las rechaza. Las
reglas son negociables.
Ejemplo: pedir a niña que se bañe, dice que sí, pero
continúa dibujando, porque en su interior se tomó cierta
libertad en el manejo de tiempos.
■Iniciar por manejar horas y espacios: ¿dónde comer?
¿Dónde jugar? ¿A qué hora dormir? ¿Cuándo ver la
televisión?
■Para ello, es conveniente establecer una rutina.
■El niño puede hacer un plan y luego valorar cómo le
fue.
9. Dejar que experimente las consecuencias
Cuentos:
El niño y los clavos.
https://www.guiainfantil.com/1428/c
uento-infantil-el-nino-y-los-clavos.html
■ Cada decisión que tomamos, tiene
una consecuencia.
■ Algunas consecuencias son
naturales.
■ Otras consecuencias no se dan de
forma natural y debemos decidirlas
junto con nuestr@ hij@.
10. Consecuencias naturales de conducta
-----Si no me pongo suéter un día de frio, tendré frio----
Conducta Consecuencia natural
Maltratar al gato Que lo arañe
Romper un juguete a propósito No tener juguete
Hostigar a otro niño Evitación por los demás niños
No hacer la tarea Quedarse después de clase el siguiente
día.
Renegar antes de ir a la escuela Llegar tarde a la escuela y que lo
reprendan
Empujar a niños de su edad Que lo empujen
Derramar una bebida Que no le llenen el vaso y limpiar.
11. Consecuencias lógicas de conducta
-----Si Juan anda en triciclo por la calle, es peligroso---
Conducta Consecuencia lógica
Andar en bici por la calle Quitarle triciclo por una semana.
Pegar chicle en muebles, ropa, cabello No darle chicle por 5 días.
Maltratar o negarse a cuidar a su mascota Regalar mascota después de varias
advertencias.
No lavarse los dientes No golosinas ni bebidas dulces hasta que se
cepille dientes.
No comer verduras No darle postre.
13. Muévanse
Las inversiones de cabeza suelen relajar
y calmar a los niños. Al cambiar la
perspectiva del cuerpo, también puedes
llegar a modificar el enfoque emocional y
mental del individuo.
El cambio de posición también modifica,
de modo sutil, ciertas respuestas
neuroquímicas del cerebro, ayudando a
relajar el sistema nervioso.
OJO: niños con inseguridad gravitacional.
14. Abrázalo por
detrás
Los terapeutas ocupacionales
recomiendan la presión profunda,
como mecanismo para tranquilizar a
los niños. Debe ser una presión firme y
uniforme, que no sea un estímulo
doloroso para el niño.
Puedes usar una cobija o el suéter de
los abrazos.
15. Rueda de
opciones
Elaboren una rueda de las
alternativas que pueden seguir
cuando detecten algunas señales
de que tu hij@ va a perder el
control.
Pueden jugar, girándola para
elegir la opción que van a aplicar
cada vez.
16. Tiempo fuera
Preparar un espacio en
casa o en la escuela al que
el niño pueda recurrir para
volver a encontrar su
equilibrio.
Para hacerlo más concreto,
pueden usar una balanza,
un sube y baja, un balancín.
17. El semáforo
Enséñalo a darse autoinstrucciones:
—Luz Roja: ALTO o ESPERA,
tranquilízate y piensa antes de actuar.
—Luz Amarilla: PIENSA soluciones o
alternativas y sus consecuencias.
—Luz Verde: ADELANTE y pon en
práctica la mejor solución.
18. ESTIMULACIÓ
N SENSORIAL
Si a tu hij@ le gustan
las texturas, ten a la
mano una caja de
arena o un recipiente
con agua.
19. Música
Cuando se sienta estresado,
puedes ponerle un mantra o
música relajante, o por qué no,
también estimulante
(dependiendo de cada niño) para
ayudarlo a volver a su centro
I am happy
20. Respirar
Para que tu hij@ respire, puedes usar
algún material de soplo:
• Burbujas.
• Silbato.
• Flauta
• Una flor
21. BOTELLA DE
LA CALMA O
BOLITA
ANTIESTRÉS
Elaboren juntos estos
materiales, utilizando los
colores, olores, texturas
que más les agraden.
22. Sé un modelo
Platica a tus hij@s
situaciones en las que te
hayas sentido enojado,
frustrado o molesto y cómo
las solucionaste.
23. Usa tus
palabras
Técnica de la tortuga.
■ Reconocer cuando nos estamos enojando.
■ Pensar “alto”.
■ Meterse en el caparazón, respirar y contar
hasta tres.
■ Pensar en una solución alternativa. Las
alternativas deben relacionarse con usar
nuestras palabras.
El adulto debe modelar el uso de la técnica,
por ejemplo, cuando esté abrumado por su
trabajo, puede decir: “creo que es un buen
momento para usar la técnica de la tortuga”.
Cuando veas que tu hij@ está por
enojarse o frustrarse, acércate a él y
dile: “usa tus palabras”.
Al principio, puedes apoyarlo con
preguntas: ¿cómo te sientes?
Acepta su estado de ánimo: “yo sé
que estás desesperado por subir al
juego, pero debemos esperar en la
fila”.
24. Entrenen Plantea situaciones imaginarias en las que tu
hiij@ represente objetos y personas, para
solucionar una situación.
Cambien de roles: que él sea la mamá, el
maestro, la señora de la tienda.
Cuando estén frente a una situación que él no
comprenda, tú ponle las palabras: “la señora
se molestó, porque el cajero le dio mal la
feria. ¿Qué crees que debió decirle?
Graben un video.
Tómense fotos.
Envíen un audio a familiares o amigos.