Este documento presenta tres textos lingüísticos diferentes y solicita un comentario lingüístico detallado de cada uno, definiendo los términos subrayados. El primer texto es una transcripción de una conversación entre jóvenes que incluye varios términos de jerga. El segundo texto es un poema de Pablo Neruda. El tercer texto es un fragmento de un cuento de Jorge Luis Borges. Adicionalmente, se presentan secciones sobre fonética, fonología y la descripción de los sonidos del español.

1. 65
1. Corrige las siguientes secuencias:
*Dimitieron al Director General.
*Quedé el libro encima de la mesa.
*Me quedo tu libro.
*La aviación abasteció alimentos a la población.
*La policía incautó un arsenal de armas de ETA.
*Amenazan paralizar con violencia las obras del puerto de San Ciprián.
*Te aludí en mi conferencia.
*Ser amables con Iván.
*Se encontró con dos hombres dándose puñetazos.
*Hice el examen poniendo al final la firma.
*El año pasado hemos entrevistado a unos amigos.
*Aboles las leyes.
*El conde-duque de Olivares fue balido del rey Felipe IV.
*Conforme lo expuesto, hemos entendido la lección.
*Su vecino es adicto de la droga.
*El Arsenal juega hoy ante el Liverpool.
*Bajo el punto de vista de Pepe, eso no es correcto.
*Nos alegra de que hayas venido.
*Pudo escapar al peligro.
*Lo leyeron de arriba a abajo.
*A grosso modo, habéis estudiado.
*Juan va hablar.
*Pon esto arriba de todo.
*Vete a abajo.
*Ponte adelante de mí para que no me vean.
*Adelante no se ve nada.
2. En los siguientes enunciados, ocúpense los puntos suspensivos con
porque, porqué, por que o por qué, según corresponda:
-¿Te has enfadado .................. no te hemos invitado a la fiesta?
-Pasaré a explicar el .................. de mi renuncia al cargo.
-No se ha comido el pescado .................. no le gusta.
-Aquella es la puerta .................. hemos entrado.
-El presidente explicará mañana .................. ha dimitido.
-No confesó el .................. de su decisión.
-No creo que pueda ayudarte .................. allí no conoce a nadie.
-Todavía no han tapado el boquete .................. se han escapado los leones.
-.................. no quiere líos está decidida a no hablar del asunto.
3. Completa los puntos suspensivos con si no, sí no o sino:
-Cuando habla para ............... hay forma de entenderle.
-El duque de Rivas escribió Don Álvaro o la fuerza del ...............
-............... hizo Luisa su parte del trabajo, deberás hacerla tú.
-No fue Baroja ............... Galdós quien escribió esa novela.
-Toda su vida ha trabajado sin descanso; ese ha sido su ...............
-Decir que ............... es siempre lo más adecuado.
-Jacinta no vive aquí ............... en el otro edificio.

2. 66
COMENTARIOS
1. Realiza un COMENTARIO LINGÜÍSTICO detallado de cada uno de los tres textos escritos
en la parte inferior y define los términos que aparecen subrayados en los mismos:
TEXTO A
—¡Oye, tronco! ¡Tengo un tubo en la cabeza desde que salimos del insti...! Oye, tía... ¿Qué vais
a hacer este finde?
—¡Jo, a ver, tía! ¡Estamos de un pasota...! Por cierto, la chupa de Tony mola mazo, no como el
friki de Charly. ¡Flipo con la peña! ¡Es demasié!
Transcripción de parte de una conversación de autobús (20-12-2011)
TEXTO B
Me gusta cuando callas porque estás como ausente,
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.
Parece que los ojos se te hubieran volado
y parece que un beso te cerrara la boca.
Como todas las cosas están llenas de mi alma
emerges de las cosas, llena del alma mía.
Mariposa de sueño, te pareces a mi alma,
y te pareces a la palabra melancolía.
Pablo Neruda, “Poema 15”, de Veinte poemas de amor y una canción desesperada
TEXTO C
Cuentan los hombres dignos de fe (pero Alá sabe más) que en los primeros días hubo un rey de
las islas de Babilonia que congregó a sus arquitectos y magos y les mandó construir un laberinto
tan [...] sutil que los varones más prudentes no se aventuraban a entrar.
Jorge Luis Borges, El Aleph
Parece que a la enseñanza en la actualidad no se le concede la importancia que merece. Entre el
alumnado crece el desinterés y la falta de motivación, así como el profesor pierde, cada vez más, el
poco crédito que le quedaba.
Sin embargo, es cierto que aún hay alumnos que, afortunadamente, manifiestan interés por
aprender y formarse, el fin último, en resumidas cuentas, de la escuela.
Pero la mayoría de nuestros jóvenes hacen lo que les viene en gana cuando les parece. Y les toca
las narices que les llames la atención. ¡Faltaría más! ¡No les vayas a tocar los violines o los
bemoles! Siento decírselo, señoras y señores, chavalas y chavales, basuras y basuros, pero
avanzamos hacia una violencia infinita.
Siento defraudarlos, pero cada vez existe menos humanidad; no hay compasión, y los referentes
de los niños son famosos que ventilan sus trapos sucios o vergüenzas en la televisión. Internet ha

3. 67
traído cosas buenas, por supuesto, pero ha permitido el acceso a la pornografía y nos ha robado
nuestra identidad. No somos más que una porquería...
La falta de educación es la marca de fábrica de los jóvenes de hoy, en donde no existe el respeto
por los demás y la violencia es la solución más adecuada. Desde luego, ¡menuda tristeza de mundo
hemos creado, en el que todos somos hijos de la violencia! Y no sólo eso, sino que las autoridades
hacen la vista gorda. Habría que empezar por educar a los papás y a las mamás, que en multitud de
ocasiones no aceptan que su hijo sea un perfecto imbécil en el mejor de los casos o un
desalmado en la peor de las posibilidades. ¡A tocarse los cataplines!
Charlie Reynolds-Coffee, The Sad Critic, London, The Great Poets, 1999, p. 5
RECRIMINAN A UN JUEZ LA CHABACANERÍA DE SU SENTENCIA
El juez José Manuel Ruiz dice en su última sentencia en la circunscripción malagueña, ya que
fue trasladado a otra comunidad, que «intentar mangarle los cupones a una ciega, es ya lo último,
aunque sea una ciega con un par de..., como en este caso. Aunque bien es cierto que casi todos los
vendedores de cupones los tienen bien puestos y es difícil dársela con queso».
En otro punto del texto, Ruiz Fernández escribe: «resulta que el hombre (el detenido) te sale con
lo de la droga y el síndrome y el mono y que estaba muy colgao y, vaya, si total no llegó a
quitárselos y tal y tal, tentativa dice la Ley (...) el caso es que la Ley, pone menos pena a los choris
si les trinca y se comen el marrón. Y al fin y al cabo, es verdad que Brenes (el acusado) está muy
acabao el hombre y a mí me da pena. Y total, que vaya, que digo yo, que es la última sentencia que
pongo como juez de instrucción y casi le tengo cariño, que son muchos años arreándole hostias al
pobre hombre. Y me marcho, que quiero tomarme un batido de yuca y chocolate. Además, está
cayendo chirimiri». Por otra parte, ya se sabe que la Ley es el alma máter de la Justicia, más
todavía si escuchamos estas palabras.
Finalmente, el juez justifica su resolución al afirmar: «no se hable más, la pena mínima y la
cuota mínima y eso porque no le puedo absolver, porque no me deja el juez que llevo dentro y
porque el fiscal, que es muy buena gente pero es fiscal, se va a cabrear y con razón. Lo dicho, un
mes de multa y no se hable más, que el detenido es mi álter ego, y dejemos de jugar con el erario
público y las divisas extranjeras». Desde luego, tales declaraciones parecen de film de ciencia
ficción.
La decisión del presidente (...) quedará supeditada al resultado de la reunión que la
Comisión Disciplinaria del Consejo del Poder Judicial celebre el próximo martes.
La Voz de Galicia, 15-5-1999

4. 68
-PRINCIPIOS DE FONÉTICA Y FONOLOGÍA
ÓRGANOS ARTICULATORIOS
NARIZ FOSAS NASALES PALADAR
LABIO INFERIOR ALVÉOLOS ÚVULA PALADAR MÓVIL
LENGUA
FONÉTICA: el fonetista busca analizar y describir hasta un determinado grado de detalle los
diferentes sonidos de una lengua, sin al menos en principio tener que preocuparse del posible valor
funcional que en el sistema de la lengua ofrezcan o no ciertas diferencias fónicas.
FONOLOGÍA: le corresponde el estudio de las unidades y propiedades sí dotadas de valor
funcional en el sistema lingüístico. Estas unidades y propiedades funcionales se materializan en
cada acto lingüístico respectivamente en sonidos y características fonéticas de dichos sonidos.
-LOS SONIDOS EN ESPAÑOL
A) SONIDOS VOCÁLICOS O VOCALES
B) SONIDOS CONSONÁNTICOS O CONSONANTES
C) SONIDOS LÍQUIDOS
-CLASIFICACIÓN DE LOS SONIDOS VOCÁLICOS
1) LOCALIZACIÓN
2) GRADO DE ABERTURA
3) NASALIZACIÓN - [ã, ẽ, ĩ, õ, ũ]

5. 69
anteriores centrales posteriores
Abertura mínima [i, ĩ] [u, ũ]
Abertura media [e, ẽ] [o, õ]
Abertura máxima [a, ã]
-LOCALIZACIÓN DE SONIDOS VOCÁLICOS NASALES
a) Entre dos sonidos consonánticos nasales [m, n, ], sean o no tautosilábicos: [´mãno],
[´mẽnos], [´nĩ o], [´mũndo].
b) En posición inicial absoluta, seguido de sonido consonántico nasal implosivo, es decir,
situado en margen postnuclear de sílaba: [ãn´dar], [´õnra], [ũm´bral].
-DIPTONGOS
-SEMICONSONANTES: elementos marginales de los diptongos crecientes [´pie] [´fue].
-SEMIVOCALES: elementos marginales de los diptongos decrecientes [´aire][´kauto].
-NASALIZACIÓN DE LOS DIPTONGOS
1) Diptongos precedidos y seguidos de consonante nasal: [mĩẽntras] [amã´nũẽnse]
2) Diptongos en posición inicial absoluta, seguidos de sonido consonántico nasal implosivo:
[ãũŋke]
COMPONENTES DE LA SÍLABA
tr a ns [porte]
-Margen explosivo Núcleo -Margen implosivo
o prenuclear o postnuclear
-Ataque silábico -Coda silábica

6. 70
-DESCRIPCIÓN DE LOS SONIDOS EN ESPAÑOL
[a]: sonido vocal, central, de abertura máxima, sonoro.
[e]: sonido vocal, anterior o palatal, de abertura media, sonoro.
[o]: sonido vocal, posterior o velar, de abertura media, sonoro.
[i]: sonido vocal, anterior o palatal, de abertura mínima, sonoro.
[u]: sonido vocal, posterior o velar, de abertura mínima, sonoro.
[p]: sonido consonante, oclusivo, bilabial, sordo.
[b]: sonido consonante, oclusivo, bilabial, sonoro.
[β]: sonido consonante, relajado o aproximante, bilabial, sonoro.
[m]: sonido consonante, nasal, bilabial, sonoro.
[f]: sonido consonante, fricativo, labiodental, sordo.
[ ]: sonido consonante, nasal, labiodental, sordo.
[ţ]: sonido consonante, oclusivo, interdental, sordo.
[θ]: sonido consonante, fricativo, interdental, sordo.
[θ]: sonido consonante, fricativo, interdental, sonoro.
[ņ]: sonido consonante, nasal, interdental, sonoro.
[ļ]: sonido líquido, lateral, interdental, sonoro.
[t]: sonido consonante, oclusivo, dental, sordo.
[d]: sonido consonante, oclusivo, dental, sonoro.
[δ]: sonido consonante, relajado o aproximante, dental, sonoro.
[n]: sonido consonante, nasal, dental, sonoro.
[l]: sonido líquido, lateral, dental, sonoro.
[s]: sonido consonante, fricativo, alveolar, sordo.
[z]: sonido consonante, fricativo, alveolar, sonoro.
[n]: sonido consonante, nasal, alveolar, sonoro.
[l]: sonido líquido, lateral, alveolar, sonoro.

7. 71
[r]: sonido líquido, vibrante múltiple, alveolar, sonoro.
[r]: sonido líquido, vibrante simple, alveolar, sonoro.
[t ]: sonido consonante, africado, palatal, sordo.
[dj]: sonido consonante, africado, palatal, sonoro.
[j]: sonido consonante, relajado o aproximante, palatal, sonoro.
[ ]: sonido consonante, nasal, prepalatal, sonoro.
[ ]: sonido consonante, nasal, palatal, sonoro.
[ ]: sonido líquido, lateral, prepalatal, sonoro.
[λ]: sonido líquido, lateral, palatal, sonoro.
[k]: sonido consonante, oclusivo, velar, sordo.
[g]: sonido consonante, oclusivo, velar, sonoro.
[γ]: sonido consonante, relajado o aproximante, velar, sonoro.
[x]: sonido consonante, fricativo, velar, sordo.
[ŋ]: sonido consonante, nasal, velar, sonoro.

8. 72
-MODOS DE ARTICULACIÓN
1) Sonidos OCLUSIVOS: [b, d, g] [p, t, k] - [ţ]
[b, d, g]
a) En posición inicial tras pausa: [´baro] [di´nero], [´gato]
b) Tras sonido consonántico nasal [m, n], anticipando bilabialidad, dentalidad o velaridad:
[´kambio], [´ãnda], [´gãŋga]
2) Sonidos RELAJADOS O APROXIMANTES: [β, δ, γ] - [j]
a) Cuando precede sonido vocálico: [β, δ, γ] [´raβo], [´deδo] [´soγa]
b) Cuando precede sonido consonántico no nasal: [dez´βio] [dezδe] [´razγo]
c) Cuando precede sonido líquido vibrante: [´arβol], [´kuerδa], [´xuerγa]
3) Sonidos FRICATIVOS [f, θ, θ, s, z, x]: [´feo, θe´reθa, ´dieθmo, ´soso, ´razγo, ´xueγo]
4) Sonidos AFRICADOS [t , dj]: [ oko´late, ´djuγo]
5) Sonidos NASALES [m, , ņ, n, n, , n ,ŋ]: [´mio, ẽ ´fermo, ãņ´θuelo, ´ãnda, ´naδa, ´an t o, ´a o,
´mãŋga]
6) Sonidos LÍQUIDOS LATERALES [ļ, l, l, , λ]: [kaļ´θaδo, ´alto, ´laδo, ko ´t on, ´λaβe]
7) Sonidos LÍQUIDOS VIBRANTES [r, r]: [´rata, pe´reθa]
-PUNTOS, ZONAS O LUGARES DE ARTICULACIÓN
A) Articulación BILABIAL [p, b, β, m]: [´pero, biembe´niδa, ´loβo, mã´ma]
B) Articulación LABIODENTAL [f, ] ´foto, ẽ ´fermo,
C) Articulación INTERDENTAL [θ, θ, ţ, ņ, ļ]: [θe´reθa, ´dieθmo, aθ´ţeka, ãņ´θuelo, kaļ´θaδo]
D) Articulación DENTAL [t, d, δ, n, l]: [´tose, ´dia, ´deδo, ´ãnda, ´alto]
E) Articulación ALVEOLAR [s, z, n, l, r, r]: [´asta, ´azno, ´naδa, ´laδo, ´rata, ´aro]
F) Articulación PREPALATAL y PALATAL [t , dj, j, , , l , λ]: [mu´ a o, ´djugo, ´majo, ´an t o,
´ nĩ o, kol ´ on, ´λaβe,]
G) Articulación VELAR [k, g, γ, x, ŋ]: [´krema, ´mãŋga, pa´γo, xa´βon, ´ãŋkla]

9. 73
PALABRAS ACENTUADAS EN ESPAÑOL
1) SUSTANTIVOS
2) ADJETIVOS CALIFICATIVOS
3) PRONOMBRES PERSONALES TÓNICOS
4) DEMOSTRATIVOS (adjetivos y pronombres)
5) INDEFINIDOS (adjetivos y pronombres)
6) NUMERALES (adjetivos y pronombres)
7) INTERROGATIVOS Y EXCLAMATIVOS (adjetivos y pronombres)
8) PRONOMBRES POSESIVOS
9) VERBOS
10) ADVERBIOS
PALABRAS INACENTUADAS EN ESPAÑOL
A) ARTÍCULO DETERMINADO
B) PREPOSICIONES (excepto «según»)
C) CONJUNCIONES (excepto «así»)
D) TÉRMINOS DE TRATAMIENTO («don», «doña», «fray», «santo»...)
E) PRIMER ELEMENTO DE LOS COMPUESTOS (Mario Juan, dos mil...)
F) PRONOMBRES PERSONALES ÁTONOS
G) ADJETIVOS POSESIVOS
-Transcribe fonéticamente los siguientes textos:
La práctica de la jardinería es un pasatiempo sumamente popular. En casi todos los jardines
hay una amplia gama de plantas que reciben los cuidados necesarios para que, si no llegan a
florecer, al menos consigan sobrevivir. Todas contribuyen al esplendor general del jardín. No es de
extrañar que muchas plantas de aficionados sean perennes y semirresistentes, como la dalia y la
fucsia. Pero cuando los brotes comiencen a asomar, las enfermedades serán una amenaza.
D. G. Hessayon, Flores de jardín. Manual de cultivo y conservación, Barcelona, Blume, 1985, pág. 131
El rey del mar es el albatros, cuya envergadura de tres metros es la mayor de todas las aves
marinas. Recorren un buen trayecto batiendo las anchas alas antes de echar a volar y son las aves
que mejor se adaptan en alta mar. Ya sabemos que otras aves se confinan en las costas, donde la
pesca resulta fructífera. La gaviota argéntea, de fuerte pico amarillo adornado con una mancha de
color rojo anaranjado, semeja una preciosa saeta cuando alza su vuelo.
Jean Dorst, El mundo de las aves, Barcelona, Timun Mas, 1965, pág. 20.

10. 74
El fin de las humanidades
La crisis por la que atraviesan los estudios de humanidades no
solo en España, sino en el mundo entero, era perfectamente previsible
desde los albores de la Revolución Industrial. Lo que se fundó en la
Grecia Clásica ‒el amor por el saber‒ y se mantuvo en Roma ‒la alabanza
del ocio y el menosprecio del negocio‒; aquello que las órdenes
monásticas conservaron durante la Edad Media; aquello que resurgió con
una insólita pujanza durante el Renacimiento europeo, luego durante la
Ilustración y en buena medida en las universidades del siglo XIX
siguiendo el ejemplo de la reforma universitaria de Humboldt en Berlín,
todo eso empezó a librar ya a mediados de ese mismo siglo una batalla
muy dura contra un enemigo de potencia no solo no prevista, sino
también incalculable. El hombre de estudio, la mujer de artes o letras,
vieron, a lo largo del gran siglo de la burguesía y de todo el siglo XX
cómo la legitimidad de su quehacer quedaba mermada y amenazada a
causa del desarrollo de la ciencia, la industria, el comercio y la
técnica.
En 1872, Flaubert lamentaba el desequilibrio que un nuevo plan de
estudios para el bachillerato en Francia exhibía entre algo tan
elemental como el deporte ‒que ya no tenía en Europa el destino agónico
que había tenido en Grecia o Roma‒ y la enseñanza de la literatura, de
la que apenas se hablaba. Con mayor énfasis, escribió lo siguiente: «Estoy
asustado, aterrorizado, escandalizado por las gilipolleces cardinales
que gobiernan a los seres humanos. Eso es algo nuevo; por lo menos en el
grado en que se produce. Las ganas de alcanzar el éxito, la necesidad de
triunfar a toda costa ‒debido al provecho económico que se obtiene‒ le
ha minado a la literatura la moral hasta tal punto que la gente se está
volviendo idiota».
Él, como tantos otros autores que empezaron entonces a reflexionar
sobre el descrédito progresivo de las humanidades, no poseía distancia
suficiente respecto a las causas de tal descalabro. Hoy sí la tenemos. Al
auge del comercio, las ciencias, la industria y la técnica, hay que
sumarle, en los últimos treinta años por lo menos, un nuevo factor,
imprevisible hace un siglo y medio: el auge de las nuevas tecnologías.
La inocencia con la que se recibió ese alarde del progreso
técnico-científico se ha transformado, ya en nuestros días, en una
preocupación ‒solo para algunos, este es el problema‒, sin que se atisbe
la posibilidad de alcanzar alguna solución. Estamos ya, propiamente, en
lo que ha venido en denominarse la era poshumana, pues nos hallamos en
la era en la que el ente, el ser, no es más que un flatus vocis: una
nadería nostálgica, un recuerdo de tiempos pasados en los que filosofía,
religión, moral y estética otorgaban a esa palabra un valor casi tan
alto como el que se otorgaba a Dios o a la muerte.
Jordi Llovet, "El fin de las Humanidades", El País. Ideas (24-4-2016): 2

11. 75
Condemor
Érase una vez un tipo alto, guapo, rumboso, malote de jeta
sin dejar de ser el marido, el yerno y el padre perfecto. Un
morenazo de ojos verdes capaz de abducir a las señoras y a
los señores por la fachada y el pico de oro y la cuenta que
les tenía a todos. Un pavo real más listo que el hambre que
nunca pasó de niño, una lumbrera con terno de tres piezas, el
eterno número uno en las oposiciones de la vida, el macho
alfa de la manada. El triunfador nato, el banquero del siglo,
el icono de masas que puso de moda las sevillanas, los
caracolillos pegados al cogote y los náuticos sin calcetines
para entrar y salir del barco. El mismísimo amo del cotarro
hasta que le vinieron mal dadas, le trincaron las trampas y
todos los que le tocaban las palmas con lo guapo que era y el
tipo que tenía se pusieron a la cola para pasarle las
facturas atrasadas. No pudieron con él ni tamaño oprobio ni
los rigores de la trena. Se hizo el amo del calabozo. El amigo
de asesinos y buscavidas. El líder irredento hasta en el
infierno. Fue allí, entre rejas, donde vio la luz, y, al salir,
quiso iluminarnos a todos. Ahí seguía hasta ayer mismo,
perdonándonos la vida desde sus púlpitos, dándonos lecciones
de decencia, sermoneándonos con santa paciencia, todavía
estupefacto porque no nos hayamos dejado salvar por su
desinteresado amor al prójimo.
Dicen que han vuelto a descubrirle de marrón el truco al
mago. Da de nuevo con sus huesos en el trullo con 67 años, el
erecto espinazo en declive y sus dos hijos emplumados. Encogía
el alma verle enjaulado en el coche de la pasma, en plena
Feria de Abril para más inri, las cejas de rapaz alicaídas, la
frente de lince marchita y la apostura de depredador reducida
a los filos de su exquisita calavera. Qué pena que Chiquito de
la Calzada, ese antropólogo disfrazado de payaso, haya
decidido colgar los hábitos. Chiquito, vuelve, fistro. Ahí tienes
a Condemor, el pecador de la pradera en persona.
Luz Sánchez-Mellado, El País (14-4-2016): 48

12. 76
Novela de posguerra
-Exilio: Rosa Chacel, Max Aub, Ramón J. Sender, Francisco Ayala...
1. La narrativa de los años 40. Generación de 1936
Camilo José Cela, La familia de Pascual Duarte (1942)
Carmen Laforet, Nada (1945)
Miguel Delibes, La sombra del ciprés es alargada (1948)
José Mª Gironella, Gonzalo Torrente Ballester
2. La "Generación del Medio Siglo" (niños durante la Guerra Civil)
Ignacio Aldecoa, Carmen Martín Gaite, Jesús Fernández Santos, Rafael
Sánchez Ferlosio, Juan Goytisolo, Juan García Hortelano, José Manuel
Caballero Bonald
"Realismo mágico": Álvaro Cunqueiro, Ana Mª Matute
Grupo neorrealista / Grupo del realismo social
3. La renovación novelística de los años 60
-Novela experimental
Luis Martín-Santos, Tiempo de silencio (1962)
Miguel Delibes, Cinco horas con Mario (1966)
Juan Marsé, Últimas tardes con Teresa (1966)
Juan Benet, Volverás a Región (1967)
Gonzalo Torrente Ballester, La saga/fuga de J.B. (1972)
4. La prosa narrativa desde 1975
-Novela innovadora
Paco Umbral, Manuel Vázquez Montalbán, José Mª Merino, Luis Mateo Díez,
Terenci Moix, Marina Mayoral, Eduardo Mendoza, Félix de Azúa, José Mª
Guelbenzu, Juan José Millás, Ana Mª Moix, Soledad Puértolas, Vicente
Molina Foix
-Últimas tendencias
Javier Marías, Julio Llamazares, Antonio Muñoz Molina, Manuel Rivas,
Javier Cercas, Luisa Castro, Lucía Etxebarría, Laura Gallego
Textos
‒Para estudiar Letras, ¿eh?... Sí, ya he recibido una carta de tu prima
Isabel. Bueno, yo no me opongo, pero siempre que sepas que todo nos lo deberás a
nosotros, los parientes de tu madre. Y que gracias a nuestra caridad lograrás
tus aspiraciones.
‒Yo no sé si tú sabes...

13. 77
‒Sí; tienes una pensión de doscientas pesetas al mes, que en esta época no
alcanzará ni para la mitad de tu manutención... ¿No has merecido una beca para
la Universidad?
‒No, pero tengo matrículas gratuitas.
‒Eso no es mérito tuyo, sino de tu orfandad.
Otra vez estaba ya confusa, cuando Angustias reanudó la conversación de
un modo insospechado.
Carmen Laforet, Nada, Barcelona, Ediciones Destino, 2000, 27
Y luego los ojos. Imposible imaginar ojos más opuestos a los de un ciego.
Brillantes, expresivos, sin rodar como los de los locos, sin permanecer
extáticos como el de Dios. Ojos humanos, cambiantes. auténticas ventanas del
alma. A causa de los ojos, las cejas y el alma, le bastaba con ponerse un vestido
negro y unos tacones altos para parecer una reina.
José María Gironella, Los cipreses creen en Dios, Bibliotex, 2001, volumen 1, 23
Filomeno, ni más ni menos, así como suena, con todo derecho, uno de esos
nombres que no se pueden rechazar salvo si se renuncia a uno mismo:
impepinable por la ley del bautismo y la del Registro Civil, también por la
herencia, porque mi abuelo paterno se llamaba así, Filomeno; y mi padre se
empeñó en perpetuar, es un decir, aquel recuerdo del pasado, respeto que tenía a
la memoria de su progenitor, de quien había recibido, según él, todo lo bueno
del mundo y hasta lo que le había acaecido, con absoluta injusticia en lo que a
mi madre respecta, que no fue mal acontecimiento, el casarse con ella, aunque
poco duradero: como que decidió marcharse de esta vida, quiero decir mi madre,
cuando me trajo a ella.
Gonzalo Torrente Ballester, Filomeno, a mi pesar, Barcelona, Editorial Planeta, 7
Doña Rosa va y viene por entre las mesas del café, tropezando a los
clientes con su tremendo trasero. Doña Rosa dice con frecuencia leñe y nos ha
merengao. Para doña Rosa, el mundo es su café, y alrededor de su café, todo lo
demás.
Camilo José Cela, La colmena, Barcelona, Editorial Noguer, 1986, 115
‒Si quiere, le dejo el libro.
‒No; lléveselo.
Martín Marco, paliducho, desmedrado, con el pantalón desflecado y la
americana raída, se despide del camarero llevándose la mano al ala de su
triste y mugriento sombrero gris.
‒Adiós, muchas gracias; es usted muy amable.
‒Nada. Váyase por ahí. Aquí no vuelva a arrimar.
Camilo José Cela, La colmena, Barcelona, Editorial Noguer, 1986, 165
La muchacha se va y Paco la sigue con la mirada hasta que se pierde
entre la gente.
‒Anda como una corza...

14. 78
Paco, el señorito Paco, encuentra guapas a todas las mujeres, no se sabe si
es un cachondo o un sentimental. La muchacha que acaba de saludarle, lo es,
realmente, pero aunque no lo fuese hubiera sido lo mismo: para Paco, todas son
miss España.
‒Igual que una corza...
Camilo José Cela, La colmena, Barcelona, Editorial Noguer, 1986, 172
‒¿Habéis tenido algún pinchazo? ‒preguntó Sebastián.
‒¡Qué va! Fue Mely, que se paraba cada veinte metros, diciendo que no está
para esos trotes, y que nadie la obliga a fatigarse.
‒¿Y para qué trotes está Mely?
‒Ah, eso...
‒Pues lo que es, nadie os mandaba esperarme; yo solita sabía llegar igual.
‒Tú sola, con esos pantalones, no irías muy lejos, te lo digo.
‒¿Ah no? ¿Y por qué?
‒Pues porque a más de uno se le iba a antojar acompañarte.
Rafael Sánchez Ferlosio, El Jarama, Barcelona, Ediciones Destino, 1996, 20
El médico se dijo que era bien triste cosa ser pobre en un pueblo de
pobres. Preguntó a Alfredo por qué Antonio no sacaba más dinero de la herrería.
‒Sacar, saca; pero una buena tierra da en un verano lo que la herrería en
tres años, y las que él tiene no valen nada. Además, son pequeñas; en dos días
todo el pan que recoge lo tiene en casa. Buena le espera...
‒¿Por qué? ¿Por casarse?
‒Ya verá cuando empiecen a venir los críos... Más les valía no nacer...
‒¿Por qué, hombre?
Alfredo se había vuelto y le miraba con firmeza, casi con rencor.
‒Para pasar hambre y miseria toda su vida, para eso se casaron.
Jesús Fernández Santos, Los bravos, Barcelona, Ediciones Destino, 1990, 150

15. 79
ESTRUCTURACIÓN DE TEXTOS: MECANISMOS DE COHESIÓN
COHERENCIA / COHESIÓN
a) Correferencia: anáfora / catáfora
b) Elipsis
c) Repetición o reiteración
d) Recurrencias: -Fónica
-Léxica
-Sintáctica
-Semántica (sinonimia, antonimia, hiperonimia, hiponimia, campos semánticos)
e) Marcadores discursivos: -Marcadores pragmáticos
-Conectores supraoracionales
COMENTARIO LINGÜÍSTICO
Algunos pensadores afirman que el ser humano es básicamente egoísta. “El hombre es un
lobo para el hombre” (Homo homini lupus), escribió Thomas Hobbes en el siglo XVII, y muchas
personas creen que ante todo nos mueven el interés personal y la defensa del propio territorio. Sin
embargo, a pesar de no ser tan visibles o impactantes, existen también infinidad de gestos que
nacen de la voluntad de ayudar.
Un hombre cae en la acera e inmediatamente varias personas acuden para auxiliarle. Una
joven escucha con atención a una amiga que habla disgustada sobre un asunto que le preocupa.
Alguien perdido en una gran ciudad encuentra a una persona que se ofrece amablemente para
guiarle. Son escenas simples, cotidianas, en las que la ayuda surge como un impulso natural ante la
necesidad de otro ser humano.
Las personas que ofrecen su tiempo y su dedicación a otras lo dicen claramente: ayudar les
hace sentirse bien. Sin embargo, esto no significa que se trate de una tarea sencilla. Tras el deseo
de querer hacer algo por alguien es preciso buscar la mejor forma de actuar.
Cristina Llagostera, “Aprender a ayudar”, El País Semanal (25-4-2010): 28

16. 80
-Aunque llueva, te querré sin pausa.
ORACIÓN
TESIS ANTÍTESIS
Cláusula Cláusula
NEXO PREDICADO SUJETO
ELÍPTICO
C. DIRECTO PREDICADO C. CIRC.
DE MODO
-Podríamos leer o estudiar, si llueve por la tarde.
ORACIÓN
CONDICIONADO CONDICIONANTE
Cláusula Cláusula
PREDICADO
Construcción
coordinada disyuntiva
SUJETO
ELÍPTICO
M1 NEXO M2
NEXO PREDICADO C. CIRC. DE
TIEMPO
-Vigilaba quiénes subían o bajaban.
CLÁUSULA
C. DIRECTO
Cláusula
PREDICADO
Construcción
coordinada disyuntiva
SUJETO
ELÍPTICO
PREDICADO
SUJETO
NEXO
M1 NEXO M2

17. 81
-Han tirado la casa donde nacieron sus padres.
CLÁUSULA
C. DIRECTO
frase nominal
NOMINAL
frase sustantiva
MODIFICADOR
Cláusula
SUJETO
ELÍPTICO
PREDICADO
DETERMINANTE
NÚCLEO
NEXO
C. CIRC.
DE LUGAR
PREDICADO SUJETO
-Siempre y cuando leas el libro, avísame aunque no quieras.
ORACIÓN
-Se trata del sistema que ella quiere, así que no lo olvides.
ORACIÓN
ANTECEDENTE CONSECUENTE
C. PREPOSICIONAL
TÉRMINO
frase nominal
NOMINAL
Frase sustantiva
MODIF.
Cláusula
SUJETO
ELÍPTICO
PRED.
ENLACE
DET.
NÚCLEO
NEXO
C. DIR.
SUJ.
ELÍPT.
PRED.
NEXO
SUJETOELÍPTICO
C.CIRC.DENEGACIÓN
C.DIRECTO
PREDICADO
CONDICIONANTE CONDICIONADO
Cláusula Oración
TESIS ANTÍTESIS
Cláusula Cláusula
NEXO SUJETO
ELÍPTICO
PRED. C. DIR. SUJETO
ELÍPTICO
PRED. C. DIR. NEXO SUJETO
ELÍPT.
C. CIRC.
DE
NEG.
PRED.