El documento describe las competencias clave que los trabajadores mexicanos deben poseer y que los empleadores deben fomentar para promover la innovación. Estas competencias incluyen conocimientos técnicos específicos del puesto de trabajo, habilidades como la resolución de problemas, comunicación y trabajo en equipo, y actitudes como la ética, compromiso con la calidad y respeto por la diversidad. Cada trabajador posee competencias específicas de acuerdo a su rol, pero no necesariamente domina todas las competencias al máximo nivel.