La educación especial atiende las necesidades educativas especiales (NEE) de los niños que las presentan en tres entornos principales: 1) en escuelas regulares mediante la integración educativa con apoyos y recursos adicionales, 2) en centros de educación especial para casos que requieren adaptaciones curriculares más significativas, y 3) brindando orientación y apoyo a las familias y maestros de escuelas regulares a través de centros como los CRIE y UOP.