La desnutrición infantil ocurre cuando los niños no reciben suficientes proteínas, calorías y otros nutrientes necesarios para su desarrollo físico normal debido a factores como bajos ingresos familiares, mala absorción de nutrientes, y falta de lactancia materna. Esto puede afectar negativamente el crecimiento del niño. La desnutrición se clasifica como aguda o crónica dependiendo de su duración, y leve, moderada o severa dependiendo de su gravedad e impacto en el peso y salud del niño.
1. Desnutrición infantil
La desnutrición infantil es una enfermedad causada por ingestión insuficiente
de proteínas, las cuales son necesarias para salud corporal y el desarrollo
normal de los músculos, las calorías quienes son las encargadas de dar
energía para que nuestro cuerpo pueda funcionar de forma normal. En este
caso las personas con esta deficiencia en nutrición, presentan dificultades en
su desarrollo físico en tal caso extremo que puede afectar el crecimiento
normal de un niño si no se realiza un tratamiento adecuado.
FACTORES DE RIESGO
Factores individuales y ambientales que influyen en la desnutrición:
1. Bajo peso al nacer
2. Privación de amamantamiento a seno materno
3. Hijo de madre adolescente
4. Malnutrición a causa de una mala absorción intestinal.
5. Bajos ingresos económicos
6. Hábitos alimentarios
7. Higiene y saneamiento deficientes.
CAUSAS:
A. Deficiente absorción de los nutrientes de los alimentos
B. La desnutrición puede presentarse por la falta de una vitamina en los alimentos, como
lo es el hierro.
C. Familias de bajos recursos económicos, en donde no pueden ofrecer una dieta
balanceada y rica en nutrientes necesarios para el desarrollo normal de un niño.
SIGNOS Y SINTOMAS
- Fatiga
- Mareo
- Pérdida de peso
2. Clasificación de la desnutrición por su duración e intensidad:
Por su duración se clasifica en:
1. AGUDA:
Se presenta debido a la restricción de alimentos que se manifiesta por la pérdida de peso y
quizá detención del crecimiento. Cuando el niño es atendido adecuadamente y
oportunamente, este se recupera, repone sus pérdidas y vuelve a crecer normal.
2. CRÓNICA:
Cuando la privación de alimentos se prolonga, la pérdida de peso se acentúa como
consecuencia el organismo para sobrevivir disminuye requerimientos y deja de crecer, es decir
mantiene una estatura baja para su edad. La recuperación es más difícil.
Por su intensidad se clasifica en:
1. LEVE:
Es cuando la cantidad y variedad de nutrimentos que el niño recibe son menores a sus
requerimientos. Al inicio se caracteriza por la pérdida o no ganancia de peso.
2. MODERADA:
Cuando la falta de nutrimentos se prolonga y acentúa, la desnutrición se agudiza y fácilmente
se asocia a procesos infecciosos, se manifiesta con mayor déficit de peso, detención del
crecimiento, anorexia y mayor facilidad para contraer infecciones.
3. SEVERA:
Cuando la carencia acentuada de alimentos continua asociada a padecimientos infecciosos
frecuentes, la anorexia se intensifica y la descompensación fisiológica del organismo llega a tal
grado, que pone al niño en grave peligro de muerte se manifiesta en dos formas:
Marasmo (desnutrición seca) y Kwashiorkor (desnutrición con edema modificando el peso del
niño).