1. 2012 Teoría de la
Teoría de la Educación Martín Soria
Educación
Martín Soria
MANIFIESTO EDUCATIVO
FUNDAMENTOS DELAEDUCACIÓN
Ensayo sobre los fundamentos del Valor, la Educación y la Apreciación
MARTIN SORIA
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 1
2. Teoría de la Educación Martín Soria
INTRODUCCION
Hablar de educación es como guardar el equilibrio sobre la frágil y delicada superficie velada que
cubre la fosa más profunda de nuestra ignorancia humana. Educar es tan delicado como definir la
educación. Se pretende pero no se comprende cómo debería ser la educación alternativa esperada.
Nuestros jóvenes exigen mejorarla, sin exigirse a si mismos su propia mejoría. Piden excelencia en
los procesos imprecisos de ignoradas estructuras imaginarias. Se formulan peticiones de educación
integral sin conocer qué es lo que integra. Acumulan múltiples exigencias para una sola misión, la
de educar. Y ¿qué es educar? ¿Es acaso hacer al joven igual al prototipo social de ciertas
características acostumbradas, o, es hacerlo similar al Prototipo Humano de su Naturaleza Original?
Estereotipos sociales existen tantos como diferencias en costumbres o medio ambientes; desde el
prototipo social del hombre de las cavernas, hasta el prototipo social del exitoso emprendedor
contemporáneo, pasando por los idealizados ficticios o artificios derivados de los ideales filosóficos
y mitológicos de cada cultura o generación.
Educar al hombre de acuerdo con los estereotipos sociales no ha sido suficiente para realizar al ser
humano indiscutible, autentico, o veraz. Ninguna cultura, tradición o generación, ofrece el prototipo
del biotipo humano natural ejemplar, modelo de persona educada en consecuencia con su
verdadero potencial humano maduro. Incluso, podríamos afirmar sin temor a equivocarnos, que
ninguna cultura, antigua o contemporánea, ha ofrecido claridad alguna sobre el potencial humano
de sus capacidades. Ni psicólogos, sociólogos, filósofos, psiquiatras, biólogos o religiosos se ponen
de acuerdo en cuáles son las capacidades humanas y las habilidades naturales de la especie.
Sin el auténtico modelo de persona educada, difícilmente podremos orientar la educación, en la
orientación adecuada para la construcción normal del ser humano decente. Pretendemos ajustar el
diámetro de una circunferencia, de la que ignoramos cuál es su longitud. El hombre normal es
maduro normado. Y ¿cuálesson las normas de educación, regulaciones y deberes que maduran al
humano y que no perjudican nunca a nadie? Sin duda es solo una: ―responder siempre, libre y
voluntariamente, al cumplimiento de la máxima necesidad válida para Todo. Aquel que beneficia
siempre a Todo, no perjudica nunca a nadie‖. Quien cumple el máximo deber, no debe nada.
A pesar, de ser esta la ley que garantiza la normalización natural humana, unos creen que la
educación se realiza en escuelas públicas o privadas y reclaman porque consideran que si lucran o
no lucran, es una mejor que la otra. Otros creen que se educa en la familia y reclaman porque
consideran que un tipo de familia monoparental o pluriparental, de unión libre, civil o religiosa, es
una mejor o peor que la otra.Pero, poner la educación en términos de mejor o peor por cantidad, o
por decisión acorde con el fragmento de moda, no es definir el estándar educativo.
La expectaciónpor un educado colectivo, exige determinar con extrema claridad y precisión, en qué
consiste lo -educado- responsable con la Naturaleza Humana y qué deberes deben cumplirse y
respetarse para integrarse y responder a las necesidades sociales.
La educación, supuestamente aumenta la calidad de vida y mejora el ordenamiento natural. Mejorar
el ordenamiento natural no significa talar bosques para crear campos de golf artificiales, a pesar de
que socialmente se presuma de ser estos, significativos de una elevada clase social. Ni tampoco se
supone sea de buena educación el asfaltar superficies de cultivo con rascacielos de hormigón
armado, o eliminar los animales salvajes por ser salvajes, cuando ser salvaje es lo más sagrado y
natural que existe. ¿Cuál ha de ser entonces la naturaleza del aprendizaje en la educación?
De eso nos vamos a encargar a fondo en este ensayo, pero, lo que el mercado contemporáneo nos
ofrece es un tipo de orientación competitiva, en donde la nota califica y clasifica la calidad del
aprendiz. Hoy, si eres un 7 o un 4 eres distinto del otro, al ser distinto eres automáticamente, mejor
o peor. Mejor puntaje posiciona al alumno en mejor situación social, es mejor visto, más estimado y
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 2
3. Teoría de la Educación Martín Soria
respetado que el otro. El mayor de los problemas de la educación, aparece cuando el mapa también
esta desorientado. El individuo adquiere el beneficio de la costumbre por sobre el de su Naturaleza.
Cuando se inserta en las costumbres, el individuo es catalogado ―bueno, natural y normal‖, aunque
no comprenda ni una pizca de la naturaleza que determina lo que es definitivamente humano y ni
una pizca, de lo que significa bueno, natural y normal.
La verdad está siempre presente para aquél que se hace consciente en el reconocimiento de la
misma. Humano, es un concepto y como tal, debe contener significado. El significado de un
concepto es la razón que justifica su existencia, acción y multiplicación, en otras palabras, el
significado de un concepto debe justificar la razón de su origen, identidad y propósito. Por lo tanto,
el concepto humano, ha de justificarse en la razón que determine al origen humano, a la identidad
humana y al propósito del humano. Ese significado sería la justificación del ser humano. El sentido
u orientación en la educación, debería ser por sobre el aprendizaje de los artificios técnicos,
excelencias académicas, o puntajes nacionales, el encuentro con la verdadera significación humana.
Si un niño se niega a ser evaluado por un docente en materias técnicas, porque prefiere ser validado
por sus padres en la moral de los vínculos afectivos, o en el respeto por la ética de sus relaciones, y
por su confianza en la lealtad al compromiso de la unidad familiar. Ese niño vinculado con sus
padres, que en la prueba docente carece de información de matemáticas, ciencia o geografía, ¿sería
justo que el docente que lo evalúe, lo considere ignorante por no responder a su prueba?
¿Cuál sería más ignorante, el niño que conoce muchas operaciones matemáticas o el que responde
responsablemente al cumplimiento del máximo deber necesario para la unidad familiar? ¿Qué joven
sería más ignorante ante la Naturaleza Humana, el joven que conoce las leyes de gravitación, las de
inercia y termodinámica, o el que reconoce y responde a las Normas de la Naturaleza Humana?
¿Qué es más importante coleccionar aventuras o las experiencias acertadas y adecuadas con el
Ordenamiento Natural? Imaginemos un inteligente insociable, o un insufrible irresponsable con
excelencia académica. ¿Sería preferible la excelencia académica por sobre la responsabilidad?Una
cosa es conocer la ley y otra muy distinta es ser legal.
Hay quienes piensan que las necesidades humanas son productos del deseo individual de cada uno.
Y en esa afirmación justifican las diferencias que manifiestan frente al cumplimiento de las mismas.
Si las necesidades humanas fueran individuales, viviríamos más y comeríamos menos, viajaríamos
más y dormiríamos menos, estaríamos felices y satisfechos con la individualidad de nuestra soledad
y consecuentemente eliminaríamos la dependencia del complemento filio-paternal o fraterno-
conyugal, porque, esa necesidad de entablar vínculos, no sería necesaria, sería solo un deseo. Pero
no son un deseo, son un deber. Nos debemos al padre para ser hijos, a la hermana para ser hermano,
a la esposa para ser marido y a los hijos para ser padres. O ¿alguno de ustedes piensa lo contrario?
Imaginemos que el ser humano por naturaleza es libre, autónomo y responsable y que dispone de un
proceso de desarrollo en cuyos estratos, existen momentos sensibles a necesidades humanas que
deben ser satisfechas y que solo decidiéndose a voluntad por el compromiso de descubrirlas y
realizarlas, el humano se realiza y se establece libre en ellas. Descubriéndolas él mismo, se realiza
autónomo y al cumplir responsablemente su realización se establece responsable. Supuestamente,
este ejercicio, madura al ser humano en toda su dimensión afectiva, cognoscitiva y natural.
Imaginemos ahora, que en lugar de realizase libre, autónomo y responsablemente humano, el
individuo decide realizarse carpintero. ¿Podría ese carpintero decirse realizado naturalmente libre,
autónomo y responsable porque eligió profesión, la descubrió por si solo y la realizó con su propio
esfuerzo? ¿Qué es humano y qué es carpintero? Si pensamos que son la misma cosa, entonces
propongamos al carpintero como modelo estereotipo de realización humana. Y designemos que la
realización del ser persona se deriva de la profesión de carpintero que realices. Pero, realizar una
profesión, debería ser definido, porque no es lo mismo el carpintero de un lugar con el de otro.
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 3
4. Teoría de la Educación Martín Soria
Y ¿cómo se realiza un individuo en lo afectivo, o en lo intelectual en una profesión como la del
buzo, el alguacil de prisiones, un policía de asalto, o la monja de clausura? ¿Podría realizarse en lo
afectivo un minero solo talando el hoyo toda su vida?
Si nos realizáramos humanos en base a una determinada profesión, la importancia de Jesús se
debería a que fue carpintero y ese debería ser el modelo de conductas a imitar en lugar del
evangelio. ¿Podría alguno madurar en la moral siendo únicamente carpintero? Dejemos a un lado
esa idea de la realización profesional como orientación de la conquista humana. Ni el éxito
profesional, ni la profesión elegida, determinan o garantizan la felicidad de las personas.
La educación ha sido orientada hacia la inercia del abismo que garantiza el fracaso humano. Hacer
profesionales, no es hacer humanos, es hacer artificios para cumplir funciones sindicales o
empresariales, no funciones afectivas, autónomas o responsables. Hacerse millonario, exitoso o
admirado por la fama, o beneficio financiero no garantiza la felicidad de la persona, ni se puede
tomar por modelo de identidad humana al exitoso, ni al célebre profesional. Y tampoco es modelo
de identidad humana el pobre ignorante desmotivado. Si buscamos proposiciones diferentes,
debemos de dejar de hacer siempre lo mismo. Pensamos que porque cambia el conocimiento, han
de cambiar también los métodos educativos y eso sería lógico, si educar fuera algo diferente en cada
generación y para cada tipo de seres humanos, pero la educación es siempre la misma para todos los
humanos. Educar es hacer al otro humano. Para hacer al otro humano, curiosamente no se necesitan
maestros. El otro se hace a sí mismo, porque es en sí mismo humano para hacerse autónomo y debe
hacerse responsablemente, es decir, respondiendo por su propia voluntad, al cumplimiento del deber
de ser humano. Humano es alguien libre, no forzado por nadie. Es sensible al futuro beneficio. Esa
cualidad de imaginarse lo necesario para beneficiar a todos es lo que nos caracteriza humanos. Lo
necesario es futuro, la elección libre es por un futuro, la esperanza es algo a cumplir.
Cada humano por si solo ha de descubrir que es libre, autónomo y responsable. Si no descubre eso,
no sabrá quién es, ni cómo es, ni para qué sirve y cargará su crisis existencial, de identidad y
vocacional sobre el lomo de sus futuras generaciones. Una vez que descubre que es libre, ha de
conocer la libertad y cómo establecerse en ella, de ese modo logra la autonomía en el
descubrimiento de su razón de ser, y si cumple esa razón, se realiza responsable. En esa realización
no es necesario un profesor, ni un docente, ni un sicopedagogo, ni inspectores o regulaciones
periódicas de disciplinas interplanetarias, solo es necesario que se descubra humano en el
entendimiento de la humanidad que hay en él desde que nace y que cumpla con el deber de ser.
Si cada individuo es único e irrepetible, ¿por qué la educación actual exige medir a cada irrepetible
frente a escalas similares compartidas y enumeradas? ¿Por qué les exigen saber un máximo de cada
materia a todos y al mismo tiempo, los declaran únicos e irrepetibles? ¿Por qué razón un número ha
de determinar la calidad de la persona? Y ese número… ¿cómo se determina?
En teoría todas los métodos de educación nos hablan de valores humanos profundos: cooperación,
inteligencia, solidaridad, igualdad, excelencia, pero en realidad, el sistema de educación actual,
prepara al alumno para que compita con el contrario y eso no es un proceso para la paz, sino un
enfrentamiento para la guerra. Se enseña a ser egoísta, a defender la supremacía, a lograr metas que
otros no llegan a conseguir, a violentarnos emocionalmente con los superiores y a discriminar a los
inferiores. Se educa en la exclusividad egoísta reclamando la incondicionalidad altruista.
La educación como se conoce hoy, promueve el carisma escénico y el entretenimiento. Se ha
transformado en un objeto de consumo reciclable, útil para la sociedad y para los dirigentes sociales
pero inútil para el aprendiz que espera ser humano. Los educadores han perdido su verdadera
identidad y su finalidad. ¿No será quizá que esa unicidad irrepetible, que tanto proclamamos, no es
más que el producto del desarrollo individual de capacidades y habilidades similares compartidas?
Si fuésemos todos distintos, disimiles, o desiguales, ¿Por qué abogan los líderes por la unidad y la
igualdad? Y ¿para qué buscar una mejor educación, en general? Si cada uno es distinto al otro,
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 4
5. Teoría de la Educación Martín Soria
también sería distinto en sus preferencias educativas. Por lo mismo no se podría ni pensar en una
orientación o dirección educativa. ¿En qué se podría educar a diferentes? La educación de calidad
exige similares en calidad.
Providencia y Procedencia.
La historia humana ha zigzagueado entre momentos de intensidad y momentos de indiferencia,
momentos de guerra y momentos de paz, momentos de descubrimientos y momentos de misterio.
La historia, en sus álgidos momentos se parece a Halloween. La noche de las brujas los padres
esconden huevos de chocolate y compran dulces para los niños.
Grandes expectativas.-Los niños saben que hay algo escondido que los gusta y satisface. Saber que
existe una razón que justifica buscar el chocolate, motiva y estimula a descubrirlo. De igual modo,
cuando en la historia humana, se sensibiliza la conciencia social e intuye que existe el justificativo
de la naturaleza humana, esa intuición, esa esperanza, estimula la determinación al descubrimiento
y aparecen nuevos inventos como el motor eléctrico o las leyes de gravedad.
Competitividad extraordinaria.-La noche de las brujas excita a los niños a indagar en la búsqueda
de los dulces y genera una competitividad extraordinaria. Cada niño quiere y espera ser quien más
descubra. De igual modo, en los momentos de la historia en donde se genera la expectativa de
encontrar la naturaleza humana, se establece una intensa competitividad en la defensa de los
postulados, así, los justificativos del cristianismo de Kant, por ejemplo, se contraponen con los
justificativos queNietzsche postuló. La ambición de Hitler se oponía a los principios democráticos.
Los grandes empresarios, competían con los pequeños hasta absorberlos.
Extremas Diferencias sociales.-Otro aspecto que aparece la Noche de las Brujas es el de las
diferencias entre quien descubrió muchos chocolates y quien descubrió pocos. De igual modo, en
esos periodos de intensa expectación porque se intuye la existencia de la razón que justifica a la
naturaleza humana, se establecen grandes ilustrados, o grandes empresarios o grandes proyectos
junto a indigentes en extrema pobreza, iliteratos ignorantes, y dementes en extremo. Eso es lo que
actualmente nos rodea.
La voluntad de realizarse se motiva y estimula en el momento que se cree posible realizar. La razón
de ser, solo se ilumina frente a la posibilidad del reconocimiento del ser. Y emocionalmente, surge
la esperanza de la conquista en el momento que se cree posible conquistarla. Esos ―momentos‖
disponen de la aprobación social en algunos periodos de la historia, luego pasan del mismo modo
que pasa la excitación de Halloween el día después de celebrarlo.
Momentos de excitación histórica han habido varios, pero a nivel macro conocemos dos. Uno fue el
momento del imperio romano que abría las puertas al cristianismo y otro el momento actual que
abre las puertas a una dimensión humana madura.
En tiempo de los romanos, se disponía de extensas carreteras, amplios medios de comunicación,
facilidad de intercambio entre culturas diferentes, ciertas libertades sociales y algunos derechos
humanos. Aspectos estos suficientes para extender una nueva visión, la visión cristiana.
En nuestro tiempo, se dispone de extensas autopistas, amplios medios de comunicación, y facilidad
de intercambio ente diferentes que disfrutan de los derechos humanos. Aspectos estos, suficientes
para extender una nueva visión, la que se descubra acorde con la naturaleza humana.
Estos momentos de importancia deben ser aprovechados, porque, perder la posibilidad de descubrir
la realidad de la Naturaleza obliga al castigo histórico de los extremos. Basta mirar la historia del
cristianismo, para darnos cuenta de la cantidad de sangre, sudor y lágrimas, que debieron ser
derramadas y sufridas, por los cristianos a cargo de los trastornos de personalidad que oprimieron
en sus extremos a quienes defendieron la fe en una humanidad suprema a la actual. Ese castigo se
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 5
6. Teoría de la Educación Martín Soria
mantuvo hasta lograr la institucionalización del mismo. Si no nos educamos, puede pasar lo mismo
con quien descubra fundamentos naturales ajustados y distintos a los desajustes educativos actuales.
La educación es fundamental para el reconocimiento del juicio justo.
Normas y valores para el orden.
Educación exige normas y valores. Si se ignora la jerarquía de los valores, se pierden las normas de
conducta frente a dichas jerarquías y se desubican los actores de la relación. Cuando un orden no
dispone de regulación que lo gobierne, se transforma en anarquía. Cuando un padre y un hijo
ignoran la importancia de sus posiciones y no guardan el respeto a la jerarquía de sus valores, padre
e hijo se desligan. Lo mismo ocurre entre un marido y su esposa o entre un director y un dirigido.
La sociedad es un enorme mercado de valores y no podemos, ni pensar, que todos los valores de un
mercado sean considerados iguales. Del mismo modo que existen autos de diferente diseño y
calidad que, por lo mismo, tienen distintos precios, las personas, (únicas e irrepetibles), a pesar de
ser iguales en capacidades y en el potencial de valor, ese potencial esta desarrollado en cada uno de
un modo diferente al otro. En esas diferencias, cabría decirse que valen unos más y otros menos.
Reconocer quien vale más en una conversación, facilita reconocerse en la posición adecuada de
respetable respetado o, de acato en el respeto. Valer más en un aspecto, no significa valer más en
ser persona. Todo humano vale el total de su potencial humano, pero el desarrollo de ese potencial
produce las variables de atractivo, de confianza y de respeto que nos diferencia en el aprendizaje.
Los valores humanos tienen un amplio espectro de posibilidades. Somos más o menos sensibles,
más o menos inteligentes, más o menos responsables. El respeto por el deber es un tipo de valor. El
conocimiento de un determinado juicio justo, o de una determinada razón es un valor. El afecto que
otros tengan por un individuo es un valor. Y no todos tenemos la misma cantidad de amigos
vinculados en el afecto que nos respeten, confíen y que se sientan atraídos por nosotros. Por lo
tanto, quien disponga del afecto mayor, ocupará la posición en jerarquía superior en el afecto frente
a quien disponga de menos vinculados, igual que quien dispone de un juicio más justo o de más
experiencia. El respeto frente al valor es un deber, así como el beneficio del valor es un derecho.
Pero no por carecer del máximo conocimiento, del máximo de experiencias o del máximo de
vínculos afectivos se merma a esa persona en el respeto, confianza y atención afectiva. Esa persona
es -ser humano- producto de la Naturaleza Humana y con el potencial de ser Humano, por lo
mismo, merece el mismo respeto que el más experto, más sabio y más sensible. Respeto no es
tolerancia ni aceptación, respeto es responder a sus necesidades naturales, que por ser siempre y
para todos válidas no perjudican nunca a nadie.
El derecho al beneficio del valor siempre se deriva del desempeño responsable del deber que se ha
cumplido. En esta dinámica de respeto en el cumplimiento del deber y disfrute del beneficio del
valor que se ha cumplido, se establece el equilibrio en la jerarquía de valores. El equilibrio es
siempre cosa de tres, dos posiciones y una norma, el orden. El orden siempre exige a dos, al deber
de ordenar y al beneficio de lo ordenado. Deber es siempre y en todo caso sujeto del derecho y
derecho, es siempre y en todo caso objeto del deber. Cuando se establecen ambos en su función, se
ubican y posicionan en el orden jerárquico de valor que les corresponde y se armonizan.
Hace tiempo que trato de simplificar aspectos de la Naturaleza Humana, que en apariencia, resultan
foráneos a la conciencia por ser fundamentales. Lógicamente resulta extraño, incluso
sorprendente,descubrir realidades existentes nunca antes imaginadas. En eso reside el atractivo de
este ensayo.
El observador actual es un espejo roto frente a la realidad que refleja y comprende en fragmentos,
(realidad es todo aquello capaz de ser evaluado) pero, esas porciones que reflejan la imagen
completa, hacen dudar de cuál de ellas será fiel reflejo de la realidad entera. Se tiene noción de
verdad, o, de normas, pero en tintes velados o en fragmentos paralelos que se ajustan al criterio de
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 6
7. Teoría de la Educación Martín Soria
ciertos grupos sociales, dentro de los cuales, se defienden válidas, no porque sean justas, sino,
porque se ajustan a los intereses de quienes las definen válidas.
Llevo muchos años en el ámbito de la docencia orientando universitarios y lo más curioso de
observar, es, que pocos, muy pocos o casi ningún docente, comparte el estándar de maduración con
el colega del otro colegio o del curso paralelo.
Cada maestrillo se atiene a su librillo.
Cada maestro es experto en su maestría, e ignorante del Biotipo Humano Estándar Natural, al cual
deben asemejar en conductas y criterio a sus alumnos. Es más, incluso muchos niegan la posibilidad
de que exista una filosofía antropológica o un Patrón Estereotipo Humano coincidente con su
Humanidad, porque consideran al significado de –humanidad- un artificio.
Diferencias han existido siempre a lo largo de la historia pero ninguna diferencia ha conseguido
establecer una normativa de educación unificada. Y si el amor es la fuerza que une, y en esa unión
se declara válido y la verdad es coincidente y por lo tanto une, y en esa unión se reconoce válida y
el bienestar beneficia y por lo tanto une, y en esa unión se experimenta válido, alguna razón debe
existir que justifique el orden y la unidad de los valores.
Cada porción explica al elefante desde el punto de vista de donde sele observa. El que está al lado
derecho ve la porción derecha del mismo. El que está frente al elefante ve la imagen frontal. El que
está detrás ve la imagen posterior. El de arriba ve la imagen superior, y cada uno de ellos defiende
su verdad como: ―la imagen –del- elefante‖. Ninguno de ellos conoce la totalidad del elefante
porque no salen de su ubicación, no lo ven por completo, pero todos creen en la parcialidad de su
fragmento de verdad, porque su verdad de la imagen es cierta, pero insuficiente para explicar la
totalidad del elefante. Eso es lo que ocurre en el sistema educativo actual, en el gobierno actual de
valores, en el concepto de familia, frente a la maduración del individuo, y lógicamente en el ámbito
de la ciencia y de las artes. Las porciones de los parciales y de los partidos no pueden demostrar lo
entero. Resulta extraño que, entre tanto postulado filosófico, científico, o religioso, no haya ni
siquiera uno, que oriente al individuo en la maduración de su Naturaleza Humana, y que no haya ni
un solo humano todavía, que pueda decirse: entero, natural, puro, e íntegro.
Hay familias cuya experiencia de respeto, confianza y unidad, no pueden ser garantizadas por
ninguno de sus integrantes o vecinos. Y la gente cuelga el ideal de su creación en el perchero de las
futuras generaciones sin darse cuenta de que ese ideal, es su legado heredado y su ideario cotidiano.
Idealizan su ideal sin idear su Idea. ¿Cómo se puede decir uno realizado, sin cumplir con el deber de
ser consecuente con la idea originaria, si esa idea del origen a realizar se desconoce?
Cuando se le dice al joven: ―¡Debes ser incondicional para madurar, deja a un lado tu egoísmo
adolescente, sé más sociable, más prudente, firme y templado con los otros!‖ El adolescente,
generalmente contesta un –si-, por la boca y un –no- en su convicción y conducta, pero la vida lo
motiva a enamorarse y tener hijos y estos, motivan a responder voluntariamente a sus necesidades.
Y, sin darse cuenta, luego de algún tiempo, el joven, que dejó de serlo, se hizo incondicional,
sociable y templado. Las normas Naturales, por fortuna, regulan lo que el individuo no puede, no
quiere o no sabe regular. En el conocimiento no hay lugar para la casualidad.
Este ensayo, es un estudio minucioso de las razones y funciones características de la especie
humana, en el que examino la composición de los pilares que sostienen la regulación y finalidad de
sus normas. El descubrimiento de los fundamentos del orden, motiva al estudiante en la
investigación y análisis de sus propias facultades. Reconocer los principios que soportan, tanto a
las infraestructuras, como a las superestructuras de la naturaleza, facilita el reconocimiento de la
posición, función y finalidad humana, así como del orden Natural y de su composición.
Los enemigos de la virtud, del conocimiento y de la sensibilidad son el exceso y la insuficiencia;
exceso y defecto que diría Aristóteles. Por carencia o por imposición se originan los trastornos.
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 7
8. Teoría de la Educación Martín Soria
Tanto el uno, como el otro, son extremos de la moderación del juicio justo, es decir, fuera de la
justicia o ―ilegales‖. Analizando los fundamentos y procesos de la creación, llegaremos a la
conclusión, de que dichos extremos son controlables, y de su dominio, se derivan los fundamentos
necesarios para el mejoramiento de la actividad humana. La actividad es consecuencia de la actitud
y esta, es predeterminada por la libertad y preferencias de la Conciencia Humana.
La libertad elige siempre lo preferido, lo conveniente y lo urgente. Lo urgente conveniente que se
prefiere, vale. Y por ser válido se pretende y se disfruta en su conquista. De donde se deduce que el
ser humano, por ser libre busca lo que vale, pero el valor contiene dos aspectos: función y
fundamento. La función beneficia a uno y el fundamento beneficia a todos. Cuando se elige el
beneficio de todo, uno se beneficia en su inclusión. Cuando se elige el beneficio de uno se excluye
al resto y ese resto priva de la posibilidad de agradecer al que se elige por sobre el resto. El
agradecimiento alegra a quien voluntariamente responde al beneficio compartido. Quien se prefiere
por sobre la totalidad, reduce el beneficio y lo limita al fragmento de su elección, por eso, se debe
elegir siempre lo que conviene al desarrollo de la Naturaleza Humana.
He visto demasiadas diferencias, excesivas luchas, odios y rencores, hartos opuestos, y bastantes
excesos dolorosamente injustos. Y ninguno de estos daños me ofrece estabilidad, confianza ni
motivación para seguir indagando en ellos a la espera de alguna solución diferente del error que
manifiestan. En los excesos o insuficiencias no se encuentra la moderación; en lo particular o lo
falso, no se encuentra justicia. En la verticalidad, no existen la derecha o la izquierda, en la
horizontalidad, no hay arriba ni abajo. Tampoco hay unidad en el estudio de los opuestos o en el
análisis de lo diferente. Las diferencias solo son particularidades de la totalidad en la cual se
insertan. La variabilidad es exclusivamente una modificación de la constante actividad que por su
condición de variar es inestable, e inconmensurable, condiciones estas, que hacen que sus razones
sean en todo caso fragmentarias. Es ilógico pensar que vamos a descubrir el orden reclamando,
acusando y justificando las desigualdades de cada objeto desordenado. Valor es la cualidad que
satisface y ni el reclamo, ni la acusación, ni el rechazo resuelven, ni realizan, por lo tanto, no
satisfacen. Reclamar, acusar o rechazar sin ofrecer soluciones, es opuesto al valor. Quien se opone
al valor es un cobarde. Aprender es siempre un regalo, aun cuando el dolor sea tu maestro.
En esencia, todo participa de lo mismo: del valor y su energía. Todo es valor y energía. Valor es la
cualidad que motiva al actuar y el poder activo que construye es el movimiento derivado de la
energía. La energía y el valor existen en todo, desde el afecto y el instinto humano, pasando por la
naturaleza directiva inherente y la morfología de los cuerpos de las especies naturales, hasta la
dualidad entre la orientación y velocidad atómica. Por eso, he dejado a un lado la violenta rebeldía
adolescente del luchador progresista liberal y he dedicado más tiempo a la tranquila reflexión en el
análisis de similitudes, parecido, e igualdades que sostienen el progreso de la revolución orbital
cíclica, sostenida y permanente. Declarar las diferencias no establece conocimiento alguno, solo
determina -lo extraño- a quien aprecia, o lo diferente a lo que se podría reconocer y que por ser
diferente no se re-conoce. Lo diferente solo aumenta las diferencias, no define los fundamentos.
Los procesos de desarrollo de cada especie son necesariamente diferentes en sus particularidades,
pero totalmente similares en los fundamentos de la finalidad de su Naturaleza Ordenada. Todas
colaboran en y participan del bien común cósmico. Del estudio de las constantes semejanzas, o
igualdades, se desprenden los fundamentos de este ensayo, que, luego de reconocer dichos patrones,
los coliga con las facultades humanas en la eficacia de su desarrollo.
Educar es hacer al otro semejante al instructor, en sensibilidad, conocimiento, o conducta. Hacerlo
similar implica tiempo y condiciones. Oficio es el dominio de una técnica y técnica es un hábito
repetido. Para educar es necesario de disciplina en la maduración del hábito al desarrollo, durante
un tiempo. Ese tiempo facilita el establecimiento de estructuras de motivación, interés o deseo por
el entendimiento. El máximo motivador, lo más interesante y lo más atractivo de toda la creación, a
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 8
9. Teoría de la Educación Martín Soria
la sensibilidad, inteligencia y voluntad humana, es el descubrimiento de su propia Naturaleza. Al
descubrir la caracterización de la Naturaleza se descubren el origen, la identidad y la finalidad de
todos y cada uno de los individuos de que está compuesta. Y sobre esa base, podemos iniciar el
camino de la reconstrucción de una sociedad humana ordenada, educada, justa y adecuada.
¿Por qué razón es necesario descubrir y analizar los principios de la creación para efectuar una
mejor disciplina moral-artístico-educativa?
El arte y la educación son procesos de consecución de logros superiores. El artista idealiza y
propone proyectos admirables y la educación, ha de complementar la excelencia de los procesos de
desarrollo de las ideas, para alcanzar el logro de trabajos, que por su excelencia y hermosura,
resulten admirables. Lo máximo en excelencia y perfección existe realizado ya en la Naturaleza.
Del estudio de la misma, descubriremos normas que establecen formas de pensamiento, que por su
equilibrio y proporciones, motivan a imitar sus fundamentos. La Naturaleza es en sí misma líder
del bien supremo, maestro de la verdad suprema y padre originario de la unidad suprema en todas
sus condiciones. De ella podemos aprender el máximo de conocimiento, el máximo de habilidades y
el máximo de atractivo. Esta es la razón que justifica el estudio de la misma. La Naturaleza es
neutra o neutral, ni es masculina ni femenina, porque contiene a ambas; ni es únicamente causa ni
consecuencias, porque contiene a ambas, ni es exclusivamente reglamento ni regulado porque es
ambos. Por ser en el hombre y en su humanidad es necesario reconocerla y hacerla participe de
nuestro progreso humano, porque, cada humano se realiza en la humanidad que desarrolla.
El ambiente contemporáneo deposita el predominio en la orientación educativa sobre la obsesión
del perfeccionamiento de los oficios y el conocimiento técnico, sin advertir que, técnica es un
hábito repetido, y en la repetición disciplinada de un hábito, es preciso el uso de prudencia,
templanza y firmeza, virtudes estas, sin el dominio de las cuales, es imposible la consecución de un
oficio perfecto. Esta es la razón por la que algunos alumnos carecen de hábitos de estudio, porque
se les exponen los contenidos pero se descuida la disciplina del desarrollo de los hábitos. Los
educadores, en ocasiones, presentan, exponen y explican tecnicismos, a quienes carecen del
dominio de las virtudes. Por eso, es nuestro deber asumir la responsabilidad de descubrir los
fundamentos de la motivación, del raciocinio y de lo necesario, para orientar en ello el ejercicio de
la prudencia, firmeza y templanza, imprescindibles para el desarrollo responsable de los oficios.
Estos fundamentos no se encuentran en opiniones fraudulentas ofrecidas por opinólogos, ni en
excéntricas teorías justificadas por la fama de superfluos ―científicos‖ de la farándula, se hallan
contenidas en el interior de la naturaleza Humana y se deducen del comportamiento de sus Normas
Naturales. Ser científico no certifica la justicia del juez que determina un juicio. La justicia del juez
la determina el juicio justo. La profesión no garantiza la verdad, ser científico es una profesión.
¿Existen o no las Normas?
Ante la interrogante de si existen o no, Normas Naturales que determinen la conducta legítima
humana, (lo que aparentemente privaría de libertad al ser humano) deberíamos iniciar ese estudio,
determinando si la humanidad es necesaria o no. Y si es necesaria, ¿para qué? A esta interrogante
solo satisface una respuesta fundamental. Podríamos entrar en la polémica discusión sobre si la
humanidad es o no necesaria para la naturaleza en su contribución biológica, pero de lo que no cabe
duda alguna, es que la creación entera, sin el humano que la valide, reconozca y aprecie, no tendría
ningún valor, ningún sentido y ninguna finalidad. Y si declaramos al valor como base esencial de
todo acto, porque siempre y en todo se pretende y se disfruta, ¿de qué serviría un cosmos creado sin
poder ser apreciado?
Hagámonos las siguientes preguntas y dejemos las respuestas necias o majaderas a quienes esperen
ser reconocidos y declarados: ―estúpidos‖. ¿Qué creación hace un creador que no espere sea
apreciada? ¿Quién, aparte del autor, podría valorarlo en la totalidad de su creación? y de crear el
cosmos ¿Cuál es esa necesidad que motiva a realizar algo tan inmenso para que una sola especie sea
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 9
10. Teoría de la Educación Martín Soria
capaz de valorarlo? Y ¿Qué cosa o qué individuo y de qué especie satisface al Origen Creador del
cosmos? Si toda causa es a/en su efecto, el efecto debe reconocerse en y reconocer a su Causa. El
efecto de una causa es igual a la propuesta necesitada por esta, luego, causa y efecto son iguales en
la necesidad. ¿Cuál es la necesidad de cualquier deber? No es otra que unirse en la satisfacción del
mismo. La Naturaleza Humana hizo al Humano para que este se una con ella en su Naturaleza.
Sabemos que todo creador se siente pleno en el establecimiento de la completa reciprocidad entre su
obra y él. En este caso, exige reciprocidad emocional afectiva, porque el origen del cosmos captó la
necesidad de realizarlo; reciprocidad en el ajuste con la justicia, porque justificó la razón de
realizarlo y todo acto se justifica necesario en su razón de ser. Y reciprocidad en la responsabilidad
conductual, porque cumplió con el deber de realizarlo. El único ser capaz de responder
completamente a esas cualidades de ser libre, autónomo y responsable en la creación, es el ser
humano, cuyos recursos emocionales, intelectuales y motivacionales lo califican capaz de apreciar y
reconocer en su madura condición, a la condición propia similar del Origen Creador del Cosmos.
Y, el Creador… ¿Qué es o quién fue? Estudiémoslo un momento.
El Creador al que nos referimos, creó todas las especies, hizo multitud de diferencias, por, o para lo
cual, dispuso de numerosas posibilidades de opción (alternativas). Si pudo optar, debió tener
capacidad de opción a lo que se denomina libertad. De donde se deduce, que el Creador es un ―ser‖
libre. Cuando digo –ser- no me refiero a un cuerpo morfológicamente determinado por los límites
de una determinada proporción, sino a existencia, a ser de estar.El origen de lo creado es una
existencia que está en el inicio del proceso de desarrollo o creación de todo acto. El origen está y
por lo tanto es, y todo lo que es, es ser. Espero haberlo aclarado.
Pero, su libertad es madura en la elección de alternativas válidas siempre y para todo lo creado,
porque todo lo elegido por El para existir, (el origen existente) existe en conectividad armónica con
el orden pleno, justo y adecuado de la totalidad. Si, elige en función de un orden sobre el cual se
ajustan sus creaciones en un perfecto intercambio de dar y responder a la unidad de todo, entonces,
el Creador es justo en su juicio y quien es voluntariamente justo en su juicio se denomina
autónomo, (auto=uno mismo; nomo= ley) por lo visto, el Creador del Universo es -algo- autónomo
en su justicia (una existencia ajustada a su razón de ser necesaria).
De ser justo en su justicia, con respecto al orden de la conectividad en la unidad inter especie de la
totalidad, ha de disponer de una voluntad motivada hacia el cumplimiento del máximo deber justo.
A esa voluntad determinada a cumplir el compromiso del deber necesario, o máximo deber justo, se
le denomina responsabilidad. Ese –algo- Creador (existencia originaria) responde siempre en todo
con respeto al cumplimiento de cada deber necesario para el establecimiento de la conectividad en
la unidad inter especie del ecosistema. El Origen creador es el máximo economista, científico y
religioso en si mismo. El máximo ingeniero, físico y matemático. Además demuestra que cumple
las necesidades globales a cabalidad sin dejar ninguna por resolver, esa –responsabilidad-
aparentemente intransigente, es la que la Naturaleza de la Unidad espera que cada humano
reconozca y se establezca voluntariamente en ella, porconsiderarla necesaria de cumplir para
realizarse libre, autónomo y responsable.
El Creador necesita la unidad completa interconectiva entre los aspectos fisiológicos o biológicos y
los aspectos emocionales, intelectuales y vinculares de su creación. Para unir los fundamentos
biológicos con los fundamentos psicológicos creó a la especie humana, única capaz de sentir las
máximas necesidades de la globalidad o totalidad de las especies, capaz de reconocer el juicio justo
de la naturaleza y capaz de realizar todo lo necesario para el establecimiento de la conectividad en
la unidad inter especie. Esa es la razón que declara necesaria a la naturaleza humana. Ese –algo-
Creador del cosmos, es por deducción lógica similar a su creación. Decimos que esta es una
deducción lógica, porque es derivada del principio declarado válido por la ciencia de los científicos,
que nos declara, que ―todo efecto es a su causa, así como la causa contiene aspectos del efecto‖.
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 10
11. Teoría de la Educación Martín Soria
Según esto, el –algo- Creador del cosmos, debería ser en consecuencia, similar a las condiciones
sensibles, inteligentes y responsables humanas. Algo sensible, inteligente y responsable, no se
considera ―algo‖, se le considera: alguien.
El creador de algo puede ser otro algo, pero el creador de alguien semejante es sólo uno, sus padres.
Una máquina puede repetir piezas, pero no puede crear otra máquina igual a ella. Existe además
otra gran diferencia entre los padres de cualquier especie natural y los padres del ser humano,
porque los padres de cualquier especie reproducen a otro individuo similar pero los padres humanos
reproducen a otro humano semejante, con la libertad de convertirse en similar.
El humano se hace humano voluntariamente porque ha sido creado responsable, es decir para que
responda y respete su potencial de forma libre y autónoma. De no hacerse similar al padre de forma
libre, autónoma y responsable, no podemos decir que es semejante. (Semejante es aquello que se hace
voluntariamente similar)
La historia de la humanidad tuvo un comienzo embarazoso para su descendencia. La humanidad
perdió la circunstancia de madurar en el inicio de su historia. Perdió la posibilidad de realizarse
naturalmente en el cumplimiento de las Normas de la Naturaleza Humana. Por eso, la sensibilidad
de nuestros antepasados se vio mermada en la captación de las necesidades máximas; su intelecto se
confundió entre la variabilidad de los fragmentos defendidos válidos por el juicio de la razón de
cada individuo y su voluntad no respondió al cumplimiento de los máximos deberes humanos. Esa
condición de insuficiencia, incoherencia e ineficiencia ha sido transmitida y heredada por
generaciones, que han hecho el máximo de su esfuerzo en descubrir las razones que originaron los
errores de ese inicio embarazosamente desgraciado y que por sumar tantos fragmentos ha sido tan
difícil de desfragmentar. Por esa razón, la sensibilidad humana, desde que dispone del derecho a
manifestarse y a la libertad de expresión, exige el respeto a los derechos humanos declarados en la
Carta Magna o en la Revolución Francesa. Derechos estos, que a pesar de no ser los que responden
al cumplimiento del máximo deber humano, aproximan, estimulan y motivan a su descubrimiento.
El encuentro con las Normas de la Naturaleza produce una sensación similar a la del hijo del minero
que nació en el interior de una cantera oscura y creció en ella sin salir durante años de las negras
profundidades, donde los únicos colores que vio en los años de su crecimiento, fueron los grises
derivados de las llamas de carburo y de las linternas de gas. ¿Podéis imaginar la sensación de ese
joven, que después de estar varios años bajo tierra, aislado del mundo iluminado, viviendo entre los
estrechos límites de la cueva y en el vacío de las profundidades, sale y se encuentra libre en la
extensión del paisaje pre cordillerano alumbrado por la intensa luz del sol?
Imaginaos un ciego que habiendo vivido mucho tiempo en su ciudad, reconoce las calles por los
sonidos y texturas de las paredes, y a los habitantes de la ciudad por el sonido de su caminar, o por
el aliento y timbre de sus voces. Incluso tiene una vaga idea de los colores por los nombres que le
dicen y con los que asocia una determinada experiencia, pero no tiene una comprensión de las
distancias, ni del volumen, no alcanza a comprender la dimensión 3D porque nunca ha visto espacio
alguno. Su noción del tiempo se basa en las rutinas porque no ve luz alguna que le permita
identificar espacios. Imaginaos la sensación de esta persona que ha existido en tinieblas, sin
distancias ni colores, sin formas ni volúmenes, en un mundo de artificios creados por suposiciones
propias, imaginaos la sensación que tuvo el día que le operaron y recuperó la visión.
Cuando se habla de la –naturaleza- de las cosas, se incluye en el significado del término, a la
totalidad de la cosa. La totalidad implica su origen, identidad y propósito. Se incluye en el
significado de naturaleza a la finalidad, el proceso y estructuras de consecución, así como la
naturaleza de su existir. Lógicamente en la naturaleza de cualquier cosa, existen contenidas, la
necesidad que justifica su existencia y el derecho al beneficio de su realización, puesto que toda
necesidad es motivada por el beneficio del derecho a disfrutarla, y todo derecho a disfrutar de un
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 11
12. Teoría de la Educación Martín Soria
beneficio, es garantizado por la necesidad de conseguirlo, más, el cumplimiento del deber ser
conseguido. En esta norma existe contenida la razón de existir, a lo que denominamos Naturaleza.
Lo Natural se pretende y se propone por dictamen natural. Oponerse a ese dictamen es obrar contra
la Norma de la Naturaleza y consecuentemente ese obrar, se declara errático en sí mismo.
La Naturaleza obliga al cumplimiento del deber ser Natural, no por imposición caprichosa de un
criterio propuesto por el arbitrio de una proposición teórica al azar, sino por la lícita razón que
justifica la existencia, acción y multiplicación de la misma Naturaleza. Eso es dictamen.
La Naturaleza Humana se debe a la razón que la justifica necesaria. Esa razón no puede ser un
eterno misterio. Los misterios solo se justifican en quienes los ignoran. Todo lo ignorado es ajeno al
intelecto, pero no por ser ignorado pierde su condición de poder ser reconocido. Intelecto es la
capacidad sensible que nos permite reconocer las razones que justifican una realidad. Porque somos
una realidad existente, podemos reconocer la existencia de toda realidad, en eso somos recíprocos.
Y eso es lo que nos permite reconocer las razones de lo existente. No existe realidad alguna
injustificada o injustificable. Existen, eso si, individuos cuyos intelectos ignoran la razón de dicha
realidad, hasta que la descubren y se educan en ello. Lo mismo ocurre con la Naturaleza Humana,
que es una realidad existente, pero que por considerarse un misterio indescifrable, no se indaga en
su descubrimiento. Todo lo ignorado es complejo, confuso y desordenado hasta que se descubre. Es
complejo porque caben todas las posibilidades de identidad, origen y propósito. Puede ser cualquier
cosa, creada en cualquier momento o lugar y por cualquier origen y sirve para tantas cosas como le
queramos imponer, porque no se sabe para qué sirve. Por el contrario, la razón de un origen es solo
una, la razón de una identidad es solo una y la razón de un propósito es solo una.
Todo acto se origina una sola vez en un solo momento y en un solo lugar, por una sola causa. Su
identidad es una sola y su finalidad es sola y exclusivamente la del cumplimiento de su razón de ser.
Una sola. El misterio se sostiene en una sola razón: ser ignorado. Cuando se descubre, se elimina.
El ser humano busca la definición de su existencia, la metodología de un correcto actuar y el
proceso reproductor del bien supremo que lo califique, certifique y garantice Verdadero.
Cuando el ser humano encuentre su verdadera condición de ser autentico en la humanidad de su
naturaleza, habrá descubierto su propia realidad y la realidad del existir. En ese momento se acabará
su evolución, porque, ¿qué sentido tiene la evolución de lo cumplido? ¿Qué sentido tiene el
desarrollo de lo ya desarrollado? La persona que descubra el manual de las capacidades humanas y
las madure, será el modelo de normalización humana madura y frente a ese modelo de autenticidad
se integrarán todos los descendientes de esa función humana verdadera.
El descubridor de la naturaleza humana, adquiere la condición de ser un verdadero iluminado,
porque no existe mayor necesidad en el universo ni mayor deber científico, filosófico o religioso
que el de religar al hombre con su naturaleza y el que descubra y explique cual es esa naturaleza
humana, lógicamente adquiere el beneficio de su descubrimiento. Habrá quien lo descubra y habrá
también quienes se realicen en el cumplimiento de ese manual humano. Descubrirlo es importante,
pero lo más importante vendrá cuando la mayoría de los humanos estén cumpliendo el manual.
La vida no es trabajo ni oficio alguno. Vida es el conjunto de fuerzas que permiten la consecución
de un propósito; sin ese propósito establecido, la vida no tiene sentido. La vida es ser feliz y no se
puede ser feliz sin darse o sin responderse.
La felicidad no es singular o de uno solo, es dual, es de dos: del que espera y logra ser, y del que se
lo proporciona. Feliz es quien consigue la sensación de plenitud en el sentirse sano, en el sentirse
poderoso, en el sentirse inteligente y en el sentirse valorado. Para sentirse sano ha de recibir los
elementos saludables que se justifican en su salud; para sentirse poderoso ha de recibir los estímulos
suficientes para impulsarse a la conquista y conquistarla. Para sentirse inteligente ha de reconocer la
razón del juicio que lo justifica lícito. Y para sentirse valorado, ha de disponer de los valores que lo
proporcionan y ameritan ser valorado.
El feliz, inteligente y maduro, se hace en el otro y en lo otro, quien comprenda esto, progresará en
la justificación de la unidad.
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 12
13. Teoría de la Educación Martín Soria
(Todo se comparte en el equilibrio vincular)
INDICADORES ACTUALES DEL ÉXITO
Éxito es una palabra latina exitus (―salida‖) generalmente utilizada para la connotación de
―sobresalir‖. Salir del anonimato o del proceso, con la conquista bajo el brazo. En la actualidad el
―éxito‖ se mide en base a resultados económicos o profesionales. Económicos,por cantidades de
dinero y profesionales en cantidades de logros. En ambos casos se establece un -poder-. Éxito y
poder van siempre de la mano. El éxito de una nación se mide en su PIB que es la cantidad de
dinero que genera su economía, así como el éxito de una determinada empresa, se mide en términos
de Beneficio Financiero. Incluso, a las familias actuales se les asigna una clase A, B, C…
dependiendo de sus ingresos, o recursos financieros. Esto es un hecho muy común y como es
mayoritariamente compartido, se ha transformado en verdad, sin darnos cuenta de su falacia.
Fíjense un instante en ustedes, en sus apariencias. ¿No dirían que quien mejor vestido esté o quien
tenga el mejor auto o celular, vive mejor que usted? ¿Cuántas veces no acusamos a nuestros padres
por no disponer de lo que tiene el otro, o a nuestros maridos por sus escasos sueldos, como si el
dinero fuese el indicador del éxito?
Éxito y felicidad son dos sinónimos con características propias. Al éxito se le asume una conquista
material y a la felicidad una conquista espiritual. La diferencia ente el ―capital humano‖ y el
―animal humano‖ es solo una: el valor, los valores. El éxito se asocia con la realización profesional
y la felicidad se asocia con disfrutar de lo conseguido. Cuando se prioriza el éxito por sobe la
felicidad, el exitoso se frustra, y cuando se prioriza la felicidad por sobre el éxito, la continuidad se
descontinúa. Son complementos,pero uno es preferente y otro preferido.
Preferir la felicidad de quienes construyen el éxito es bueno para todos, a eso se le llama bien
común y cuando es ecológico se le llama bien supremo. Y preferir el éxito por sobre la felicidad de
quienes lo construyen se le denomina ambición y corrupción. Por lo visto, la naturaleza de las
relaciones humanas, nos obliga a buscar el bien común por sobre la ambiciosa pretensión del éxito.
Cuando los indicadores del éxito son: el dinero, el poder, o la fuerza, la naturaleza sensible de las
personas se ve frustrada en su esperanza vincular, porque se entienden las diferencias por cantidad.
Cuando los indicadores del éxito son: el vínculo, la verdad, el juicio justo, la razón, la cooperación,
la solidaridad, la transparencia y el afecto, la naturaleza sensible de las personas se ve satisfecha en
su esperanza de unidad, porque no existen diferencias.
Estamos abriendo las puertas a una nueva generación que esperalibertad, justicia y éxito. Por lo
mismo, debemos educar en el reconocimiento y cumplimiento de los deberes que garantizan los
derechos exigidos; en el reconocimiento y cumplimiento de las máximas alternativas válidas que
garanticen la verdadera libertad, y en el reconocimiento y cumplimiento, de los valores máximos
sociales y ecológicos que posibiliten el establecimiento de una economía sustentable que garantice
la protección de las necesidades básicas de las personas.
Existen ciertas áreas del desarrollo que debemos custodiar: la dignidad humana y la justicia social,
la transparencia y participación democrática en la toma de decisiones importantes, la solidaridad
filantrópica o altruista y la sostenibilidad ecológica. Estas áreas de convivencia, solo pueden
mejorar en el ejercicio del máximo de sus respectivos desarrollos, y esa es la labor del arte, de la
ciencia y de la sociedad. La sociedad espera el bien supremo que incluya a cada individuo en él.
El arte es un medio para la conquista de la felicidad porque busca y espera lo supremo, lo justo y lo
máximo en su desarrollo. Las artes buscan maximizar el bien común. Esa debe ser la finalidad de
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 13
14. Teoría de la Educación Martín Soria
cualquier proyecto educativo y debe en complemento, ser el máximo del interés, del aprendiz a ser
feliz.
ORDEN
Orden es la estructura que establece la reciproca unidad entre una causa y consecuencia mediante la
unidad sujeto objeto.
La búsqueda de un nuevo orden social, educativo y económico ha sido siempre una constante en la
historia de la humanidad, que se ha mantenido a la espera del encuentro por una sola y sencilla
razón, la ignorancia del significado ―orden‖. Busquen en los diccionarios el significado de este
concepto y verán la poca claridad que se ofrece al respecto.
Orden es un estado situación, en donde se ligan los aspectos de pretensión y beneficio junto con los
aspectos de creador y objeto creado. En ese estado de concordia, entre el creador que crea lo
necesario y se siente satisfecho, se establecen el orden binario dual vertical y horizontal que permite
tres posibles comparaciones en cantidad: mayor, igual o menor, dentro de su reciprocidad ordenada.
Y el orden del conjunto o unidad trinitaria: centro y dos extremos, que permite la extensión en
calidad emocional afectiva, en calidad de ajuste a la justicia y en calidad de la eficiencia y extensión
del ejercicio del deber.
Todo orden existe siempre y cuando sea este evaluado. Sin alguien que aprecie y reconozca al
orden, el orden no se establece aunque en potencia exista. El drama de la imposibilidad del
encuentro con el orden y su definición, ha sido causado por la incapacidad humana en apreciar la
esencia fundamental del orden. Se pensó que el orden era la demostración de una secuencia, y lo es,
porque la estructura que establece la reciproca unidad entre una causa y consecuencia mediante la
unidad sujeto objeto, se mantiene y repite una y otra vez, pero la definición del orden no queda
satisfecha con el mero alineamiento horizontal. También se pensó en un tipo de mantenimiento
cósmico, al que se le denominó –orden- cósmico, y existe el orden cósmico, pero esa definición
tampoco satisface la significación completa del orden. Por otro lado, se habló de los órdenes
religiosos, también haciendo referencia a sistemas lineales repetidos o jerarquías de autoridad, pero
en ningún caso se llegó a comprender el completo significado del orden y esa es la razón por la que
el nuevo orden social, educativo y económico esperado, ha permanecido esperado por generaciones.
Ahora disponemos del significado oculto del orden y decimos que: ―orden, es la estructura que
establece la reciproca unidad entre una causa y consecuencia mediante la unidad sujeto objeto‖.
Por lo tanto, podemos iniciar el establecimiento del nuevo orden social, educativo y económico.
Una sociedad en orden, de acuerdo a nuestra significación del orden, sería aquella que satisface su
causal propositiva originaria, mediante la satisfacción de cada uno de los miembros de que se
compone.
Una educación en orden, de acuerdo con nuestra significación del orden, sería aquella, en la que se
reconoce la justificación de su causal propositiva originaria, mediante el reconocimiento de cada
uno de los miembros de que se compone.
Una economía en orden, de acuerdo con nuestra significación del orden, sería aquella en la que se
dominan los procesos de construcción de la realización de la causal propositiva originaria, mediante
el dominio de cada uno de los miembros de que se compone.
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 14
15. Teoría de la Educación Martín Soria
Dominio, conocimiento y satisfacción, son tres hermanos gemelos que deben ir siempre de la mano
sin soltarse. El ejercicio del dominio de los extremos, debe permitir el reconocimiento del juicio
justo y de este reconocimiento y cumplimiento de lo reconocido necesario, se satisface el individuo.
Este es el mecanismo del orden que en el resto de las especies opera de forma automática mediante
el rigor del instinto, pero, que en el caso de la especie humana, dispone de la libertad de respetar y
responder voluntariamente a ese rigor o, de ignorarlo e ignorarse en la ignorancia del mismo.
La libertad es una capacidad emplazada en el orden natural para ordenar al orden de manera
voluntaria, autónoma y responsable, de ese modo, se hace cooperativa, correspondiente y
correlativa, en la recíproca interacción del individuo con su Naturaleza.
La capacidad de optar, es solo el potencial de una posibilidad; pero la elección, determina el éxito o
fracaso de la opción, dependiendo de si esta, es o no, acertada, adecuada o satisfactoria. Cuando es
satisfactoria plenamente, es la que se ajusta a la necesidad y por lo mismo, es acertada y si satisface
y es justa, ha de ser buena y por lo tanto, adecuada. La elección adecuada no deja lugar a
casualidades, es siempre la que se ajusta a una necesidad y se ajusta por ser esta la razón que la
justifica necesaria, no por ser casualmente necesaria, sino, por ser causalmente necesaria.
Existen dos tipos de libertad, la libertad del liberto y la del libertino. La libertad del liberto excluye
de reclamos, acusaciones o rechazos. La libertad del libertino incluye reclamos, acusación y
rechazos.
La Libertad del liberto responsable que cumple el deber máximo aceptable, justo y necesario
libera.Lalibertad del libertino esclaviza en los errores que debe indemnizar.
La elección de lo preferido, siempre excluye a un rechazado, mientras que la elección de lo
preferente, por ser incluyente, porque a todos los incluye y si es preponderante es por todos
necesitado.Si es preferente, se debe hacer y ese deber, beneficia a la totalidad de los necesitados, no
declara a nadie rechazado, porque su cumplimiento beneficia a todos. Al elegir lo preferido y
excluir del beneficio del acto al resto, ese individuo se hace esclavo de su deficiencia y recibirá
reclamos, acusaciones y el rechazo de los no beneficiados por su elección, mientras que en el caso
del que eligió lo preferente, lo más importante para la totalidad, lo preponderante que por beneficiar
al todo no perjudicó a ninguno, se libera de ser reclamado, acusado o rechazado.
Esta norma de preferencias globales por sobre las individuales es la que estimula al orden.
En la actualidad el hombre es enclavo de sus carencias. Esto se ve con claridad entre las personas
que decidieron hacer de sus vidas una carrera privada o quienes decidieron hacer una carera pública.
Lógicamente si los que decidieron la carrera pública no pecaran de corruptos y se entregaran
voluntariamente al beneficio global, disfrutarían de la cooperación de la totalidad del beneficio,
pero desgraciadamente aún somos esclavos de nuestras carencias y decidimos el beneficio preferido
en lugar del preferente.
Si observamos los dolores y sufrimientos de la humanidad, y los analizamos llegaremos a la
conclusión de que son todos productos de alguna carencia. Incluso los excesos son provocados por
la carencia de dominio.
El humano se hace esclavo de sus carencias afectivas, de sus carencias intelectuales y de sus
carencias de dominio sobre las estructuras y los procesos y de consecución.
Se hace esclavo de lo que no tiene al esperarlo sin estar seguro de contenerlo.
Carece de prudencia, firmeza y templanza y sufre las consecuencias por no saber que las posee y
por no responsabilizarse en madurarlas. Carece de sensibilidad, justicia y determinación y sufre las
consecuencias por no saber que las posee y por no responsabilizarse en madurarlas. Carece del
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 15
16. Teoría de la Educación Martín Soria
dominio sobre los extremos emocionales, intelectuales y motivacionales y sufre las consecuencias
por no saber que de él depende dominarlos y para eso ha de responsabilizarse en madurarlo.Carece
del dominio sobre los instintos de protección, conservación y reproductor y sufre las consecuencias
por no saber que de él depende dominarlos y para eso ha de responsabilizarse en madurarlo.
El inmaduro se hace esclavo de sus carencias y sufre las consecuencias de sus insuficiencias.
El inmaduro se daña y lastima en el dolor de sus carencias. Incluso se flagela en su desconsuelo.
De la carencia de dominio sobre el instinto reproductor surgen los daños y dolores sicológicos de
las incompetencias, los traumas, y heridas emocionales cuyas consecuencias se somatizan en
trastornos de sueño, alimentación o conductas. La sensación de un embarazo prematuro trastorna la
estabilidad emocional de dos familias completas.
De la carencia de dominio sobre el instinto de mantenimiento surgen los apetitos extremos o la falta
extrema de apetito, que en sus extremos se transforman respectivamente en bulimia o anorexia.
Del descontrol y falta de dominio del hábito regular a conciliar el sueño, surgen trastornos como el
insomnio, la hipersomnia, que derivan en somatizaciones como la fibromialgia, mononucleosis,
sonambulismo, incluso irritabilidad, dolores de cabeza etc.
Del descontrol y carencia de dominio sobre el instinto de protección surgen los temores, las
ansiedades y angustias por no asumir los riesgos. En sus extremos, esos miedos son transformados
en fobias o pánicos, como la claustrofobia, la entomofobia, la xenofobia, el pánico escénico etc.
La carencia de control y dominio sobre el celo extremo emocional, produce desconfianza y rechazo
entre personas, incluso odios permanentes o el impedimento para reconciliarse.
La carencia de control y dominio sobre el celo intelectual, produce inseguridad y desajustes que
motivan el rechazo del conocimiento ofrecido o recibido. Ese rechazo agrede a quien lo ofrece y
este declara falso, o ignorante a quien lo entrega y por lo mismo, se le ignora.
La carencia de control y dominio sobre el celo motivacional, o agrede en su extremo violento o en
lo irresuelto o inconcluso declara su insuficiencia.
En todos estos casos la carencia lastima y se transforma en dolor. Y en todos estos casos la actitud
fue elegida libremente, pero no podemos declarar culpable de estos dolores y sufrimientos a la
libertad, sino a la elección. La responsable de nuestra esclavitud y dependencia de nuestras
carencias no es la libertad, sino la falsa elección, la elección de lo incorrecto, lo desajustado, lo
insuficiente y eso es siempre y en todo caso aquello que se declara preferido para un fragmento por
sobre aquello que se declara preferente por el deber de resolver, solucionar o satisfacer a la máxima
necesidad válida para el todo. Bajo este análisis podemos deducir que la verdadera libertad es la
capacidad de realizar el bien común, o mejor dicho, el Bien Supremo. Consecuentemente la
elección, verdaderamente libre es la opción por el cumplimiento del máximo deber necesario.
El humano promedio contemporáneo elige lo que desea, o como vulgarmente se dice ―elige lo que
le da la gana‖. Lo que le da la gana lo desea sin estar seguro o sin saber cómo lo debe conseguir y si
intuye como debe conseguirlo, en ocasiones le falta voluntad, determinación y firmeza. Otras veces
prefiere ponerse a disposición de las dependencias, del depender de la suerte, de las oportunidades,
de las posibilidades, o de la ayuda del tercero imaginario. De este modo, se hace esclavo de los
otros esperados de los que depende. En este caso se esclaviza de sus carencias.
El caso del que espera ser amado sin entregarse en atender, entender o estar atento a las necesidades
del ser amado y en sus carencias encuentra reclamos, acusaciones o rechazos, también es un esclavo
de su libertad preferida. Si en lugar de optar por elegir lo preferido hubiese optado por la elección
de lo preferente para el amor, se habría entregado a atender, entender y estar atento a las
necesidades del prójimo y en su satisfacción, se habría evitado del reclamo, la acusación o el
rechazo, siendo agradecido, por el otro, respetado y recibido en su agradecimiento.
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 16
17. Teoría de la Educación Martín Soria
Libertad es la capacidad de optar por lo que es siempre y para todo válido, en ese sentido coopera
en el ordenamiento de la totalidad.
LAS ARTES
La pérdida del orden en las artes, ha colaborado en la devaluación del orden moral y social.
La historia muestra el atractivo natural por lo bien hecho. ―Bien hecho‖ en este contexto, significa
eficiente, justo o ajustado y adecuado con lo necesario. De este significado se desprenden los
objetos admirables de la historia humana. El ejercicio máximo de la eficiencia, de la justicia y de la
supremacía de lo admirable, se denominó: arte, para distinguirlo o diferenciarlo de lo oficial u
oficioso, servil o utilitario. Para la producción utilitaria de objetos cotidianos se desarrollaron los
oficios como: carpintería, alfarería, albañilería, etc. Para ensalzar estos oficios con el aditivo
apreciativo de despertar el interés y admiración por los mismos, se produjo la depuración en la
elaboración metódica de los dominios técnicos profesionales. Al significado del ejercicio de
dominio de los oficios, se le atribuye el concepto de arte. Esta es la declaración histórica del arte.
Arte ha sido siempre sinónimo de excelencia, de supremacía, de lo admirable por parecer
inalcanzable.
La introducción en el mercado de la idea socialista de la igualdad, opuesta lógicamente a la de la
diferenciación de clases sociales, se introdujo en el orden de las artes, sin darse cuenta de que en el
ámbito de la calidad, no existe posibilidad alguna de restringir sus ambiciones e igualar a todos en
ella. La calidad de las personas, así como la calidad de sus oficios, no pueden ser igualitarias, si es
que se pretende el desarrollo de los mismos. ¿Cómo se puede lograr una mejor calidad de vida si se
dispone y dictamina que todos los objetos creados por todas las personas de una sociedad, deben ser
iguales en calidad? Las ideas socialistas de igualar a las personas y para ello darles la misma
posibilidad de entrar en escuelas técnicas avanzadas a los no avanzados, provocó el desorden del
orden existente en lo admirable, y la calidad, fue perdiendo su posición de preferente, pasando a
dejar paso a la admiración por la cantidad. Así surge el libro guines, en donde se promueven logros
de: las uñas más largas, el salto más largo, la persona más grande o más chica, más fuerte o más
débil etc. Las obras de arte pasaron de ser objetos de admiración en sus lugares de ubicación a ser
objetos de sorpresa por la cantidad de plata por la que se vendieron. La calidad de lo permanente,
fue suplantada por el confort de lo transitorio y reciclable.
Arte es el orden armónico que se establece entre creador y apreciador de un objeto que los introduce
en dicho orden. En las artes, desde que apareció el punto en el espacio, hasta las más complejas
declaraciones, o manifestaciones de su consecuente extensión, contienen órdenes temáticos
universales e individuales, emblemáticos o personales. Al ser propuesta, toda pretensión asume ser
originada en una necesidad fundamental universal, la necesidad humana por apreciar o por evaluar
para adquirir valor. Al mismo tiempo, esa pretensión es reconocida y decidida por una singularidad
individual llamada persona, por lo tanto es una pretensión personalizada en el individuo que la
declara necesaria. Esta dualidad universal e individual, al ser asumida por un individuo maduro, que
responde al máximo beneficio global, reconocería en esa máxima necesidad a ser satisfecha, al
objeto emblemático por ser representativo de todos los individuos de la sociedad. Y de ese modo lo
emblemático y personal se unirían en perfecta armonía con lo universal e individual, realizándose
así el máximo de valor propositivo.
Este valor temático contenido en toda proposición, no solo artística, sino también cotidiana, fue
eliminado por los socialistas, del sistema de valores y se encargaron de eliminar también con ello,
las tradiciones de los oficios artísticos. Por eso vemos que desaparecieron las grandes e
importantes academias de arte, como La Real Academia de San Fernando de Madrid. Y no
desaparecieron porque sus planteamientos no se ajustaran a necesidades sociales, porque tenemos la
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 17
18. Teoría de la Educación Martín Soria
evidencia de pintores como Antonio López, Isabel Quintanilla, Carmen Laffón, Odd Nerdrum, Ron
Muek y muchos otros, que siguen los oficios tradicionales academicistas, siendo contemporáneos.
Por lo tanto, la eliminación de las Academias no se debe a preferencias sociales, sino, a
determinaciones de un partido socialista, que con su propaganda de igualar al pobre con el rico, hizo
uso y abuso de ese concepto de igualdad para igualar la calidad y eso es algo contra natura.
En toda proposición existen manifiestas una idea y una imagen. La idea de una obra de arte se
compone mentalmente de imágenes ideadas con la pretensión de ser transformadas en objetos
sensoriales. Esta actividad se reconoce como orden compositivo. En la composición intervienen
tiempo, entre la concepción ideada y su imaginación definida y espacio entre las posiciones de
creador y objeto creado o, entre las posiciones de las particularidades de lo imaginado. Las
posiciones entre los objetos y sus diferencias deben ser acomodadas en función del orden
compositivo que unifica al creador con su obra y al espectador con su expectativa a ser satisfecha.
Sin establecer el orden en las funciones, ni la ubicación en sus respectivas posiciones de ideario e
imaginario, es imposible establecer la armónica relación que permita la sustentabilidad de la
continuidad creativa.
Este planteamiento del orden compositivo de las diferencias entre creador y apreciador o entre obra
y obrero, ha sido perseguido por los socialistas que esperan una lucha entre clases, para, de ese
modo, eliminar las posiciones de director y dirigido o de obra y obrero, transformando a cada
obrero, obra del socialismo, y a cada director en dirigido por los socialistas.
Las ideas imaginadas, se realizan generalmente con las extremidades. El movimiento de los brazos
o de las manos se define gráfico. Por gráfico entendemos al trazo realizado con la mano. En la
creación realizada con las manos se establece un orden gráfico. En ese orden existen dos aspectos a
considerar, el de la precisión y el de la destreza. El orden gráfico se caracteriza por la eficiencia y
dominio de los procesos de consecución de las formas, imágenes, volúmenes o significados ideados.
Al pretender la eliminación de los extremos económicos y sociales, el socialismo invadió con esa
legítima defensa, la libertad de los desarrollos impidiendo el mejoramiento de los dominios, y el
desarrollo de la eficiencia.
El orden tonal también existe en la producción de obras de arte. Las diferencias entre contrastes y
homogeneidad, o entre los altos y los bajos, existen y existirán siempre en la naturaleza creativa.
Siempre hay un primero y un último y un más que el otro y un menos que el otro por la sencilla
razón de nuestra unicidad. La idea es cómo armonizar a ambos para lograr el orden. Los órdenes
tonales se establecen cuando los altos consideran y respetan a los bajos y los bajos consideran y
respetan a los altos. Sobre esa base del respeto mutuo en la justicia de la Naturaleza del Orden, se
puede establecer el valor tonal entre los diferentes contrastes.
El socialismo admite el respeto entre las diferentes clases sociales, pero no reconoce la Justicia de la
Naturaleza del Orden. Para el socialismo, el orden es posterior a lo ordenado. Según los defensores
del socialismo, cuando el proletario gane la última batalla eliminando al empresario, surgirá el
orden social ideal y el proletario se transformará en mesías de la humanidad. Esta imposición del
egoísmo al servicio del estado egoísta no dio resultado ni en la URSS, ni en China que tuvo que
adoptar el sistema de valores capitalista, ni en Cuba que admite y legaliza el contrabando, ni en
ningún lugar donde el socialismo se implantó democrática o impositivamente. El proletario al
servicio del empresario que, de vez en cuando le sube el sueldo, o que si no se lo sube dispone de
libertad para buscar otro patrón, se encuentra en el socialismo, con un estado que lo ubica en la
posición de trabajador de una empresa estatal de donde no disfruta ni de vacaciones, porque todos
los obreros son iguales, ni de aumentos de sueldo porque todos los obreros son iguales, ni de
permiso para contraer matrimonio con quien quiera porque son piezas de una maquinaria estatal en
donde sus piezas no pueden cambiarse o viajar de un lado para otro. Ese es el verdadero logro de la
lucha de clases propuesta por el socialismo.
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 18
19. Teoría de la Educación Martín Soria
También existe el orden cromático en las propuestas pictóricas principalmente. Este orden, que en
pintura adquiere sentido en la diferenciación entre colores cálidos y fríos, socialmente es manifiesto
en las diferencias entre lo atractivo y repulsivo. Lo atractivo es generalmente agradable, mientras
que lo desagradable es repulsivo. Esta diferenciación no transforma a lo repulsivo en inválido para
todos, sino que lo reduce a ser por uno rechazado. Lo que uno rechaza puede ser recogido por otro.
Por lo tanto, lo rechazable no pierde su condición de seguir siendo valioso. De este modo
entendemos que tanto lo atractivo por ser agradable, como lo repulsivo por ser desagradable, son
aspectos de valor que proporcionan la unidad o rechazo respectivamente. Al rechazar a lo
desagradable lo calificamos ―malo‖. Malo es solo el término que designa aquello rechazado, pero el
término -malo- no corresponde a inservible, inútil, o inválido del objeto en sí. Solo corresponde a la
negativa enadquirir, de hacer uso o de evaluar dicho objeto. En otras palabras el término -malo-
esencialmente significa: ―no lo quiero, no me interesa o no me sirve‖.
La concepción del bien y del mal socialista tiene una finalidad peligrosa. El bien socialista es todo
aquello que beneficia al estado y el mal lo que se contrapone con el estado. Esta aparente lógica del
bienestar, cuando el estado es benefactor de la sociedad, es ideal, pero un estado compuesto por
inmaduros humanos ignorantes de la naturaleza humana es una mafia de corruptos y eso es lo que la
nomenclatura fue y sigue siendo hasta encontrar las normas del orden natural.
Los socialistas encuentran atractivos a sus correligionarios pero no admiten a los diferentes, aun a
pesar de pregonar que han de igualarse todos. El único problema es que pregonan que se igualen, no
en la igualdad entre ambos, sino al igual que ellos en ideas ya olvidadas en el siglo XVIII.
Al realizar un producto se establecen tecnicismos en la continuidad de los procesos. Dichos
tecnicismos, se organizan en un orden tradicional en la depuración de los oficios, descubiertos en la
experimentación espontánea de dichos procedimientos. La depuración en los oficios y el dominio
de los procedimientos técnicos hacen que se sumen las habilidades del creador con los recursos de
experiencia y el producto resultante sea un objeto de mejor calidad. La continuidad en el ejercicio
de los procesos se transforma en dominio sobre los mismos y de ahí surge la diferencia a la que
denominamos arte.
Los socialistas no ven esa continuidad, porque su misión no es la consecución del orden natural, su
pretensión es la conquista del estado, desde donde puedan imponer y obligar a los necios que
votaron por ellos, a trabajar más duro que antes y en peores condiciones, para el beneficio del
estado, compuesto por una nomenclatura de milicos que se apodan a sí mismos ―revolucionarios‖.
El socialismo ha hecho mucho daño al arte. Lo ha tildado de propagandístico de ideas tradicionales
religiosas o moralistas, sin admitir que los que verdaderamente han hecho uso de la propaganda anti
moralista y anti tradicional, han sido los socialistas. Si pregonan la igualdad y el respeto mutuo,
¿por qué no respetan a los artistas en sus diferencias? ¿Por qué obligan e imponen a esos mismos
artistas a negar sus propias diferencias y a tener que asumir lo contrario a lo que ellos defienden?
¿Por qué deben dejar la tradición academicista los artistas y aceptar la casualidad experimental
lúdica de quienes dicen, que lo que pinta un ignorante de los oficios, es mejor que lo que hicieron
los profesionales? ¿No será todo lo contrario? ¿No será generalmente mejor el profesional que el
autodidacta? Lógicamente existen autodidactas que con mucho esfuerzo han logrado fama y
prestigio, pero no lograron ni la fama ni el prestigio por lo poco profesionales que llegaron a ser,
sino todo lo contrario, porque lograron transformar sus experimentaciones en una continua labor
profesional.
Las viciosas exposiciones bautizadas con los términos socialistas evolutivos ―contemporáneos‖ o
―vanguardistas‖ incitando a lo casual, lúdico, minimalista, conceptual o estrafalario e inhumano,
han degenerado la excelencia del arte,transformándolo en vulgar, hasta tal punto, que los propios
artesanos se mofan de los artistas. Esa es la tarea que se ha logrado a lo largo de los últimos
cincuenta años, bien cumplida por nuestros correligionarios socialistas, de quienes se esperaba una
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 19
20. Teoría de la Educación Martín Soria
mejor sociedad, y que lo único que han hecho, es imitar a sus opuestos fascistas en la conquista del
poder y la imposición de obligaciones y responsabilidades para con el estado.
El arte necesita ordenarse en el ordenamiento de las normas naturales, no en base a órdenes
predeterminados por fragmentos sociales, económicos, políticos o culturales.
LAS DIFERENCIAS
Una de las grandes interrogantesconcernientes a la educación, es el… ¿Por qué nos debemos
educar? Y otrano menos importante que la anterior es: ¿Cómo nos debemos educar?
La respuesta inmediata que nos aparece en mente es, que nos educamos, simplemente porque se
nace en diferente condición del maduro educado. Nacemos y compartimos diferencias en todo tipo
de condiciones sensibles, intelectivas o conductuales. Cada uno adquiere costumbres basadas en la
repetición de un hábito y que al habituarse en ellas, se deja de cuestionar su veracidad o adecuación.
Generalmente, las verdades se adquieren en la concordia entre lo observado y lo consideradoválido.
Si desde la infancia hemos visto y validado una costumbre, ese hábito será difícil de cambiar porque
durante mucho tiempo se tuvo por válido, como por ejemplo matar a las arañas cuando se las ve en
algún lugar y sin que se consideren amenazantes. ¿Qué culpa tienenlas arañas del hábitosocial
aprendido por quien las mata? Y, seguramente el asesino de las arañas, justificará su crimen
enfatizando que era venenosa. ¡No por ser venenosa supone una amenaza! ¡También son venenosas
muchas plantas del jardín y no por eso se las muele a palos!
Debemos educarnos porque somos diferentes a la humanidad de la Naturaleza Humana y porque esa
―humanidad‖ debemos descubrirla de la Naturaleza original de la Especie y adquirirla. Los
maestros son solo orientadores en el aproximarnos al entendimiento y reconocimiento de la
Naturaleza Humana. Nacemos con el potencial capaz de intelectualizar y comprender la Justicia
Natural, pero debemos replantearnos la veracidad de nuestras costumbres y criterios. Muchos de
nosotros hemos creído tradiciones, únicamente porque se nos han presentado válidas por las
costumbres, pero que no coinciden con la humanidad natural de la conciencia natural humana.
Tradiciones inhumanas, en algunos casos crueles y que defendemos por ser costumbres o
tradiciones ―religiosas‖ como la flagelación de los penitentes, el consumo de alcohol o de
drogas.No solo de drogas ilegales, sino también de drogas legales que utilizamos para combatir
estados de ánimo que nada tienen que ver con químicos materiales. Creemos que los estimulantes
musculares modifican la determinación y libre voluntad del individuo sin percatarnos que esa libre
voluntad es eso mismo –libre- de contaminantes.
Necesitamos educarnos por nuestras diferencias en desarrollo afectivo, cognoscitivo y de dominio
sobre las habilidades humanas y en el reconocimiento de la Naturaleza Humana que es la propia
naturaleza de cada humano. Es fácil apreciar el comportamiento inhumano del de afuera nuestro, y
muy difícil reconocer el mismo comportamiento inhumano en el que observa. El que juzga es juez y
como tal, se asume lícito, pero en realidad no es así. El juez es otro humano cuya evaluación del
juicio va a depender del criterio con que lo evalúe y su criterio puede ser suficiente o
insuficientemente justo, dependiendo de su nivel de desarrollo humano. Si juzga desde un estado de
inmadurez en criterio, su veredicto puede ser ilícito, y el correctivo del acusado sería injusto. Para
evitar la injusticia de la especie humana es necesario reconocer la razón que justifica al ser humano
y esa razón, se deriva del entendimiento de las normas de la Naturaleza Humana.
¿Cómo debemos educarnos? Del modo más humano posible. Analizando el comportamiento y los
juicios inhumanos y reconociendo en ellos su opuesto humano. Para eso los reclamos son un
verdadero diccionario. Cuando se reclama al flojo, se está afirmando que debe ser responsable y
responder al cumplimiento del deber necesario. Cuando se reclama al imprudente, se está pidiendo
sea prudente, cuando se reclama algo se está afirmando en ese reclamo el cumplimiento de su deber.
Si analizamos cada reclamo y apuntamos lo debido reclamado, llegaremos a la convicción de lo que
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 20
21. Teoría de la Educación Martín Soria
el ser humano debe hacer para realizarse humano y en esa humanidad excluye su inhumanidad o
comportamiento inhumano. Esa es una manera que me ha servido para descubrir los fundamentos
que a continuación comparto con ustedes. Cada uno ha de encontrar su modo de madurar frente a
los juicios justos y valores constantes aprendidos. Cada uno, para calificar de ser autónomo.
Las diferencias ideológicas que tanto daño hacen a la conducta de la especie y a la naturaleza
original del ser humano. Cuando decimos que se tiene derecho a la libertad sin definir, o en
particular, cuando se declara que se dispone del derecho a la libertad de conciencia, sin explicar en
qué consiste la conciencia; o libertad de pensamiento sin precisar los límites del pensamiento o que
se dispone de libertad de acción, sin restricciones, se está abriendo la puerta a divagaciones
ideológicas y conductuales socialmente peligrosas.
Libertad de conciencia es una ambigua afirmación que pareciera indicar que se dispone de libertad
para asumir la ideología que cada uno considere, ya sea esta consecuente o no con la Naturaleza
Humana. Claro que podría decirse que ¿quién es el que define cual es la Naturaleza Humana? Pero
de igual modo podría responderse y ¿quién es el que determina que la Naturaleza Humana es la que
él o ella consideran? Entrar en esa polémica relación, no conduce al reconocimiento de la función
de nuestra especie y lo que no se puede negar, es que cada especie existente, cumple una específica
función.
Hablar de libertad de conciencia sin definir lo que por conciencia se reconoce justo, es entrar en una
conversación donde los supuestos postulados se distinguen unos de otros solo por sus diferencias.
Si por conciencia se entiende al criterio que justifica válida una alternativa o proposición,
estaríamos frente a una circunstancia bastante distinta de la libertad, porque el criterio de la
conciencia, únicamente elige aquella posibilidad que considera válida. Según esto, la conciencia no
dispone de otra libertad que la de elegir la alternativa preferida. Si se opta en toda elección por lo
válido, no se dispone de libertad para optar por lo contrario.
En este caso, debe precisarse quién o qué hace uso de la libertad, si es la conciencia o es el criterio,
o si es el criterio o es el valor. Y lógicamente entraríamos en un área filosófica delicada, la de
precisar axiológicamente la definición o significado del valor.
Se dice que se tiene derecho a la libertad de pensamiento. Estamos frente a una afirmación que
produce muchas interrogantes. ¿Qué se entiende por pensamiento? Algunos dicen que es todo
aquello que pasa por la mente. Por la mente solo pasan sensaciones, sentimientos, juicios y
motivaciones. Toda idea es imaginada porque se reconoce necesaria, porque interesa o porque se
motiva a imaginarla, sin motivación, interés o necesidad no se imagina, ni se idealiza. Según esto,
lo que pasa por la mente es algo determinado necesario. ¿Se dispone entonces de la posibilidad de
liberar al pensamiento de lo que se considera necesario? No existe posibilidad alguna de pensar algo
que no se considera necesario. De este modo, la única libertad posible del pensamiento es la de
pensar en aquello que se considera preferido.
Y si hablamos de la libertad de acción, nos encontramos con la misma paradoja. Hacemos aquello
para lo cual nos determinamos y nos determinamos a realizar lo que consideramos preferente. La
libertad, entonces, se limita a realizar el cumplimiento de lo que consideramos que se debe realizar.
Analicemos los momentos en los que nos decidimos a realizar algo para lo cual no nos hemos
previamente determinado. Como ven, es imposible. Todo acto contiene intencionalidad,
selectividad y poder. La intencionalidad determina, la selectividad analiza que sea justo lo que se
debe y la voluntad opera siempre al servicio del cumplimiento de un deber considerado necesario.
Hemos puesto en evidencia la falacia del derecho a la libertad de conciencia, del derecho a la
libertad de pensamiento y del derecho a la libertad de acción. Pueden estar de acuerdo o no, pero no
pueden demostrar que la conciencia pueda desprenderse del valor en su elección, ni que el
pensamiento pueda independizarse del criterio en su juicio, o que la voluntad pueda excluirse del
deber que la motiva.
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 21
22. Teoría de la Educación Martín Soria
La Naturaleza Humana persigue la Plenitud por sobre los placeres, la justicia por sobre la razón y el
cumplimiento del deber por sobre los apetitos. Esta necesidad natural compartida obliga al
individuo a asemejarse con sus conciudadanos independientemente de que esa función se reconozca
o no. Todo humano sensible espera sentirse pleno, todo humano inteligente espera reconocer los
juicios justos y todo humano espera que su inmediato responda responsablemente al cumplimiento
del deber.
La libertad obliga en todo caso a la elección de la alternativa válida. Los romanos decían: "Libertas
est potestas faciendi id quod Jure licet" (La libertad es la facultad de hacer lo que el derecho
permite)" entendiendo por derecho al cumplimiento del deber. En Francia, en la Declaración de los
Derechos del Hombre y del Ciudadano, la libertad se consagra como Derecho Fundamental en el
artículo 2° y se define en el 4° en estos términos: "La facultad de hacer todo aquello que no
perjudique a otro". Pensar que la libertad posibilita optar por algo diferente a lo que da la gana es
algo parecido a pensar que como la temperatura aumenta infinitamente, también disminuye
infinitamente. La temperatura se limita en el Cero Absoluto, -273,15 Cº, del mismo modo que la
libertad es limitada por el valor. Optar es una acción de elegir lo preferido. Para determinar lo
preferido es necesario evaluarlo, ya sea consciente o inconscientemente. Si es lo preferido, y se
determina a la elección, interesa y se justifica razonable. Y si la voluntad se determinay dispone a la
elección de la alternativa preferida y se dispone a optar por ello, es porque considera la alternativa
preferida lo más importante a elegir. Lo más importante, interesante y razonable es lo que se quiere
hacer, luego, la libertad está condicionada por el valor de lo que se quiere hacer. No existe
posibilidad alguna de optar por otra posibilidad que no sea aquella para lo cual se está determinado.
Optar es determinarse a elegir. Para determinar a la voluntad, el intelecto ha de reconocer justa la
elección y la emoción debe considerarla necesaria. Sin esa unidad sensible cognoscitiva y
motivacional, no se establece el impulso que determina la elección. Los estímulos de desagrado no
conectan, separan. El reconocimiento de lo injusto no justifica, desconfía y lo inadecuado no
motiva, desmotiva. La voluntad desmotivada, desconfiada y desagradada por la posible alternativa,
no puede optar por ella. Solo puede optar después de evaluar la nueva alternativa y determinarla
preferente, pero no se puede aislar la libertad de lo preferido.
Las diferencias se establecen cuando se considera válida la elección para uno en perjuicio de la
validez universal. Cuando el individuo decide que el orden es el que determina y no el que se debe,
en esos casos surge la desubicación del individuo. Esa es la razón por la que existen tantas
diferencias en criterio, en conciencia y en comportamiento. El hombre maduro se determina al
cumplimiento máximo del deber máximo también. El inmaduro es el que prefiere la elección del
fragmento que en sí mismo justifica válido para él. Si en un partido de futbol cada jugador juega su
partido esperando ganarlo sin considerar a sus colegas, seguramente lo perderá. Pero cuando cada
jugador se ordena en su posición y comparte con el resto del equipo, las posibilidades de ganar el
partido, son mayores. Del mismo modo, el individuo que actúa en pro del cumplimiento del
máximo deber valido para todo, califica responsable, justo y maduro.
Las diferencias entre diferentes no conforman un orden, el orden lo conforman las semejanzas en la
unidad.
Se asocia a la emoción con la circunferencia, al intelecto con el triángulo y a la voluntad con el
cuadrado. La circunferencia y el cuadrado tienen 360 °, pero el triángulo solo tiene 180°. Esta
realidad geométrica tiene su explicación espiritual. Al intelecto identificado con el triángulo le
faltan 180° para completar los 360° de la emoción significada con la circunferencia o con el cubo
representando a la voluntad. Los 180° restantes del intelecto significan la responsabilidad de cada
humano por descubrir su Naturaleza Humana. La voluntad tiene límites, representados por sus lados
finitos, los límites del agotamiento o del cansancio. La emoción no tiene límites, se puede amar u
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 22
23. Teoría de la Educación Martín Soria
odiar eternamente. El intelecto debe descubrir su origen, su identidad y su propósito por sobre todas
las cosas. El descubrimiento de la Naturaleza humana completa al intelecto y lo iguala con la
emoción y la voluntad, al responsabilizarse en el cumplimiento del criterio Natural.
Pensar que no existe un criterio compartido Natural Humano es afirmar que la humanidad no tiene
sentido y en esa afirmación se pierde también el sentido de quienes lo defienden. Las verdades no se
defienden, se justifican.
¿Qué es primero el orden o lo ordenado? Hay quienes piensan que el orden se establece al ordenar y
otros que piensan que para ordenar se necesita el criterio de lo ordenado. La definición del orden
puede darla quien considera ordenado lo que deja en cualquier sitio, pero la Naturaleza no deja a
las especies en cualquier lugar para afirmar después que están ordenadas. La naturaleza exige y
obliga a cada individuo de cada especie a que funcione en el cumplimiento de su Naturaleza. Del
mismo modo operan los humanos maduros que responden al cumplimiento del máximo deber
válido para todo por sobre el cumplimiento de sus apetencias personales. A la defensa de las
obligaciones personales se le denomina con un término no muy agradable para quienes lo reciben,
me refiero al egoísmo.
Analizando la realidad de las conductas Naturales podemos descubrir la importancia del criterio
natural que proporciona la verdadera libertad, justicia y responsabilidad. Negarse a la realidad es
perder la posibilidad de madurar.
La dualidad de las características se debe a la unidad de los propósitos. No existe posibilidad de
optar al mismo tiempo por dos propósitos, pero para cumplirlo es necesario de dos posiciones, la del
creador y el objeto que es creado. Pensar que los propósitos son duales es equivocado. Esa es la
razón por la cual la libertad se debe únicamente a la opción válida, sin posibilidad alguna para elegir
aquello no preferido o considerado válido. La alternativa elegida es siempre una a la vez incluso
cuando pensamos que elegimos dos cosas al mismo tiempo, en realidad esas dos cosas son
únicamente una posibilidad a la vez. Por ejemplo, cuando apreciamos algo con la vista y
escuchamos al mismo tiempo una canción, si nos concentramos en determinar qué es lo que se ve,
perdemos la capacidad de escuchar en ese instante, a pesar de que se escuche y cuando escuchamos
algo, al apreciarlo y reconocerlo perdemos la posibilidad de reconocer lo que se mira.
La razón por la que se termina con dolor de cabeza en los momentos en los que se nos inunda con
sonidos, imágenes y ansiedades es precisamente esa, que no se puede concentrar el intelecto en el
reconocimiento de varias cosas al mismo tiempo.
Libre no es únicamente aquel no limitado, libre es quien responde al cumplimiento del máximo
deber válido en el momento y lugar. No limitado, indiferente e inactivo, no ejercita su libertad y por
lo mismo, no puede declararse libre. Pero quien responde al cumplimiento del máximo deber
necesario que beneficia siempre a todos, no perjudica nunca a nadie y en ese no perjudicar por
responder al cumplimiento del deber se realiza y califica libre. Los franceses intuyeron esto al
declarar que "La facultad de hacer todo aquello que no perjudique a otro" es libertad, pero les faltó
completarlo con la necesidad de responder de manera responsable, no descubrieron que: ―Quien
responde al cumplimiento de lo que beneficia siempre a todo, no perjudica nunca a nadie‖.
Libertad es un concepto incomprendido a la luz de la voluntad humana, porque para motivar a la
voluntad se necesita algo más que solo fuerza. Sin el elemento de valor, la libertad es imposible de
ejercer.
Libertad es la capacidad de optar por lo que es considerado válido. Existe lo válido personal o
individual y lo válido Natural Ecológico. La elección de lo considerado válido ha de ponerse en
Martín Soria En el equilibrio vincular se comparte todo Página 23