ACERTIJO CÁLCULOS MATEMÁGICOS EN LA CARRERA OLÍMPICA. Por JAVIER SOLIS NOYOLA
Primer día de clase
1. Primer día de clase
El primer día de clases es un hito en la vida del niño que se siente
grande porque empiezael colegio donde aprenderá a leer y escribir. Sin
embargo,se trata de una situación nueva que lo puede asustar.
Entonces es comúnver escenas de llanto desesperado y de padres que
no saben si irse con sentimientos de culpa o quedarse hasta que el
retoño deje de llorar.
"La mejorforma de prepararlos ante la entrada a clases es contándoles
lo que va a pasar y entusiasmándolos los días previos",explica la
psicólogay académicade la escuelade Psicologíade la Universidad de
Chile, Tania Donoso.Hay que enfatizar que el niño ya está grande y que
en la escuelava a aprender cosas nuevas y encontrar amigos.
Para ayudarlo se le puede contar como fue para el papá o la mamá
entrar a clases,o para sus hermanos mayores si los tiene. También se
le puede entusiasmar comprando el uniforme juntos o usando algunos
de los útiles adquiridos,por ejemplo,pintando con los lápices de
colores.
Los niños enfrentan su primer día de clases de distintas formas
dependiendode factores como su temperamento y experienciaprevia.
Es más fácil para pequeños que han asistido al jardín infantil o han
estado expuestos a diferentes ambientes sociales y están
acostumbrados a enfrentar distintas situaciones. Si se trata de un hijo
único que nunca ha ido al jardín, le puede resultar más difícil separarse
de los progenitores."Se le puede decirque para él va a ser más
entretenido jugar con niños de su edad que seguir jugando con la mamá
o el papá", señala la psicólogaDonoso.
El día de entrada a clases hay que estar tranquilos y demostrarempatía.
Uno puede calmar sus temores diciéndole:"yo sé qué es difícil porque
2. no conoces a nadie, pero las profesoras te van a cuidar y pronto vas a
tener muchos amigos.", indica Tania Donoso.
Si llora desesperadamente hay que consolarlo un momento pero
sobretododarle tranquilidad con una actitud serena. Luego anunciarle
que lo vendrán a buscar al término de la jornada e irse. "Si no existe una
rutina establecidapor el colegio de que los papás se queden con sus
hijos, es mejor irse cuando los demás padres se van", explica la
psicóloga."Si uno se queda, a la angustia de la separación se suma la
vergüenza que al niño le produce que sus compañeros lo vean llorar",
agrega.
Cuando termina el primer día hay que mostrarse interesados por lo que
el niño hizo y seguirlo reforzando positivamente. Decirle por ejemplo,
"qué lindo lo que pintaste, mañana vas a aprender otras cosas bonitas".
Al día siguiente, y durante el resto de la semana, hay que mantener la
actitud positiva y de calma cuando se lo va a dejar. El período de
adaptación suele durar una semana, con una eventual recaída el lunes
siguiente tras el fin de semana con los padres.Si a las dos semanas el
niño continúa con llantos, se trata de problemas más serios de angustia
de separación, por lo que es recomendableconsultar a un psicólogo,
explica Tania Donoso.