El documento describe la gestión del conocimiento como un proceso globalizado e intercultural para enriquecer proyectos educativos en instituciones y promover la autonomía institucional dentro de las políticas públicas. También explica que la gestión del conocimiento implica que las personas demuestren y compartan sus conocimientos en el aula para enriquecer los procesos pedagógicos de acuerdo con las necesidades educativas del contexto local y regional.