El documento discute la biopsicología del lenguaje y cómo puede transformar. Propone que el lenguaje reside en procesos cognitivos distribuidos por el cerebro en lugar de áreas específicas. También compara actos fallidos con la suplencia de funciones en casos de lesiones cerebrales. Concluye que los procesos biopsicológicos del lenguaje tienen el potencial de intercambiar e transformar a través de la interacción.