La reingeniería implica rediseñar radicalmente los procesos fundamentales de un negocio desde la perspectiva del cliente. Esto requiere que las empresas abandonen las reglas y políticas convencionales para enfocarse en procesos que agreguen valor al cliente de manera más productiva. La reingeniería busca comenzar desde cero para lograr mejoras dramáticas mediante el replanteamiento de por qué se realizan los procesos y la búsqueda de cambios radicales enfocados únicamente en los procesos.