Sobre premisas

1. La jerarquización del hombre en virtud del pensamiento
Confuciodecíaque “el hombresuperior piensaen la virtudy el hombrevulgar en la
comodidad” expresando con esto esencialmente la brecha entre aquellos llevados por el
conformismoylafacilidad, yquienesven másalláypersiguenloutópico, mostrando que la
diferenciaentre unoshombres y otros no se halla en la posición social y/o económica sino
enla capacidadintelectual,laformade pensaryactuar frente a lavida misma y la sociedad
estaultimacomoinstrumento de progreso.Aquelindividuo que hace de la comodidad una
formade vidaestarálimitadoporsi mismo al no asumirretos o tomar parte enla evolución,
social y humanaperse; mientrasque aquel que busca nutrir el intelecto, la personalidad e
incluso el espíritu, y aportar algo mas a la sociedad que una presencia tacita es el hombre
mas grande.
Para Confucioel conocimiento era solo una de las tres virtudes que el consideraba
universales,juntoconlabenevolenciaylavalentía, definíaaestasultimascomocontrolarse
a uno mismo, actuar con moralidad y el poder de alejar toda inquietud, respectivamente.
Popularmente conocemos que la valentía no es la ausencia del miedo sino el poder
conquistarese temor,yla benevolenciacomosinónimode tolerancia,inclusiveindulgencia.
Si se toma en cuenta aquello dicho por Descartes “je pense, donc je suis” que
traducido al español quiere decir “pienso luego existo” que o quien es el hombre que no
piensasiquieraenestastresvirtudes fundamentales, ¿seráacasoaquel que define Confucio
como un hombre vulgar, o menos que eso? Vano y orgulloso, aun cuando su posición no
sea elevada siempre se creerá este superior y permanecerá estancado en si mismo por
considerarse suficiente, el hombre que por el contrario piensa en tales virtudes nunca
sentiráque ha alcanzadoel dominio pleno de estas y/u otras virtudes, seguirá en busca de
un pocomas, pondráprimero enpráctica susideas,y después predicará a los demás lo que
él ya realiza.
¿Valdrá la pena entonces dar voz y voto al vulgo, si este esta conformado por
aquellos hombres incapaces siquiera de pensar en la virtud per se y fundamentalista?

2. ¿Puede lasociedadenfrentarse asi mismabajo esta paradoja de benevolencia y tolerancia
o sucumbirá ante un nuevo orden para bien o para mal?
Tibimar Paniccia
C.I.: 24.679.179
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