La miopía es un estado refractivo en el que el punto focal se forma delante de la retina y puede deberse a factores hereditarios o ambientales como un uso excesivo de la acomodación. Algunas complicaciones de la miopía no corregida son el glaucoma, la catarata y el desprendimiento de retina. El diagnóstico incluye un examen de refracción y la medición de la agudeza visual, y el tratamiento principal es la corrección con anteojos o lentes de contacto.