Artículo de Albert Riba en Capital Humano sobre la Gestión del Error y el Fracaso

1. DOSSIER GESTIÓN DE CONFLICTOS
Ficha técnica
Título: Cómo aprender del fracaso
Autor: RIBA TRULLOLS, Albert
Fuente: Capital Humano 274, Marzo 2013
Resumen: Fracasar no es malo, lo malo es pasar por ello sin obtener una lección útil.
Ya que fracasar es sin duda un hecho doloroso, empecemos por aceptarlo, darle vi-
sibilidad, analizarlo y acabaremos convencidos de que “Fracasar es una suerte”. Para
llegar a esta convicción, el autor nos propone elaborar nuestro “currículum fracasional”
que nos permita ver con perspectiva todos fiascos de nuestra vida. Hacer este ejercicio
implica realizar un análisis profundo que muchas veces puede llegar a ser doloroso.
Sin embargo, cuando se consigue llevar a cabo, permite dar visibilidad a los errores del
pasado y entender qué motivos los ocasionaron.
Descriptores: Gestión de Conflictos / Desarrollo Personal / Desarrollo Profesional
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2. Cómo aprender
del fracaso
Desarrollar la capacidad de tratar el fracaso con actitud
positiva y constructiva es un propuesta que siempre
concluye de la misma manera: aún hay tiempo para
aprender de los errores. Un profundo y sincero proceso
de reflexión y análisis de todos los fiascos personales y
profesionales puede resultar tan positivo para nuestro
desarrollo que un día nos sorprendamos pensando en
lo afortunados que fuimos al fracasar.
Albert Riba Trullols, profesor de EADA y CoFounder InPreneur
R
ecientemente tuve la oportunidad en seco. Debido a este suceso aprendí, entre otras
de impartir el taller “Cómo apren- cosas, que en aquella ocasión había fracasado porque
der del fracaso”, en la escuela de no me había cuidado, pero que aún estaba a tiempo
negocios EADA y en el marco de la para aprender.
Global Entrepreneurship Week. Esta
propuesta nace de un proceso de reflexión y análisis Después de este tremendo proceso, me surgió la po-
profundo de todos y cada uno de mis fracasos persona- sibilidad de colaborar en distintos medios de comu-
les y profesionales, llevada a cabo en el verano de 2010, nicación de radio y prensa escrita. Esto me llevó a
cuando un problema de salud me obligó a detenerme >
tener una sección llamada “La suerte del fracaso” en >
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3. > la emisora catalana Rac1. Aquí es donde he tenido la der de una cosa cuando somos capaces de analizarla
valiosa oportunidad de testar, comparar y validar todos y compartirla con nuestro entorno. Y esto , qué duda
estos aprendizajes. cabe, no se puede hacer si antes no se da visibilidad al
fracaso sin temor ni vergüenza.
De todo esto surgió el taller “Cómo aprender del fracaso”,
que principalmente tiene dos claros objetivos: Dar visibilidad al fracaso es una situación hartamente
compleja, ya que el desastre afecta a las emociones de
1. Mostrar una visión positiva, pues el fracaso nos las personas y a su ego. En otras palabras, el fracaso
está ofreciendo la oportunidad de aprender y salir rompe y tira por los suelos aquello con lo que hemos
mucho más reforzados si aprovechamos los apren- soñado durante un largo tiempo, aquello que nos ha
dizajes. ilusionado tanto y aquello a lo que hemos dedicado
2. El fracaso está en todas partes y no solo en el gran esfuerzo, mucho tiempo, buenas dosis de energía
mundo de los emprendedores. Está latente –y muchas o incluso dinero.
veces escondido– en todo tipo de organizaciones,
sean grandes o pequeñas. Cuando esto sucede, normalmente las personas “toca-
mos fondo”. Lo que debemos entender es que salir de
Impartir estos talleres sobre el fracaso me está permi- la oscuridad del fracaso es posible, pero solo haciendo
tiendo integrar en una misma aula estos dos objetivos. dos cosas: dándole la visibilidad que comentábamos o
Además, provoca que todos los seminarios estén llenos bien escondiéndolo debajo de una alfombra para que
de asistentes que normalmente se van contentos y nadie se dé cuenta de que está ahí. Por desgracia, ésta
animados. Es muy gratificante. última es la situación más común en nuestro país, y es
la alternativa errada.
Apenas nos adentramos en el contenido, lo primero que
me dicen la mayoría de las personas cuando surge la Ponerlo debajo de una alfombra es una opción ten-
palabra “fracaso”, es la típica frase: “En Estados Unidos, tadora que casi todos hemos hecho, algunos hacen y
si uno fracasa, se valora mucho; pero aquí, inmediata- seguro todos haremos alguna vez en un futuro. Pero
mente te castigan”. lo más importante es que, de vez en cuando, debemos
levantar la alfombra para dar visibilidad a estos errores
No diré que en cierto punto esta afirmación es cierta, y así poder aprender.
porque en gran parte lo es, pero lo que sí diré es que
cambiar esta percepción del fracaso depende solo de Podemos escoger no hacerlo y dejar enterrados todos
nosotros mismos y de nadie más. los problemas, errores o fracasos que llevamos en
nuestra mochila, pero dejarlos allí solo tiene conse-
Depende de nuestra voluntad y capacidad de proporcionar cuencias negativas en un futuro. Tarde o temprano,
la máxima visibilidad al fracaso para ponerla en primer plano incluso años después, alguna persona vuelve a levantar
sin ningún tipo de problema, prejuicio, rubor o miedo. En la dichosa alfombra y sale a la luz todo aquel polvo,
el fondo, ésta es la verdadera diferencia entre Estados Uni- aquellos problemas enmarañados, todos los miedos
dos y España: la capacidad de tratar el fracaso con actitud y, entonces, gestionarlos es muchísimo más complejo,
positiva y constructiva. por no decir casi imposible.
Por todos estos motivos debemos dar visibilidad al
DAR VISIBILIDAD AL FRACASO fracaso y a todos los componentes que lo provocan.
Debemos exponer, analizar y gestionar esos miedos
En nuestro país fracasar también está permitido, pues que tenemos en el momento de abordar algún proyecto,
realmente muchas personas lo estamos haciendo. Pero ver en qué nos equivocamos y, sobre todo, analizar
el problema es que aún tolerando el fracasar, la gran qué lecciones podemos aprender para no repetir el
mayoría de veces no lo afrontamos y, así, no se puede error en un futuro.
aprender.
Citar estos puntos puede parecer muy simple pero,
Por eso siempre digo: “Fracasar no es malo. Lo malo es realmente, esta simplicidad es tremendamente difícil
no aprender del fracaso”. Pero solo con esto tampoco de conseguir porque es necesario cumplir tres requi-
hay suficiente, puesto que únicamente podemos apren- sitos sin excepción: no perder la dignidad, realizar un
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4. análisis sincero y exhaustivo, e implantar medidas con permite predisponer la mente y el cuerpo en una actitud
la máxima rapidez. constructiva, positiva, plena de fuerza y, sobre todo,
valorando las capacidades de uno mismo.
Es imprescindible mantener la dignidad de cara a uno
mismo y frente a nuestro entorno, con el fin de saber
asumir realmente la causante que ha provocado el el “currículum fracasional”
fracaso y, sobre todo, saber afrontarlo con el objetivo
de aprender de la situación. Hasta ahora hemos hablado de que debemos dar visi-
bilidad al fracaso, pero sobre todo, decíamos, debemos
Solo podremos aprender del fracaso si, una vez asumido afrontarlo con dignidad para interactuar rápidamente
con dignidad, somos capaces de realizar un análisis de con la finalidad de aprender. ¿Con qué método? Es aquí
todos esos puntos en los cuales hemos fallado. También cuando aparece el “currículum fracasional”.
debemos observar todos aquellos factores externos
que han propiciado esta situación. Podemos culpar a El currículum fracasional es una evolución de los cu-
los demás pero debemos también mirar todo aquello rrículums profesionales. En lugar de presumir de unos
que sí depende de nosotros mismos porque es en es- estudios, de una experiencia laboral, de saber hablar
tos puntos donde resulta más fácil poder interactuar idiomas y más, se focaliza solo en los fracasos. Es decir,
y mejorar con decisión. contempla todas aquellos meteduras de pata personales
y profesionales que nos ha tocado vivir. Pueden ser
Una vez hemos encontrado los puntos que han oca- fracasos en los estudios, mal amor, problemas de salud
sionado el fracaso y los hemos analizado a fondo, ten- por no cuidarse, un trabajo del que nos expulsaron o
dremos que definir rápidamente un plan de acción que una empresa cerrada.
nos permita tomar medidas lo antes posible. Es decir,
podemos dedicar algún tiempo “a quejarnos y llorar”, ¿Y cómo se hace este currículum? Es muy sencillo, pues
pero debemos invertir más tiempo aún en aprender solo implica dos puntos:
para mejorar.
−− Hacer la descripción actual de todo aquello que se
tiene, de lo que uno se siente orgulloso. En otras
el duelo palabras, todo lo que la persona ha conseguido
hasta la fecha. Todo esto debe ir acompañado con
En este punto entra en juego un concepto muy impor- una foto en la que uno se guste, considere que está
tante que normalmente asociamos a otros dramas, pero guapo, risueño y, sobre todo, orgulloso.
el fracaso, también lo necesita: es el luto. −− El segundo es introducir una lista de los fracasos
anotando en una columna tres puntos claramente
Todo fracaso, sea emocional o profesional, sea de pa- diferenciados: una aproximación de la fecha en que
reja o de empresa, sea de amistad o sea con un cliente, se produjo el fracaso (Ej: 1986-1992), descripción
necesita un periodo de duelo. Este tiempo es distinto del fracaso (Ej: fracaso escolar) y, en tercer lugar, el
en cada persona y en cada situación, como sucede motivo (Ej: motivación nula).
con todo. Por ejemplo, alguien optimista normalmente
suele levantarse más rápido que el pesimista. Pero una Hacer este ejercicio implica realizar un análisis profun-
persona de condición pesimista también aprende de do que muchas veces puede llegar a ser doloroso. Sin
sus errores y gestiona su luto aunque, por lo general, embargo, cuando se consigue llevar a cabo, permite
lo haga con un tempo más lento. dar visibilidad a los errores del pasado y entender qué
motivos ocasionaron el fracaso.
Una vez superado el luto es cuando la persona se
encuentra capaz de analizar con mucha frialdad el fra- Como hemos podido ir viendo en este artículo, fracasar
caso y ver si todas aquellas sensaciones, causantes o es un hecho doloroso y lo primero que debemos hacer
justificantes del mismo, que ha pensado durante el luto, es aceptarlo. Si somos capaces de darle visibilidad, de
son ciertos o no. analizarlo y de aprender, podremos acabar convencién-
donos de lo que llevo tiempo diciendo en mi sección
La gestión del fracaso, una vez la persona lo ha asimila- en la radio y en mis charlas y talleres: “Fracasar es una
do como proceso de mejora personal y organizacional, suerte”.¢ >
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