El documento describe el arte bizantino, comenzando con una introducción histórica sobre el Imperio Bizantino y su continuidad del arte paleocristiano. Luego resume la arquitectura bizantina, con énfasis en la cúpula y plantas centralizadas. También cubre las artes figurativas, dominadas por mosaicos y iconos con temas religiosos estilizados. Finalmente, divide la historia del arte bizantino en tres edades de oro y describe obras representativas de cada período.