1. Taller #4 10/08/18
Moreno, Laura Samaniego, Paola Vergara, Liz
Quiroz, Jianna Sánchez, Ana Sofía Vergara, Orlando
Rangel, Gisel Serracín, Rebecca Vidal, Ernesto
Reyes, María A. Serrano, José Xian, Alexander
Rodríguez, Frank Thomsen, Nurith Yang, Mónica
Rodríguez, Sara Valverde, Ricardo Zeballos, Rossanis
Rodríguez, Sofía Vásquez, Daniella
“Asepsia, antisepsia y lavado de manos”
Se considera que asepsia y antisepsia son los procedimientos mediante el cual a
través de diferentes mecanismos químicos, físicos y biológicos logra la destrucción
o eliminación de microorganismos patógenos que pueden contaminar diferentes
tejidos. El concepto de asepsia es un término médico que define al conjunto de
métodos aplicados para la conservación de la esterilidad. Mientras que
antisepsia se define como el empleo de medicamentos o de sustancias
químicas para inhibir el crecimiento, destruir, o disminuir el número de
microorganismos de la piel, mucosas y todos los tejidos vivos.
La finalidad de estos procedimientos es evitar o atenuar el riesgo de infección en
toda técnica quirúrgica, es por eso la importancia del lavado de manos. Las manos
son la principal vía de transmisión de gérmenes. Miles de personas mueren
diariamente en todo el mundo a causa de infecciones contraídas mientras reciben
atención médica.
El lavado de manos es la medida más importante para evitar la transmisión de
gérmenes perjudiciales y evitar las infecciones asociadas a la atención sanitaria.
Todo profesional de salud, o cualquier persona que participe de manera directa o
indirecta en la atención a un paciente, debe mantener la higiene de sus manos y
saber cómo hacerlo correctamente en el momento adecuado.
2. Artículo: Ignaz Semmelwis and the birth of infection of control
Video 1: Historia de la Asepsia – Caso Semmelweis
IGNAZ SEMMELWEIS & NACIMIENTO DEL CONTROL DE INFECCIÓN
Para valorar la importancia del lavado de manos, es crucial conocer el inmensurable
riesgo que representa el incumplimiento de dicha praxis previo a la realización de
un procedimiento médico, en especial si se trata de una intervención quirúrgica.
La sepsis es causa importante de muertes diarias y representa un alto costo para la
medicina a nivel mundial. Sin embargo, lo más alarmante es que la mayoría de estos
pacientes la adquieren a nivel hospitalario; de hecho, es la complicación más común
en un paciente hospitalizado.
La infección cruzada de pacientes por las manos contaminadas del personal
médico, constituye el principal mecanismo de extensión de numerosos agentes
infecciosos. Por esta razón, el lavado de manos se considera el factor más
importante para el control de las infecciones. Sin embargo, anteriormente no se
consideraba un factor tan importante. No fue hasta 1847, cuando Ignaz
Semmelweis, médico húngaro, innovó en dicha práctica, que, como asistente
obstétrico en el hospital docente Allgemeine Krankenhaus en Vienna, observó que
las mujeres cuyos partos eran atendidos por médicos y estudiantes de medicina,
tenían un mayor porcentaje de muertes post-parto (13-18%); mientras que las
mujeres cuyos partos eran atendidos por parteras, tenían menor porcentaje (2%).
Para mediados del siglo IX, no se utilizaban guantes y casi no se tenía conocimiento
sobre agentes infecciosos, por ende, las normas de limpieza no eran como las de
hoy día y dichas muertes eran documentadas solo como “fiebre puerperal” y se
desconocía su causa.
Gracias al tipo de accidentes que caracterizan gran parte de los descubrimientos
médicos, Ignaz Semmelweis encontró la solución. Su colega Jakob Kolletschka se
cortó un dedo realizando una autopsia, se infectó y murió con síntomas que
recordaban a los de la “fiebre puerperal”. Como no se conocía aún la teoría de la
enfermedad por gérmenes, atribuyó dicho evento a algún componente del material
cadavérico de las autopsias. Misma asociación que utilizó para explicar las muertes
de las puérperas, ya que los médicos y estudiantes de medicina manipulaban los
cadáveres de las autopsias antes de atender a las embarazadas, práctica que no
era realizada por las parteras.
Semmelweis desarrolló hipótesis y publicó el libro “La Etiología, Concepto y
Profilaxis de la Fiebre Puerperal” en 1861, pero sus hipótesis fueron rechazadas
debido a la poca evidencia de sus investigaciones. No fue hasta 2 décadas después
de su muerte, que su trabajo fue revisado y se le dio el crédito. Solo después que
Pasteur, Koch y Lister aportaron mayor evidencia a la teoría de gérmenes y a las
3. técnicas de antisepsia, se apreció el valor del lavado de manos innovado por Ignaz
Semmelweis.
Link del video: https://youtu.be/2HF2PUWgrMo
APORTES HISTÓRICOS
Louis Pasteur (1822-1895)
Demostró entre 1860 y 1864 que la fermentación y el desarrollo de microorganismos
en caldos de nutrientes no procedía de la generación espontánea. Expuso la "teoría
germinal de las enfermedades infecciosas", según la cual toda enfermedad
infecciosa tiene su etiología en un germen con capacidad para propagarse entre las
personas, además de ser el causante de procesos químicos como la
descomposición y la fermentación, y su causa no provenía de adentro del cuerpo
debido a un desequilibrio de humores como se creía tradicionalmente. Sus
experimentos refutaron la generación espontánea y crearon el principio Omne vivum
ex vivo, clave en la actual teoría celular. Las consecuencias prácticas de su teoría
lo llevaron al desarrollo de vacunas para varias enfermedades y la impulsión de la
higiene como método efectivo contra el contagio de las enfermedades.
Joseph Lister (1827-1912)
Cirujano inglés, se le atribuye la invención de la sutura reabsorbible, el catgut (tripa
de gato), y la creación de la antisepsia. Lister observó que las fracturas no
expuestas no se infectaban, al contrario de las expuestas. Entonces, para evitar la
infección, diseñó una venda oclusiva, un apósito de ocho capas impregnado con
varias sustancias, incluyendo el ácido fénico. Lister demostró que la morbilidad y
mortalidad de los pacientes intervenidos quirúrgicamente decrecía conforme el aseo
del campo operatorio, del instrumental y del cirujano, se incrementaba. Entre sus
publicaciones destaca su On the antiseptic principle in the practice of surgery (1867),
en el cual establece las bases de la antisepsia. Paulatinamente, fueron utilizados
otros antisépticos menos cáusticos como el iodoformo, el vioformo y el hipoclorito
de sodio.
Florence Nightingale (1820-1910)
Enfermera, escritora y estadista británica. Su mayor reconocimiento vino por su
labor en la Guerra de Crimea, en la cual como responsable de un grupo de 38
enfermeras, fue enviada al campo de batalla para atender a los heridos. Con
impresionante dedicación atendió a más de 5.000 heridos, denunció a las
autoridades las pésimas condiciones higiénicas en las que se encontraban los
enfermos, recopiló datos estadísticos y empezó a cambiar el sistema de atención
médica que hasta aquel momento se daba a los heridos al utilizar esos datos para
calcular la tasa de mortalidad en el hospital y demostrar que una mejora en los
4. métodos sanitarios empleados produciría una disminución en el número de muertes.
Esta información fue usada después como herramienta para mejorar los hospitales
militares y los de las ciudades.
Robert Koch (1843-1910)
Su primera contribución a la recientemente asentada ciencia de la microbiología fue
el aislamiento de Bacillus anthracis, agente etiológico del carbunco bacteridiano, en
el año 1877. A raíz de sus investigaciones sobre el carbunco Koch enunció una
serie de leyes, los postulados de Koch, que constituyen su mayor contribución a la
historia de la microbiología. En 1882 consiguió aislar el agente etiológico de la
tuberculosis, el Mycobacterium tuberculosis. Un año después aisló el Vibrio
cholerae, agente etiológico del cólera. La aplicación de estos postulados a los
estudios microbiológicos permitió a los científicos, en tan sólo 25 años, identificar la
mayoría de los patógenos que causaban enfermedades con altas tasas de
mortalidad entre la población.
William Steward Halsted (1852-1922)
Obtuvo su título de médico en la Universidad de Columbia. En 1877, en el Hospital
Bellevue de Nueva York, trató de convencer al hospital para la construcción de un
quirófano estéril pero el hospital se negó, ya que la propuesta era bastante cara, por
lo que Halsted utilizó 10,000 $ de sus propios fondos, siendo este el primer entorno
operativo estéril en la historia clínica. En 1886 experimentó con perros para mejorar
la técnica quirúrgica para la sutura intestinal y la cicatrización de heridas. Introdujo
las técnicas quirúrgicas de aneurismas, bocios, reparación de hernia, suturas
intestinales, cirugía del tiroides y el tratamiento de la tuberculosis. En 1890 fue
nombrado jefe del servicio de cirugía en hospital de la Universidad Johns Hopkins y
1892 fue nombrado como primer profesor de cirugía de la escuela de medicina. Es
conocido como el inventor de los guantes de látex en 1889. Lo hizo por amor pues
una enfermera del hospital Johns Hopkins de Bartimore, su instrumentista, Caroline
Hampton, sufrió un eczema debido a los líquidos utilizados para desinfectar el
material quirúrgico. Halsted encargó a la empresa Goodyear que fabricara unos
guantes de goma para la protección de la piel de su ayudante, con una goma lo
suficientemente fina para permitir un trabajo manual preciso. Éste fue el origen de
la a utilización actual de los guantes de goma en los quirófanos.
Video 2: Lavado de Manos Quirúrgico
El objetivo es brindar las herramientas necesarias para el desenvolvimiento en sala
de cirugía, identificar los requerimientos para ingresar a un quirófano y evitar
acciones no seguras que nos llevan a cometer errores.
¿Qué se busca en un quirófano?
Establecer parámetros que disminuyan los factores de contaminación en sala de
cirugía
5. ¿Cómo lo logramos?
Cumpliendo con las normas de sepsia y antisepsia
¿Qué debemos hacer?
Empezar con el reconocimiento del área quirúrgica:
REQUERIMIENTOS PARA INGRESO AL QUIRÓFANO:
- Las joyas como cadenas, aretes, pulseras, relojes deben ser retirados y
guardados en un sitio seguro.
- Las uñas deben ser cortas y sin esmalte. Su extensión no puede sobrepasar
0.5 cm de largo. No uñas postizas ni extensiones.
- Las manos y antebrazos deben estar libres de lesiones cutáneas.
- No está permitido el ingreso de bolso, maletines o cualquier otro elemento
que constituya factor de contaminación para el área quirúrgica.
- Se debe utilizar ropa quirúrgica (scrubs). La camisa debe portarse dentro del
pantalón. No es permitido el uso de ropa personal debajo de la ropa
quirúrgica.
VERDE -Acceso a familiares
autorizados.
- Vestidores, recepción de
pacientes, área de
descanso, baños, cuartos
de aseo, recuperación de
pacientes.
AMARILLO -Área quirúrgica no estricta.
-Es indispensable el uso de
ropa quirúrgica. -
Lavamanos quirúrgicos,
depósitos de instrumental
estéril y de medicamentos.
ROJO -Área quirúrgica estricta.
6. - Los zapatos deben ser exclusivos del área quirúrgica, deben ser de fácil
lavado, duro, sin perforaciones y no de tela. Luego colocarse los cubre
zapatos desechables.
- El gorro debe ser desechable y cubrir todo el cabello.
- La mascarilla se coloca cubriendo nariz y boca.
- Gafas de protección, tienen un cubrimiento en los laterales.
LAVADO DE MANOS:
Recomendaciones:
- Los jabones más utilizados en cirugía son la yodopovidona y la clorhexidina.
- El tiempo de lavado no debe ser superior a 5 minutos. Un tiempo posterior a
este no mejora la asepsia y puede llevar a irritación de la piel, y en tiempos
menos no se asegura que el antiséptico actúe.
- No es necesario el uso de cepillos ni esponjas para el lavado de manos, esta
práctica puede dañar la piel e incrementa la dispersión de bacterias de las
manos. Desde este momento evite el contacto con cualquier superficie no
estéril.
-
TÉNICA CORRECTA DE LAVADO DE MANOS (PASOS):
Primer tiempo:
1. Se aplica el jabón en una mano y se frota palma contra palma
2. Frote palma de la mano derecha contra el dorso de la izquierda entrelazando
los dedos y luego viceversa
3. Frote palma contra palma entrelazando los dedos
4. Frote dorso de los dedos de una mano contra la palma de la otra mano
manteniéndolos unidos
5. Limpieza dedo a dedo de forma vertical o circular primero de mano derecha
y luego izquierda
6. Limpieza de yema de dedos de la mano derecha contra la palma de la
izquierda y viceversa.
7. Enjabonar de muñeca a codo en forma descendente, circular, en un solo
sentido sin devolverse en ambos brazos.
8. Lavar con agua. Recordar que se enjuaga desde los dedos a los codos en
un solo sentido.
9. Bajo el agua lavar meticulosamente uña por uña, primero las de la mano
derecha y luego izquierda, utilizando las uñas de la mano contraria.
Segundo tiempo:
Se repiten los pasos 1 a 9.
En el paso 7 solo se llega hasta el antebrazo en vez del codo.
Tercer tiempo:
Nuevamente se repiten pasos 1 a 9, pero en el 7 solo hasta la muñeca.
7. Después del lavado diríjase al quirófano siempre con la posición de los
brazos frente a usted. No bajar los brazos, no sacudir las manos.
Las puertas se abren con la espalda o cadera, no utilizar las manos.
Si accidentalmente toca una superficie, debe iniciar de nuevo el lavado de
manos.
Otra manera de realizar el lavado es con Avagard, el cual es un antiséptico con
dos ingredientes activos: gluconato de clorhexidina 1% y alcohol etílico al 61%.
Tiene formulación con emolientes que evita la resequedad
Es indispensable utilizarlo con las manos limpias y secas, es decir, hacer
un lavado previo, no tiene que ser estéril y luego aplicar el Avagard.
TÉNICA DE LAVADO DE MANOS CON AVAGARD:
1. Tenga en cuenta la posición de las manos, que van a la altura del pecho.
2. Accionar el dispensador y colocar 2 mL en palma de una mano
3. Sumerge los dedos, haciendo que el Avagard penetre en las uñas
4. Dispersar el restante en la muñeca, antebrazo y codo de manera
descendente
5. Segundo bombeo. Sumergir los dedos de la mano contraria en la palma y
dispersar el restante en muñeca, antebrazo y codo
6. Tercer bombeo. Repartir el producto en las manos y esperar a que se
desvanezca en las mismas.
No utilizar toallas.
Si es alérgico a la clorhexidina no usarlo. Utilizar en este caso,
yodopovidona
Link del video: https://youtu.be/DUwQuUrHJ20
Gracias a las observaciones de Ignaz Semmelweis, considerado el padre del control
de las infecciones; Joseph Lister, Florence Nightingale y William Halsted en cuanto
a las técnicas de asepsia y antisepsia, hoy por hoy se ha logrado reducir de manera
importante las tasas de mortalidad e infección a nivel intrahospitalario en
comparación a aquellas décadas. Y es aquí donde se hace evidente la importancia
del correcto lavado de manos que se debe hacer de la mejor manera siguiendo las
recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud por un periodo de 5
minutos. Además de esto es importante recordar seguir las normas del
comportamiento dentro del quirófano incluyendo la correcta vestimenta y el uso de
implementos como mascarilla, gorros desechables y zapatos desechables como
parte de la norma establecida.