Este documento describe los ictus, definidos como episodios de déficit encefálico focal causados por interrupciones en la circulación cerebral. Los ictus pueden ser isquémicos (85% de los casos) o hemorrágicos (15%). Se enumeran los factores de riesgo y se clasifican los ictus isquémicos. El diagnóstico se basa en la historia clínica, examen físico y exámenes de imagen como la TAC y RMN. El tratamiento incluye medidas generales, control de la presión arterial, anticoag
IMÁGENES EN LA ENFERMEDAD CEREBRO-VASCULAR.
La enfermedad cerebrovascular es la tercera causa de muerte y la primera causa de invalidez en el mundo. Se trata de una enfermedad que no respeta edad, sexo, raza, ni condición social y que en muchas ocasiones afecta a individuos en las etapas más productivas de sus vidas. A pesar de esto, la mayoría de la gente no es consciente de la gravedad de esta enfermedad, de los factores de riesgo que favorecen su desarrollo, de sus manifestaciones clínicas, ni de las opciones de tratamiento que existen en la actualidad. El diagnóstico clínico del ACV es tan simple o tan complejo como quiera mirarse. Por lo tanto, Se utilizan estudios que muestran imágenes del cerebro (tomografía computada, resonancia magnética), miden el grado de compromiso, la actividad eléctrica del cerebro y muestran el flujo de sangre al cerebro a fin de averiguar el tipo de accidente cerebrovascular y su gravedad. La TC es el método neurorradiológico más usado en pacientes con sospecha de infarto o de hemorragia cerebrales; la TC demuestra sangre desde el primer momento que ha sido liberada al espacio subaracnoideo o al tejido cerebral y es por lo tanto mandatoria y superior a RM cuando se sospecha HIC o HSA o cuando estas entidades deben ser descartadas. Los defectos isquémicos en cambio, pueden tardar hasta 24 horas en dar manifestaciones propias como hipodensidad tisular. Cada vez es más importante reconocer cambios isquémicos tempranos, debido a los nuevos métodos terapéuticos que exigen descartar a aquellos pacientes con lesiones “establecidas”. La sensibilidad de la TC en isquemia de la fosa posterior es pobre. Los infartos lacunares en general y los infartos del tallo en particular son difíciles de apreciar en TC por su pequeño tamaño y el poco contraste que tienen con el tejido adyacente. No se recomienda el uso de medio de contraste intravenoso porque no ayuda al diagnóstico en la etapa aguda y puede inducir confusión. La RM aporta datos importantes en la evaluación de la ECV sin desplazar a la TC de manera completa. Sus principales ventajas radican en detectar infartos más tempranamente que lo que lo hace la TC, permitir un diagnóstico también más temprano de los infartos pequeños especialmente de los infartos lacunares ha permitido deducir interesantes aspectos fisiológicos con el uso de medio de contrate paramagnético. Las imágenes influidas por T2 muestran los infartos como lesiones hiperintensas tan temprano como dos horas después del desarrollo de los síntomas y es un método mucho más sensible que la TC en la evaluación de los infartos de la fosa posterior.
IMÁGENES EN LA ENFERMEDAD CEREBRO-VASCULAR.
La enfermedad cerebrovascular es la tercera causa de muerte y la primera causa de invalidez en el mundo. Se trata de una enfermedad que no respeta edad, sexo, raza, ni condición social y que en muchas ocasiones afecta a individuos en las etapas más productivas de sus vidas. A pesar de esto, la mayoría de la gente no es consciente de la gravedad de esta enfermedad, de los factores de riesgo que favorecen su desarrollo, de sus manifestaciones clínicas, ni de las opciones de tratamiento que existen en la actualidad. El diagnóstico clínico del ACV es tan simple o tan complejo como quiera mirarse. Por lo tanto, Se utilizan estudios que muestran imágenes del cerebro (tomografía computada, resonancia magnética), miden el grado de compromiso, la actividad eléctrica del cerebro y muestran el flujo de sangre al cerebro a fin de averiguar el tipo de accidente cerebrovascular y su gravedad. La TC es el método neurorradiológico más usado en pacientes con sospecha de infarto o de hemorragia cerebrales; la TC demuestra sangre desde el primer momento que ha sido liberada al espacio subaracnoideo o al tejido cerebral y es por lo tanto mandatoria y superior a RM cuando se sospecha HIC o HSA o cuando estas entidades deben ser descartadas. Los defectos isquémicos en cambio, pueden tardar hasta 24 horas en dar manifestaciones propias como hipodensidad tisular. Cada vez es más importante reconocer cambios isquémicos tempranos, debido a los nuevos métodos terapéuticos que exigen descartar a aquellos pacientes con lesiones “establecidas”. La sensibilidad de la TC en isquemia de la fosa posterior es pobre. Los infartos lacunares en general y los infartos del tallo en particular son difíciles de apreciar en TC por su pequeño tamaño y el poco contraste que tienen con el tejido adyacente. No se recomienda el uso de medio de contraste intravenoso porque no ayuda al diagnóstico en la etapa aguda y puede inducir confusión. La RM aporta datos importantes en la evaluación de la ECV sin desplazar a la TC de manera completa. Sus principales ventajas radican en detectar infartos más tempranamente que lo que lo hace la TC, permitir un diagnóstico también más temprano de los infartos pequeños especialmente de los infartos lacunares ha permitido deducir interesantes aspectos fisiológicos con el uso de medio de contrate paramagnético. Las imágenes influidas por T2 muestran los infartos como lesiones hiperintensas tan temprano como dos horas después del desarrollo de los síntomas y es un método mucho más sensible que la TC en la evaluación de los infartos de la fosa posterior.
resumen de accidente cerebro vascular, un tema con fisiopatología, diagnostico, causas y tratamiento, mencionando algunos scores, flujogramas, dibujos, etc
Presentació de Elena Cossin i Maria Rodriguez, infermeres de Badalona Serveis Assistencials, a la Jornada de celebració del Dia Internacional de les Infermeres, celebrada a Badalona el 14 de maig de 2024.
DIFERENCIAS ENTRE POSESIÓN DEMONÍACA Y ENFERMEDAD PSIQUIÁTRICA.pdfsantoevangeliodehoyp
Libro del Padre César Augusto Calderón Caicedo sacerdote Exorcista colombiano. Donde explica y comparte sus experiencias como especialista en posesiones y demologia.
Presentación utilizada en la conferencia impartida en el X Congreso Nacional de Médicos y Médicas Jubiladas, bajo el título: "Edadismo: afectos y efectos. Por un pacto intergeneracional".
2. • Es un episodio de déficit encefálico focal que aparece como
consecuencia de una interrupción circulatoria en una zona del
parénquima encefálico.
• La alteración puede ser cuantitativa: cantidad de sangre que
se aporta al encéfalo (trombosis, embolia, bajo gasto
cardiaco); o cualitativa: calidad de sangre (anemia,
trombocitemia, policitemia).
3. • Las enfermedades cerebrovasculares agudas o ictus son
consecuencia de una alteración de la circulación cerebral, que
ocasiona un déficit transitorio o definitivo del funcionamiento
de una o varias áreas del encéfalo. Según la naturaleza de la
lesión encefálica se distinguen dos grandes tipos de ictus:
isquémico (85% de los casos) y hemorrágico (15%). El primero
es debido a la falta de aporte sanguíneo a una determinada
zona del parénquima encefálico, y el segundo, a la rotura de
un vaso sanguíneo encefálico con extravasación de sangre
fuera del flujo vascular.
4. • Factores de riesgo: Ateroesclerosis, hiperlipidemia, isquemia
miocárdica, arritmia cardíaca, tabaquismo, drogas,
hipertensión, diabetes, predisposición familiar, valvulopatías,
miocardiopatías, uso de anticonceptivos hormonales.
5.
6. • Los ictus isquémicos se clasifican en:
• 1) Isquemia cerebral global.
• 2) Isquemia cerebral focal. Esta a su vez se divide en:
• 2.1) Ataque Isquémico Transitorio
• 2.2) Infarto Cerebral. El infarto cerebral se subdivide en:
• 2.2.1) Infarto Aterotrombotico
• 2.2.2) Lacunar
• 2.2.3) Cardioembólico y
• 2.2.4) Etiología indeterminada
7. Por la localización del daño isquémico se clasifican en:
• Síndrome de arteria carótida
• Síndrome de la arteria cerebral media
• Síndrome de la arteria cerebral anterior
• Síndrome vertebro bacilar
• Infarto lacunar
• Infarto cerebral
8. Los síntomas aparecen de manera repentina y dependen de la
parte de cerebro afectada. Algunas de las manifestaciones
clínicas que observamos en general son:
• Debilidad o entumecimiento repentinos del rostro, el brazo o
la pierna, especialmente en un lado del cuerpo
• Confusión repentina
• Problemas repentinos para hablar o comprender
9. • Problemas de vista repentinos en uno o ambos ojos
• Mareos repentinos, problemas para caminar, pérdida del
equilibrio o de la coordinación
• Dolor de cabeza intenso y repentino sin causa conocida
10. Síntomas en el territorio carotideo:
• Amaurosis Fugaz
• Compromiso piramidal y facial Central directo
• Trastornos neuropsicológicos. Afasias, apraxia agnosias
• Alteraciones de pulsos y soplos carotideos
11. Síntomas en el territorio vertebral:
• Manifestaciones del tronco cerebral: Vértigo, Diplopía,
Compromiso de pares craneales, ataxia.
• Trastornos sensitivos disociados del motor y cuadros alternos.
• Soplos vertebrales o subclavios.
12.
13.
14.
15. • La historia clínica y el examen físico ofrecen el 90% del
diagnóstico; se debe diferenciar con trastornos súbitos del
estado de consciencia, se complementa con un adecuado
examen físico identificando signos de lateralización y estado
de conciencia, además se debe tomar EKG, radiografía de
tórax si existen signos de embolización.
16. • Exámenes de laboratorio: Hemograma, plaquetas, glucosa,
nitrógeno ureico y creatinina, electrólitos séricos (Na, Cl, K,
Ca.), urea, pruebas de coagulación (TP, TPT).
17. • TAC cráneo (casi 100% descarta HIC) Paciente por clínica
sugestiva de ictus, paciente con factores de riesgo
cardiovascular y trastornos del estado de conciencia y
sospecha de fenómenos vasculares. Ante alta sospecha de
hemorragia, debe realizarse sin material de contraste.
• TAC con emisión de Fotón Único y la TAC con emisión de
positrones: Perfusión, metabolismo y neuroquímica
• RMN: 90% vs. 58%; Tronco 60% vs. 39% Mayor costo + mayor
tiempo. ( en casos sugestivos a infartos de fosa posterior o del
tallo cerebral).
18. • Evaluar el ingreso a: unidad de cuidados intensivos o unidad de
cuidados intermedios en los siguientes casos de enfermedad
sistémica descompensada, inestabilidad hemodinámica,
necesidad de ventilación mecánica, necesidad de monitoreo
invasivo.
• Manejo de la presión arterial: debe mantenerse una presión
arterial media entre 110 a 120 mmHg, no se debe disminuir la
presión arterial a menos que exista insuficiencia cardíaca,
disección de la aorta, presión diastólica mayor de 120 mmHg o
sistólica mayor de 220 mmHg.
19. • Medidas generales: Oxigenoterapia, aspiración de
secreciones, mantener con respaldo a 30º, líquidos
intravenosos, evitar soluciones hipotónicas (usar Solución
salino Normal 0.9%), profilaxis con heparina subcutánea,
movilización y fisioterapia temprana, uso de sonda
nasogástrica en pacientes inconscientes, sonda vesical cuando
sea necesario, acceso venoso central en pacientes con ictus
agudo con falla hemodinámica y que requieran un mejor
monitoreo.
20. • Terapia específica:
• Anticoagulación: Si existe evidencia de cardioembolismo, se
debe iniciar la anticoagulación a las setenta y dos horas post
infarto con control tomográfico y monitoreo de tiempos de
coagulación, excepto que el infarto cerebral sea muy extenso
por el riesgo de transformación hemorrágica.
• Trombolisis: El máximo beneficio y seguridad se logra cuando
se inicia dentro de las primeras tres horas.
• Antiagregantes plaquetarios: Aspirina 325 mg/día o clopidogrel
75 mg/día.
21. • En pacientes con crisis hipertensiva:
• Nitroprusiato de sodio a dosis de 0.5 - 8.0 mcg/Kg/minuto por
vía intravenosa en infusión continua.
• Nitroglicerina de 10 - 500 mcg/minuto en infusión continua.
22. • Edema cerebral citotóxico: para el cual no se deben administrar
esteroides
• Hemorragia cerebral (ante la sospecha, se debe indicar una TAC de
urgencia)
• Convulsiones (puede usarse fenitoína o ácido valproíco),
• Neumonía aspirativa,
• Infecciones
• Fiebre central.
• Disfagia
• Ulceras por decúbito
• Hemorragia digestiva
• Infecciones urinarias
• Insuficiencia respiratoria