Este documento discute estrategias para lograr la disciplina en el aula. Explica que los estudiantes constituyen un grupo y no una serie cuando comparten un objetivo y contexto común en el aula. También destaca la importancia de considerar el conflicto como parte natural del desarrollo y de enfocarse en estrategias positivas en lugar de punitivas. Finalmente, enfatiza que para mejorar la convivencia se requiere un enfoque institucional que promueva valores como el diálogo.