El documento propone que debemos ayudar a las comunidades brindando servicios a quienes más lo necesitan, como desplazados y niños de bajos recursos. Sugiere realizar labores sociales en comunidades afectadas por la violencia y trabajar con programas del gobierno para beneficiar a damnificados por desplazamiento forzado o desastres ambientales. También recomienda proyectos que recolecten alimentos para comunidades de bajos recursos donados por colegios de mayores recursos.