Este documento explora la teología de la libertad cristiana a través de varios capítulos. Define la libertad como la capacidad de aceptar totalmente el misterio de Dios y de responder libremente a Él a través del amor. Explica que la verdadera libertad proviene de Dios y conduce hacia Él, y que Jesucristo nos liberó del pecado a través de su encarnación, muerte y resurrección. También discute cómo la libertad y el destino coexisten armónicamente para el creyente, cuya vida está
2. CONTENIDO II CAPÍTULO
Teología de la libertad
Orígenes de la libertad
Confirmación de la libertad cristiana
Destino y libertad
3. TEOLOGÍA DE LA LIBERTAD
La
libertad
en la
historia
La historia de la teología cristiana es una progresiva autocomprensión “temática” del hombre como ser libre
Libertad como lo contrario a la esclavitud: libre es el que posee autopraxía.
Desde lo interno, la libertad es el espacio del hombre donde es y puede continuar siendo él mismo.
La auténtica libertad de elección sólo puede verse con claridad en el cristianismo.
La historia de la revelación hace posible la constitución esencial del hombre como ser libre.
LIBERTAD DE LA ACETACIÓN TOTAL DEL MISTERIO ABSOLUTO LLAMADO DIOS
4. I. EN LA CONCEPCIÓN TEOLÓGICA, LIBERTAD ES LIBERTAD DESDE
DIOS Y HACIA DIOS
Sólo Dios hace posible la libertad
•En cada acto libre, Dios está dado
atemáticamente como su fundamento.
•“Hacia dónde absoluto”
•Dios en sí mismo sería el primer
conocimiento “en” el que conoceríamos lo
demás.
Libertad frente a Dios
•Para la doctrina cristiana de la libertad es
decisivo que esta libertad implique la
posibilidad de un sí o un no frente a su
propio horizonte e incluso eso es lo que la
constituye propiamente.
•Encontramos a Dios en todas partes,
como el primer interrogante a nuestra
libertad.
La paradoja de la libertad
humana
•Esta libertad que niega se da, afirmado y
negado, y esta suprema monstruosidad se
retira a la vez y se relativiza en la
temporalidad.
•La libertad es en su origen libertad de si y
del no a Dios.
Libertad y gracia
•El último fundamento teológico de la
libertad como libertad frente a Dios.
•Dios se ofrece como tal en la gracia
divinizante.
•La libertad se convierte en la facultad del
si o del no frente a Dios mismo.
5. II. LIBERTAD ES LA TOTAL DISPOSICIÓN DEL SUJETO HACIA LO
DEFINITIVO
Libertad para salvarse o condenarse
• La libertad es la facultad de
realizarse a sí mismo de una vez
para siempre.
• Para la Escritura, el hombre pecador
y el justo son responsables delante
de Dios de sus obras.
• El hombre decide y dispone de sí
mismo como de un todo.
Libertad es realización de sí mismo
• La libertad es ante todo “libertad
óntica”.
• Libertad de ser.
• La persona no “está ahí” sino que
“existe para sí”.
• Por esta libertad ontológica, el
hombre es incomparable, libertad
de la autocomprensión.
Libertad: capacidad de lo eterno
• No se logra la misma profundidad
actual y radical de autodisposición
en cada acto libre.
• El acto fundamental de libertad se
realiza a través de las acciones
concretas del hombre.
• El resultado de la libertad es la
necesidad verdadera y permanente.
6. III. LA LIBERTAD ES LA FACULTAD DIALOGÍSTICA DEL AMOR
Libertad: capacidad de amar
•La autoperfección de la libertad:
autorrealización delante de Dios.
•En cuanto a facultad del “corazón” es
una capacidad de amor.
•Solo el amor a Dios puede abarcarlo
todo.
El riesgo del amor
•Este amor no es una realización
determinada.
•El primer mandamiento obliga al
hombre a ama a Dios con todo su
corazón.
•Se asume el riesgo de asumir la
propia realidad.
Lo desmesurado del amor
•El mandamiento del amor requiere al
mismo hombre que debe “aceptar” el
amor divino, en el que Dios se da a sí
mismo.
•La dependencia de la criatura frente a
su creador.
Amor al prójimo
•La libertad humana lo es siempre que
se realiza sobre un objeto..
•La relación originaria para con Dios es
el amor al prójimo.
•En ese amor el hombre alcanza su
realidad total.
7. IV. LA LIBERTAD ES UN MISTERIO
Libertad es subjetividad
Este carácter se prolonga en los actos libres del sujeto como
tal.
Solo así se puede hablar con verdad de un acto totalmente
libre.
El hombre madura su ser definitivo en la libertad, mas no
puede objetivar este resultado de su libertad.
Libertad y juicio moral
La subjetividad y la persona se realizan siempre dentro de lo
natural.
El hombre es siempre el que reflexiona, se objetiva y se
coloca bajo normas.
El hombre está capacitado y obligado a un cierto
autoenjuiciamiento reflejo y objetivo de su situación moral.
8. V. LA LIBERTAD DE LA CRIATURA SE DA EN UNA INEXORABLE
SITUACIÓN DE CULPA
La libertad humana es la libre
realización personal que apunta a
lo definitivo: libertad de criatura.
El fin de la libertad se experimenta
en la realización de la existencia
espiritual misma.
La capacitación de la libertad hacia
el Ser absoluto requiere de una
autocomunicación inmediata que
llamamos gracia divina.
La libertad es la libre respuesta.
Esta libertad debe ser ganada por
el hombre en el encuentro con la
libertad de otros.
La libertad está determinada por la
culpa.
En cuanto más de objetiviza la
libertad, más se aliena
9. VI. POR LA GRACIA, LA LIBERTAD ES UNA LIBERTAD LIBERADA
Libertad
por
Cristo
La historia de la experiencia de la libertad con Dios está concretada en Jesucristo, en lo que llamamos gracia
divinizante.
La libertad liberada, obrada por Cristo y que San Pablo anuncia como la “libertad de los hijos de Dios”, es la
verdadera libertad cristiana.
El Hijo nos hace libres del pecado, de la ley y de la muerte.
Todo se hace posible por el misterio de la encarnación, muerte y resurrección del Hijo.
Se establece a plenitud el vínculo de amor entre Dios y el hombre, manifestado en el obrar del Hijo y la iluminación
del Espíritu Santo.
10. ORÍGENES DE LA LIBERTAD
CARACTERÍSTICAS FORMALES
DE LA LIBERTAD CRISTIANA
•La libertad auténtica es la que
deriva de Dios y a Él se
encamina.
•La libertad moral es siempre,
una libertad religiosa.
•Es este acto libre se trata al
hombre mismo, nos realizamos
a nosotros mismos.
•Dios se ha donado
previamente de manera
personal como la posibilidad
absoluta, en lo que
denominamos gracia.
LIBERTAD Y GRACIA
•Dios debe ser comprendido
como la causa universal que
regala la potencia y el acto.
•La gracia de Dios ha de liberar
la libertad y encaminarla hacia
sí.
•La gracia de Dios libérrimo
precede a la palabra histórica
del evangelio.
•No por eso el Deus
absconditus se convierte en
Deus revelatus.
LIBERTAD COMO EXIGENCIA Y
POSIBILIDAD
•Libertad como decisión en las
relaciones para con Dios, como
planteamiento de lo definitivo,
como autodisposición
definitiva; evidencian lo que la
libertad debe ser.
•Su fruto es la eternidad de la
creatura.
•La salvación hay que recibirla
libremente de Dios.
LA ENCARNACIÓN DE LA
LIBERTAD Y SU LUGAR
EXCLUSIVO
• No hay acción del hombre
corpóreo que no esté
vinculada a la materia.
•Por eso la nuestra es una
libertad corporal.
•Al realizar mi libertad
contribuyo a determinar el
espacio de la libertad del otro.
•Existe la libertad absoluta, mas
no un espacio absolutamente
libre.
•Aceptamos esta limitación con
esperanza.
EL CAMBIO DEL ÁMBITO DE LA
LIBERTAD
•El ámbito de la libertad se ha
ampliado gracias a los
diferentes aportes del mundo
actual.
•Sin embargo, está amenazado
y condicionado secretamente
por fuerzas anónima.
•Por eso existe una
codependencia entre la
ampliación y el
estrangulamiento del ámbito
de la libertad.
11. ORÍGENES DE LA LIBERTAD
EL CRISTIANO DEBE ACEPTAR LA
AMPLIACIÓN DEL ÁMBITO DE LA
LIBERTAD
•Si la libertad debe existir porque solo en
ella acontece lo definitivo y eterno
necesario.
•En el siglo XIX se suponía que la libertad
era la posibilidad neutra de hacer algo,
sin una exigencia moral de por medio.
•La supresión absoluta del ámbito de la
libertad, por bienintencionada que
fuese, sería un atentado a la dignidad y
libertad de la persona.
•La libertad de los hijos de Dios, solo se
da en la libertad del espíritu natural.
•Ser libres tener el valor de aceptar el
ámbito más amplio de la libertad, pese
a todos sus peligros.
LIBERTAD Y LIMITACIÓN DEL ÁMBITO
LIBRE
•Existe un liberalismo razonable que
deriva esencialmente de una
comprensión cristiana de la persona y la
libertad.
•Pero también hay un liberalismo
utópico.
•El verdadero problema de la libertad
radica en repartir adecuada y
justamente entre todos, el ámbito finito
de libertad.
•Existen limitaciones legítimas que el
liberalismo no quiere ver.
•Un liberalismo libertino e individualista
es una negación implícita del ámbito
libre de los demás.
LA LIBERTAD COMO VALOR PARA
COMPROMETERSE
•Una voluntad realista de libertad,
comporta en sentido cristiano el valor
de aceptar de sujeción, incluso la
presión y la voluntad de poder.
•Lo que se llama bien común, no es otra
cosa que el derecho de los demás a
tener un ámbito libre
•Un sistema social eternamente estable
es una utopía.
•Sin embargo, los cristianos tienen la
tarea de colaborar en la configuración y
reparto del único ámbito de libertad.
LA LIBERTAD COMO UN HALLAZGO
SERENO DE LOS IMPERATIVOS
CONCRETOS DEL MOMENTO
•Es tarea de los cristianos elaborar un
modelo cada vez más nítido y eficaz
para la configuración del ámbito libre.
•A tales reglamentaciones de la vida
social, pertenecen otras de sentido
material; tenemos que defenderlas y
aceptarlas.
•Un verdadero espacio libre para todos y
su correcto reparto y ordenamiento.
•Los cristianos son descubridores de los
imperativos concretos del momento
para configurar la vida pública de cara a
un ámbito de libertad lo más amplio
posible.
12. CONFIRMACIÓN DE LA LIBERTAD CRISTIANA
1º
•La disposición para aceptar
libremente aquellas condiciones
que son indispensables a un ser
finito y social pertenece a la
realización integral de la
humana.
2º
•La libertad auténtica es una
voluntad de verdad, porque
libera al hombre de los peligros
interiores cuya amenaza para la
libertad es mayor que la de
todas las presiones exteriores, a
saber, de los peligros de la
propia miopía, la presunción y
egoísmo que ciega.
3º
•La libertad cristiana es una
libertad que deja libre la
del otro, que es tolerante y
busca el diálogo abierto con
todos.
4º
•La libertad es el valor de
arriesgarse en el ancho mar el
futuro inabarcable.
5º
•La libertad en su realización es
acontecimiento personal y
espiritual, único e irrepetible de
cada hombre en su valor
definitivo delante de Dios.
13. DESTINO Y LIBERTAD
¿Cómo se comportan mutuamente el destino y la libertad?
La filosofía y la teología verdaderas consisten en dejar subsistir a ambos
Destino interior o exterior.
Para el creyente el sentido de su vida está sostenida en el poder de Dios: Él la sostiene en la unidad de
destino y libertad.
La omnipotencia divina y la autorresponsabilidad humana crecen de manera proporcional.