El documento describe los controles oftalmológicos recomendados en diferentes etapas de la vida. En los recién nacidos es importante examinar el rojo pupilar para detectar daños en la retina. Durante los primeros años se debe observar el desarrollo visual del niño. A los 4 años se realiza el primer examen oftalmológico obligatorio. En la etapa escolar se controla la agudeza visual. A partir de los 40 años comienzan exámenes regulares para controlar enfermedades como la presbicia, glaucoma y cataratas.