La catedral de Reims es una de las obras más emblemáticas de Francia y Europa, construida entre 1211 y 1311. Mide 138 metros de largo y 30 metros de ancho, dividida en tres naves con una altura de 38 metros y torres de 86 metros. Fue declarada patrimonio de la humanidad en 1991 y posee el mayor número de estatuas entre todas las catedrales europeas.