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Enfoque Salud -Enfermedad
1. BLOQUE TEMÁTICO 2
ENFOQUE SALUD-ENFERMEDAD
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DOCENTE: JOSÉ SANTOS
M.
2. LECTURA RECOMENDADAS
Lecturas recomendadas:
Barriga, S., León, J.M., Martínez, M.F. y Jiménez, I.F., Psicología de la salud. Aportaciones desde
la Psicología Social. Sevilla. Sedal.
Buceta, J.M. y Bueno, A.M. (1993). Modificación de conducta y salud. Madrid. Eudema.
Pelechano, V., Botella, C., Blanco-Picabia, A., Belloch, A., Echeburúa, E., Gil-Roales, J. y
Luciano, M.C., Psicología Clínica y/o de la Salud. Valencia. Promolibro.
Rodríguez, J. y García, J. (1996). Psicología Social de la Salud. En J. L. Alvaro, A. Garrido y J.R.
Torregrosa, Psicología Social Aplicada (pp. 352-380). Madrid: McGraw-Hill.
Rodríguez Marín, J. (1995). Psicología Social de la Salud. Madrid. Síntesis.
Recursos a través de Internet:
http://www.juntadeandalucia.es/averrores/recursos/area-salud.php3
http://www.xtec.es/~imarias
http://www.educacionparalasalud.com/index1.htm
11. LAS CONDUCTAS DE ENFERMEDAD Y EL
PROCESO DE ENFERMEDAD
Sicología Clínica en el contexto Salud-Enfermedad.
CONDUCTAS DE ENFERMEDAD
Taylor (1990):
Conductas de enfermedad: acciones que las personas realizan cuando creen que están
experimentando síntomas de enfermedad (ej. Ir al psicólogo clínico, etc.)
Enfermedad: implica una patología documentada.
Las conductas de enfermedad nos muestran cómo una persona se adapta a la experiencia
de un problema de salud y cómo asume y representa el papel de persona enferma.
12. 3. LAS CONDUCTAS DE ENFERMEDAD Y EL
PROCESO DE ENFERMEDAD
OTRAS VISIONES DE SALUD MENTAL
PROCESO DE ENFERMEDAD
Percepción e interpretación de síntomas
Percepción: naturaleza de los síntomas, diferencias individuales, factores situaciones, factores
emocionales, experiencia y aprendizaje.
Interpretación: experiencia previa, creencias, expectativas, actitudes referidas a la enfermedad,
actitudes, creencias y expectativas del grupo de pertenencia, materialidad de los síntomas (si
afectan a una parte vital o no)
Asunción del rol de enfermo
Búsqueda de ayuda
14. SALUD
Es el estado de completo bienestar físico, mental, espiritual,
emocional y social, y no solamente la ausencia de afecciones o
enfermedades.
La salud implica que todas las necesidades fundamentales de
las personas estén cubiertas: afectivas, sanitarias,
nutricionales, sociales y culturales. (OMS. 1948).
15. SALUD
“La salud humana es un proceso social en su origen,
que tiene repercusiones ecológicas, en el ambiente
de vida dela comunidad y que finalmente, produce en
el individuo, según las circunstancias (favorables o
negativas), el estado ecológico de salud o el
desequilibrio ecológico que llamamos
enfermedad”(San Martín, H. 1984).
16. ENFERMEDAD:
(OMS) es un proceso y el status
consecuente de afección de un ser
vivo, caracterizado por una alteración
de su estado
17. ENFERMEDAD:
Normal de salud. El estado y/o
proceso de enfermedad puede ser
provocado por diversos factores, tanto
intrínsecos como extrínsecos al
organismo enfermo: estos factores se
denominan noxas
18. PROCESO SALUD - ENFERMEDAD
Sicología Clínica en el contexto
Salud-Enfermedad.
Es la resultante de un conjunto de
factores o necesidades no
satisfechas y algunas veces no
percibidas, que reflejan, las
condiciones de vida de la población
de pendiendo de la
estructura económica y de la
organización social del país (OMS)
20. EVOLUCIÓN DEL
CONCEPTO SALUD-
ENFERMEDAD
1. Concepción tradicional Desde los albores de la humanidad,
el ser humano ha hecho esfuerzos de diversa naturaleza por
mantener su salud, y desde la antigüedad se ha considerado
que existen personas con capacidades para restablecerla, para
quienes la mayoría de las explicaciones acerca de la salud y la
enfermedad, se fundamentaban en la existencia de dioses que
curaban y en las virtudes mágicas de encantamientos y
hechizos.
21. EVOLUCIÓN DEL
CONCEPTO SALUD-
ENFERMEDAD
En las culturas primitivas, el brujo era curandero por
dos virtudes: por su conocimiento de plantas y
preparación de brebajes y por su cercanía con los
dioses. Las plantas de donde se extraían las
infusiones y los bebedizos eran albergue de los
espíritus de los dioses, que debían ser invocados
mediante ceremonias y rituales.
22. EVOLUCIÓN DEL
CONCEPTO SALUD-
ENFERMEDAD
2. Concepción moderna En los años noventa, se
inicia el estudio de la salud desde las
representaciones sociales que tienen los individuos y
la sociedad en general. Herzlich, citada por Viveros,
M. 1993, señala cómo los individuos se expresan a
propósito de la salud y la enfermedad en un lenguaje
elaborado a partir de la relación que establecen con
la sociedad.
23. EVOLUCIÓN DEL
CONCEPTO SALUD-
ENFERMEDAD
Es así como en la actualidad se abre paso a un
análisis de la salud y la enfermedad, no como
entidades cuya definición es evidente, sino como el
resultado de procesos sociales, elaboraciones
intelectuales y continuos intercambios de la
colectividad.
24. EVOLUCIÓN DEL
CONCEPTO SALUD-
ENFERMEDAD
3. Concepción Posmoderna No se niega que haya
relaciones causales, ni tampoco se niega en principio
que haya cambios de carácter histórico. Sin
embargo, tanto las relaciones causales como los
desarrollos diacrónicos, se entienden en función de
relaciones de significación y de formaciones
sincrónicas; se opone así al causalismo y al
historicismo.
27. Dimensiones de la
anormalidad sicológica.
Son útiles para juzgar la normalidad o
anormalidad, la adaptación o no de los
individuos en un entorno social, cultural
y laboral específico.
28. Dimensiones de la
anormalidad sicológica.
El sufrimiento
“dolor del alma”, la falta de confort, el
malestar consecuente con referentes
cognitivos y con activos de algún
trastorno o padecimiento.
Afectivo (Subjetivo)
29. Dimensiones de la
anormalidad sicológica.
La conducta maladaptativa (conductual)
La incapacidad del individuo de interactuar
con su medio ambiente, de afrontar los
problemas de manera exitosa y de ajustarse
y funcionar ante el cambio dentro de las
exigencias de su entorno.
30. Dimensiones de la
anormalidad sicológica.
La conducta maladaptativa (conductual)
La incapacidad del individuo de interactuar
con su medio ambiente, de afrontar los
problemas de manera exitosa y de ajustarse
y funcionar ante el cambio dentro de las
exigencias de su entorno. (coping)
31. Dimensiones de la
anormalidad sicológica.
Irracionalidad (Cognitiva)
Capacidad o incapacidad del individuo
para pensar racionalmente y analizar
de manera inteligente su situación,
conducta o sentimientos.
32. Dimensiones de la
anormalidad sicológica.
Irracionalidad (Cognitiva)
También la incapacidad para cambiar
una conducta a pesar de la convicción
de que ésta es negativa.
Tiene que verificar dos o tres veces que
las puertas estén cerradas a pesar de
las medidas cotidianas de seguridad.
33. Dimensiones de la
anormalidad sicológica.
Pérdida de control
El control, consistencia de una persona
con respecto a su conducta.
Connota la capacidad para predecir la
reacción de una persona conocida ante
un evento determinado.
34. Dimensiones de la
anormalidad sicológica.
Pérdida de control
Personas con labilidad afectiva o con
carácter explosivo.
Patología mental, asociados a
episodios de agresión.
35. Dimensiones de la
anormalidad sicológica.
Convencionalidad
Relación entre la conducta o creencia
particular de un individuo y la
generalidad de las creencias o
conductas de la comunidad o cultura
específica a la cual pertenece.
36. Dimensiones de la
anormalidad sicológica.
Convencionalidad
Connota la aceptación, la visualización,
estima y connotación social de
determinadas conductas o pensamientos.
37. Dimensiones de la
anormalidad sicológica.
Incomodidad de terceros (subjetiva)
Juzga la salud mental o la capacidad
de convivencia social y laboral de una
persona.
39. La rana y el alacrán
Cuentan que en una ocasión el alacrán
le pidió a la rana que le pasara al otro
lado del río pues necesitaba visitar a un
familiar que estaba enfermo. La rana le
miró con suspicacia y se negó
diciéndole que de seguro le clavaría sus
mortales tenazas, el alacrán, con
expresión muy humilde, le insistió
diciéndole que nada de eso iba a pasar,
que estaba muy angustiado por poder
estar al lado de su pariente y que no le
haría daño bajo ninguna circunstancia.
40. La inocente rana cedió ante su petición, subió al escorpión a sus
espaldas y comenzó, nadando, a atravesar el río,… a los pocos metros el
alacrán tuvo el súbito impulso de punzar a la rana, pero de inmediato se
arrepintió pensando que había empeñado su “palabra”, a los pocos
instantes la tentación aumentó y se dijo a sí mismo que tenía que
controlarse, pero cuando ya estaban en medio del río, en la parte más
caudalosa, no pudo evitar hundir la temida ponzoña en la espalda del
infeliz batracio, quien aún muriendo tuvo tiempo de preguntar al
agresor: “¿Por qué lo hiciste si también morirás ahogado ahora?”, a lo
que el canalla sólo atinó a decir: “De verdad que lo siento, pero no pude
evitarlo, ¡es mi esencia!”.
41. Delimito mi profesión, pero
también el tipo de persona
que se convertirá en
profesional.
Conjuntamente con otros campos de la
Psicología Clínica comparte la tarea de incrementar el
conocimiento sobre los principios del
funcionamiento psicológico de las “personas en
general”, pero su preocupación distintiva es con
los problemas humanos de
“personas en particular… no basta con ser es importante
parecer”.
KORCHIN
42. Delimitar la profesión
Retos del Psicólogo Clínico en la
practica Clínica.
Implicaciones curriculares para la
formación
43. DELIMITAR LA PROFESIÓN
(Pérez, C. 1998) los retos del Psicólogo
Clínico son:
Formación de carácter científico practico-
establecer estándares científicos.
Tener competencias para el trabajo eficiente
para trasformar y mejorar la condición del
paciente.
Licenciatura no tienen la madurez para
abordar problemas de los adultos.
44. DELIMITAR LA PROFESIÓN
Especialización o Posgrado.
Trabajo multidisciplinario
Exigencias de formación VS. Curriculum.
Prerrequisito: dotado de salud mental y
equilibrio psicológico,
Juicio Critico, apertura, empatía (no
forma la academia- la vida misma y la
reflexión propia)
46. Personas en peculiares situaciones
existenciales. La universalidad existencial de
los problemas humanos
• Se acoge la declaración formal de que la Psicología Clínica está
comprometida con la comprensión y mejoría del funcionamiento humano
(Korchin), o que sus dos funciones primordiales sean comprender y
ayudar a cambiar a las personas (Bernstein)
• En todos los casos no se trata de problemas abstractos, se trata de
personas en peculiares situaciones existenciales en que el malestar, el
dolor y el sufrimiento, o simplemente el desconocimiento, la ambigüedad
o la incertidumbre las pone en una muy confusa interacción con el
entorno, con los demás, pero sobre todo consigo mismos.
47. • Lo anterior presupondría en consecuencia legitimar la inevitable
existencia de los problemas humanos, frente a la ingenua
interrogante que presupone una infundada sensación de
invulnerabilidad de “¿por qué me tiene que suceder esto
precisamente a mí?”, y que tiene una sola respuesta, ¡sencillamente
porque estás vivo!; estar vivo presupone no sólo la falibilidad (Ellis,
Dryden) sino la no inmunidad a los problemas humanos.
• Como lógica derivación la práctica profesional del psicólogo clínico,
aún conociendo los postulados de las clasificaciones de
enfermedades mentales existentes (DSM-IV y CIE-10) está
convocada a partir del esclarecimiento de que “tener problemas”
no equivale a estar “enfermo”, a tener siempre presente el vetusto
paradigma de la medicina griega de “que no existen enfermedades
sino enfermos.”
• Es decir, personas en peculiares situaciones existenciales en que
objetiva o subjetivamente, y regularmente ambas, está
comprometido su bienestar.
48. CARACTERÍSTICAS DEL PERFIL DE UN PSICÓLOGO
• Tiene control y comprende emociones.
• Maneja habilidades sociales.
• Tiene capacidad para relacionarse con los demás.
• Presenta una personalidad abierta y receptiva.
• Se pone en el lugar del otro y sabe escuchar.
Además, el futuro psicólogo debe tener una buena
autoestima y capacidad para liderar y motivar
grupos.
49. Las tres principales recomendaciones del informe (Shakow, P 2001)
para el entrenamiento clínico fueron las siguientes:
• 1. El psicólogo clínico sería formado antes que nada
como psicólogo (y por tanto como científico) y
contando con ello como profesional práctico.
• 2. El entrenamiento clínico sería tan riguroso como
cualquier otra ciencia de la medicina, lo que supone
el establecimiento de unos criterios estándar de
postgraduación.
• 3. El contenido de la preparación clínica se centraría
en la evaluación, el tratamiento y la investigación.
50. Prevención y Promoción de la Salud
• Sus funciones preventivas y promotoras de salud se centrarán en:
• - Capacitar a los mediadores de las redes sociosanitarias de la
comunidad diana para desempeñar funciones de promoción de la
salud y de prevención.
• - Analizar la problemática de las personas con prácticas de riesgo,
elaborando estrategias encaminadas a aumentar el contacto con
ellas y valorando la adecuación de la oferta real de tratamiento a
dicha problemática.
• - Incrementar el nivel de conocimientos de las personas en situación
de riesgo de la comunidad, sobre la enfermedad o enfermedades
correspondientes, o sobre los factores de riesgo.
• - Fomentar y promover los hábitos de salud en la población general.
• - Promover una mayor accesibilidad a los instrumentos preventivos.
• - Dar a conocer diversos recursos humanos y materiales para la
prevención y promoción.
Notas del editor
Uno de los primeros paradigmas que se les enseña a los estudiantes de Psicología en
las Universidades es el “carácter único e irrepetible de cada individuo” que se plasma
finalmente en esa polémica categoría que es la personalidad. Y más allá de la
preferencia profesional de identificarse o no con dicho término, lo cierto es que cada
persona tiene su propia idiosincrasia, su identidad única e irrepetible que matiza todo
su quehacer, incluidos no sólo los problemas en que implica, sino también la manera
en que los enfrenta.
Para el psicólogo clínico no basta con saber de la existencia de problemas, es
imprescindible conocer no sólo quién es quien los tiene sino, sobre todo, cómo les
hace frente; nadie está excluido de la posibilidad de “tener problemas”, los problemas
son consustanciales a la existencia humana, pero cada persona pone a los mismos su
sello distintivo en función de una infinita diversidad de variables (biológicas como la
constitución física y la salud, e inclusive el momento del ciclo vital en que se
encuentre; sociales como la pertenencia a determinada clase social, el acceso a redes
de apoyo social o la tenencia de determinado empleo; o psicológicas como la
cosmovisión, la autoimagen, el optimismo o la tan polémica inteligencia, incluida su
moderna vertiente emocional), sin ignorar la historia individual de la que es producto
la persona concreta, así como las situaciones peculiares que atraviesa una persona y
las demandas concretas a que es expuesto, pero sobre todo las interacciones entre
ambas.
En este sentido, Korchin hace una interesante reflexión acerca de que personas de
diferentes antecedentes, procedencias culturales y códigos de valores difieren
sustancialmente en sus actitudes (de credibilidad o no) hacia uno u otro tipo de ayuda
psicológica, su disposición a buscar dicha ayuda e incluso la efectividad de su respuesta
ante tales intervenciones, todo ello atravesado por el desarrollo de la cultura; durante
muchos años en Cuba las personas no querían asistir al psicólogo, o no querían que se
supiera que lo hacía, por temor a ser etiquetadas de “enfermas de los nervios”,… una
vez que tal profesional se “popularizó”, el psicólogo es consultado por cualquier
inquietud existencial de las personas en sus vidas cotidianas.
Merece en este acápite una particular consideración acerca de la polémica relación
entre los aspectos estáticos y dinámicos de las personas, en la expresión de su
subjetividad y comportamiento; si algo distingue a la vida y peculiarmente a los
humanos a lo largo de todo su ciclo vital es su carácter dinámico, la omnipresencia del
cambio. La capacidad de cambio, que no quiere decir la plasticidad en pasar de un
estado a otro sin dolor ni conflicto, es algo en que difieren las personas, algunas son
descomunalmente rígidas, inflexibles y resistentes a todo lo que parezca cambio y no
ven soluciones alternativas a sus problemas, se mueven en el rango de los que buscan
“la” (única) solución y no en la búsqueda de “una” (entre varias alternativas) mas
realista ; otras personas son mas flexibles (uno de los componente mas facilitadores de
la solución de problemas) y son capaces de ajustarse con relativa facilidad (que no
quiere decir sin pasar un doloroso proceso) a las siempre nuevas circunstancias que
caracterizan la existencia humana.
Ello debe ser tomado en consideración por el psicólogo clínico que trabaja con
personas en/con problemas, poniendo una sistemática dosis de optimismo realista en
el sentido de creer en la posibilidad y potencialidad de cambio de las personas, aún
aquellas que menos parezcan tener dichas potencialidades. Pero quisiera, a modo de
abogado del diablo, poner una nota de polémica en lo referente a que la potencialidad
dinámica de una persona tiene límites en tanto es importante considerar la existencia
de aspectos estáticos, o ya muy establecidos, que, sin asumir una pesimista y fatalista
posición, identifican aspectos esenciales de una persona, de tendencia regular a
determinado tipo de acción, que hacen cuestionable su modificación. Se trata de los
aspectos de esencia de las personas que dejan su sello sui generis y de lo cual
difícilmente puedan desprenderse. Una vieja fábula infantil ilustra con nitidez esta
afirmación:
Siendo legítima la afirmación que hacíamos en el Capítulo anterior acerca de que
desde sus inicios la Psicología Clínica ha estado en constante movimiento y expansión,
ampliando sus escenarios desde el consultorio hasta la comunidad, desde los temas
individuales hasta los sociales –enfatizando la familia- y comunitarios, desde el
“enfermo” hasta el proceso salud enfermedad en su mas amplia acepción, desde la
salud “mental” hasta le salud en general, desde el diagnóstico y el tratamiento hasta la
promoción, la prevención y la rehabilitación, lo cierto es que aún sigue siendo una
profesión, aplicada por excelencia, que se encarga (Korchin) de prestar atención
privilegiada a los problemas humanos,… o para ser mas preciso a las personas en (¿o
con?) problemas tratando de incrementar tanto su bienestar como la óptima
interacción con su medio y calidad de vida.
Ello justifica no sólo la marcada connotación práctica y aplicada de esta rama
de la Psicología, referida a personas concretas y no conceptos abstractos, sino
su significación y vigencia que trasciende paradigmas dada la universalidad
existencial de los problemas humanos.