Los uréteres son tubos musculares que conducen la orina desde los riñones hasta la vejiga. Se dividen en 4 porciones: abdominal, ilíaca, pélvica y vesical. Pueden presentar malformaciones congénitas como duplicidad ureteral, uretocele o megauréter congénito, que pueden causar obstrucción y provocar infecciones o deterioro renal. Algunas malformaciones requieren cirugía para corregir la obstrucción, mientras que otras pueden no causar síntomas.
2. • Los teres son dos tubos de
unos 25 a 30 cm de longitud
cuyas contracciones
lticas conducen la
orina desde la pelvis renal a
la vejiga.
• Sus paredes son gruesas, y
su consistencia dura y
stica.
• El uréter se divide en 4
porciones:
Porción abdominal.
Porción ilíaca.
Porción pélvica.
Porción vesical.
3. Porción Abdominal
• Desciende en el retroperitoneo, por delante del músculo psoas
mayor, entrando a la pelvis a nivel de la bifurcación de la arteria ilíaca
primitiva.
4. Porción ilíaca
• Antes de penetrar a la cavidad pélvica, el uréter pasa anterior a los vasos
ilíacos. En la mayoría de los casos el uréter derecho cruza la arteria iliaca
externa, mientras que el uréter izquierdo cruza la arteria ilíaca común.
5. Porción pélvica
• En esta se describen dos
segmentos; uno parietal y otro
visceral.
Parietal: Adosado a la
pared lateral de la pelvis,
en íntima relación con los
vasos ilíacos internos. Lo
más frecuente es que el
uréter derecho sea anterior
a la arteria ilíaca interna, y
el izquierdo posterior a ella.
Visceral: Se dirige hacia
delante y hacia adentro a
buscar la vejiga
discurriendo por el espacio
laterovesical de la pelvis. En
la mujer, pasa por fuera del
cuello uterino, cruzando
por debajo de la arteria
uterina.
6. Porción vesical
• Es ya cuando los uréteres penetran la pared vesical, haciendo un corto
trayecto diagonal de entre 1 y 2 cm, y se sitúan 4 cm uno de otro.
Terminan abriéndose por medio del orificio ureteral, formando los angulos
laterales del trigono vesical. Gracias a la forma en que terminan, evitan el
reflujo de orina durante la contracción de la vejiga.
7. Paredes del uréter
• Las paredes del uréter consta de tres
capas:
Mucosa: Presenta pliegues
longitudinales que le confieren un
aspecto estrellado en cortes
transversales. Esta compuesto por un
epitelio de transición característico de
las vias urinarias, llamado urotelio.
Muscular: en los dos tercios superiores
se organiza en dos estratos de
musculatura lisa; longitudinal interno y
circular externo. En en tercio inferior se
añade un tercer estrato longitudinal
dispuezto externamente.
Fibrosa/Adventicia: Se continúa con la
de la pelvis y la de la vejiga, y aísla el
uréter del TC laxo extraperitoneal.
8. Vascularización
• -La irrigación del uréter se realiza
por medio de ramas ureterales
que proceden de varias fuentes,
debido a que cada porción tiene
su irrigación independiente.
La parte alta recibe ramas de la
arteria renal.
La parte media recibe ramas de
las arterias testicular/ovárica y de
la ilíaca común, y hasta de la aorta
abdominal.
La parte inferior está irrigada por
ramos de la arteria vesical inferior
y de la uterina en la mujer, o solo
de la vesical inferior en el hombre.
• -El drenaje es mediante venas
tributarias de la ilíaca interna,
testicular u ovárica, y renal.
9. Inervación
• Inervación:
La inervación del
uréter se realiza por
fibras procedentes del
plexo renal, que
acompaña las arterias
renales.
Ramos de los ganglios
del plexo celíaco.
Los filetes nerviosos
del nervio esplácnico
menor rodean las
arterias.
11. Cólico nefrítico
• Al obstruirse el uréter, desencadena un dolor violento que se irradia desde la región lumbar hasta la
ingle, donde puede extenderse hasta la piel del escroto o de los labios mayores.
• Los cálculos renales se producen por solidificación de las sales disueltas en la orina; su composición es
muy variada y la eliminación puede ser problemática, pues como ya se ha dicho, en ocaciones no logra
pasar por estrechamientos del uréter.
• Una forma de eliminar aquellos cálculos que no se expulsan por vía renal, además de por cirugía
convencional, por medio de litotripsia por ondas de choque.
12. Malformaciones del uréter
• Las malformaciones congénitas del aparato genitourinario
son las más frecuentes en el ser humano. Si bien se producen
durante la vida intrauterina, muchas de ellas no se expresan
hasta la vida adulta o son ignoradas por completo.
• Se conoce su existencia cuando por la gravedad o magnitud
comprometen la vida o cuando se complican de
infección, litiasis, hematuria o deterioro de la función renal;
esto puede ocurrir en cualquier etapa de la vida.
• Entra las malformaciones más comúnes del uréter podemos
mencionar:
Duplicidad ureteral.
Uretolece.
Megaureter congénito.
13. Duplicidad ureteral
Incompleta: En la incompleta, los dos teres se unen en
forma de "Y" antes de llegar a la vejiga y desembocan en ella
por un orificio nico. Es generalmente tica y puede
pasar totalmente desapercibida.
Infrecuentemente puede provocar crisis dolorosas o infecciones
urinarias, cuando existe un mecanismo obstructivo en el punto
donde confluyen los dos teres que pueden condicionar el
llamado reflujo en yo-yo por su semejanza con el movimiento
de bajada y subida del juguete.
Completa: El ter que drena el n superior
desemboca s abajo (caudalmente) en n al que drena
el n inferior, que desemboca cranealmente. Se trata
de la ley de Weigert-Meyer.
Es s frecuente que la incompleta. En un 25 % de los casos es
bilateral. Puede no presentar ninguna a asociada y
representar un hallazgo casual, pero puede asociarse a otras
malformaciones y producir problemas .
14. Uretocele
• Es la inflamación o n quistica del ter
intravesical. Puede presentarse en n doble o en
n simple; y es s frecuente en el sexo
femenino y en n doble.
• Su o puede oscilar entre unos metros y
varios metros, y por su n se divide en
intravesical y extravesical, n su base de
n este dentro de la vejiga o se
prolongue s alla del cuello vesica,
respectivamente.
• En n simple, intravesical y de o o,
puede pasar desapercibido por carecer de
n gica.
• El ureterocele en n doble, grande, y sobre todo
el extravesical, representa un meno
obstructivo, y puede presentar displasia y atrofia
tica
El objetivo del tratamiento es
eliminar la obstrucción. Los drenajes
colocados en el uréter o en el área
renal (stents) pueden proporcionar
alivio de los síntomas a corto plazo.
La cirugía para reparar el
ureterocele generalmente cura la
afección y comprende ya sea hacer
una incisión en el ureterocele o
extirpar el ureterocele y fijar de
nuevo el uréter a la vejiga. El tipo de
cirugía depende de la edad, la salud
general y la gravedad de la
obstrucción.
15. Megauréter congénito
• La ureterohidronefrosis unilateral o bilateral que se
presenta nitamente y esta provocada por la
n obstructiva o mal funcionamiento de su
segmento terminal; en él hay una zona que no se relaja e
impide el flujo normal de la orina a la vejiga.
• En síntesis, se trata de un segmento del uréter terminal
que no conduce las ondas peristálticas, produciendo
ureterectasia por arriba de ella.
• En algunos casos, no se requiere intervención médica
más que antibióticos como medida preventiva para evitar
futuras infecciones del tracto urinario, dado que el
megauréter se resolverá por sí solo con el transcurso del
tiempo.
• Si existe una obstrucción del tracto urinario
probablemente requiera intervención quirúrgica. El
procedimiento quirúrgico consiste en extirpar la porción
del uréter que es anormal, reduciéndolo y volviéndolo a
conectar.