Hegel propuso una nueva lógica dialéctica para captar el movimiento y desarrollo de la realidad. Según él, la realidad es un sujeto en constante cambio a través de la superación de contradicciones, no una sustancia estática. La verdad se encuentra en la totalidad del desarrollo. Hegel explica este devenir dialéctico a través de una estructura triádica de tesis, antítesis y síntesis.