Un conjunto de vectores es ortogonal si cada vector es perpendicular a los demás, es decir, si su producto interno es igual a 0. Un subconjunto T de un espacio vectorial V es un conjunto ortogonal si el producto interno de cualquier par de vectores distintos en T es 0. Todo conjunto ortogonal es linealmente independiente, ya que al multiplicar los vectores por escalares, siguen siendo perpendiculares entre sí.