Los trastornos disruptivos del control de los impulsos y de la conducta (DSM-5, APA, 2013) incluyen afecciones que se manifiestan con problemas en el autocontrol del comportamiento y las emociones mientras que otros trastornos del DSM-5 pueden tratar sobre problemas de la regulación del comportamiento y las emociones, los trastornos disruptivos se traducen en conductas que violan derechos de los demás (por ejemplo: agresión, destrucción de la propiedad), o llevan al individuo a conflictos importantes frente a las normas de la sociedad o las figuras de autoridad.
2. INTRODUCCIÓN.
Los trastornos disruptivos del control de los impulsos y
de la conducta (DSM-5, APA, 2013) incluyen afecciones que
se manifiestan con problemas en el autocontrol del
comportamiento y las emociones mientras que otros
trastornos del DSM-5 pueden tratar sobre problemas de la
regulación del comportamiento y las emociones, los trastornos
disruptivos se traducen en conductas que violan derechos de
los demás (por ejemplo: agresión, destrucción de la
propiedad), o llevan al individuo a conflictos importantes frente
a las normas de la sociedad o las figuras de autoridad.
Las causas que subyacen en los problemas del autocontrol
del comportamiento y las emociones pueden
variar sustancialmente dentro de los trastornos disruptivos y
así como entre los propios individuos dentro del mismo grupo
diagnóstico.
Estos trastornos se dan de forma más frecuente en el sexo
masculino que en el sexo femenino.
3. INTRODUCCIÓN.
A menudo los trastornos disruptivos se presentan de
forma comórbida, es decir, asociada, al trastorno
por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) en sus
formas impulsivas-hiperactivas, cuando existen factores
desencadenantes biológicos y/o ambientales (entorno) como
consumo de sustancias, entornos desestructurados,
experiencias de bullying, problemas socio-afectivos o
antecedentes familiares. Estas situaciones pueden actuar de
catalizadores para la presencia de este tipo de patologías,
especialmente en la etapa de la adolescencia.
Para prevenir este tipo de patologías asociadas es
fundamental el diagnóstico precoz y una
intervención temprana eficaz y multimodal de los síntomas.
Los trastornos disruptivos del control de los impulsos y
de la conducta incluidos en el DSM-5 (APA, 2013):
4. TRASTORNO NEGATIVISTA DESAFIANTE
(TND)
El Trastorno negativista desafiante se
presenta mediante un patrón de enfado/
irritabilidad, discusiones/actitud
desafiante o vengativa y que se exhibe
durante la interacción por lo menos con un
individuo que no sea un hermano.
5. TRASTORNO EXPLOSIVO INTERMITENTE
(TEI)
El Trastorno Explosivo Intermitente (TEI)
es un trastorno psicológico que se
caracteriza por la presencia de un patrón
aleatorio de reactividad conductual
agresiva y desproporcionada sin un
motivo ni objetivo concreto,
ocasionando alteraciones o perjuicios
graves en el entorno físico y social y el
propio individuo.
6. TRASTORNO DE CONDUCTA
El trastorno de conducta se manifiesta a
través de un patrón repetitivo y persistente
de comportamiento en el que no se
respetan los derechos básicos de otros,
las normas o reglas sociales propias de
la edad.
7. TRASTORNO DE LA PERSONALIDAD
ANTISOCIAL
La persona que presenta una personalidad antisocial
manifiesta un patrón general de desprecio y violación
de los derechos de los demás que se presenta desde
la edad de 15 años. Entre los compartimientos
recurrentes encontramos: fracaso para adaptarse a las
normas sociales en lo que respecta al comportamiento
legal; irritabilidad y agresividad, indicados por peleas
físicas repetidas o agresiones; falta de remordimientos,
como lo indica la indiferencia o la justificación del haber
dañado, maltratado o robado a otros; despreocupación
imprudente por su seguridad o la de los demás,
irresponsabilidad persistente, indicada por la incapacidad
de mantener un trabajo con constancia o de hacerse
cargo de obligaciones económicas, impulsividad o
incapacidad para planificar el futuro, etc.
8. PIROMANÍA
La persona denominada pirómana muestra un
comportamiento caracterizado por lareiteración de
actos o intentos de prender fuego a las
propiedades u otros objetos, sin motivo aparente
junto con una insistencia constante sobre temas
relacionados con el fuego y la combustión. Estas
personas pueden estar también interesadas de un
modo anormal por coches de bomberos u otros
equipos de lucha contra el fuego, con otros temas
relacionados con los incendios y en hacer llamadas
a los bomberos.
9. CLEPTOMANÍA
La cleptomanía es un trastorno psicológico por el
cual la persona denominada cleptómana o
cleptomaníaca tiene una conducta repetitiva de
apropiarse de aquello que le es ajeno. Hay que
distinguirlo de la actividad del ladrón esporádico o
habitual, cuyo objetivo es el enriquecimiento ilícito
buscando un beneficio personal. En cambio, en la
cleptomanía, el momento del robo se convierte en sí
mismo en la finalidad del acto, no persiguiendo un
enriquecimiento personal ni el perjuicio de la
persona a quien roba.
10. OTRO TRASTORNO DISRUPTIVO, DEL
CONTROL DE LOS IMPULSOS Y DE LA
CONDUCTA ESPECIFICADO
Esta categoría se aplica a presentaciones en las que
se predomina los síntomas característicos de un
trastorno disruptivo, del control de los impulsos y de
la conducta, que causan un malestar clínicamente
significativo o deterioro en las aéreas social, laboral
o de otro tipos importante para el individuo, pero
que no cumplen todos los criterios de ninguno
de los trastornos de la categoría diagnostica de
trastorno disruptivo, del control de los impulsos y
de la conducta.
11. BIBLIOGRAFÍA.
American Psychiatric Association (2002). Manual
Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales
(DSM-IV-TR), 1ª Ed. Barcelona: Editoral MASSON.
American Psychiatric Association (2014). Manual
Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales
(DSM-5), 5ª Ed. Madrid: Editoral Médica
Panamericana.