La nueva reforma laboral busca reducir las obligaciones de los empresarios con los empleados y desalentar las demandas de los trabajadores. Incluye cambios como permitir contratos por temporada, periodos de prueba extendidos hasta 6 meses, y capacitación conjunta entre empresas. También prohíbe el trabajo infantil y obliga a las empresas a verificar el cumplimiento de normas de seguridad en empresas subcontratistas.