Los estudiantes del segundo grado desarrollaron su proceso de lectoescritura a través de estrategias como escribir letras de canciones y dramatizar cuentos. Esto fomentó su creatividad y curiosidad. Las actividades incluyeron interpretar canciones, transcribir textos, dibujar, escribir de forma espontánea y escuchar historias. Al final, los estudiantes mejoraron notablemente su comprensión lectora según se evidenció en sus respuestas a talleres y pruebas escritas.