El documento discute el papel y compromiso de la educación superior en el siglo 21. Señala que la educación superior debe fomentar la ciudadanía mundial, la especialización y resolución de problemas, el aprendizaje empresarial y la educación permanente. También debe transmitir conocimientos y valores, formar profesionales para servir a la sociedad, y contribuir al acervo mundial del conocimiento a través de la investigación. La educación superior debe adaptarse a los cambios en el mundo para configurar el futuro de manera responsable.
2. EDUCACIÓN SUPERIOR EN EL SIGLO
XXI
Transmisión de conocimientos y valores.
Educación para la ciudadanía mundial.
Contribución al acervo mundial del conocimiento
Universidad, ciencia sociedad
Calidad del profesorado y del alumno
La educación superior para el desarrollo humano global
3. El papel de la Educación Superior en el siglo XXI
El mundo ha dado un auténtico “vuelco” en los últimos años: desde
los aspectos poblacionales y sanitarios consecuencia de la mayor
longevidad, al “alcance” del ámbito personal por comunicaciones
globales y en tiempo real, pandemias, asimetrías de toda índole y
amenazas a escala planetaria,
debilitamiento de las posibilidades de apelación y amparo,
trivialización de los puntos de referencia éticos... Todo ello requiere
una revisión a fondo de las misiones, objetivos, prioridades,
organización, contenidos, estructuras y métodos de la Educación
Superior, para conservar lo que es esencial –que sigue siendo
mucho- y cambiar lo que la realidad, a veces por imprevisión e
inacción, ha superado.
4. Educación para la ciudadanía mundial.
Como continuación de los grados educativos anteriores, debe
favorecerse, en un proceso de aprendizaje permanente, una
visión global para:
-Capacidad de participación
Implicarse activamente en la construcción y fortalecimiento de
la democracia, tanto a escala local como planetaria.
-Especialización y capacidad resolutiva, sobre la base de
sólidos
conocimientos generales.
-Aprender a emprender.
-Educación Superior permanente, a lo largo de toda
la vida
5. Transmisión de conocimientos y valores.
Formación de profesionales al servicio de la sociedad.
-La Universidad debe hallarse en la vanguardia de la propagación
del conocimiento y de sus aplicaciones y en el cultivo de la ciencia
y sus implicaciones tecnológicas, recordando siempre que “no
hay ciencia aplicada si no hay ciencia que aplicar” (Prof. Bernardo
Houssay). El conocimiento siempre es positivo. Sus aplicaciones
pueden ser negativas e incluso perversas. La interface entre lo
factible y lo admisible para la dignidad humana requiere un
intercambio habitual de puntos de vista, orientados por valores
universales
6. Contribución al acervo mundial del
conocimiento
-Esfuerzo investigador.
Es un pilar fundamental de la Educación Superior.
Promover la investigación científica y constituir
equipos de prestigio resulta indispensable para
las dimensiones docente, cultural, social y
económica de las universidades.
7. Universidad, ciencia, sociedad
Universidad en vigilia para una sociedad que no vaya a
la zaga de las metamorfosis actuales y previsibles.
Memoria del futuro: configurar el futuro y no ser sólo
espectadores del fluir de los sucesos. Ni dejarse
arrastrar por la corriente ni repetir el ejercicio de
inventar lo ya inventado. Para hacer frente a los grandes
retos de hoy, la Educación Superior debe incorporar la
experiencia de todos, eliminando adherencias del
pasado.
8. Calidad del profesorado y del alumnado
Para el cumplimiento de su papel crucial en orden a
los cambios perentorios de la situación y tendencias
actuales, es imperativo asegurar la calidad
(excelencia) del profesorado y del alumnado, en
virtud de lo que establece el artículo 26.1 de la
Declaración Universal de los Derechos Humanos:
“Todos tendrán acceso a la enseñanza superior, en
virtud de sus méritos”.
9. La educación superior para el desarrollo
humano global.
Educación para globalizar la solidaridad; los papeles educativos e investigadores de la educación superior
en un mundo en compleja y desequilibrada globalización, deben incorporar una opción estratégica para
el desarrollo equitativo socialmente y equilibrado con la naturaleza a escala planetaria. (Particularmente
las de los países más prósperos).
Ello implicaría un compromiso de/en las universidades, a colaborar decididamente con los organismos y
las organizaciones internacionales gubernamentales y no gubernamentales en la formación, la innovación
y la transferencia tecnológica.
11. REFERENCIAS
1. “La Educación Superior y el desarrollo humano sostenible”, Conferencia Mundial sobre Educación
Superior; Visión y acción, UNESCO, Paris, 5-9 octubre 1998.
2. “A European Agenda for Change for Higher Education in the XXI Century”, Palermo, Italy, 24-27 september
1997. (Contribution to the UNESCO World Conference on Higher Education).
3. “The European Research Council. A cornerstone in the European Research Area”, Report from an expert
group. Ministry of Science, Technology and Innovation, Denmark, Dec. 2003.