El documento discute las causas del fracaso escolar en matemáticas, señalando que no siempre es la culpa de la escuela sino del propio alumno que ya no participa ni muestra interés en aprender. También identifica dos tipos de dificultades de aprendizaje: aquellas causadas por métodos inadecuados de enseñanza y aquellas relacionadas con problemas neurológicos. Propone trabajar con maestros comprometidos para luchar contra el fracaso escolar y mejorar la enseñanza de las matemáticas.