El documento argumenta que la evaluación de los estudiantes se ha centrado demasiado en las calificaciones cuantitativas en lugar de valorar sus conocimientos socioculturales. Plantea preguntas sobre por qué la evaluación se enfoca principalmente en los conocimientos expresados por los estudiantes y sus logros en comparación con el grupo, en lugar de otros elementos del proceso de enseñanza y aprendizaje. También sugiere que la evaluación debe medir de forma integral los conocimientos de los estudiantes de diferentes maneras.