El artículo discute cómo la percepción de la realidad influye en el comportamiento humano en el contexto de las relaciones públicas. Argumenta que cada persona tiene su propia realidad basada en su percepción, lo que conduce a mapas mentales diferentes y problemas de comunicación. Propone compartir ideas y prestar atención a las perspectivas de los demás para lograr una comunicación más significativa.