Diapositiva de Topografía Nivelación simple y compuesta
Agentes de corrosion
1. República Bolivariana De Venezuela
Ministerio Del Poder Popular Para La Educción Universitaria
Instituto Politécnico Santiago Mariño
Extensión Valencia
Alumno:
Materia: Proceso De Fabricación I Humberto Duran CI: 25091557 esc 46
Docente: Jaime Zerpa Plataforma: SAIA
Valencia Enero Del 2019
2. Protección contra la Corrosión
El fin más frecuente e importante de los recubrimientos metálicos es el
de proteger a otros metales de la corrosión. Otros usos son: lograr un conjunto
de propiedades diferentes que no están reunidas en un metal solo o fines
decorativos.
La mayoría de los metales, expuestos a la acción del ambiente, sufren
transformaciones fisicoquímicas que los degradan, reducen su utilidad y llegan
a destruirlos. Los fenómenos que originan estos cambios se agrupan en el
concepto de corrosión, o, con mayor amplitud, en el de deterioro de materiales.
Para comprender mejor la importancia y la actuación de los recubrimientos
metálicos conviene clasificar los metales disponiéndolos en orden decreciente
de su tendencia a disolverse, es decir, de su potencial negativo, obteniéndose
así la llamada serie de fuerzas electromotrices.
En la mayor parte de los casos, la aplicación de un recubrimiento
metálico tiene por finalidad proteger de la corrosión a otro metal más barato.
Para ello, lo más eficaz es elegir como protector a otro situado en la serie de
fuerzas electromotrices por encima del que se va a proteger. En el caso
particular del hierro, p. ej., son el aluminio, el zinc y, en la mayoría de las
condiciones, el cadmio los que mejor lo protegen.
En el valor protector influyen, por consiguiente, el método de aplicación y el
espesor de la película protectora. Sin embargo, la corrosión es un fenómeno
mucho más amplio que afecta a todos
los materiales (metales, cerámicas, polímeros, etc.) y todos los ambientes
(medios acuosos, atmósfera, alta temperatura, etc.).
Clasificación De Los Procedimientos
PROTECCIÓN CATÓDICA: ocurre cuando un metal es forzado a ser el cátodo
de la celda corrosiva adhiriéndole (acoplándolo o recubriéndolo) de un metal
que se corroa más fácilmente que él, de forma tal que esa capa recubridora de
metal se corroa antes que el metal que está siendo protegido y así se evite la
reacción corrosiva. Una forma conocida de Protección Catódica es la
3. GALVANIZACIÓN: que consiste en cubrir un metal con Zinc para que éste se
corroa primero. Lo que se hace es convertir al Zinc en un ÁNODO DE
SACRIFICIO, porque él ha de corroerse antes que la pieza metálica protegida.
PROTECCIÓN ANÓDICA: es un método similar que consiste en recubrir el
metal con una fina capa de óxido para que no se corroa. Existen metales como
el Aluminio que al contacto con el aire son capaces de generar
espontáneamente esta capa de óxido y por lo tanto, se hacen resistentes a la
corrosión. Aún así, la capa de óxido que recubre al metal no puede ser
cualquiera. Tiene que ser adherente y muy firme, ya que de lo contrario no
serviría para nada. Por ejemplo, el óxido de hierro no es capaz de proteger al
hierro, porque no se adquiere a él en la forma requerida.
Selección de materiales
La primera idea es escoger todo un material que no se corroa en el
ambiente considerado. Se pueden utilizar aceros inoxidables, aluminios,
cerámicas, polímeros (plásticos), FRP, etc. La elección también debe tomar en
cuenta las restricciones de la aplicación (masa de la pieza, resistencia a la
deformación, al calor, capacidad de conducir la electricidad, etc.).Cabe recordar
que no existen materiales absolutamente inoxidables; hasta el aluminio se
puede corroer.
En la concepción, hay que evitar las zonas de confinamiento, los
contactos entre materiales diferentes y las heterogeneidades en general.Hay
que prever también la importancia de la corrosión y el tiempo en el que habrá
que cambiar la pieza (mantenimiento preventivo)
Diseño:
El diseño de las estructuras del metal, estas pueden retrasar la velocidad
de la corrosión. Este quizá el método más efectivo para el control de la
corrosión, ya que si hacemos un buen diseño y una buena planeación podemos
evitar dicho fenómeno, a continuación se enumeraran algunas reglas generales
que se deben seguir:
4. Se debe tener en cuenta la acción penetrante de la corrosión junto con
los requerimientos de la fuerza mecánica cuando se considere el
espesor del metal utilizado.
Son preferibles los recipientes soldados que los remachados para
reducir la corrosión por grieta
Se deben usar preferiblemente metales galvánicamente similares
para prevenir para prevenir la corrosión galvánica. Si se atornillan
metales no similares galvánicamente se deben usar arandelas no
metálicas para eliminar contactos eléctricos entre los materiales.
Es preciso evitar tensión excesiva y concentraciones de tensión en
entornos corrosivos, para prevenir la ruptura por corrosión por esfuerzos,
especialmente en aceros inoxidables, latones y otros materiales
susceptibles a este tipo de corrosión.
Se deben evitar recodos agudos en sistemas de tuberías por donde
circulan fluidos. En estas áreas donde cambia la dirección del fluido
bruscamente se potencia la corrosión por erosión.
Se deben diseñar los tanques y recipientes de una manera que
sean fáciles de limpiar y desaguar, ya que el estancamiento de
sustancias corrosivas provoca la aparición de celdas por concentración.
Se debe hacer un diseño eficiente de aquellas piezas que se espera
queden inservibles en poco tiempo, para que sean fáciles de
reemplazar.
Es importante también diseñar sistemas de calefacción que no den
lugar a zonas puntuales calientes, los cambios de calor ocasionan
corrosión
5. Recubrimientos:
Estos son usados para aislar las regiones anódicas y catódicas e
impiden la difusión del oxígeno o del vapor de agua, los cuales son una
gran fuente que inicia la corrosión o la oxidación. Hacen de barrera entre
el metal y el agente corrosivo. Se clasifican en:
Orgánicos
Inorgánicos
Metálicos
Por películas pasivas
Recubrimientos orgánicos
Pintura:
Son los recubrimientos más utilizados. Protegen los metales de la
corrosión atmosférica; para ello se deben limpiar las superficies metálicas y
posteriormente aplicar la pintura en forma líquida endureciéndose hasta formar
una película sólida y compacta. Para que además proporcionen una protección
catódica se utilizan pinturas ricas en cinc. Pero para que la protección con
pinturas sea completa se deben añadir sustancias capaces de inhibir la
superficie del metal frente al medio ambiente.
Las principales características a tener en cuenta en las pinturas son:
● Resistencia a la intemperie o agentes corrosivos.
● Estabilidad de colorido.
● Adherencia a la superficie tratada.
● Rendimiento y fluidez.
● Terminado decorativo duradero y homogéneo.
6. Lacas: Son combinaciones insolubles, coloreadas y muy estables, que forman
algunos materiales con ciertos óxidos metálicos. La mayoría contienen
pigmentos que dotan al recubrimiento orgánico de las propiedades
anticorrosivas necesarias.
Resinas: Son sustancias sólidas solubles en aceites y alcohol. Pueden arder
en el aire. Se utilizan a menudo para revestir suelos e impermeabilizar techos.
Como tipos principales de resinas pueden distinguirse las resinas verdaderas,
las gomorresinas, las oleorresinas, los bálsamos y las lactorresinas.
Recubrimientos metálicos: Este tipo de recubrimiento es importante, ya que
permite la elección del metal que más adecuado sea a la superficie a proteger.
La protección mediante recubrimientos metálicos es muy frecuente en el
caso de materiales de hierro y de acero; los demás metales de importancia
técnica son ya, de por sí, lo bastante resistentes a la corrosión, por lo que se
recubren sólo en casos muy especiales, o por razones distintas a la de mejorar
su resistencia a la corrosión.
Inhibidores de la corrosión: Es el traslado de los productos físicos que se
agrega a una solución electrolítica hacia la superficie del ánodo o del cátodo lo
cual produce polarización.
Los inhibidores de corrosión, son productos que actúan ya sea formando
películas sobre la superficie metálica, tales como los molibdatos, fosfatos o
etanolaminas, o bien entregando sus electrones al medio. Por lo general los
inhibidores de este tipo son azoles modificados que actúan sinérgicamente con
otros inhibidores tales como nitritos, fosfatos y silicatos. La química de los
inhibidores no está del todo desarrollada aún. Su uso es en el campo de los
sistemas de enfriamiento o disipadores de calor tales como los radiadores,
torres de enfriamiento, calderas y "chillers". El uso de las etanolaminas es
típico en los algunos combustibles para proteger los sistemas de contención
(como tuberías y tanques). Se han realizado muchos trabajos acerca de
7. inhibidores de corrosión como alternativas viables para reducir la velocidad de
la corrosión en la industria
Los métodos de aplicación más importantes actualmente son:
Inmersión en metal fundido:
Consiste en sumergir el metal que se va a recubrir en otro metal de
menor punto de fusión, en estado fundido. La aplicación más importante la
constituye el recubrimiento de objetos, chapas, barras y alambres de acero con
zinc, y el recubrimiento de acero, cobre y latón con estaño. En menor extensión
se aplica también por este procedimiento el aluminio, para el que resulta
necesario efectuar el recubrimiento en atmósfera de hidrógeno. En este
proceso hay que regular la temperatura y el tiempo para lograr cierta disolución
del metal que se va a recubrir, en el metal fundido, con objeto de que se forme
una capa intermedia de aleación de ambos metales que dé lugar a una buena
adherencia del recubrimiento, pero el espesor de la capa de aleación no debe
ser tan grande que origine una película frágil.
Los espesores que se obtienen por este procedimiento son
relativamente gruesos comparados con los que se obtienen por otros métodos,
y presentan menos poros. Sin embargo, tanto el espesor como la uniformidad
del recubrimiento son difíciles de regular.
Cementación.: Consiste en calentar a temperaturas relativamente altas el
metal que se va a recubrir, estando rodeado por otro metal, en polvo, que se
difunde originando la película protectora. Así se aplican sobre el acero el
wolframio, cromo, vanadio, cobalto, titanio, molibdeno, tántalo y otros.
Laminación: Consiste en laminar juntos los lingotes superpuestos de dos
metales. La presión provoca la aleación y adherencia. Así se obtienen láminas
bimetales con propiedades que no se encuentran juntas en un solo metal.
Proyección de metal fundido: En una «pistola» de oxígeno y acetileno se
funde un alambre, y el metal fundido se proyecta con aire o un gas inerte
comprimido sobre el objeto. El recubrimiento es económico pero más poroso
que el obtenido por otros métodos.
8. Otros procedimientos que tienen gran importancia, para recubrir con fines
decorativos objetos de plástico, vidrio, cerámica, etc., son los de proyección
catódica y evaporación en vacío.
Galvanizado electroquímico:
Es el proceso electroquímico por el cual se puede cubrir un metal con
otro. Se denomina galvanización pues este proceso se desarrolló a partir del
trabajo de Luigi Galvani, quien descubrió en sus experimentos que si se pone
en contacto un metal con una pata cercenada a una rana, ésta se contrae
como si estuviese viva, luego descubrió que cada metal presentaba un grado
diferente de reacción en la pata de rana, por lo tanto cada metal tiene una
carga eléctrica diferente.
Más tarde ordenó los metales según su carga y descubrió que puede
recubrirse un metal con otro, aprovechando esta cualidad (siempre depositando
un metal de carga mayor sobre otro de carga menor).
Galvanizado por inemersion:
Consiste en sumergir el material que se desea recubrir en un crisol de
zinc fundido, la reacción de difusión entre los metales da como resultado la
formación de una barrera impermeable que protege a las superficies metálicas
del medio ambiente.
Un acero desprotegido tiene un promedio de vida útil de tan solo dos
años antes de que se afecte su funcionalidad o integridad estructural, en
cambio los recubrimientos galvanizados obtenidos en instalaciones apropiadas,
generalmente duran como minimo diez años sin necesidad de mantenimiento
alguno, incluso en las peores condiciones atmosféricas.
Un recubrimiento que se acaba de hacer presenta generalmente un aspecto
brillante, el cual con el tiempo va desapareciendo debido a la reacción del
contacto del zinc con el aire del ambiente el cual da lugar a la formación de una
fina capa de hidróxidos básicos del zinc de color gris metalico mate, que se
conoce como capa de pasivacion y que constituye una barrera que aisla la
superficie del zinc del medio ambiente.