El documento analiza las distintas perspectivas filosóficas y teológicas sobre el mal y las teodiceas a lo largo de la historia. Explora las visiones de Agustín, que ve el mal como carencia de bien, y de Leibniz, que propone que Dios creó el mejor de los mundos posibles. También critica las teodiceas desde un enfoque humanista y científico, señalando que el mal natural es inherente a la vida y que no hay explicación satisfactoria para el mal global.
1. EL SENTIDO, EL MAL Y
LAS TEODICEAS
El MAL DESDE LA ONTOLOGIA DE LA CARENCIA.
•La hermenéutica bíblica y platónica del mal.
•La lucha contra el mal.
EL MAL METAFISICOY LAS APORIAS DEL CREADOR.
•El mejor de los mundos posibles.
•Las aporías del creador.
LA CRÍTICA DEL HUMANISMOATEOA LASTEODICEAS.
•El significado amoral de los males naturales.
•El mal global: el sentido de la vida.
¿CREER EN DIOS SIN UNATEODICEA?
•El postulado cristiano de sentido.
2. EL SENTIDO, EL MAL Y LAS
TEODICEAS
Desde los inicios de la filosofía, sobre todo con los grandes
sistemas metafísicos platónicos y aristotélicos, se prendió ofrecer
unas síntesis metafísicas, integrando la naturaleza, el hombre y
Dios. La pregunta por el significado de la vida y el mal está
conectada, directa o indirectamente, con la pregunta por Dios,
como el gran referente de sentido. Las religiones quieren salvar, y
el obstáculo es el mal.
No es fácil definir el mal ni darle un contenido sustancial y
universal, rompe la visión armoniosa del ser y los distintos
sistemas metafísicos tienen que explicar su origen, su significado y
sus funciones.
Entre los distintos intentos de clarificarlo a lo largo de la historia de
la filosofía sobresalen dos teorías: la agustiana, que ha prevalecido
hasta el Medievo, y la de Leibniz, que se impuso en la época
moderna.
3. 1. El MAL DESDE LA ONTOLOGIA DE LA CARENCIA.
El mal es un reto para las religiones, que ofrecen salvación y
sentido. La filosofía y la teología analizan el mal desde las
distintas antropologías y filosóficas de la historia. En este
marco sobresale la gran síntesis agustiniana.
4. 1.1 LA HERMENÉUTICA BÍBLICAY PLATÓNICA DEL MAL.
San Agustín parte de una metafísica platónica, que está en contra
de las teorías dualistas que contraponían el bien y el mal como
principios equiparables y en conflicto.
La materia es lo más lejano a Dios y lo más cercano a la nada, san
Agustín recurre a la estrategia de denominar el mal “carencia de
bien”, a costa de relativizar su realidad ontológica, acusando al
hombre de las causas del mal.
5. El ser humano es autor y víctima del pecado.
El mito del paraíso original, la tensión prometeica
entre dioses y hombres.
El hombre es tan fuerte que cambia planes del
creador y la mortalidad es su castigo.
6. La biblia mantiene la idea de que el mal, como el bien,
proviene de Dios, que choca con bondad divina. (Am 3, 6; Is
45, 7; Ex 11, 4; Lv 26, 26; Dt 28, 22. etc.
En el antiguo testamento, se habla de un Dios genocida,
que ordena el asesinato de mujeres y niños, (Dt 20, 10-18; 1
Sam 15, 1-23) que acepta los sacrificios humanos.
7. Cuando se requiere racionalizar a Dios para
explicar el mal, lo más fácil es que la síntesis
fracase y se hable de un dios malo.
8. El Dios bíblico vengativo y castigador que castiga a los padres en
los hijos hasta la cuarta generación (Ex 20, 5), teoría retributiva
cruel, que ignora el sufrimiento del inocente y viola la ley del
talión (diente por diente, ojo por ojo), los inocentes pagan por los
culpables.
La clave teológica de pecado y castigo se vuelve contra una
divinidad que amonesta al perdón sin ser capaz de perdonar ella
misma, como explican las teorías de la satisfacción.
La idea del siervo sufriente deYahvé, el inocente que muere sin
odio ni venganza, poniéndose en las manos de Dios, escapa al
mecanismo de la retribución.
Dios premia a los buenos y castiga a los malos (Jer 12, 1; Job 7, 1-
21; 9, 21-24; 19; 21; 30- 31).
San Agustín minimiza la realidad ontológica del mal y la esparce
en cuanto acción humana.
9. 1.2. LA LUCHA CONTRA EL MAL.
El mal caótico se contrapone a la imagen
antropomórfica de un Dios que lucha contra él.
La creatividad ordenadora en el mundo simplemente
indica que el mal existe en la naturaleza, desde los
inicios y que Dios actúa contra él. Quiere decir que
el mal existe en la naturaleza y actúa entre ellas.
10. Admite el carácter inconcluso de la creación, el
problema cosmogónico ¿de dónde el mal? Pero la
metafísica clarifica el sentido ¿de dónde el bien? En la
que confluyen el creador y los hombres.
Es una creación incesante que explica la continuidad del
mundo sobre la base de la permanente intervención
divina y humana, Dios actuara en cuanto inspirador y
motivador de la acción, pero decidirá no cambiar el
mundo sin el hombre.
El mal es también la clave teológica para explicar lo
incompleto de la presencia divina en la historia, en que la
iglesia en su conjunto se convierta en un obstáculo para
el reino de Dios.
La alianza divina con la humanidad se pervierte desde la
ambigüedad del pueblo elegido, se presta a respaldar la
venganza y la violencia.
11. 2. EL MAL METAFÍSICOY LAS APORIAS DEL
CREADOR.
2.1 EL MEJOR DE LOS MUNDOS POSIBLES.
La razón evalúa la acción divina, sin someterse al misterio ni
asumir los límites de la teología negativa al hablar de Dios.
Dios actúa racionalmente, porque es la Razón suprema, a la
que apuntan las tradiciones platónica y aristotélica de un
nuevo sistema metafísico.
El ojo de Dios abarcaría el conjunto del universo y la infinidad
de posibilidades, y su bondad le inclinaría a escoger lo mejor
para el hombre.
La divinidad no se equivoca y es justa, aunque la realidad que
percibamos sea diferente, porque siempre tiene la razón en
una creación perfecta la que es posible para Dios,
absolutizando el orden como punto de partida, a la realidad
del desorden.
12. Leibniz fijó las tres dimensiones del mal, el mal físico: causado por la
naturaleza, el mal moral: causado por el hombre, mal metafísico: el resultante
global del ser creado. Los tres se relacionan y están vinculados, pero el
metafísico es la explicación ultima de la que deriva los otros, en la perfección
de lo creado.
El acto creador se basa en la capacidad de Dios para pensar todos los mundos
posibles y su voluntad realiza la opción mejor y de producir de lo que no es
divino que por definición no pude ser perfecto.
13. Solo es necesario asumir la negatividad de la vida como parte de la condición
humana. En Dios no puede haber mal porque es perfecto e infinito, pero sí en
todo lo creado, finito y contingente.
Hablar de la bondad de la creación y del mejor de los mundos posibles resulta
cínico para las personas afectadas por el sufrimiento, la angustia y el sinsentido.
La capacidad de hacer el bien es la ganancia resultante de poder obrar mal,
porque el hombre no es un autómata.
14. 2.1. Las aporías del creador.
Si el mal metafísico radica en la imperfección de lo creado,
nunca es superable, siempre somos y seremos criaturas finitas y
contingentes.
Leibniz dice que el mal es necesario y eterno.
La expectativa esperanzada en un Dios que supere el sinsentido
seria la contrapartida al mal presente desde el inicio cósmico e
histórico.
El mundo no es algo externo al hombre, sino que es parte de él
y de su esperanza de realización.
15. Pero la tradición cristiana sobre una superación final del mal y un
reino de Dios sin sufrimiento sería imposible de realizar según
Leibniz, ya que implicaría eliminar la “ creaturidad”
Dios que no puede evitar el mal al crear, lo va a superar
posteriormente, con lo que afirmamos que si puede evitarlo.
No podemos hablar de la creación desde la perspectiva racional
divina, que desconocemos podemos, inferir que sin el mundo es
contingente, hay un absoluto, pero no podemos ponernos en su
lugar para hablar del universo.
16.
17. 3. LA CRÍTICA DEL HUMANISMOATEOA LAS
TEODICEAS.
Dos elementos fundamentales han obligado a
replantear la teodicea y por ella el problema del
sinsentido que es: la revolución científica y la otra la
crisis de la tradición metafísica, que no puede
demostrar la existencia del creador.
18. 3.1. El significado amoral de los males naturales.
La perspectiva de la evolución ha posibilitado la naturalización del
mal, ha llevado al conformismo y a la resignación ante el “mal
inevitable”
19. la teoría de la evolución asume la lucha por la
supervivencia y la violación natural.Ya que la vida
se basa en el dominio y la pérdida de los más
débiles al explicar desde la evolución no hay más
que decir del mal, porque es parte de la vida
20. El mal es un problema para el que cree en
Dios, no para los que asumen una visión
científica del mundo. Las leyes científicas
ponen límites a las hermenéuticas filosóficas
y religiosas sobre el cosmos.
21. El mal físico es inherente a la condición viviente y no hay
escapatoria (la muerte, la reproducción de la vida se basa en la
desaparición de los seres vivos, los animales se comen unos a
otros, se alimentan de plantas) la vida y la muerte están
constituidos por átomos de carbono y oxígeno.
22. La concepción naturalista deTeilhard Chardin es
una concepción filosófica-teológica. (no
sabemos si hay otras condiciones de vida en
otros lugares desconocidos del universo, pero en
nuestro planeta, la obra creadora se realiza
mediante el dolor físico y la muerte de seres
finitos).
El mal natural forma parte de la vida.
No hay vida sin dolor y las leyes de la naturaleza
son amorales (no podemos juzgarlas sin buenas
o malas)
23. El mal hay que aceptarlo porque no hay escape posible.
(además si no conocemos otro mundo) no sirve para huir de
las exigencias del mundo o escaparnos a otro lugar.
No conocemos si hay otras galaxias con condiciones de
vida.
Hay que concluir que el universo factico que conocemos el
mal forma parte del orden planetario y es inevitable.
24. Podemos preguntarnos ¿por qué Dios ha
creado el universo con estas leyes?
Lo que habría que impugnar no es a Dios,
sino la obra misma de la creación.
Si Dios ha asumido la evolución con sus
costos y sufrimientos, no hay más remedio
que aceptar el mundo como es.
25. Las preguntas filosóficas y religiosas van más allá de los datos de la
ciencia. Desde la ciencia hay que rechazar al dios tapagujeros pero
desde la religión ¿Qué impide que Dios intervenga en el curso natural
para mitigar el dolor que produce?.
Como Dios no interviene en el mundo físico, la mejor respuesta es la
ciencia y el progreso, en la medida en que conozcamos el mal natural,
sus causas y sus leyes podemos curar enfermedades, prevenir males
potenciales y controlar mejor los desastres naturales.
26. Dios no envía enfermedades, ni desastres naturales, ni son
castigos divinos. La idea de que Dios premia o castiga, y de
que los fenómenos naturales son su resultado; es una
mentalidad religiosa que responde a una concepción
mágica de Dios.
La creación de Dios es una obra imperfecta e inacabada.
Existe el dolor. Dios no tiene la culpa de todo lo que
ocurre(males naturales), sino la naturaleza y sus leyes
27. Es normal que el ser humano se encuentra
afectado por un mal físico, recurra a Dios si es
creyente. La propuesta cristiana es vivir toda la
vida en la presencia de Dios.
El cristianismo no resuelve el mal, ni
teóricamente (explicándolo) ni prácticamente
(suprimiéndolo) pero enseña a afrontarlo y apela
a Dios.
Como afirma San Agustín, es normal que
recurramos a Dios en el dolor y en el gozo,
pidiéndole que nos conforte, capacite y
humanice.
28. Pedir en la enfermedad o en desastre natural no es
malo, vivir y esperar en Dios nos puede
confortarnos.
Diversos estudios científicos, antropólogos y
medicinales muestran que las personas creyentes
tienen mas capacidad para asumir el sufrimiento.
Si una experiencia religiosa ayuda, debe ser
respetada, incluso por los que no son creyentes. No
hay por qué rechazar las convicciones religiosas.
Desde la perspectiva física, la oración no cambia
nada.
29. Si el mundo ha sido creado por Dios y tiene
sus propias leyes, no tiene sentido que las
modifique. Las desgracias naturales ocurren
sin que nadie sea culpable, con intervención
del azar, que deriva de la evolución natural.
El mal es resultado de la libertad del hombre,
sufrimos física, psíquica y socialmente, que
es diferente al dolor animal o que tiene que
ver con el mal natural.
30. 3.2 . El mal global: el sentido de la vida.
El mal metafísico o global, que integra el físico y el
moral, no es el de la finitud e imperfección de lo
creado, sino la desesperación, el vacío de una vida
sin significado.
el problemas es, si es posible que la vida larga o
corta, que vivamos tenga valor y significado en si
misma.
31. Algunas teodiceas afirman que el mal es el precio de la
libertad.
La pregunta por el sentido de la vida depende de la
capacidad personal de generar un proyecto que no
degenere en auto destructividad ni en daño de los otros.
Cada ser humano tiene que afrontar los retos de la vida,
incluidos los males de su contorno.
32. 4. ¿CREER EN DIOS SIN UNATEODICEA?
4.1.El postulado cristiano de sentido.
La peculiaridad judía, en cuanto peores son los
acontecimientos, más aumenta su adhesión a Dios, se asume
la promesa de una redención final.
Las religiones viven de una confianza, todavía por realizarse,
que responde a la angustia del sinsentido. Esperar y aferrarse
33. 4.1.El postulado cristiano de sentido.
El mal religioso. Antes proclamaba al dios salvador,
ahora se convirtió en instrumento de la muerte.
Las religiones son especialmente peligrosas
cuando triunfan y sus iglesias se convierten en un
poder de este mundo, tanto mas afectada mayor
es su capacidad.
34. Dios no legitima la religión asesina ni a sus
representantes. Cada vez que una religión
mata, se convierte en “deicida” porque Dios
está con los asesinados.
Los representantes de la religión se ciegan
porque quieren preservar su código sacral.
Lo cristiano esta en buscar a Dios ante la dureza
de la vida. La intervención divina no hace
innecesaria la humana sino que la potencia.