La transfusión de sangre es un procedimiento médico importante que involucra riesgos. Se debe realizar pruebas de compatibilidad antes de la transfusión y existen complicaciones potenciales como reacciones inmunológicas hemolíticas agudas o retardadas, sensibilización del receptor, enfermedad de injerto contra huésped y complicaciones infecciosas. Para reducir riesgos, se recomiendan técnicas como autotransfusión, minimizar pérdidas sanguíneas, políticas restrictivas de transfusión y el uso de