La estudiante reflexiona sobre lo que aprendió al realizar un trabajo sobre signos lingüísticos. Se dio cuenta que comprender un signo lingüístico es más fácil que no conocerlo, y que el habla y la escritura están influenciadas por la cultura. Como futura maestra, esto la motiva a prestar más atención a detalles culturales no superficiales sobre el origen y la interpretación de los signos, para seguir aprendiendo y enseñar mejor a sus estudiantes.