Este documento ofrece estrategias para la disciplina de niños de diferentes edades. Para niños menores de 3 años, se recomienda la supervisión, distracción y reorientación cuando se portan mal. Para niños de 3 a 8 años, se sugieren límites consistentes, ignorar ciertos comportamientos, tiempo aparte limitado, enseñar consecuencias, y quitar privilegios si continúan comportándose mal. El objetivo es enseñarles a comportarse de manera adecuada a su edad con amor y respeto.