El documento discute cómo los estudiantes de magisterio aprenden a ser maestros a través de la interacción con otros y la interiorización de las normas y prácticas culturalmente aceptadas de la escuela normal. Señala que la cultura del aula se construye a través de un entramado de símbolos, prácticas y discursos que los estudiantes aprenden a interpretar. También explica que los rituales como la instrucción, las prácticas pedagógicas y la graduación tienen un fuerte impacto en la formación del ethos y la