La producción de alimentos balanceados une la agricultura y la ganadería al crear mezclas de ingredientes como maíz y harinas que satisfacen los requerimientos nutricionales de diferentes especies animales. El proceso implica recibir y almacenar materias primas, molerlas, mezclarlas, agregarles grasa y miel para formar comprimidos o bolas que se empacan y distribuyen a granjas. Las plantas modernas pueden producir hasta 10 toneladas de alimento por hora.